Finalmente llegó. El primer disco del 2017 que traemos es de nada más y nada menos que del señor Oldfield, un trabajo muy esperado que, según dicen, trae de vuelta al mejor Oldfield, aquel que crea libremente, sin cadenas de ningún tipo. Arte puro asegurado...
Artista: Mike Oldfield
Artista: Mike Oldfield
Álbum: Return to Ommadawn
Año: 2017
Género: Crossover Prog / Progresivo sinfónico
Duración: 41:40
Nacionalidad: Inglaterra
Año: 2017
Género: Crossover Prog / Progresivo sinfónico
Duración: 41:40
Nacionalidad: Inglaterra
Lista de Temas:
01. Return To Ommadawn, Pt. I
02. Return To Ommadawn, Pt. II
01. Return To Ommadawn, Pt. I
02. Return To Ommadawn, Pt. II
Alineación:
- Mike Oldfield / Todos los instrumentos
- Mike Oldfield / Todos los instrumentos
En su carrera ha tenido muchos problemas con la industria discográfica, discos que no quería hacer, discos que quería hacer y no pudo, contratos engañosos. En este espacio donde nos metemos de lleno con el arte pero sin dejar lo social de lado, también hemos hablado de cómo la industria mercantilista arruina el arte (y todo lo demás, pero hablemos del arte) y entonces tenemos el caso de todo un movimiento que, sin darnos cuenta, se rebela ante las reglas de juego y lanza sus propios trabajos en libertad, rememorando ese movimiento R.I.O. (Rock En Oposición) donde primó la libertad del artista y su independencia (claro, si quieres libertad, tendràs que hacerte cargo de tu propia libertad y tendrás que ver cómo te subvencionas tu trabajo, porque ya no tendrás quien lo haga por vos) tenemos a artistas inmensos como Gismonti, M.I.A., Marillion, The Enid y muchísimos otros más, menos o más conocidos, que apuestan a la independencia. También lo tenemos al señor Olfield que lanza este disco libre de contratos. Y según este músico, en realidad no quedan muchas opciones: "La industria de la música ha cambiado. Ya no puedes vivir del dinero que ganas grabando discos. Es muy triste, no para mí, sino para los músicos más jóvenes. Me cuesta creer que podemos estar ante el final de la música, no sé cómo alguien va a poder vivir de esto, de hacer música. No creo que los músicos jóvenes puedan tener una carrera en el mundo de la música. Todavía puedes ganar algo de dinero dando conciertos, si eres bueno, pero todo lo que está pasando es muy preocupante".
Yo no he escuchado aún este disco, en medio de mis vacaciones veo el mail del Mago Alberto con esta belleza y no puedo hacer otra cosa que tratar de compartirla con ustedes ahora mismo.
Return to Ommadawn is the twenty-sixth studio album by Mike Oldfield. It is a sequel to his third album, Ommadawn (1975).Wikipedia
The album was released on 20 January 2017[1] on CD, CD/DVD, LP and as a digital download by Virgin EMI Records. The CD/DVD-Audio set contains a 5.1 surround sound mix of the album.
Oldfield has played with the idea of creating a sequel to Ommadawn in the past; "Amarok was originally going to be Ommadawn II, but it went off a little in its own direction. "Oldfield's previous sequel albums had all been a part of the Tubular Bells series.
On 16 October 2015, Oldfield stated on Twitter, "I am continuing to work on ideas for "A New Ommadawn" for the last week or so to see if [...] the idea actually works."[6] On 8 May 2016, Oldfield stated on his Facebook group page that the new Ommadawn project with the tentative title of Return to Ommadawn is finished, and he is awaiting a release date from the record company.
On 7 December 2016, Oldfield revealed in a Facebook post that the release date was to be 20 January 2017. A 30-second preview was included in this Facebook post, and a 3-minute "radio exclusive single version" was played on BBC Radio 2.
Return to Ommadawn is the first album since Incantations (1978) that follows the format of having one track per side of vinyl simply titled "Part one", "Part two" etc.
Oldfield relató sobre el disco: "Viendo las redes sociales, los primeros 3 discos siguen siendo los favoritos de la gente 40 años después, y Ommadawn incluso más que Tubular Bells. Creo que es porque es una composición genuina más que una producción: manos, dedos, uñas. No me puse una meta. No estaba intentando conseguir nada ni contentar a nadie. Fue hacer música de manera espontánea, llena de vida. Hacer Return to Ommadawn ha sido volver a mi verdadero yo".
Sin duda a Oldfield no se le había visto defender tanto su obra musical como con ésta, lo que testifica que es un trabajo del cual se siente orgulloso.
Un lanzamiento que despertó antes de su salida muchísimas expecatativas, básicamente porque Mr. Oldfield ya había consultado a sus fans sobre que obra les gustaría para producir una continuidad, y todos coincidieron con "Ommadawn", y allí se abocó el lord inglés a trabajar en esa propuesta, que conceptualmente es una continuación de la obra original, y manteniendo musicalmente las características fundamentales del primer "Ommadawn".Mago Alberto
En la grabación que le tomo a MO casi un año se utilizaron la mayoría de los instrumentos originales de sus primeros proyectos musicales, hasta un piano que tocaba la abuela en la segunda guerra mundial en un pub tiene sus momentos en la vuelta a "Ommadawn".
