Artista: Anthony Phillips
Álbum: Wise After Event
Año: 1977
Género: Rock sinfónico
Duración: 53:26
Referencia: Progarchives
Nacionalidad: Inglaterra
La mayoría seguro que ya conoce el disco, pero por las dudas aquí va un comentario somero y eficaz para presentarlo:
¿Anthony Phillips? El guitarrista original de Genesis.
Al inicio de su carrera en solitario desarrolla un estilo sobrio, solemne y respetuoso, poco a poco evolucionando hacia territorios más ambiciosos. En esta ocasión comentaré el segundo álbum dentro de su vasta producción.
Este disco es la lógica continuación del disco debut «The geese and the ghost» en el sentido de que las composiciones contienen más vocales y mayor instrumentación, enriqueciendo el estilo a veces minimalista del aquel primer disco. Sin embargo la base de las piezas sigue siendo acústica y el humor general del disco es muy similar.
Algunos aficionados suelen comparar la música de esta etapa incial de Phillips con piezas de su anterior grupo, como Dusk o Stagnation. Sin embargo, hay que señalar que aquellas son piezas más extensas y progresivas. Las composiciones de Phillips son más pastorales y ligeras. A pesar de parecer en un principio débiles, podrán crecer en el gusto de quien persista.
Phillips continúa interpretando todos los instrumentos de cuerda y de teclados, siendo apoyado por diferentes músicos, como dos antiguos miembros de King Crimson: Michael Giles en los tambores y Mel Collins en el saxofón y flauta.
Con «Wise after the event» el guitarrista recupera la atención de los aficionados gracias a esta efectiva colección de canciones semi-acústicas, bellamente arregladas. El artista se siente agusto presentando composiciones sencillas pero con arreglos excelsos, lo suficiente para afimar categóricamente no se trata de un álbum pop.
Y las siguientes son las palabras de nuestro eterno comentarista involuntario de siempre, en relación a la reedición de este disco en el 2016:
Segunda travesía de sabiduría y creatividad progresivas
Dos meses antes de publicar la reedición especial de 3 CD + 1 DVD del tercer disco de ANTHONY PHILLIPS “Sides”,
se realizó a inicios del presente año 2016 un formato similar para la
reedición del disco antecesor “Wise After The Event”, original de 1978.
Esoteric Recordings es el sello a cargo de estas maravillosas labores
arqueológicas con estos dos discos publicados originalmente por Arista y
Passport: en el caso de “Wise After The Event”, la edición original
data de mayo de 1978, tras haber sido grabado y producido a lo largo de
los tres últimos meses del año precedente. Este disco es el único en el
que quien fuera el primer guitarrista de GENESIS canta en todas las
canciones y supuso un viraje bien definido hacia el formato de canción
tras su espléndida exhibición de creatividad progresiva de carácter
prioritariamente instrumental en “The Geese & The Ghost”, disco
debut que más bien era de facto un disco a dúo con su amigo y excolega
en GENESIS MIKE RUTHERFORD. El mismo PHILLIPS recalca que “Wise After
The Event” es el primer disco en el cual se embarcó con la mentalidad de
que era un trabajo fehacientemente solista; en él, nuestro héroe se
hace cargo de las guitarras, la armónica, los teclados, algo de bajo y
algo de percusión, aunque siempre fiel a su estilo humorístico, algunos
de estos ítems están acreditados a los personajes que se esconden bajo
los seudónimos de The Vicar y Vic Stench (o sea, él mismo). Ésta fue la
primera vez que PHILLIPS contó con los servicios de la fenomenal dupla
rítmica del baterista Michael Giles y el bajista John G. Perry. También
es la primera vez que Rupert Hine cumple con el honor de producir un
álbum de PHILLIPS, y no solo eso, también apoya en algo a la logística
instrumental tocando percusión en una canción y batería en otra. Otros
colaboradores ocasionales dignos de destacar son Mel Collins (con
fantásticas contribuciones al saxofón en un tema y la flauta en otro),
Robin Phillips (al oboe), Jeremy Gilbert (a los teclados en la bella
canción ‘Greenhouse’) y un tal Perkin Alanbeck (realmente el ingeniero
de sonido Alan Perkins, al sintetizador en ‘Birdsong And Reprise’).
