Cuando hablamos de músicas del mundo, en muchos casos lo primero que se nos viene a la cabeza son indios tocando el sitar, o tal vez indios, pero de los del otro lado, realizando una danza de la lluvia. O si no los Zulúes, los Watussi, los Papuasios.... Pero la Norteamerica de raices europeas dificilmente acudirá a nuestra mente. Me he divertido explorando su folklore, pues de lo que aquí nos llega -aparte del típico country ramplón y verbenero,- hay muy poco de genuino; Neil Young, por ejemplo. Y es una pena, porque hay todo un mundo de cosas que escuchar. Aquí está el primer músico del que les quiero hablar, dentro de este género: Stefan Grossman. Vamonos a Memphis, Tennessee...
Artista: Stefan Grossman
Álbum: Hot Dogs
Año: 1972
Género: Country blues, bluegrass
Duración: 39:01
Nacionalidad: Estadounidense
Año: 1972
Género: Country blues, bluegrass
Duración: 39:01
Nacionalidad: Estadounidense
Lista de Temas:
01. Hot Dogs -Cincinatti Flow Rag -New York City Rag02. Roll And Tumble Blues
03. Shake Sugaree
04. Martin's Joy
05. Promised Land
06. Candyman
07. Morning Comes
08. Take A Whiff On Me
09. The Do It All Over You Boogie
10. Blues For Mr. Sam
11. Vestapol -That's No Way To Get Along
12. Those Lazy Blues
Alineación:
Stefan Grossman/ guitarras
Big Jim Sullivan/ guitarras
Alan White / batería, percusión |
Lo primero que habrán notado, seguramente, es la maravilla de baterista que trabaja en este disco...nada menos que Alan White. A ver, a ver... vaya... si fue exactamente en plena época dorada de Yes, cuando tenían entre manos Close to the Edge! En efecto, Alan White en ese momento ya formaba parte de aquella banda de semidioses llamada Yes. Ya solamente por esto el señor del que vamos a hablar hoy, Stefan Grossman, sería digno de mención. Pero hay mucho más.
Quien es Stefan Grossman?
Guitarrista, musicólogo, educador e historiador, Stefan Grossman era estudiante de blues acústico, cantante y guitarrista de Gospel con el Reverendo Gary Davis. Comenzó sus estudios musicales cuando tenía 15 años, asistiendo a clases con Davis los fines de semana, y pasando de ocho a diez horas en su casa en Harlem, absorbiendo todo lo que podía de sus conocimientos. Después de estudiar con Davis durante ocho años en la escuela secundaria y en la universidad, siguió aprendiendo con mucho ahinco de otros guitarristas de country blues: Mississippi John Hurt, Son House, Skip James, Mance Lipscomb, y Fred McDowell. Entre otras influencias tempranas de Grossman están Elizabeth Cotten , Sam McGee , Willie Brown , y Charley Patton.
A comienzos de los años '60, Grossman formó la Even Dozen Jug Band y trabajó con los Fugs, una banda de rock, antes de trasladarse a Gran Bretaña. En 1968, fundó con Ed Denson la discográfica Kicking Mule, un sello que se especializó en blues acústico y en otros diversos estilos de guitarra folk. Denson y Grossman disolvieron su sociedad a mediados de los años 80, pero el catálogo de Kicking Mule fue adquirido por Fantasy Records. Las caras de algunos de sus vinilos llegaron al fin a ver la luz del día, pero ya en formato CD.
De 1967 a principios de los 80, Grossman vivió en Gran Bretaña, donde se ganó una buena reputación en el mundillo del blues europeo, tocando con algunos de los guitarristas acústicos más aplaudidos por los británicos, como es el caso de John Renbourn y John Fahey.
Su discografía en solitario tiene su punto de partida en 1966, cuando grabó Cómo tocar la guitarra Blues, con Elektra Records; sus grabaciones de sesiones también incluyen temas ejecutados con la Even Dozen Jug Band (en los que intervenían también futuras estrellas como John Sebastian, Maria Muldaur, y David Grisman), así como discos de Paul Simon, John Fahey , Charlie Musselwhite , y Happy Traum. En los años 80, Grossman comenzó una larga relación con la Shanachie Records, de Newton, Nueva Jersey, grabando intensivamente y sacando de su chistera álbumes como Shining Shadows (1988), Guitar Landscapes (1990), Love, Devil & Blues (1992), Northern Skies , Southern Blues (1997), y Shake That Thing: Fingerpicking Country Blues (1998) para este sello.
