El periodista Hugo Alconada Mon, prosecretario de redacción del diario La Nación y uno de los integrantes del consorcio de periodistas que develó el escándalo de los Panamá Papers hace ya un año y medio, fue llamado a declarar el miércoles pasado, en donde se le solicitaron detalles sobre lo publicado en su libro "La raíz de todos los males" y las preguntas estuvieron centradas en los aportes truchos de campaña de Corporación Cambiemos en la última elección: "... la campaña bonaerense de Cambiemos destinó 26 millones de pesos al pago de fiscales en ese distrito y que para distribuir esa fortuna utilizaron dos docenas de bolsos, todos idénticos, todos negros y comprados sobre la Avenida Cabildo de la Ciudad de Buenos Aires". En cuanto al origen de ese monto y el funcionamiento, el periodista refirió que se trata de "parte de los fondos obtenidos de las donaciones de empresarios ocurridas durante 2015 por parte del equipo de campaña nacional (...) abocado a la candidatura de Macri", que también se habría hecho cargo del operativo en territorio de la gobernadora Vidal.
Esto es, el equipo encabezado por el propio Mauricio Macri e integrado por Nicolás Caputo, Edgardo Cenzón, Marcos Peña y Jaime Durán Barba, entre otros, según Alconada Mon, a través del que el líder PRO pidió "a diversos empresarios el 1% de sus respectivos patrimonios, en negro, para financiar su campaña electoral a cambio de políticas pro mercado que como Presidente impulsaría, como así también políticas sectoriales, que permitirían revitalizar áreas de la economía que redundarían en beneficios generales para las empresas".
Respecto de cómo se distribuyeron los $26 millones en bolsos a lo largo y ancho de la Provincia para que llegaran a los fiscales amarillos, Alconada Mon detalló: "... se distribuyeron en varias camionetas que salieron hacia distintos puntos de la Provincia de Buenos Aires, donde fueron recibidas por los responsables distritales de la campaña, que a su vez se encargaron de su distribución entre fiscales, fiscales generales y otros".
Otro dato curioso de la declaración del periodista ante el juez Ernesto Kreplak refiere a cómo el "equipo recaudador" de Corporación Cambiemos corroboraba la correcta recepción de los fondos de los empresarios, y confirmó que "cuando recibían el aporte de un empresario, enviaban un mensaje de WhatsApp a la cúspide del equipo recaudador, con el monto recibido, y se lo mostraban al empresario, para que al menos se quedara tranquilo que el valijero no se comería un 'tajo'".
Kreplak investiga posibles delitos como asociación ilícita y lavado de dinero. La extesorera bonaerense María Fernanda Inza -excontadora general de la gobernadora Vidal, también denunciada, y actual empleada del gobierno nacional- es la principal imputada y pugna porque la causa quede únicamente en manos de la justicia electoral platense, lo que implicaría licuar responsabilidades penales, que las consecuencias se limiten a multas o sanciones y limpiar a su exjefa.
Y mientras de a poco se van deschavando una de tantas maniobras mafiosas del "mejor equipo de los últimos 500 años", ahora la Hiena Heidi Vidal nos quiere hacer creer que, si al menos ellos no son gente buena, son mejores que los demás, diciendo que los amarillos al menos no se financian con guita de la droga. Al idiota medio que mira los programas de los medios hegemónicos se les puede pasar pero a los que seguimos a medios alternativos no. Y ni hasta los medios militantes pudieron ocultar el accionar de los narcos en el mismo corazón cambiemita.
Al final, son truchos, mafiosos y pelotudos, todo junto. Ah, me faltó hijos de puta, pero eso ya lo sabemos...
Esto es, el equipo encabezado por el propio Mauricio Macri e integrado por Nicolás Caputo, Edgardo Cenzón, Marcos Peña y Jaime Durán Barba, entre otros, según Alconada Mon, a través del que el líder PRO pidió "a diversos empresarios el 1% de sus respectivos patrimonios, en negro, para financiar su campaña electoral a cambio de políticas pro mercado que como Presidente impulsaría, como así también políticas sectoriales, que permitirían revitalizar áreas de la economía que redundarían en beneficios generales para las empresas".
Respecto de cómo se distribuyeron los $26 millones en bolsos a lo largo y ancho de la Provincia para que llegaran a los fiscales amarillos, Alconada Mon detalló: "... se distribuyeron en varias camionetas que salieron hacia distintos puntos de la Provincia de Buenos Aires, donde fueron recibidas por los responsables distritales de la campaña, que a su vez se encargaron de su distribución entre fiscales, fiscales generales y otros".
Otro dato curioso de la declaración del periodista ante el juez Ernesto Kreplak refiere a cómo el "equipo recaudador" de Corporación Cambiemos corroboraba la correcta recepción de los fondos de los empresarios, y confirmó que "cuando recibían el aporte de un empresario, enviaban un mensaje de WhatsApp a la cúspide del equipo recaudador, con el monto recibido, y se lo mostraban al empresario, para que al menos se quedara tranquilo que el valijero no se comería un 'tajo'".
Kreplak investiga posibles delitos como asociación ilícita y lavado de dinero. La extesorera bonaerense María Fernanda Inza -excontadora general de la gobernadora Vidal, también denunciada, y actual empleada del gobierno nacional- es la principal imputada y pugna porque la causa quede únicamente en manos de la justicia electoral platense, lo que implicaría licuar responsabilidades penales, que las consecuencias se limiten a multas o sanciones y limpiar a su exjefa.
Y mientras de a poco se van deschavando una de tantas maniobras mafiosas del "mejor equipo de los últimos 500 años", ahora la Hiena Heidi Vidal nos quiere hacer creer que, si al menos ellos no son gente buena, son mejores que los demás, diciendo que los amarillos al menos no se financian con guita de la droga. Al idiota medio que mira los programas de los medios hegemónicos se les puede pasar pero a los que seguimos a medios alternativos no. Y ni hasta los medios militantes pudieron ocultar el accionar de los narcos en el mismo corazón cambiemita.
Al final, son truchos, mafiosos y pelotudos, todo junto. Ah, me faltó hijos de puta, pero eso ya lo sabemos...
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