Artista: The Flying Eyes
Álbum: Burning of the Season
Año: 2017
Género: Psychedelic Rock
Duración: 42:45
Referencia: Discogs
Nacionalidad: EEUU
No le voy a dar mucha vuelta porque recién estoy conociendo esto, pero hay gente que ya lo escuchó y escribió sobre esto. A veeeer....
Después de un estupendo “Lowlands” (reseña aquí),
durante estos instantes finales del mes de Septiembre, hemos tenido que
soportar la larga espera para muchos de lo que supone siempre escuchar
nuevo material de estudio por parte de The Flying Eyes, nuestros protagonistas de este jueves con su última obra lanzada a través de Ripple Music (Norteamérica), Noisolution (Europa) y Abraxas (Sudamérica), bajo el nombre de “Burning Of The Season”.
Cuatro años dan para mucho en lo que se refiere a estos músicos de Baltimore, quiénes durante este tiempo han contribuido en algún que otro split o aquel “Leave It All Behind Sessions” que destaparon en el 2014 y que lo puedes disfrutar ampliamente desde su plataforma de bandcamp.
Dicho esto, “Burning Of The Season”, marca el punto de reinicio justo dónde acabó “Lowlands”, uno de esas obras imperecederas con aires desérticos y los mejores crujidos del heavy blues. Este es el estilo más implantando por The Flying Eyes y “Burning Of The Season” es todo un escaparate para su espectáculo.
No
hay mucha exploración o cualquier innovación que alguien espere en su
nueva obra, todo sigue fluyendo de la misma manera que lo hacía su
predecesor álbum, manteniendo ese llama que nos atrapa en “Drain” o el magnífico cierre “Oh Sister”, una de las destacadas del redondo, con un crescendo bastante memorable, alcanzado su clímax en la parte final. La voz de Will Kelly, sigue atrapando de igual manera, con un aire al siempre recordado Jim Morrison, y con estruendos para el disco como pueden ser en “Circle Of Stone” o “Fade Away”, llevando esas mejores vibraciones más reconocidas de The Flying Eyes con poderosos riffs, órganos, inclinaciones hacía un lado más místico y el omnipresente groove que a ellos caracteriza.
El
equilibrio que ofrecen los norteamericanos en este disco es perfecto,
sabiendo llevar los instantes más incisivos, con otros compases para la
reflexión y los largos atardeceres. Una compañía perfecta para dicho
momento podría ser la enigmática “Rest Easy”, con esas suaves guitarras que reverberan en homenaje al gran Neil Young.
La garantía de The Flying Eyes vuelve al ruedo con otro disco más para encumbrar una valiosa discografía. “Burning Of The Season”
es como una película que se reserva para sus mejores momentos, siendo
uno de los trabajos más dinámicos hasta la fecha para este cuarteto, su
nueva obra tiene todo lo que necesitas para adentrarte en su exótico
oasis. Cierto es que en conjunto no ofrece la pegada de sus redondos
anteriores, pero para la ocasión, The Flying Eyes ha
pensado más en la calidad de sus composiciones, que es dónde sin lugar a
dudas, reboza de exquisitez en toda su amplitud este cuarto LP.
*****DETALLES TECNICOS*****
Artist: The Flying Eyes
Album: Burning of the Season
Year: 2017
Label: Abraxas
Catalog: RIPCD074 (ABXS0002)
Country: Brazil
Release: 2017
Tracks: 8
Barcode: na
Matrix: ABXS0002 A1/1
Mastering SID Code: na
Mould SID Code: na
Batch ID: AA00500
***************************
Otro comentario y más videos, lo que abunda no daña, y más si se trata de música.
Se ha hecho esperar este lanzamiento, pues no teníamos material nuevo del cuarteto desde 2013, año en que publicaron el estupendo: "Lowlands" (pinchar).
Lo primero que se advierte cuando el disco empieza a girar, es que el grupo no renuncia a sus señas de identidad. Esto tiene una doble lectura: por un lado mantienen las bondades de su sonido, y por otra parte se arriesgan a pecar de redundantes, pues apenas queda margen en este nuevo trabajo para comentar nada que no haya sido ya analizado en la revisión de sus trabajos pretéritos.
