Buenos días desde La Barra Beatles. Todavía sigue la conmoción por haber visto en vivo a Steve Hackett junto a Genetics en el Luna Park hace casi una semana. Recuerdo que en el lejanísimo 1974 mi amigo Alfredo era alumno de guitarra de Litto Nebbia, y este le había recomendado un disco muy copado: "Vendiendo Inglaterra por una libra", yo lo conocía por leer la Revista Pelo y se lo definía como de genial para arriba. Lo escuchamos un sábado a la tarde y el impacto fue tan grande que el lunes fui a comprarlo. Lo escuchaba cada día, me gustaban todos los temas, pero había uno es especial cuyo desarrollo me parecía verdaderamente maravilloso: "Quinto de quinto". Toda la canción era increíble pero el solo de guitarra me parecía sublime, un verdadero arreglo, daba la impresión de ser una obra escrita y ejecutada con suma prolijidad. En un momento retoma el leit motiv que ya habían desplegado primero la flauta y luego el piano, mientras tanto antes y después el tipo saca a relucir toda su profundidad y nos cuenta casi todo.
Por Jorge Garacotche
Da la impresión que ese solo es un tema en sí mismo, como si Hackett insertara su propio tema en otro de la banda. Seguramente este solo sigue llenando estadios y la gente quiere estar ahí para escucharlo en vivo, algo de eso se vio en el Luna Park porque fue el broche de oro de ese concierto y los saludó una ovación. Sin duda que es uno de los mejores solos de la historia del rock mundial poniendo un pie en el concepto rockero y otro en la herencia clásica, es que por momentos la ejecución trata de ser de un violín marciano.
Cuando yo era adolescente y tocaba apenas la guitarra ya conocía muchos solos y les paraba la oreja como para tener info, pero esto me maravillaba porque imaginaba que quien lo tocaba estaba en otro mundo, el virtuosismo venía desde otro lugar, desde las entrañas del buen gusto, desde la melodía exquisita de un violero muy particular. La verdad que se te tiene que ocurrir algo así, incluso dada su extensión siempre se la rebusca para no ser largo, es más, cuando cierra y vuelve la parte cantada uno tenía hilo en el carretel como para seguir la ruta que Hackett fue inventando.
Se me ocurrió recordar hoy aquella versión en vivo que está en "Second out", grabado en París en 1977, en pleno auge del Genesis sin Gabriel. Luego de publicado este álbum doble Steve decidió abrirse del proyecto e iniciar una brillante carrera solista. A mí, personalmente, me gusta más la versión original, la cantada por Gabriel, pero traigo esta porque es lo que vimos, la calidez de lo que va pintando ahí, en vivo, con todos y todas con la sensibilidad al aire y en estado de éxtasis.
Cuando el pasado viernes lo escuché en persona, en esos minutos recordé tantas cosas, la música y su extraña manera de hacernos viajar por el tiempo propio, recordé a ese pibe que soñaba con ser músico, que acudía cada semana a la Escuela de Jazz de Walter Malosetti mientras afuera, en las calles, una atroz Dictadura Cívico Militar prometía torturas, quiebras y muerte, nos prohibía discos, libros, películas y todo aquello que nos pueda dar ilusiones.
Quienes estuvimos el viernes 25 de agosto en el Luna Park estamos teniendo días muy Genesis, así que en mi manera de seguir enganchado comparto estos minutos de felicidad de la mano de "Quinto de quinto".
Jorge Garacotche
Yo estoy tan conmocionado como Jorge. Un show extraordinario. He asistido a ver a Génesis sin dudas, porque verdaderamente lo fueron para mi. Estos tipos me pusieron en estado de emoción y felicidad desde el viernes y aún no regreso de allí.
ReplyDeleteGabriel.