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Mostrando las entradas etiquetadas como * Opinión

Javier Milei y su guerra contra los de abajo

Desprecio por los de abajo y obsecuencia para servir a los de arriba: resumen de un año de Javier Milei como presidente. El fondo del problema es a quiénes responde, para quiénes gobierna. Con la complicidad de amplios sectores políticos y judiciales, arremetió contra los pueblos indígenas. Busca profundizar un modelo que asegura dependencia, pobreza y violación de derechos. Más extractivismo y menos democracia. Cuando la realidad está alterada de forma extrema se hace necesario buscar otras categorías de análisis para pensar, luego hacer y transformar esa realidad. Con una pobreza del 50 por ciento, con un millón de niños sin cenar cada noche, con la quita de remedios a los jubilados y una política que, con complicidad judicial, arrasa territorios, no alcanza con decir que se trata solo de un modelo económico. Otra categoría posible para pensar la realidad: "Nos han declarado la guerra", explicaron en numerosas oportunidades los zapatistas, en referencia a las políticas ...

Un año de crueldad: El costo de un fracaso miserable

Hace un año que el autoproclamado "anarcocapitalista" Javier Milei asumió la presidencia de Argentina. Asumió el poder en un país donde la inflación anual era del 160%, más de cuatro de cada diez personas estaban por debajo de la línea de pobreza y el déficit comercial se situaba en 43.000 millones de dólares. Además, existía una enorme deuda con el Fondo Monetario Internacional de 45.000 millones de dólares, de los cuales 10.600 millones debían ser pagados al prestamista multilateral y a los acreedores privados. El anterior gobierno peronista había fracasado miserablemente en la expansión económica, la estabilidad de la moneda y la baja inflación. Tampoco logró poner fin a la pobreza y reducir la desigualdad. La tasa oficial de pobreza de Argentina aumentó al 40% en el primer semestre de 2023. Según la Base de Datos Mundial sobre la Desigualdad, el 1% más rico de los argentinos tenía entonces el 26% de toda la riqueza personal neta, el 10% más rico tenía el 59%, mientras que...

No es la economía bimonetaria, ni la dolarización, ni la escasez de divisas; es el colonialismo, estúpidos

La dirigencia política argentina, una y otra vez, expone como causas de la problemática económica nacional lo que en realidad son sus consecuencias. Sucede que tanto Cristina Kirchner como Javier Milei, con toda la franja de impresentables y mercenarios que se ubican en medio, no pueden admitir que se disputan la administración de una Argentina colonial donde sus sectores estratégicos, y su producción, se encuentran en manos de corporaciones extranjeras. El colonialismo, el sometimiento político; la extranjerización y primarización de la economía; son las verdaderas causas de la decadencia argentina; el resto, sus consecuencias. Por Rodolfo Treber Notas relacionadas:   Los hijos de puta: Si esta no es la casta... ¿la casta dónde está? Miseria social en Argentina: no es la pobreza, es la riqueza, estúpido   "Cuando la desigualdad social es abismalmente grande, se vive como como natural, la imaginación social ni siquiera es capaz de plantearse la posibilidad de su supresión y...

Miseria social en Argentina: no es la pobreza, es la riqueza, estúpido

¿Quién es el sujeto empobrecedor? Para el editorialismo mediático y su correlato en redes sociales, el "pobrismo" es resultado de los "gerentes de la pobreza". Pero ¿y los "gerentes de la riqueza"? Debiera ser obvio que está arriba lo que falta abajo, pero no lo es. Las clases y grupos sociales cuya riqueza es la contracara de carencias que agobian la vida de las mayorías siempre estuvieron fuera del radar de la discusión pública sobre la miseria social. Ahora, el ultraderechismo del gobierno de Javier Milei no solo se acordó de ellos, sino que los situó en el altar de la solución del problema. Como aprendimos en la primaria, somos un país con todas las estaciones, con todas las tierras y recursos; somos un país rico. La torta, sencillamente, es repartida con la inherente mezquindad de sus dueños. Por Sergio Tagle para La tinta Notas relacionadas:   Los hijos de puta: Si esta no es la casta... ¿la casta dónde está? No es la economía bimonetaria, ni la do...