Los últimos cuatro años golpearon muy fuerte la estructura emocional de Oldfield por cuanto tuvo que afrontar el fallecimiento de su hijo y también de su padre, y quizás para provocar sus propios anticuerpos mentales se encerró en un estudio casero en las Bahamas y dió rienda suelta a lo que se convertiría en 2017 en el "Return to Ommadawn".
Los seguidores y fanas de MO seguro estaran muy contentos con esta obra que es como volver en el tiempo a una obra conceptual de los 70s. La carga emocional está impresa desde el primer sonido, y hasta diría que hay una sobrecarga emocional en todo el disco, cosa que MO siempre expresó de manera primordial y quien escucha su obra no escapa a sus efectos. La tapa del disco está inspirada en la serie "Games of Thrones".
Un reflejo o una onda expansiva de los 70s impregnará y pegará seguro en más de una neurona cabezona, relájense y conéctense con el espíritu de Oldfield.
Y como dije, yo no voy a dar mi comentario de un disco que aún no he escuchado, pero ya hay otros comentarios dando vueltas y me remito a ellos. Parece que esto está bueno por lo que dicen,
Expectación. Sin lugar a dudas esa es la palabra que mejor podría definir las primeras reacciones de los seguidores de Mike Oldfield al conocer que su nuevo trabajo estaría centrado en una de sus mejores obras: Ommadawn. Dicha expectación estaba más que justificada, por motivos evidentes, al tiempo que era imposible no sentir cierta incertidumbre ante la posibilidad de que ese retorno no fuera, ni de lejos, lo que cabría esperar del genio de Reading. Esta semana se despejó cualquier atisbo de duda: Oldfield lo había vuelto a conseguir, ofreciendo uno de los mejores trabajos de toda su vida.reviewsnewage.com
Grabado todo “a mano” por él mismo durante casi un año, con un sonido limpio y cuidado, una base rítmica espectacular en muchos tramos, y sin abusar de las percusiones (tan sólo en ciertos momentos clave, en los que los tambores africanos vuelven a tener un papel crucial), Mike juega con las sorpresas, regalándonos después de tantos años una de sus mejores producciones.
Cabe destacar, no obstante, que Return to Ommadawn se aleja notablemente de la secuela “espiritual” que supuso Amarok. Así, aquellos que estén esperando una continuación lógica del trabajo del año 90, se sentirán frustrados en cierto modo. En cualquier caso, si nos atenemos a las palabras de Oldfield cuando aseguró que había regresado a sus raíces musicales, efectivamente así ha sido. Éste nuevo álbum no podría tener mejor nombre. Es como viajar atrás en el tiempo y situar a Mike de nuevo en pleno 1975, en su etapa más acústica, pero con la experiencia musical y personal atesorada durante estos cuarenta largos años. Return to Ommadawn en un estéreo más que perfecto, que vuelve a presentar magistralmente todos los instrumentos y ofrece multitud de fragmentos ciertamente inolvidables.
Diferenciando ambas partes, la primera puede resultar ligeramente más sencilla, más reservada, en cuanto a producción. Su introducción presenta, tal y como describía recientemente el propio Mike, un fondo distante y unas flautas celtas que suponen un guiño a Hergest Ridge. A continuación, van cobrando especial protagonismo sus instrumentos de cuerda, desde Fender Strat a mandolinas, pasando por PRS, Gibson y guitarra clásica entre otros. Es en el minuto 12, tras un repentino cambio, cuando entran en juego los tambores africanos, decisivas percusiones a las que se irán sumando, in crescendo, los mismos juegos corales del primer Ommadawn (recuperados tal cual para la ocasión) y el sello inconfundible de Oldfield, sus solos de guitarra que fluyen, como toda la primera parte, con elegancia y sumo cuidado, destacando extremadamente la inteligencia de sus cambios.
La segunda parte resulta más cálida, pero también más compleja y contundente, con fuerte protagonismo de teclados y guitarras en algunos fragmentos. Nacen así melodías fascinantes donde Oldfield tiene la posibilidad de destacar diversas genialidades durante sus 20 minutos de duración, regalándonos diferentes estados de ánimos e instantes de auténtico virtuosismo, tanto en la utilización de sus instrumentos, como en lo que a producción y composición respecta. Mike se adentra sutilmente en un perfil más celta, pero sin abandonar el carácter general que marcaba la primera parte, con melodías para el recuerdo cuyas notas, quizá, permanecerán para siempre en la memoria de sus seguidores. Cada escucha, sin duda, resulta mejor que la anterior.
