La portada ya te avisa: nada de colores, nada de sonrisas. Vamos con el excelente y mejor disco (al menos por ahora) de una banda de Avant-Prog, Math Rock y Brutal Prog. Se trata del tercer disco de la discografía de este power trío brutal, y entra de lleno en esa hermosa sección que es la música para amar o para odiar sin términos medios, y personalmente es de la música que más me gusta, desafiante, compleja, aguerrida, visceral, llena de polirritmias, cambios, improvisaciones controladas, y da como resultado un trío que suena como si Don Caballero, King Crimson (época 1975) y Voivod se hubieran cruzado en un after de músicos matemáticos locos y peligrosos. Ojo, esto no es para todo el mundo y entra dentro de los terrenos pantanosos de lo que aquí dimos en llamar "música para amar o para odiar sin téminos medios", y que cae justo para que en este fin de semana te saque todos los tornillos que te quedaron un pobre y desvencijada cabecita. Quizás no te guste, pero esto es de...