En los últimos años, se ha venido sucediendo en América Latina procesos nacionalistas, populares, democráticos, que hasta cierto grado, han roto con los esquemas más ortodoxos impuestos en la región con la denominada "globalización neoliberal". Los países latinoamericanos viven hoy un momento que definirá su historia, al menos, por los siguientes 50 años. La continuidad de estos procesos, que fueron un tapón para el desarrollo de los planes de EEUU sobre la región que se vieron en el tratado del ALCA, sufren la agresión de la derecha continental, que son a todas luces dirigidas desde centros de inteligencia públicos y privados del Imperio (muchos critican la utilización de esta palabra, pero no es posible dejarla de lado mientras el enemigo de la humanidad sea el mismo y tenga la misma predisposición frente a nosotros).
Existe una monstruosa guerra psicológica de última generación, que permite a las grandes maquinas propagandísticas de la derecha manipular amplios sectores de nuestras sociedades. Los medios de comunicación imponen hoy una agenda de saturación que nos identifica con hechos aislados pero no nos deja pasar a la etapa de los acontecimientos. Los pueblos están siendo utilizados para generar la impresión colectiva de que la lucha contra la corrupción es la llave hacia la felicidad de los pueblos.
Es en el campo comunicacional donde se libra una de las batallas decisivas, pues de ellos surgen unidireccionalmente las ideas que prevalecen en los movimientos lanzados contra la izquierda continental. Parece mentira, pero incluso grupos revolucionarios caen en los discursos elaborados finamente desde la derecha.
No será extraño que se intensifique la campaña de desprestigio y persecución política contra quienes participan o participaron en el proyecto populista latinoamericano. Los puntos en común de los hechos que suceden y se comunican en todos los paises de América Latina (Brasil, Argentina, Venezuela, Ecuador, El Salvador, Guatemala y Honduras) nos impiden verlo como hechos aislados, ya que comparten la misma estructura y el mismo hilo comunicacional los rasgos característicos de la turbulencia social en estos países sigue un patrón similar, demasiado estandarizado para ser casual: los medios de comunicación se están comportando como un arma de guerra. La manipulación de las masas, la explosión de las emociones, el engaño frente a la realidad, el distanciamiento de la política, la satanización de la ideología, la acción intensiva de ONG y grupos religiosos, todo es tan consistente que la tesis del efecto dominó y el advenimiento de una nueva es absolutamente cuestionable.
Es preciso entender que ahora no solo buscan destruir procesos que se oponen al dominio del mercado, sino imponernos una nueva realisdad, una nueva historia, y nos preparan para que apoyemos (vuelvo a la idea del doblepensar que abordé en el post de "1984") los horrores de este neoliberalismo que hoy es más feroz y audaz que nunca.
Existe una monstruosa guerra psicológica de última generación, que permite a las grandes maquinas propagandísticas de la derecha manipular amplios sectores de nuestras sociedades. Los medios de comunicación imponen hoy una agenda de saturación que nos identifica con hechos aislados pero no nos deja pasar a la etapa de los acontecimientos. Los pueblos están siendo utilizados para generar la impresión colectiva de que la lucha contra la corrupción es la llave hacia la felicidad de los pueblos.
Es en el campo comunicacional donde se libra una de las batallas decisivas, pues de ellos surgen unidireccionalmente las ideas que prevalecen en los movimientos lanzados contra la izquierda continental. Parece mentira, pero incluso grupos revolucionarios caen en los discursos elaborados finamente desde la derecha.
No será extraño que se intensifique la campaña de desprestigio y persecución política contra quienes participan o participaron en el proyecto populista latinoamericano. Los puntos en común de los hechos que suceden y se comunican en todos los paises de América Latina (Brasil, Argentina, Venezuela, Ecuador, El Salvador, Guatemala y Honduras) nos impiden verlo como hechos aislados, ya que comparten la misma estructura y el mismo hilo comunicacional los rasgos característicos de la turbulencia social en estos países sigue un patrón similar, demasiado estandarizado para ser casual: los medios de comunicación se están comportando como un arma de guerra. La manipulación de las masas, la explosión de las emociones, el engaño frente a la realidad, el distanciamiento de la política, la satanización de la ideología, la acción intensiva de ONG y grupos religiosos, todo es tan consistente que la tesis del efecto dominó y el advenimiento de una nueva es absolutamente cuestionable.