Es posible que en este nuevo disco, el sonido, o más bien la atmósfera del disco sea más luminosa; podríamos decir que no flotan estas canciones entre tinieblas tan nebulosas y espesas como las de antaño, dotando a su sonido de mayor amplitud, resultando por tanto más accesible.
Pero no es éste un detalle de excesiva significación, lo que se escucha es, como siempre, un blues rock, con evidentes brotes psicodélicos y esencias hard-rock.
Es inevitable la comparación con productos similares aparecidos en el ultimo lustro como: The Sheepdogs o Datura 4, resultando esta banda más claustrofóbica, íntima y underground que las dos excelentes formaciones mentadas. Aunque siguen existiendo en su ADN connotaciones estilísticas que nos retrotraen a bandas como: The Doors, Black Sabbath, Cream o Led Zeppelin.
Con todo lo dicho, nos encontramos con un disco de ocho canciones, que quizás pequen de ser demasiado similares sónicamente, lo que unido a la extensión de alguna de ellas, puede hacer la escucha del disco un tanto pesada.
Pero durante el repaso del elepé nos encontramos momentos brillantes, de gran intensidad y suntuosidad sonora: riffs furibundos a base de distorsiones y fuzz, una base rítmica cohesionada y francamente rotunda, incisivos punteos, algún poderoso estribillo y buenas melodías, aunque sin sorpresas reseñables.
"Sing praise" abre el disco, con un riff psicodélico y poderoso, un estribillo efectivo y gran conjunto bajo/batería, un muy buen tema en la onda de los Zepp más lisérgicos.
"Come round" se apoya sobre una base de batería y la voz de Mac Hewitt. mezcladas en un torbellino de guitarras, un tema de hard rock setentero.
"Drain" es un corte mucho más hard, con gran base rítmica e interacción de guitarras, y un explosivo final.
La extensa "Circle of stone" hace incapié en el blues rock psicodélico, fuzz, sólida base rítmica y medio tiempo melódico en un tema que se va desarrollando en instrumentación, por lo cual no aburre, un gran momento.
Tampoco decepciona "Fade away", un corte que va evolucionando desde una estructura de balada hasta un final enérgico de gran riqueza eléctrica. El tema más accesible es el rock-blues: "Farewell", más luminoso y con menos carga sónica, se trata de una bonita melodía de sedante lirismo.
"Rest easy" se muestra más controvertida, aunque gana con las escuchas.
Y finalizan el tracklist con la extensa, -más de ocho minutos- "Oh sister", gran rock aderezado de blues, de poderosa percusión y pegadizos momentos melódicos que recuerdan tanto a los Zepp del "III" como a los Cream del "Wheels of fire", un extraordinario final.
El nuevo trabajo de The Flying Eyes no aporta demasiado a su trayectoria en cuanto a estilo, aunque no se puede habar -ni mucho menos- de un mal disco. Se nota una madurez y una apertura sónica con respecto a anteriores ocasiones incuestionable, aunque tal vez peque de un tanto lineal.
Confieso que esperaba un paso al frente más decidido, pero apartando esta pequeña decepción, me veo en la obligación de reconocer que hay momentos excelentes en el trabajo, que las canciones mejoran en estructura con respecto a anteriores trabajos y que el disco gana -y bastante- con las sucesivas escuchas.
Jorge García
Y acá los videos prometidos:
Desde aquí los pueden escuchar, seguir, comprar y lo que quieran:
Facebook || Bandcamp || Web Oficial || Comprar
Lista de Temas:
1. Sing Praise
2. Come Round
3. Drain
4. Circle of Stone
5. Fade Away
6. Farewell
7. Rest Easy
8. Oh Sister
Alineación:
- Adam Bufano / Guitar, Lap Steel
- Mac Hewitt / Bass
- Will Kelly / Vocals, Guitar
- Elias Schutzman / Percussion, Vocals
- Trevor Shipley / Keyboards
Comments
Post a Comment