Artista: Monkey3
Álbum: Welcome To The Machine
Año: 2024
Género: Stoner rock progresivo
Duración: 46:48
Referencia: Discogs
Nacionalidad: Suiza
Ya habíamos presentado antes su quinto disco, y si bien hay un sexto que no llegué a escucharlo, goza de inmejorables comentarios, así como toda su discografía. Por suerte ya encandilaron a mucha gente, por lo cual siempre hay muchas manos escribiendo sobre sus discos cada vez que sacan uno, y me voy a remitir a ellos.
Tras la publicación de su último y aclamado álbum, ‘SPHERE’ (reseña aquí) en 2019, los pioneros del psych rock instrumental suizo MONKEY3 nos presentan su nueva oferta cósmica, ‘WELCOME TO THE MACHINE’. En el que posiblemente sea su álbum mas épico y oscuro, una vez más, MONKEY3 envuelve a los oyentes en su neblina auditiva cósmica única. El séptimo álbum de la banda mantiene el poder cautivador de los suizos, elevando la apuesta y corroborando de nuevo, que son una de las bandas destacadas de la escena psico-espacial y Stoner del continente europeo. Una odisea cósmica y sensorial a semejanza de películas como 2001: A Space O Dyssey , The Matrix, Sunshine, Solaris y 1984 (en las cuales está insipIrado), revelando una lucha encarnizada de contra las máquinas en un salto al vacio del cosmos. Entre supernovas, asteroides, galaxias y agujeros negros, la música de MONKEY3 logra penetrar en el oyente como viene haciéndolo desde hace años, en un intrigante viaje a lo desconocido, en busca de respuestas. «¿Los seres humanos se están convirtiendo en máquinas o las máquinas se están convirtiendo en seres humanos?«, se cuestiona la banda. El álbum mantiene el relato con una fluidez asombrosa que va contando al oyente esta particular historia que se anticipa a un incierto futuro de la humanidad. Embutido en intrigantes atmosferas melancólicas, las embestidas de pesadez son sacan de un trance incierto entre colosales riffs, inquietantes paisajes de teclados y una base rítmica fornida. MONKEY3 no se ciñe únicamente a estándares psicodélicos, sino que toma prestados momentos post-rock y complejos desarrollos progresivos, para cautivar al oyente en un viaje astral hacia lo inexplorado en el que los ecos floydianos tienen su espacio (De hecho el propio nombre del álbum parece ser un guiño a la banda del fluido rosa). Una vez mas queda sobradamente probado, que la ausencia de voces en una banda no es un obstáculo para conquistar al oyente con su propuesta, y estos chicos, son maestros en estas lides. En poco tiempo podremos comprobar en directo como son trasladadas a los escenarios las canciones incluidas en ‘WELCOME TO THE MACHINE’, ya que la banda acaba de anunciar las fechas de la primera parte del tour de presentación del álbum. Allí estaremos para contároslo.
Sumiéndonos en un espacio sideral, ‘Ignition’ nace de un lento génesis palpitante para desarrollarse entre supernovas y un entorno ingravitatorio a lo largo de diez minutos fascinantes en los que el cuarteto suizo plasma todo su potencial. Una odisea espacial en la que los riffs musculosos co-habitan con unos teclados que se inclinan por entornos cósmicos embutidos en una atmósfera psicodélica. Toda una tortuosa travesía con melodías cautivadoras y un ritmo trepidante que surca los confines del espacio impulsado por su cautivadora psicodelia así como por impactantes riffs.
La colisión de dos elementos crea caos, pero también paz y armonía. Esto da origen a algo completamente nuevo. Con este argumento ‘Collision’ se desarrolla en una misteriosa atmósfera con bellos pasajes psicodélicos de guitarra que gravitan en una órbita sideral construida a base de tenues sintetizadores y un ritmo hipnótico. Acolchado en su sonido, el corte contiene una cálida línea de bajo que recubre las paredes de sus armonías. Impulsados por ese combustible, MONKEY3 nos enredan entre psicotrópicos paisajes sonoros manteniendo el magnetismo en un entorno sideral, complejo, pero fascinante y exótico.
Incidiendo en la particular visión de la psicodelia de los suizos, ‘Kali Yuga’ parece coquetear con elegantes y sofisticados momentos post-rock para crean un corte majestuoso. Controlando la intensidad, la pista palpita entre teclados y efectos antes de sucumbir a cautivadores pasajes floydianos en los que la guitarra de Boris se muestra esplendorosa. Habitando en la penumbra, la canción muestra un tono melancólico que se compensa con hermosas melodías bajo un ambiente inquietante.