Que quede esto muy claro: no hay en este disco un viraje propiamente
dicho al formato de canción: recordemos que los GENESIS empezaron como
cantautores y solo en la época del “Trespass” abrazaron el estándar del
entonces adolescente paradigma del rock progresivo británico. Tal como
se ve en el librillo que acompaña a esta reedición masiva, el repertorio
contiene algunas canciones que estaban compuestas desde el inicio de su
periodo post GENESIS, así como material nuevo que se basaba mayormente
en la presencia de las guitarras de 12 cuerdas, tanto eléctrica como
acústica. También hay palabras de gran aprecio hacia John G. Perry y
Michael Giles, quienes dieron un fuerte apoyo y una gran seguridad a
PHILLIPS a lo largo de esta nueva empresa, no solo contribuyendo con
arreglos interesantes, sino además contando con un espacio genuino para
la voz de mando. En una anécdota tan graciosa como reveladora, Giles le
dio a PHILLIPS la orden de practicar un día entero con un metrónomo a
fin de que se ajustara adecuadamente a las exigencias específicas de los
patrones rítmicos: en palabras del propio PHILLIPS, “¡tantos años de
tocar «solo» habían convertido a mi sentido del ritmo en algo así como
forma libre!”. Las sesiones de grabación tuvieron lugar entre mediados
de octubre e inicios de diciembre de 1977, con la idea de crear
suficiente material para un LP y un EP; además, se tenía pensado que
casi todas las canciones del LP se vincularan con breves viñetas
instrumentales. Mientras se elaboraba la lista de canciones, Peter Cross
se hacía cargo del diseño gráfico de la portada, un prodigio de
surrealismo entrañable donde se mezclan lo pastoral y lo espacial en
torno a la inmensa figura protagónica de una ardilla. Tal como
resultaron las cosas tras la incómoda interferencia de los jefes del
sello discográfico, se tuvo que anular la idea del EP, lo cual llevó a
un serio recorte y una no menos seria modificación del repertorio del
álbum. Esto llevó a una ridícula incongruencia en la lista de canciones
que aparecía en la contraportada, pero a fin de cuentas, la labor de
Cross era demasiado bella como para alterarla en el más mínimo detalle.
Vayamos ahora al disco en sí. Las cosas se inician con la simpática
canción ‘We’re All As We Lie’, la misma que se convirtió en el lado A
del single promocional. Se trata de una cálida exhibición de ambientes
pastorales que se sostiene sobre la confluencia de guitarras acústicas y
suavizadas guitarras eléctricas; la inclusión de un hermoso solo de
saxofón en el interludio instrumental añade un apropiado recurso
manierista al asunto. Sigue a continuación ‘Birdsong And Reprise’, que
con una duración más ambiciosa de 6 ¾ minutos, despliega una mayor dosis
de sofisticación musical a la permanente estrategia pastoral. Así las
cosas, el modelo Genesiano se asienta firmemente en este mundo
particular de PHILLIPS mientras las cristalinas amalgamas de guitarras
acústicas, los sutiles retazos de la eléctrica y los sobrios ornamentos
de los teclados nos remiten a este paradigma tan esencial para la
historia del rock progresivo. El clímax final es una explosión de luz
hecha sonido antes de que la coda se centre plenamente en lo bucólico.
