Lars Fredrik Frøislie es un tecladista noruego conocido por su contribución en varias bandas de rock progresivo escandinavas, especialmente reconocido por su trabajo en White Willow, Tusmørke y sobretodo Wobbler. Este es su primer disco solista y es el elegido para terminar otra semana en el blog cabeza, ya que todas estas influencias están plasmadas (sobretodo la influencia de Wobbler, ya que esto parece una disco de esta banda). Y aquí tendrán lo mejor de progresivo retro, con momentos melancólicos, vuelos instrumentales progresivos a granel, miles de mellotrones para formar un disco totalmente "old school" hasta en su grabación, con un enfoque un tanto crudo que le otorga un sonido orgánico que es parte del encanto que aumenta la belleza de la música, que ya de por si es bastante. El disco es una autentica joya de rock progresivo barroco y medieval, y si bien yo reniego de los discos retro porque creo que la cosa está en buscar nuevos sonidos y nuevos caminos, cuando e...