Ya en el 2014 científicos suecos habían logrado captar por primera vez el sonido que produce un solo átomo , el sonido más débil que es posible captar, según los físicos, o lo más parecido al "silencio" de Miles Davis cuando enunciaba "el silencio es el ruido más fuerte". Ahora, físicos de la Universidad de Stanford (EEUU), consiguiendo escuchar los susurros cuánticos de los átomos, por medio de dispositivo que puede "escuchar" las partículas de sonido presentes en una onda sonora -que tiene una gran diferencia con los micrófonos clásicos, que se basan en las vibraciones de las ondas sonoras: desplazan una membrana que se convierte en un voltaje medible, por el contrario, este dispositivo no sirve para medir fonones, porque al estar en el universo cuántico su posición no puede establecerse con precisión sin modificarla, tal como señala el principio de incertidumbre de Heisenberg, pero al ser extremadamente sensible puede registrar las cuasipartículas q