‘Moonshooter’ también es una canción con suficientemente ambiciosas
dosis de musicalidad como para motivar nuestro intelecto de manera
especial, y ahora lo hace con una candidez de tenor folk que nos remite a
los momentos más reflexivos del “The Geese & The Ghost”. Es un
hecho que esta canción destila unas inmensas vibraciones románticas. La
canción homónima es la más extensa del álbum, ocupando un espacio de
casi 10 ½ minutos. Tras un prevé prólogo con una minimalista capa de
sintetizador, se instala la tríada de guitarra-bajo-batería para
instaurar un medio tiempo solemne en el que la garra esencial del
lenguaje del rock se maneja con oportuna sobriedad. A mitad de camino se
baja un poco la intensidad del groove con la finalidad de aumentar la
densidad reinante, y así, desde las inteligentes polifonías de múltiples
guitarras, se gesta un dramatismo luminoso que se proyecta hasta el
final de la pieza, habida cuenta que el bloque instrumental se ha de
enriquecer más con la inclusión de capas de teclado. La coda armada por
la guitarra acústica de 12 cuerdas y el sintetizador aporta un aire
calmadamente elegíaco al esquema global de la canción, aporte que se
traduce en un aura de raro misterio.
La segunda mitad del disco se abre con ‘Pulling Faces’, canción
diseñada para sacar al frente de una buena vez el potencial rockero de
PHILLIPS y sus colaboradores: los guitarreos y las ostentosas
ornamentaciones de los teclados brillan a su antojo sobre el mágico
sostén aportado por la dupla rítmica. Obediente del estándar Genesiano,
su desarrollo melódico está enriquecido con varios giros, y también es
de apreciar cómo la ilación de los diversos grooves que acaecen se
concreta en una ingeniería progresiva perfectamente pulida. El turno de
‘Regrets’ es uno de conmovedora introspección, en base a un dueto de
piano y voz que se acomoda muy bien bajo el ropaje de un ensamble
orquestal y con ciertas acentuaciones provistas por el sintetizador. Se
respira todo el tiempo la inminencia de una explosión fastuosa, cosa que
efectivamente sucede en toda su gloria a partir de la frontera del
tercer minuto y cuarto. Las líneas “Regrets, our secret cemeteries /
Where loves and loss are silently lain, / The dream is fading faster now
/ And son you’ll slip beyond my recall” evocan una intensidad dramática
muy oportuna para el cierre. El pasaje final se retrotrae a la
serenidad inicial tras el impacto climático. Tras esta imponente
exhibición de esplendor musical, ‘Greenhouse’ emerge como un simpático
ejercicio de folk-rock con sutiles revestimientos progresivos, y acto
seguido, ‘Paperchase’ regresa a la candidez romántica que ya habíamos
apreciado en ‘Moonshooter’. Los últimos 8 ½ minutos del disco están
ocupados por la canción de temática ecologista ‘Now What (Are They Doing
To My Little Friends?)’. Básicamente se trata de una extensa balada
sinfónica en la que PHILLIPS muestra, a su manera peculiar, la furia y
la tristeza que le causa la matanza de animales con fines de lucro. Con
la candidez de su canto y la robustez lírica que se arma en el entramado
de piano, guitarras y sintetizador, se edifica una intensidad casi
cinematográfica en la estructura de la canción. Se puede muy bien
describir esta canción como un híbrido de GENESIS, AL STEWART y BARCLAY
JAMES HARVEST: este retrato de estilización funciona a las mil
maravillas como cierre del disco.