El relato futurista de los suizos prosigue con ‘Rackman’. Otra canción de psicodelia cósmica con hermosos desarrollos en una fluida narrativa que surca el universo atravesando nebulosas siderales. La pista toma elementos progresivos que son incorporados a su fuerte pero cadente ritmo, creando un ‘todo’ que te atrapa en su relato. No faltan los crujientes riffs que MONKEY3 añaden a sus canciones consiguiendo que estas se muestren sólidas y firmes. Nuevamente, una guitarra floydiana empuja la pista a un hipnótico trance en los confines del espacio sideral.
Como epílogo del álbum, los doce minutos de ‘Collapse’ reflejan a la perfección el sonido de la banda. A semejanza de ‘Time’ de Pink Floyd, la pista conjuga todas las inquietudes de MONKEY3. Pesados por momentos, delicados y susurrantes en otros, pero siempre causando sensaciones en el oyente. Con toda la monumentalidad, los golpes de pesadez que la pista contiene son amortiguados por ensoñadores pasajes instrumentales que sitúan al oyente en otro nivel sensorial. Un espacio que la banda domina a la perfección y que se plasma en sus mágicos desarrollos instrumentales.
Y mucha gente estuvo escribiendo sobre esto que tenés la posibilidad de escuchar ahora...
5 años tuvieron que transcurrir para volver a escuchar en la escena a los chicos del stone rock psicodélico Monkey3, desde las montañas nevadas de suiza llegan este año para deleitar a quien quiera sumarse en este viaje de sicodelia progresiva en su placa recientemente lanzada Welcome to the machine, 100% instrumental donde la imaginación de recrear escenarios y odiseas espaciales está a la orden del día.
Ignition con sus 10 minutos te sumerge de inmediato en esta escalada galáctica, donde el oyente pasa a ser participe, guiándonos por ritmos reforzados de riffs que hipnotizan y atrapan, teclados que hacen una inmersión atmosférica única en este espacio que va recorriendo, un solo de guitarra arrollador y muy bien ejecutado, para puedes imaginar como de la calma la banda pasa a una especie de progresión mucho más poderosa donde podemos imaginar la caída de esta nave que esta por aterrizar en un planeta desconocido, con riffs mucho más pesados, una batería dura en un galopeo constante y tenso, los teclados y el bajo también demuestran esta estructura sólida en cuanto a la interpretación de sus instrumentos.
Collision con una temática mucho más enfocada al fin de una era en donde parte fundamental lo juegan las maquinas , con pasajes psicodélicos y una línea de bajo que sobre sale de manera cautivante, sintetizadores que crean atmosferas psicodélicas que van equilibrando estas melodías y por supuesto todo extrapolado de un momento a otro por esta base de riffs ruidosos que llegan de manera desorbitante a retumbar todo a su paso, demostrando todo el poderío de la banda y haciendo destacar nuevamente ese solo de guitarra progresivo y potente que va apoyado por este magnetismo sonoro complejo.
Kali Yuga tiene este comienzo mucho más melancólico y denso sumergido en estos paisajes de ambientes misteriosos, una guitarra mucho más oscura mostrando quizás esta destrucción post-colisión, todo dentro de una apreciación netamente cinematográfica, es una composición que muestra muchos momentos musicales entrelazados en una variedad de formas que en cada escucha puedes ir notando, la canción en su totalidad juega con esta idea de recrear una especie de tensión sensorial en el ambiente que te mantiene inquietante de principio a fin.
Rackman desde sus inicio se presenta como una exploración cósmica de sicodelia que va trascendentalmente surgiendo a través de sus melodías, en una especie de marcha bastante pesada en lo musical, el bajo presionando a fondo, una batería de golpes fuertes y secos, el teclado con esta especie de gritos desde la profundidad y la guitarra que entrega estos ligados que van traspasando a la banda a la siguiente parte donde se muestra nuevamente toda esa firmeza que tienen y han demostrado, sonidos progresivos en un ritmo un poco más acelerado y mucho más sólido.
Collapse se presenta como el tema con mayor complejidad y de larga duración del álbum, con pasajes progresivos, aires de Pink Floyd en toda su forma, atmosferas de un viaje que está encontrando su ciclo final, todo pasa después de Rackman de este traspaso de la humanidad hacia las maquinas, claramente en una interpretación personal y de cada uno de los oyentes, pero con una base melódica y una ejecución instrumental de cada uno de sus músicas notable, son casi 13 minutos que puedes estar conectado de principio a fin sin despegarte, te encontraras con líneas pasivas y ambientes sobrios, que ya hacia el final se vuelven mucho mas caóticos despertando esa templanza que se veía en el disco, creo que cada uno sobresale por sí solo, el teclado deslumbra con un solo distorsionado sonoramente pero que entrega una pasión muy clara. En general un cierre de ciclo perfecto para el álbum en general.