Es preciso entender que ahora no solo buscan destruir procesos que se oponen al dominio del mercado, sino imponernos una nueva realisdad, una nueva historia, y nos preparan para que apoyemos (vuelvo a la idea del doblepensar que abordé en el post de "1984") los horrores de este neoliberalismo que hoy es más feroz y audaz que nunca.
A continuación, alguna notas que no son mías pero tienen puntos en común y un hilo conceptual. No me pidan que les brinde todo servido...
BPI: política monetaria expansiva aumentó la desigualdad
El Banco de Pagos Internacionales (BPI), que tiene su sede en la ciudad suiza de Basilea y es conocido como “el banco de los bancos centrales”, advierte de que las políticas monetarias expansivas aplicadas desde que estalló la crisis financiera mundial han contribuido a aumentar la desigualdad en la mayoría de los países. En un artículo monográfico publicado en el último boletín trimestral de marzo, dado a conocer este domingo (6.3.2016) por el BPI, se concluye que “la desigualdad probablemente ha aumentado en la mayoría de países como reflejo de la rápida recuperación de los precios de las acciones, que beneficia a los estratos más altos”. Asimismo el elevado grado de endeudamiento familiar perjudica a los estratos bajos. La recuperación de los precios de la vivienda, que habría favorecido a los estratos más bajos, ha sido más lenta. Según la entidad, algunas medidas adoptadas han tenido como objetivo los precios de activos. Según el informe, la desigualdad en el reparto de la riqueza ha aumentado en las economías avanzadas desde 1980: “Aunque la desigualdad se sitúa por debajo de los niveles de la segunda mitad del siglo XIX, este incremento marca el final de una tendencia de caída de la desigualdad que duró la mayor parte del siglo XX”, afirma. En el estudio, que analiza datos de hogares de Alemania, España, Francia, Italia, Reino Unido y Estados Unidos, se determina que los precios de las acciones y de la vivienda han sido los principales desencadenantes de la desigualdad. Desde 2010 las elevadas ganancias en las acciones han sido el principal impulso para un crecimiento de la riqueza neta en la parte alta de la distribución, asevera el informe.Nota original.
Monsanto suma a Blackwater, el mayor ejercito de mercenarios del mundo
Si algo le faltaba a la nefasta corporación Monsanto era un ejército oficial de asesinos a sueldo. Controla el suministro de alimentos, comparte financistas con la industria farmacéutica y fabrica armas nucleares y biológicas. El periodista Jeremy Scahill, en una nota de The Nation expone que el ejército mercenario más grande del planeta, (conocido antes como Xe Services y, más recientemente, “Academi”) realiza tareas para la corporación transnacional Monsanto. Tras incontables denuncias internacionales por violaciones a la Ley, y habiendo adquirido fama por sus masacres de civiles en Irak y otros países, Blackwater cambió su nombre en el año 2009. No obstante, continua siendo el mayor contratista privado del Departamento de Estado de Norteamérica, como una agencia secreta de "servicios de seguridad" que practica terrorismo de Estado dándole al gobierno la posibilidad de negarlo.
Political Blind Spot denunció que: "Muchos agentes de la CIA y ex militares trabajan para Blackwater o compañías relacionadas, las cuales buscan desviar la atención de su mala reputación y obtener cuantiosos beneficios comerciales. Estos mercenarios venden sus servicios que van desde información ilegal hasta inteligencia de infiltración, lobbismo político y entrenamiento paramilitar - para gobiernos, bancos y corporaciones multinacionales. Acorde a Scahill, los negocios con Monsanto, Walt Disney Company, Chevron, y gigantes financieros como el Barclays o el Deutsche Bank, se canalizan a través de dos empresas cuyo propietario es Erik Prince, dueño de Blackwater: Total Intelligence Solutions y Terrorism Research Center. Estos organismos comparten funcionarios y directores con Blackwater.
Uno de los directores llamado Cofer Black, quien se hizo famoso por su brutalidad como dirigente de la CIA, fue quien hizo contacto con Monsanto en el año 2008 siendo cabeza de Total Intelligence. Monsanto contrató sus servicios para espiar e infiltrar organizaciones de derechos humanos, de animales, y actividades anti-transgénicas (además de ejercer control sobre otras corporaciones biotecnológicas y farmacéuticas).
