Artista: Silvestre Revueltas
Álbum: Night of the Mayas
Año: 1939 - 1994
Género: Música clásica
Duración: 68:22
Nacionalidad: México
A los once años de edad, ya estaba dando un concierto en el Teatro Degollado de Guadalajara. A los 21 realizó una gira artística por la República Mexicana, en 25 organizó conciertos de música moderna junto con Carlos Chávez; en 1926 (a sus 27 años) el público de Estados Unidos disfrutó el arte de Silvestre Revueltas, donde destacó como violinista y director de orquesta. En 1937 viajó a España con un grupo de artistas mexicanos, y a su regreso se dedicó resueltamente a escribir música propia. Se desempeñó con gran éxito como Director de la Orquesta Sinfónica de la UNAM y de la Escuela Nacional de Música.
Según cuenta Aaron Copland, Revueltas pasaba días sin comer mientras trabajaba en una partitura y se cerraba completamente del mundo. Las crisis que le resultaban al terminar una creación resultaban en fuertes alcoholismos y en la necesidad de internarlo en sanatorios.
Revueltas solía alcoholizarse en exceso al terminar una obra, como una forma de liberación de la tensión acumulada en la creación. Su inmensa soledad y aislamiento hicieron que redactara un diario con sus ideas acerca del amor, la humanidad y la vida, aparte del pesimismo por la incomprensión general hacia su propia creación.
Silvestre Revueltas Sánchez (Santiago Papasquiaro, 31 de diciembre de 1899 - Ciudad de México, 5 de octubre de 1940) fue un compositor mexicano modernista de música sinfónica de la primera mitad del siglo XX, violinista y director de orquesta. Es considerado el más influyente compositor mexicano, por el alcance y originalidad de su música de cámara y de ciertas obras que se han vuelto una parte muy importante del repertorio orquestal. Estas obras, notablemente Sensemayá, son frecuentemente interpretadas, sobre todo en Latinoamérica.Wikipedia
La música de Revueltas ha despertado el interés musicológico internacional, fenómeno que no se observó hasta 50 años después de su muerte. Las diferentes investigaciones están perfilando a un compositor cuya importancia lo coloca dentro de los creadores más originales de la música del siglo XX. Incluso Peter Garland, uno de sus principales estudiosos, lo considera el mejor compositor surgido en Latinoamérica.
Entre sus obras se cuentan "Cuauhnáhuac", poema sinfónico que describe la vida de un pueblo mexicano; "Tres cuartetos de cuerda" escritos de 1930 a 1931; y en este último año también "Dúo para pato y canario"; escribió "Redes" en 1935, alusivo a la lucha de los humildes; escribió "Siete canciones", basada en poemas de García Lorca; y en 1940 "La Coronela", entre otras.
Y así nos vamos preparando para terminar una semana, luego comenzaremos unas merecidas vacaciones pero con la promesa de una vuelta llena de sorpresas, discos incríbles, joyas perdidas, maravillas recién salidas y nuestros queridos clásicos de siempre... bah, lo que es común en el blog cabezón!
Corrían los años de la lucha armada de la Revolución Mexicana y la violencia tocó a muchos lugares del país; en el norte, sobre todo, la situación fue muy complicada mientras que en la Ciudad de México la guerra no se manifestó con la misma dureza. Aunque en los días de la llamada "Decena Trágica" de 1913 sí hubo cañonazos y balas perdidas, en términos generales las labores del día a día continuaron en la capital del país.
En este contexto el joven Silvestre Revueltas era estudiante del Conservatorio Nacional de Música, y en el año 1915 realizó su primer recital de piano. Desde niño demostró ser un virtuoso del violín y que su destino estaba en la música. Aunque su vida estudiantil transcurrió en un entorno relativamente amable, la transformación social y política revolucionaria incidió fuertemente en su quehacer artístico y en el de toda su generación, a la que también pertenecieron otros músicos de reconocida trayectoria como Manuel M. Ponce, Carlos Chávez, Candelario Huízar, José Pablo Moncayo y José Roldón.
En la década de 1920 los ideales revolucionarios comenzaron a consolidarse, enfocado en mejorar las condiciones de vida de la mayoría de los mexicanos. Los cambios políticos y económicos debían ser acompañados de una cultura que les diera soporte; y de este ímpetu surgió el nacionalismo cultural, que tuvo expresión en todas las áreas artísticas. En este contexto, Silvestre Revueltas se convenció de que el arte sólo adquiría sentido si contribuía con la formación de una cultura nacional, y para él lo más importante era que su obra tuviera su origen y destino en el pueblo mismo, encausando sus esfuerzos en acercar las expresiones artísticas y culturales a los sectores populares. Este tipo de música tuvo un repunte caracterizado por la innovación, la creación de un estilo propio y la elevada calidad artística.