Estamos frente a un álbum totalmente lleno de sensaciones, tiene partes crudas, melancólicas, caóticas, progresivas, y todo en una conjugación de lo que están acostumbrados a reflejar los músicos, perfectamente puede estar involucrado con una cinta o largometraje presentando cada uno de los temas para crear esta colosal odisea, como recomendación propia es un disco que debes escuchar con audífonos ya que la entrega y la forma en la cual se encuentra mezclada es para entregarte esa parte donde tú puedas imaginar todo este caos que te están presentando, tiene tantas matices que puedes parecerte en ocasiones oscuro y amenazador, en resumidas cuentas pasando a ser el 7mo disco de la banda y habiendo escuchado su trabajos anteriores creo que es su placa más cautivadora donde demuestran porque siguen destacando dentro del género progresivo psicodélico.
Por Pablo Espinoza “Lalolanda”
Desde
las tierras de Guillermo Tell, los Monkey3 nos traen su séptima larga
duración, esta ocasión lleva por nombre Welcome to the Machine
¿volveremos a recibir un viaje cósmico, espacial como en sus anteriores
discos? Parece que por el nombre y la portada así será camaradas. Este
cuarteto integrado por: Walter en la batería, Jalil en el bajo, Boris en
la guitarra y teclado, se adentran en los territorios instrumentales
del rock psicodélico, cósmico, Stoner espacial, escuchemos por donde nos
llevan en esta ocasión ya que al parecer el disco está inspirado en
películas como The Matrix, 2001 Odisea del Espacio, Sunshine, Solaris y
1984, con una portada de algo que parece una nave/cubo (que se parece al
cubo de los lamentos de Hell Raiser) flotando en el espacio.
Despegamos
precisamente con Ignition, una preparación para de una vez por todas
dejar la apocalíptica tierra, 3,2,1 vamonooooooosss. Escuchamos poder,
rapidez, el bajo la guitarra y la batería se cohesionan por 4 minutos
para salir de la órbita de la tierra, después el bajo le da estabilidad a
la nave, ahora y con tranquilidad puedes ver por las ventanas y
apreciar la oscuridad espacial mientras te quitas el cinturón y flotas
sin gravedad, después disfrutas de un solo descomunal de guitarra que
despierta tus sentidos aún más.
Las cosas se complican un poco en la
nave, al parecer una lluvia de meteoritos viene frente a nosotros y
Collision comienza, pero todo es relajado aquí no se entra en pánico,
los teclados crean atmosferas que junto a la batería y los sonidos de la
guitarra te llevan a unas colisiones más introspectivas, pero ojo esos
viajes internos nos hacen cuestionarnos la existencia del humano en el
cosmos y como las máquinas nos hacen torpes, ¿la inteligencia artificial
nos superara, nos dominará? Un solo kilométrico nos lleva al límite
mental a bordo de la nave y cuando pensamos que nos va a estallar la
cabeza, todo se silencia y comienza Kali Yuga, que sin duda está
influenciada por Pink Floyd, crea paisajes sonoros exóticos que
encontramos en la oscuridad espacial, también tiene melancolía sumida en
la penumbra, tiene un bajo interesante y una guitarra acústica al final
que cierra de manera envolvente. Les recomiendo que todo el disco lo
escuchen con audífonos.
En Rackman, ya estamos en el espacio sideral,
ya no hay marcha atrás ni regreso a la tierra, aquí por la ventana se
ven nebulosas y galaxias, explosiones estelares, la guitarra de Boris
una vez más es poseída por el espíritu de Gilmore y nos lleva de alfa
centauro al límite de la vía láctea, donde el contundente y gordo bajeo
de Jalil nos da fuerza para cruzar.
La nave se va quedando sin
energía, caemos sin caer, digo en el espacio como saber si caes o
flotas, aquí los Monkey3 hacen sonar el último track del disco, así
comienza Collapse, aquí ya estamos en el inicio de la nueva civilización
estelar, no niego que se parece a time de Pink Floyd, pero solo el
inicio que es como aterrizar e ir descubriendo ese nuevo planeta,
misterio y fascinación, éxtasis, la pesadez y el Post Rock se combinan
de gran manera, el tema es perfecto para finalizar la travesía.
En fin, cinco temitas para volarte la chabecha. Que lo disfruten!
Lo pueden escuchar desde acá:
https://monkey-3.bandcamp.com/album/welcome-to-the-machine
y acá...
https://open.spotify.com/intl-es/album/4ePyoRcbljdyQeKWCRVVq0
Lista de Temas:
1. Ignition (10:38)
2. Collision (6:03)
3. Kali Yuga (10:01)
4. Rackman (7:13)
5. Collapse (12:50)
Alineación:
- Walter / drums
- Jalil / bass
- Boris / guitar
- dB / keyboards, sounds, acoustic guitars
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