Mientras residió en el noroeste de Nueva Jersey, Grossman salió de gira con poca frecuencia y concentró sus esfuerzos en el buen funcionamiento de su negocio de audiovisuales educativos Vestapol, publicando videos (muchos de los cuales están ahora disponibles en DVD) con la colaboración de guitarristas de primera linea del country y bluegrass. Verán muchos tutoriales suyos en YouTube.
Durante el año 2000, encontamos a Grossman inmerso en la grabación de Dúos y Tríos (en 2007 Bermuda Triangle Exit, con Tokio Uchida, y Played a Little Fiddle con Danny Kalb y Steve Katz ) y publicando los resultados en su sello Guitar Worshop, que también lanzó discos de Davy Graham,Happy Traum, y David Laibman, así como grabaciones de archivo y una serie de colecciones de Varios Interpretes. En 2006 comenzó a viajar una vez más, haciendo apariciones en los EE.UU., Inglaterra, Europa y Japón. Grossman sigue siendo una de las principales autoridades del mundo en cuanto a la guitarra de Blues acústico.
Resumiendo, Grossman es un personaje de multiples facetas: si bien la de educador es quizás la central, tambien destacó enormemente como instrumentista, como folklorista, preservando las raíces, rescatando piezas y técnicas del autentico country, esa música que tiene tanto de irlandés, que en algunos momentos casi no parece ni americana.
Este disco, que es especial para mi, no solo porque es el primero que oí de este gran guitarrista, sino porque me parece de lo mejor que ha hecho, desafortunadamente no lo tengo en buena definición, solo en mp3 por ahora.
Cada canción del álbum tiene una historia, o bien relacionada con el folklore, o con su autor. pongamos por ejemplo, Shake Sugaree. Esta canción fue compuesta por Elizabeth Cotten, una mujer afroamericana de pocos recursos, y muy religiosa: Ella solía ir a tocar la guitarra a la iglesia. Dice la wikipedia: "Su vida dió un giro radical debido a un hecho fortuito. A mediados de los años '50, Cotten se encontraba trabajando en los grandes almacenes Landsburgh’s de Washington cuando encontró a una niña perdida a la que ayudó a encontrar a su madre, que resultó ser la musicóloga Ruth Crawford Seeger quien le ofreció trabajo como niñera de sus hijos.
Elizabeth Cotten
Trabajando para los Seeger, Elizabeth Cotten rescató su vieja guitarra y comenzó a tocarles canciones a los niños. Su peculiar estilo llamó la atención de la familia, especialmente de Mike Seeger, uno de los hijos que, grabadora en mano, grabó algunos de los temas que en 1958 fueron publicados en un álbum titulado Folksongs and Instrumentals with Guitar. El tema "Freight Train" compuesto por la propia Cotten en 1904 cuando apenas contaba con 11 años tuvo una enorme repercusión, siendo versioneado posteriormente por artistas como Peter, Paul and Mary, Jerry Garcia, Bob Dylan, Joan Baez, Devendra Banhart, Laura Gibson, Laura Veirs, His Name Is Alive, Doc Watson, Taj Mahal y Geoff Farina. Tras la publicación del álbum comenzó a realizar actuaciones, acompañada por Mike Seeger, la primera de las cuales tuvo lugar en 1960 en el Swarthmore College."
Y resulta que el tal Shake Sugaree era su nieto, que tocaba con ella!
Candyman, "el hombre caramelo", es una canción tradicional americana, a no confundir, por favor, con la de Christina Aguilera...
En cuanto a That's no Way to Get Along (Vestapol es simplemente una tecnica de fingerpicking con la que se ejecuta la canción) tiene una historia curiosa: cuando la escuché me pareció casi identica a una canción de los Rolling Stones, Prodigal son. Yo me preguntaba quien plagió a quien, hasta que pude aclararlo; Por un error, en los créditos del álbum Beggars Banquet, de los Stones, la discografica le cambió el nombre, y puso como autores A Mick Jagger y Keith Richards. El verdadero autor fue el reverendo Robert Wilkins, al parecer un talento del country blues y del Fingerpicking.
Para terminar, les dejo un artículo de la revista Rolling Stone sobre este curioso asunto. Que se lo pasen muy bien.
"Prodigal Son," one of the tracks on the Stones' Beggar's Banquet LP, is not an original by Mick Jagger and Keith Richards, although the album credits, as revised from the original banned LP cover to the one inspired by the record company, list it as such. It is a song written and recorded by Reverend Robert Wilkins, a
72-year-old former blues singer turned minister. He first recorded it in February of 1964 for Piedmont Records (Reverend Robert Wilkins—Memphis Gospel Singer Piedmont 13162), a now defunct specialist label that featured Mississippi John Hurt, as well as reissues of classic blues and ragtime numbers.