Qué es esto? Una alegoría

El fascismo es una herramienta del capitalismo en crisis que opera bajo el precepto cognitivo y político de una permanente contradicción, aspecto que aparece nítidamente si pensamos en el gobierno del presidente Milei: un aparato de Estado ubicado en el corazón de la estatalidad para destruir el Estado social. Por Rocco Carbone para La Tecl@ Eñe. Me gustaría formular una alegoría. Vlad Tepes III de Valaquia fue un noble, militar y político rumano del siglo XV. Lo conocemos también con el nombre de Drăculea (hijo del dragón), miembro de la casa de Drăculești, conocido como el “empalador” por su afición de empalar a sus enemigos. En tanto señor feudal, poseía un castillo, hoy en ruinas, ubicado a orillas del río Argeș y conocido como la fortaleza de Poenari. Alrededor de ese castillo vivían campesinos y campesinas, súbditos de Vlad, a quien estxs denominaban “dracul”, que en rumano quiere decir “el diablo” o “el demonio”, por aplicar ingentes impuestos. De la historia, Vlad, pasó ...

El niño y el agua sucia

Hace unos pocos días y a propósito del recorte en la cobertura de medicamentos del PAMI a los jubilados nacionales, decíamos en una entrada: "Tampoco es ésta medida el único ajuste que está ejecutando este gobierno sobre sectores vulnerables, con la excusa del mal uso de los beneficios, o su indebido aprovechamiento: las turradas siempre encuentran en éste país una excusa para justificarse, y gente dispuesta a creer en esas excusas; que conoce un tío que pide medicamentos que no necesita, o un vecino que se queda con un paquete de polenta destinado a un comedor comunitario. La hijoputez se alimenta del prejuicio, siempre, y este gobierno es experto en manipular ambos en su beneficio". Aplica a este gobierno -como a pocos- aquello de no tirar el niño junto con el agua sucia, pero no deja de sorprender que hay una audiencia dispuesta a creer que los brutales recortes que está ejecutando en los roles y funciones del Estado no tiene que ver con una concepción ideológica, sino...

Los hijos de puta: Si esta no es la casta... ¿la casta dónde está?

Si acá no está la casta ¿la casta dónde está? En la Argentina se habla mucho de la pobreza: como se mide, cuantos pobres hay, si sube o baja, que políticas o gobiernos la hicieron crecer o bajar. En el discurso, les preocupa a todos: Macri hizo campaña en el 2015 prometiendo alcanzar la "pobreza cero", y Milei basa su cruzada contra el socialismo en que son "zurdos empobrecedores". De lo que no se habla tanto (casi nada) es de la riqueza y de los ricos: quiénes son, cuan ricos son, como y por qué se hicieron ricos. Y menos que menos se habla de la relación directa y necesaria que hay entre las dos cosas: en el capitalismo salvaje que vivimos, para que haya (pocos, cada vez menos) ricos cada vez más ricos, es imprescindible que haya pobres (cada vez más, y cada vez más pobres). Hablan mucho de la pobreza para no hablar nunca de la riqueza. Ése es el truco.   De los pobres sabemos mucho, o nos cuentan bastante: quien los manipula políticamente o los emplea como man...

Que deje de estar de moda ser un hijo de puta

La pintada decía: "Tiene que dejar de estar de moda ser un hijo de puta". La vi, la compartí, me quedé pensando en eso. En que es verdad, es literal esa frase, no llega a ser irónica. No tiene nada de ironía, en rigor: es eso la ultraderecha. Mirado desde este costado tan poco académico, le llamamos ultraderecha no ya a la desinhibición de todos los hijos de puta existentes y latentes, sino a su exhibición, su exaltación, y su ejemplarización. Los hay históricos y del común. Por Sandra Russo Ese llamado hegemónico a ser un hijo de puta es lo que inflama a la farmacéutica de Pinamar y a su marido, y es tan fuerte la repulsión y el desprecio que los domina, que partirle un palo de golf a una negra que toma mate es lo menos que pueden hacer. Lo peor es que en la amplia difusión del hecho, se hacía palanca en que la señora... ¡no era una negra! Si hubiese sido una negra la noticia circulaba menos. Así vivimos hoy, respirando el aliento en la nuca de miles de hijos de sus madre...

Ideario del arte y política cabezona

Ideario del arte y política cabezona


"La desobediencia civil es el derecho imprescriptible de todo ciudadano. No puede renunciar a ella sin dejar de ser un hombre".

Gandhi, Tous les hommes sont frères, Gallimard, 1969, p. 235.