El seguidor fiel podrá echar en falta solos más virtuosos, pero es necesario recordar, no sólo la evolución de Oldfield durante las últimas décadas, sino también los contratiempos que sufrió durante la grabación de Ommadawn, en la que perdió excesivas horas de trabajo por problemas con las cintas, hasta el punto de llegar a perder todo lo grabado y tener que comenzar de nuevo. Todos esos esfuerzos, unidos a la infinidad de ocasiones en que tuvo que tocar las mismas melodías, hicieron mejorar enormemente su técnica para aquel álbum. Aparte de esto, la otra ausencia destacada del álbum, si es que queremos considerarlo como tal, es la omisión de un nuevo “On horseback”, el postre final que pusiera la guinda a semejante banquete musical tal y como ocurriese en el año 75.
Si existe una parte realmente criticable del disco, sin duda puede ser su portada. Una composición gráfica que, como el propio Mike contaba recientemente, evoca el encuentro de un refugio seguro tras haberse perdido en la nieve. El álbum, mucho más abierto y esperanzador que su predecesor, no casa adecuadamente con dicho diseño.
Desde un punto de vista totalmente externo al músical, el tragico contexto que rodeó la vida del genio de Reading durante el primer Ommadawn, se repite también en esta secuela. No hay que olvidar que Oldfield compuso Ommadawn enmarcado en uno de los peores momentos de su vida y con solo 21 años: justo cuando empezaba a recuperarse de su adicción al alcohol, falleció su madre y apenas se hablaba con su padre. Esa terrible e inesperada pérdida, que coincidió en pleno proceso de grabación de la primera parte del álbum, le hizo sumergirse completamente en su música, liberar todas las tensiones a través de la composición y crear uno de los mejores y más irrepetibles solos de guitarra de toda su carrera profesional. Del mismo modo, en la actualidad y desde que tocara el cielo durante su actuación en la la Ceremonia de Apertura de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, las desgracias y los problemas han azotado su vida cual huracanes. Divorciado de su tercer matrimonio, del que aún se está recuperando emocional, y sobre todo, económicamente, perdió a su hijo Dougal Oldfield de tan solo 33 años (fruto de su relación con Sally Cooper). A esto hay que sumar el fallecimiento de su padre, Raymond, a la edad de 93 años.
Sigue resultando paradójico además, que una de las obras cumbre de su discografía, Ommadawn, pronunciado en realidad como “Amadán”, signifique “Idiota” en gaélico (Tal y como desveló en 2007 en su autobiografía, Mike quería añadir partes vocales que no fuesen fácilmente entendibles, por lo que solicitó a Clodagh Simmonds, cantante y compositora irlandesa, que escribiera lo primero que le pasase por la cabeza y lo tradujera al gaélico. Una de las frases era “Soy un idiota”, así es como eligió el título).
Sin duda, tras haber realizado varias escuchas de este esperadísimo nuevo álbum, es posible afirmar con rotundidad que es el momento perfecto para que Oldfield ofrezca a continuación su esperadísimo Tubular Bells IV. De momento, disfrutaremos, como hacía muchos años que no ocurría, de un nuevo trabajo enmarcado en su etapa acústica, tan añorada por sus seguidores, y que supone, como indicábamos al principio, uno de sus mejores trabajos.
Por último, cierro la entrada con una palabras de Olfield que siempre traigo a colaciòn porque las ha repetido millones de veces: "Desde que era muy pequeño la música no es que haya estado en mi vida, es que está en mi ADN, en mi existencia. Yo no escucho sonidos normales, para mí todo es música. Escucho el ritmo de los sonidos del mar, de la gente que habla… a veces estoy escuchando a alguien hablar y no estoy prestando atención a las palabras, sino a las entonaciones, a las consonantes. Todo es música para mi. No puedo dejarla. Sería como abandonar mi cuerpo".
Para finalizar el artículo, me quedo simplemente con la alegría que éste disco está dando a muchos fans. Hacía muchísimos años que no estaban tan emocionados los fans de Oldfield. En grandes medidas, el 90 por ciento de los fans están más que alegres y contentos con el disco. Oldfield está muy contento con la reacción de los fans en general, y también orgulloso de su trabajo independiente.
perdón no tienes el enlace para bajarlo?. Muchas gracias por tú trabajo
ReplyDeleteHola Luis, no hay descargas publicadas en el blog salvo que lo autoricen los músicos. Pero hay más material del publicado libremente en el blog y eso está en nuestra lista de correo. Para obtener toda esa información tienes que suscribirte a la lista de correo (te recomiendo usar un mail de gmail y NUNCA uno de Microsoft; tipo Hotmail, Live, Outlook, etc. porque filtran los mensajes de nuestra lista) y leer bien los mensajes de bienvenida ya que sino te perderás de información crucial. Para suscribirte, acá tenés una guìa que te ayudará en el proceso: http://cabezademoog.blogspot.com.ar/p/por-si-algun-dia-no-estamos-aca.html
Deleteprueba con un archivo torrent yo lo consegui de esa manera
DeleteEs una gran obra OMMADAWN,pero personalmente HERGEST RIDGE contiene un paisajísmo sonoro incomparable, es mi preferido!!! saludos cabezones!! Claudio Sumic.
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