The original cover for Beggar's Banquet had clearly credited Wilkins with the tune, and since the confusion was pointed out to London Records and the Stones business office, publishing, royalties and other attendant financial details have been happily and properly straightened out.
It's more than just a matter of credit where credit is due; anyone who copyrights a song is paid composer royalties for any recordings of that song. The standard music publishing contract provides that the author gets 50 percent of the royalties, the publisher gets the other 50 percent. Nowdays, this generally means that for each song recorded on an LP, the composer gets 1 ¢ per copy sold.
The song rights are owned by Wynwood Music, Box 141, Burke Va. 22015, headed by Peter Kuykendall, a former bluegrass singer and arranger (he worked with the Country Gentlemen), and sound engineer; he mastered Wilkins' Piedmont LP. When contacted, Kuykendall hadn't heard of the Stones recording.
"We usually try to keep close tabs on this sort of thing, but it's not always possible," he explained. "But I'll certainly get my papers in order and put in a claim – and hope for the best. The Stones may accept it and pay on it right off," he continued, "which was the case with Cream's version of Skip James's 'I'm So Glad' on their first LP. I don't know if it was Clapton or who, but when they found out about the claim they said, 'Let's not fight it, he needs the bread.'"
Dick Spottswood, who recorded the Reverend's first and only LP, is an old-time record collector, bluegrass enthusiast, and former head of several specialized blues and folk labels. He filled in Reverend Wilkins' background. "He was born Robert Timothy Wilkins, January 16, 1896, in Hernando, Mississippi, Negro on his father's side, white and Cherokee Indian on his mother's. When he was very young, Wilkins' father was forced to leave the state to avoid prosecution on bootlegging charges. Wilkins' mother remarried, to a very fine guitar player, who taught Robert. By age 15, Robert was playing for dances, parties, etc., and he became a very fine guitarist and singer. In 1915, he left for Memphis, Tennessee, and other than a short spell of military service in World War I, he's lived there ever since. He never did make his living completely by singing, but music has always been a part of his life."
In September of 1928 Wilkins made his first blues recordings, for Victor label. The song was "Rolling Stone Blues, Parts I & II" (another twist!) "Robert used a borrowed guitar with a broken neck – he didn't want it released, but Victor went ahead. For later sessions he got a better guitar, the sound was much improved. A year later, 1929, Wilkins recorded "That's No Way To Get Along," a blues ancestor of "Prodigal Son," using the same melody and guitar lines, only with blues lyrics (available today on a reissue LP Mississippi Blues 1927-1940, Origin Jazz Library OJL-5). Wilkins worked as a pullman porter and stockyard clerk, singing and recording on the side.
"In 1936 he was 'converted' to Christian ideals, which meant that he stopped singing secular music. In 1950 he undertook his first ministry, and he is now an herb medicine specialist and minister of the Church of God In Christ, in Memphis."
Spottswood, a connoisseur of old blues, "rediscovered" Wilkins in a manner that seems absurdly simple when you hear of the decade-long hunts for other old blues men. He heard a rumor that Wilkins was alive in Memphis, went to a library, got a Memphis directory, and found two Robert Wilkinses listed. So he sat down, wrote identical letters to both addresses, and the right man answered. The recording sessions and Newport appearances followed.
"Wilkins' guitar style hadn't changed," Spottswood said. "But the old blues songs had become guitar instrumental pieces – he would play anything – it was only sinful to sing the words. Or he would rework the old songs, as the case with 'That's No Way To Get Along' becoming the biblical tale of 'Prodigal Son.'
"Today Wilkins is making a comfortable living as a minister, and he's the patriarch of a large family, including his wife, children, in-laws and grandchildren. He sings and plays gospel songs as a regular part of his weekly service – but he's still proud of the old blues."
Later, Kuykendall phoned the Reverend and told him of the Stones recording, without mentioning the copyright difficulties. "He seemed quite happy that people will be hearing his song," Kuykendall said. "It couldn't bother him that a rock group has done it."
This story is from the March 1, 1969 issue of Rolling Stone.
By Tony Glover
el Canario
Qué buen aporte!! Gracias, Canario!
ReplyDeleteGracias princesa. Tengo al menos tres álbumes más que comentar, de este género. Besos
ReplyDeleteCanarín... sos grosso, sabelo....
ReplyDeleteDark-ius