Artista: John Coltrane
Álbum: Coltrane Plays the Blues
Año: 1966
Género: Jazz, blues, Avant-Garde
Duración: 46:10
Nacionalidad: EUA
El legado de Coltrane tiene tantas aristas que es difícil elegir una puerta de entrada. Los especialistas dirán que se debe escuchar primero Blue Train (1957, pero es muy inicial), My Favorite Things (1961, orientado a la exploración modal y parte de un proceso junto con Giant Steps de 1959) o Ascencion (1965, demasiado vanguardista). Quizá una buena elección es este disco de blues que salió en 1966, se reeditó en 1970 y luego vino en CD con un bonus que no es blues pero fue grabado en la misma sesión del 24 de octubre de 1960. La base de blues que elige el trío/cuarteto de Trane los ubica en un punto intermedio entre el mainstream hard bop/post bop y la vanguardia free y modal, que, por otro lado, fue el ambiguo espacio en el que se movió este saxofonista genial, ampliando desde ahí las fronteras de la música.
El disco contiene seis blues, dos de ellos en un implacable trío sax-batería-bajo, con Elvin Jones en los tambores, alguien de quien el propio Trane decía: “A veces no puedo tocar con él” (1). En el bajo está Steve Davis, que lleva en orden todo el tiempo la labor de soporte del ritmo y plantea la armonía que Trane se encargará de poner llamas. El resto de los temas, incluyendo el bonus, tienen al tremendo McCoy Tyner, un pianista ultra armónico y percusivo que se mantuvo (junto con Jones) al lado de Trane durante una de sus mejores épocas. De él dice Ted Gioia, célebre crítico de jazz:
En fragmentos en los que otros pianistas hubieran acompañado el saxofón de Coltrane con rutinarios acordes improvisados, Tyner retaba al solista con un tsunami sonoro.
Ted Gioia (2)
Todos los temas son de Coltrane. En cada uno está el uso de una forma de blues diferente, desde los alegres mayores de “Mr. Day”, llenos de soul, hasta los pesados compases de un auténtico blues fúnebre del Delta (que en los compases de cierre se alegra) en “Mr. Syms”, que además tiene el mejor solo de piano del disco, o la marcha con remembranzas arabescas con la que inicia “Mr. Knight”. En esta época también, Trane se interesaba por formas populares de la música asiática, africana y latinoamericana, lo que quedaría plasmado en 1961 en Africa/Brass:
Este apetito insaciable por lo nuevo y lo diferente era igualmente evidente en la música de Coltrane. Muchos años antes de que la llamada world music se pusiera de moda, Coltrane investigó en profundidad las culturas auditivas de India, África, Latinoamérica y otras partes del planeta.
Ted Gioia (3)
En “Blues to Bechet” y “Mr. Syms” Coltrane toca el saxo soprano, justo en la época en que comenzaba a explorar las posibilidades armónicas de este instrumento que había desaparecido del escenario de innovación del jazz de los sesenta. En el resto de los temas lo encontramos con el tenor, el saxo que tiene su sello, el sonido que construyó al lado de Miles Davis y Cannonball Adderley. En términos generales, este es un gran disco para conocer la técnica y la concepción coltreana de la música como quien no quiere la cosa, como quien escucha blues, ese canto centenario lleno de alma que fluye por las venas de la esclavitud africana en América.
Ted Gioia parece haber descubierto el secreto de Trane, al menos para su performance en el clásico Giant Steps (1959):
Si se observa con mayor detalle, gran parte del trabajo solista de Coltrane se basa en un patrón simple —que emplea en cualquier acorde las primeras cuatro notas de la escala pentatónica— […] Sin embargo, la magistral ejecución de Coltrane y su energía despiadada son impresionantes.
Ted Gioia (4)
Pero seguir un solo de Trane es una tarea imposible, no parece haber tal patrón al que se refiere Gioia. Su tratamiento de la melodía en constante búsqueda de sus multiplicaciones armónicas hace que el sax suene como si fuera un instrumento polifónico. Lo hace disparando a diestra y siniestra notas, las notas que va encontrando en su exploración (a la que no le falta un soporte modal, esa estructura armónica escalonada que descubrieron juntos Miles, Trane, Cannonball y Bill Evans durante ocho meses gloriosos en la historia del jazz). Leroi Jones (a.k.a. Amiri Baraka, un revolucionario crítico de jazz de la época), a diferencia del esquemático Gioia, lo describe así:
Esas masas tan notables de semicorcheas, ese concepto tan nuevo y articulado de emplear grupos enteros o clusters de notas disparadas rápidamente, como si insistieran en sugerir acordes más que en producir progresiones melódicas estrictas. Es decir, las notas que Trane usaba en un solo se volvían algo más que una sucesión de notas, en cualquier orden, orientadas a producir una melodía. Las notas iban tan rápido y con tantos subtonos, que adquirían un efecto como si se tratara de un pianista que golpeara acordes a gran velocidad, pero articulando cada nota del acorde, y cada subtono, por separado.
Leroi Jones (5)
Los temas sin piano son especialmente ilustrativos de esta técnica (más bien, una forma de expresión en proceso de búsqueda), al no estar más que sugerida la estructura armónica del blues por el bajo, el sax tiene que encargarse de proporcionarla, de otro modo, sonaría “seco”. Y no es así, tanto en el soprano como en el tenor, Trane dibuja la armonía de un modo tan percusivo que hasta las explosiones de platillos y tambores de Jones parecen cantar. Así, el sax de Coltrane se convierte en una especie de portal sonoro que conduce a otra parte, a algún lugar donde lo ordinario se convierte en extraordinario, parafraseando otra vez a Leroi Jones:
Esa es una de las funciones del arte: revelar la belleza, sea común o extraordinaria, de manera extraordinaria. Y eso es lo que hace Trane.
Hay un carácter osadamente humano en la música de Coltrane… Si uno sabe escuchar, esta música puede hacerle pensar en un montón de cosas extrañas y maravillosas. Podemos incluso volvernos una de ellas.
Leroi Jones (6)
Ya Moe nos habló de esto hace poco en dos posts geniales: “La religión de la música y el sacerdote de los sonidos” y “John Coltrane: la música, el espíritu y las matemáticas”.
Referencias:
- Joe Goldberg, liner notes del disco. Atlantic, 1966.
- Ted Gioia, Historia del Jazz, Madrid: Turner, 2002, p. 405.
- Ibid., p. 408.
- Ibid., p. 403.
- Leroi Jones (Amiri Baraka), “Un grande del Jazz: John Coltrane (1963)”. Black Music. Free Jazz y conciencia negra, 1959-1967. Buenos Aires: Caja Negra, 2013, p. 59.
- Leroi Jones, “Coltrane en vivo en el Birdland (1964)”, Black Music, pp. 66-67.
- Leroi Jones, “La Avant-Garde del jazz (1961)”. Black Music, p. 73.
Lista de Temas:
1. Blues to Elvin
2. Blues to Bechet
3. Blues to You
4. Mr Day
5. Mr. Syms
6. Mr. Knight
Bonus:
7. Untitled Original
Alineación:
- John Coltrane / Sax tenor y soprano
- McCoy Tyner / Piano
- Steve Davis / Bajo
- Elvin Jones / Batería
de donde saco ellink
ReplyDeleteDe la lista de correo...
ReplyDeletehttp://cabezademoog.blogspot.com/p/por-si-algun-dia-no-estamos-aca.html
;)