Y dentro de toda esa gran movida artística, es que aparece el proyecto "La noche de los mayas", y para ver de qué se trató pasamos a copiar el texto de Wikipedia que habla de él:
Revueltas se había asociado con el director de cine Chano Urueta, el productor y argumentista Salvador Novo y el actor cómico Mario Moreno Cantinflas. En este año, Revueltas se dedicó al cine. Los trabajos de Urueta en el cine han sido durante mucho tiempo de pobre opinión de la crítica.Wikipedia
El rodaje de La noche de los mayas se inició el 17 de febrero de 1939. La película no tiene valor fílmico. Terminó con una gran aportación de Gabriel Figueroa en la fotografía en las ruinas de los mayas y la extraordinaria música de Revueltas, la cual se convirtió en una de las obras orquestales más interpretadas del compositor.
De acuerdo a Contreras Soto la partitura de Revueltas es altamente emotiva, dramática y brillante. La noche de los mayas se estrenó el 7 de septiembre de 1939 en el cine Alameda de la Ciudad de México. Durante la composición de la música, Revueltas recibió la noticia de la muerte de su madre, Romana Sánchez Arias. La versión actual de la música de La noche de los mayas es una recopilación de la música de la película, realizada por José Ives Limantour veinte años después de la muerte del compositor, quien la había realizado en forma de sinfonía.
La siguiente partitura fílmica realizada por Revueltas fue Los de abajo, también con la dirección de Urueta y posteriormente ¡Que viene mi marido! (1939). Las dos películas se estrenaron en 1940. Aunque la producción de partituras de cine le ganaron cierta ganancia económica, Revueltas se retiró de la composición fílmica.
Y ahora veremos qué es lo que nos cuentan en Viaje al espacio visceral sobre este disco:
Nacido el último día del siglo XIX (el 31 de diciembre de 1899) y falleció de alcoholismo el 5 de octubre de 1940, Silvestre Revueltas fue a todas luces el tipo de persona en torno a la cual crecen las leyendas. En realidad los hechos documentados son pocos. En su corta y oscura existencia, Revueltas ya se destacó como un niño prodigio en México, su patria. Estudió el violín y composición en Chicago en la época de los gángsteres. Fue el primer violín para una tal Aztec Theater Orchestra en San Antonio (Texas). Combatió del lado del gobierno republicano en la Guerra Civil española. Regresó a México, donde fue internado varias veces en clínicas psiquiátricas. Fue pobre y murió jovén.Nota original
He aquí el tipo de vida que suele parecerles tan atractivo a aquellos jóvenes y privilegiados "románticos" que nunca han experimentado nada parecido en carne propia. De hecho, el mundo debió resultarle a Revueltas un verdadero infierno. Sin embargo, como Malcolm Lowry (el novelista que vivió en México cuando Revueltas estaba componiendo sus obras y cuyo "Bajo el volcán" tiene algunas de las cualidades maníacas, volubles y cuasi-alucinantes que asociamos a la mejor música del compositor), no volvió del infierno con las manos vacías.
Escuchemos, por ejemplo, la introducción a "Homenaje a García Lorca", una composición de 1937 escrita en memoria del asesinado poeta español. El piano toca un acorde llamativo, disonante, que podría conducir a cualquier parte, mientras la trompeta canta una melodía ligada y anhelante. Por un instante, "Homenaje" parece una especie de nocturno moderno, pero de repente se produce un "golpe" y quebramos arrojados en medio de un tumultuoso torbellino de sonidos luminosos, deslumbrante y asombroso, un caos magistralmente controlado, una multiplicidad reducida a su quintaesencia. He aquí a Revueltas.
Peter Garland, cuyo libro "In search of Silvestre Revueltas (En busca de Silvestre Revueltas; Soundings Press) es, con diferencia, el estudio más valioso sobre el compositor en inglés, considera "Homenaje" su obra maestra: "Esta música borra completamente los límites entre la música clásica y la popular. Ya es casi como si ésta se apoderara totalmente del carácter de la música. Revueltas casi lo consiguió varias veces a lo largo de su obra, pero jamás con la misma emoción y desesperación que en esta pieza. Esta pieza canta como un mariachi (de los de antaño) y suena como si le fuera arrancada del corazón..."