Aunque la ardilla ocupa un lugar protagónico en la portada de “Wise
After The Event”, la canción titulada ‘Squirrel’ quedó fuera del
repertorio definitivo del LP para ocupar un digno lugar como lado B del
single ‘We’re All As We Lie’. La canción llega a nosotros como bonus,
revelándose como una sosegada pieza de piano en la que PHILLIPS explora
lo romántico centrándose más en las progresiones armónicas que en una
férrea arquitectura melódica. El resultado final se siente
agradablemente intimista. El CD 2 contiene una generosa cantidad de
bonus tracks, comenzando con el breve interludio originalmente planeado
para vincular a ‘We’re All As We Lie’ con la siguiente canción, que es
en realidad un retazo del pasaje final puesto al revés con mezcla
adicional de sitar; sigue la agradable semibalada pastoral ‘Sleeping On
An Interstellar Plane’, la idea seminal para lo que posteriormente sería
‘Greenhouse’. Contamos, como es habitual en estos casos, con copiosas
versiones instrumentales de ensayos y maquetas de las canciones que
conocemos en sus versiones definitivas desde 1978: en el caso de
‘Pulling Faces’ son notables las muestras de dialogal genialidad rítmica
entre Perry y Giles incluso en esta situación en que se maneja un
esquema rítmico sencillo y lento. Hay una maqueta inicial de la pieza
homónima del álbum que también muestra fehacientemente la magia de la
dupla Perry-Giles, y de paso, el encanto de los riffs de guitarras de 12
cuerdas (eléctrica y acústica), solamente con una sobrias capas de
teclado añadiéndose cerca del final. La gran novedad está en dos breves
piezas tituladas ‘Magic Garden’ y ‘Chinaman’, respectivamente: en la
primera, el piano se pasea serenamente por escalas diseñadas para
mostrar una espiritualidad meditativa, mientras en la segunda,
originalmente concebida como interludio para el disco, se destaca un
dueto de guitarras de 12 cuerdas cuyo enfoque emocional es de una serena
satisfacción. La versión instrumental de ‘Now What (Are They Doing To
My Little Friends?)’ exhibe unas breves secciones que posteriormente
fueron reemplazadas por otras en la versión definitiva. El CD 3 contiene
la remasterización de la mezcla original de estéreo, mientras que el
DVD nos brinda la nueva mezcla con tres alternativas de disfrute
audiófilo.
En comparación con el siguiente disco “Sides”, “Wise After The Event”
se destaca como poseedor de un repertorio más consistente en lo
estilístico y en el delineamiento de las atmósferas predominantes. Pero
en lo referente a la evaluación de los puntos climáticos, creemos que
cualquiera de los cuatro temas que completan la gloriosa segunda mitad
del “Sides” porta un carisma más arrollador que cualquier tema de este
disco que tenemos ahora en nuestras manos. Tal vez nuestro balance más
constructivo nos lleve a considerar que ambos discos deben ser
apreciados conjuntamente al modo de un continuum en una temporada de
particular creatividad en el currículum vitae de ANTHONY PHILLIPS, dos
caras de una misma moneda que PHILLIPS acuñó con oro puro en medio de
una temporada de insensatas presiones de parte de la élite corporativa
del negocio musical. Sabiduría y creatividad progresivas de primer
nivel. A fin de cuentas, es una bendición que el sello Esoteric
Recordings nos haya traído esta versión aumentada de “Wise After The
Event” pues ANTHONY PHILLIPS es una de las más creativas figuras del
art-rock británico desde los años 70s hasta ahora.
César Inca
Un lindo disco como para empezar la semana en el blog cabeza...
Y tendremos mucho más Anthony Phillips en esta semana. Y gracias a Horacio Marique, así que no dejen de agradecerle.
Lista de Temas:
1. We're All As We Lie (4:34)
2. Birdsong (7:30)
3. Moonshooter (5:52)
4. Wise After The Event (8:45)
5. Pulling Faces (4:32)
6. Regrets (5:15)
7. Greenhouse (3:00)
8. Paperchase (5:28)
9. Now What (Are They Doing To My Little Friends)? (8:30)
Alineación:
- Anthony Phillips / vocals, guitars, keyboards (as "The Vicar"), bass (7-as "Vic Stench"), harmonica, orchestral arrangements (6)
With:
Perkin Alanbeck / synthesizer (2)
Jeremy Gilbert / keyboards (7), harp (9)
Mel Collins / soprano sax (1), flute (2)
Robin Phillips / oboe
John G.Perry / bass
Michael Giles / drums
Rupert Hine / percussion, drums (7-as "Humbert Ruse"), backing vocals, producer
Gilbert Biberian / orchestra conductor (6)
David Katz / orchestra leader (6)
Rodent Rabble / noises
Excelente!!! Preguntale a Horacio Marique si tiene "Archive Collection: Volume I & Volume II (2022)"
ReplyDeletepara subir. Gracias por los aportes!!!
Manrique
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