Lució, sobre esto no cabe discusión, uno de los más majestuosos nombres imaginables: Thelonious Sphere Monk. De entre todos los emblemas de genialidad asociados a su figura, fue el único que no podemos considerar mérito suyo, sino de sus padres. Todo lo demás, eso sí, fue el producto de una mente insondable. Se desconoce más sobre Monk que lo que se presume saber y se presume saber más de lo que se debería. Todos tendemos a psicoanalizar a las figuras que nos deslumbran, es verdad, y aunque nos equivocamos casi siempre, no deja de ser un error producto de la admiración. Pero ni sus propios músicos lo entendían, así que no podemos pretender entenderlo nosotros. Por Emilio de Gorgot Yo lo que te digo es: toca a tu manera. No toques lo que el público quiere oír. Toca lo que tú quieres y deja que el público lo descubra después, incluso si les cuesta quince o veinte años. Thelonius Monk «Tocando con él podías ser libre, pero no demasiado libre», ha dicho alguna vez el legendario s...