"Semsemayá" es probablemente la pieza más conocida de Revueltas. (Leonard Bernstein, que sabía reconocer una joya cuando oía una, la grabó con la Filarmónica de Nueva York). "Semsemayá" fue compuesto para orquesta de cámara en 1937. La versión que aquí ofrecemos data del año siguiente y está orquestada para 27 instrumentos de viento, 14 instrumentos de percusión y cuerdas. El efecto visceral es brutal y apasionante, aunque "Sensemayá" está construida con extraordinaria sutileza rítmica. Si Igor Stravinsky hubiese escrito algunas "melodías" para ser tocadas en combinación con "Ionisation" de Edgar Varèse, el resultado podría haber sonado como "Semsemayá".
Un problema que se le presenta a todo aquel que pretende realizar una antología de la obra de Revueltas es el de encontrar una manera de romper la persistente, agudísima intensidad de su música. Es francamente imposible empezar con "Homenaje" y "Semsemayá" y continuar con otra pieza transcendental como "Redes" (1935), seguida de "Planos" (1933) y "La noche de los Mayas" (1939) sin poner a prueba nuestra capacidad de resistencia del oyente más fervoroso. Por eso, con reticencia, hemos dejado "Redes" para un disco futuro, sustituyendo esta pieza por otras tres, más apacibles y bastante menos ambiciosas. Por su puesto, "Alcancías" (1932) es una pieza que, impotente y con tres movimientos furiosos que suenan como "El Salón México" con mezcal, no tiene nada de diminuto. Aún así no es tan "pesada" como la mayor parte de la obra de Revueltas: las melodías son dulces y predomina un tono festivo, a veces incluso cómico. La "Toccata"(1933) y "Ocho x radio" (1933) marcan una música de cámara mexicana que es genuinamentede su propia época y lugar. ¿Ha habido jamás un compositor de la talla de Revueltas menos interesados en apropiarse de estilos y modos europeos? "Ocho x radio", de hecho, fue escrito para radio y, usando una imagen de Lowry, probablemente no sonaría nada mal berreando por altavoz de una cantina.
Severa, magnífica y furiosamente concentrada, "Planos" es una obra maestra del "alto Modernismo" (en el sentido anglosajón, a principios del siglo XX) sin una sola nota desperdiciada. Representa el estilo más formal y austero Revueltas. El propio compositor lo reconoce así, al caracterizar la pieza como una "arquitectura formal que no excluye sentimientos". Posteriormente rehizo y re-orquestó la obra para orquesta grande con el título de "Danza geométrica". Yo prefiero la primera versión: los ángulos son más nítidos, la pulsación más primitiva, la atmósfera obsesionante, incluso peligrosa.
El disco concluye con "La noche de los Mayas", que junto con Alexander Nevsky de Prokofiev y los mejores esfuerzos de compositores como Bernard Herrmann, Nino Rota, George Delerue y Alex North (quien fue amigo y alumno de Revueltas) constituye una música cinemática que ejemplifica el género a la vez que lo trasciende. Aunque nunca he visto la película para la cual esta obra fue compuesta, creo entender algo acerca de ella gracias a la composición de Revueltas, con su envergadura panorámica, sus graves ritmos mántricos y ese singular final con un obligado demencial de concha y los silbidos y sacudidas con que la percusión despierta a los muertos. Con el creciente y gran interés por la cultura hispana en los años noventas, parece que ya es hora de reconocer los méritos de Silvestre Revueltas. Su música es magnífica: vistosa, convulsiva, potente, y siempre original. "Catalyst" saca este disco convencido de que Revueltas por fin atraerá al gran público que sin duda se merece.
*Tim Page: Productor Ejecutivo de Catalyst. Además, el crítico de música clásica para revistas Nueva York y Long Island Newsday y autor de varios libros, incluso Music from the Road: Views and Reviews 1978-1992 y el próximo libro Dawn Powell ar Her Best (1994).
Lista de Temas:
1. Homenaje a Federico García Lorca
2. Sensemayá (New Philharmonia Orchestra, Eduardo Mata, conductor)
3. Ocho x radio
4. Toccata
5. Alcancías - Allegro
6. Alcancías - Andantino
7. Alcancías - Allegro vivo
8. Planos
9. La noche de los Mayas - I. La noche de los Mayas
10. La noche de los Mayas - II. La noche de jaranas
11. La noche de los Mayas - III. La noche de Yucatán
12. La noche de los Mayas - IV. La noche de encantamiento
Alineación:
- New Philharmonia Orchestra
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