Mirale la cara. Mirala en el barrio. Mirala con lxs pibxs. Mirala en el merendero y con el micrófono. Con la casaca y las ganas. Con las compañeras y amigas. En los plenarios y calles. Mirala, que se te grabe, que nunca desaparezca.
Mirala para nunca más preocuparte por una catedral, un patrullero o una pared pintada. Mirala y dejame de romper los ovarios con las caras tapadas, nuestras tetas y algún cascote. Mirala y decime si no te sentís un forro.
Mirala y preguntate si vas a seguir hablando sobre cómo iba vestida, sobre la hora que era, sobre el lugar y dónde estaban esos padres, preguntate si andaba sola y sentite una mierda.
Mirala y volvé a decirnos violentas si te dan los huevos. Mirala y decime que no podemos estar hartas, enojadas, angustiadas.
Mirala y salí a la calle con tus compañeras. Mirala y discutile a los machitos de tu familia, amigos y compañeros.
Mirala y hablá de un Estado ausente y una justicia cómplice. Mirala y no te olvides del violador suelto, del juez que lo libera, de la yuta no haciendo una mierda.
Mirala y no permitas nunca más el chiste misógino en la oficina, el golpe que se escucha en la casa de la vecina. Mirala y no te hagas el pelotudo.
Mirala y dejá de decirle piropo al acoso y y violencia a la violencia machista. Mirala y no desvíes la mirada cuando nos gritan, tocan, ningunean, ridiculizan, golpean.
Mirala y hacete cargo del cupo, de correrte, de dejar avanzar. Mirala y cagate en tus privilegios que nos hacen de pared cuando queremos gritar.
Mirala y nunca más se te ocurra decirnos cómo luchar, cómo expresarnos y con qué formas hablarles.
Mirala y que te quede bien claro: Micaela es nuestra lucha y hambre de justicia.
Mirala y que te quede claro que no vamos a parar, que Micaela es un llanto colectivo en un abrazo común. Que hoy en los barrios suspendemos el taller de mujeres para pasarnos el mate entre lágrimas que prometen justicia.
Mirala para siempre y nunca te olvides: no vamos a parar nunca, porque si paramos le fallamos a la negra y a todas las que no están.
Mirala porque la negra no lucha más, pero acá estamos nosotras y juramos vencer.
Vamos a llenar de machos, ratis y jueces el paredón. SE VA A ACABAR.
Julieta Gugliottella
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ReplyDeleteFEMINAZI
ReplyDeleteLautaro: No acostumbro a responder a trolls, pero me agarraste justo en un momento de suerte... de suerte para vos. Voy a tratar de desarrollar la idea por partes.
DeleteNo conozco a Julieta Gugliottella, que es la autora de la nota original. Pero veo su perfil en Facebook y me doy cuenta que es una persona valiente, en contraposición con vos que tenés un perfil falso en Blogger desde 2008, con solo dos visitas y lo usás ahora para insultar.
Por lo que veo Hera solamente reprodujo las palabras de Julieta sin censura, y no como los que hicieron el video, que lo acomodaron a la visión de un hombre, pero censurando.
Estaba pensando en escribir algo sobre Mica. Resulta que yo conocí a Mica el año pasado en mis vacaciones, de pura casualidad. También lo conocí a su novio Alejandro. Lo recuerdo jugando en patas a la pelota con los gurises en el SUM, tratando de darles una alegría, una distracción, cuando iban a tomar la merienda que sus padres aparentemente no podían darles. La recuerdo a ella haciéndole hacer gimnasia a las chicas. Chicas que no podían pagar un gimnasio. Mica era dulce y tal vez no hubiera estado de acuerdo con estas palabras que aquí se transcriben. Pero corren por cuenta de quien las escribió. La autora tendrá su bronca, como yo tengo la mía. Bronca por estar lejos en este momento y no poder hacer nada. Iba a pedirte que le expongas tu sesudo comentario a Julieta, que es lo que corresponde, pero después pienso que no podés hacerlo. No podés hacerlo porque no existís, porque te escondés detrás de un perfil falso. Conozco muchas madres de mi barrio que no son feminazis pero tienen ganas de cortarle las bolas a varios en este momento. Son simplemente madres, como yo soy padre y también tengo ganas de cortárselas a más de uno.
Por eso te dije al principio que tenés suerte. Tu cobardía te mantiene a salvo. A salvo de todos menos de vos mismo. Tu olor a cobarde te acompaña en todo momento. Ojalá cambies, porque es muy triste ser un cobarde.
Lautaro: es cierto. NO EXISTÍS.
DeleteHay hay hay, cuanto pelotudo comentando.
ReplyDeleteNo por nada tenemos este presente...
La verdad Lautaro feminazi te recomiendo que si querès causar indiganciòn, hacelo comentando un post político, porque estos temas nos afectan a todos los seres normales, ya que se trata de una vida que se truncó, de una familia que se arruino, de una sociedad que no encuentra justicia, de un estado ausente y de un sistema judicial inoperante y corrupto.
ReplyDeletePor eso recapacita porque la palabra feminazi te pone a la altura del engendro que violò y mato a Micaela