Según las malas lenguas, la corporación Monsanto no sólo asesina personas con sus productos químicos, sino también a balazos y mediante "accidentes". Sus víctimas son periodistas, activistas, políticos y cualquiera que suponga un obstáculo para sus planes de expansión.
No resulta sorprendente que una corporación extensamente dedicada a la ciencia de la muerte como Monsanto, que se dedicó desde sus inicios a producir venenos tóxicos como el Agente Naranja, los PCB (bifenilos policlorados), pesticidas, hormonas, semillas modificadas genéticamente, e incluso la bomba atómica, se asocie con otra empresa de asesinos y mercenarios.
Pocos saben que Gates está promoviendo activamente una toma de control corporativo de la agricultura mundial. La organización de agricultores orgánicos Vía Campesina reportó que la Fundación Bill y Melinda Gates compró 500.000 acciones de Monsanto, pagando más de $ 23 millones de dólares, lo cual es una acción que destruye la máscara de "filantropía". Bill Gates controla más de 90 por ciento del mercado de patentes en el mundo de la computación, además de promocionar y financiar campañas de vacunación para laboratorios genocidas, siendo responsable de experimentación ilegal con fármacos en países subdesarrollados, mientras Monsanto controla el 90 por ciento del mercado mundial de semillas transgénicas y semillas comerciales a nivel global, habiendo fundado Pharmacia, hoy de Pfizer.
En otras palabras no existen peores monopolios en el sector industrial, ni tampoco tan vastos. La propia existencia de estas entidades implica que la Tierra es subyugada por un régimen financiero totalitario el cual es en sí mismo niega el principio de "competencia de libre mercado". Tanto Gates como Monsanto son extremadamente agresivos defendiendo sus monopolios mal habidos.
Siguiendo órdenes de la familia Rothschild, tanto Gates como Monsanto se dedican a destruir la agricultura orgánica en todo el mundo, lo cual tuvo inicio, principalmente, mediante la "Alianza para una Revolución Verde en África" (AGRA), que operó como un caballo de Troya para privar a los campesinos africanos pobres de sus semillas tradicionales sustituyéndolas por semillas transgénicas. Para ello, la Fundación contrató a Robert Horsch en 2006, quien fuera director de Monsanto.
Nueva política agropecuaria en Argentina, menos apoyo a la agricultura familiar
La creación de la Secretaría de Agricultura Familiar significó un reconocimiento para las formas organizativas y productivas familiares y territoriales de base, un sector troncal en la producción de alimentos en nuestro país y también se involucró en los conflictos por tenencia de tierras. En diciembre de 2014 el Parlamento Nacional aprobó la Ley de "Reparación Histórica de la Agricultura Familiar Para la Construcción de Una Nueva Ruralidad en Argentina", que aún no fue reglamentada por el Ejecutivo Nacional.Mahuen Gallo, Diego Caviglia, Lorena Putero Investigadores del CESO (Centro de Estudios Scalabrini Ortiz)
La Secretaría trabajaba en distintos lineamientos desde dos Subsecretarías. Por un lado la Ejecución de Programas para la Agricultura Familiar, incluyendo las Direcciones de Identificación y Formalización de los Agricultores Familiares y de Programas y Proyectos para la Agricultura Familiar; y por otro la Subsecretaría de Fortalecimiento Institucional, con la Dirección Nacional de Fortalecimiento Institucional y Apoyo a las Organizaciones de Agricultura Familiar.
En ese contexto se logró construir un registro de la Agricultura Familiar. Hoy sabemos que a lo largo del territorio nacional existen 333.477 Explotaciones Agropecuarias (EAPs) de las cuales el 66% son de pequeños productores que se dedican principalmente a la agricultura y cría de animales, según los datos del Censo Nacional Agropecuario de 2002. También sabemos que la realidad del sector no permite establecer un cierre definitivo del registro. Para tener una dimensión de su importancia podemos decir que la producción de este sector en el área metropolitana abastece una parte importante de la canasta básica familiar: hortalizas, huevos, pollos, cerdos, miel, lácteos.
Posee los principales cordones hortícolas y florícolas del país; La Plata, Florencio Varela, Berazategui y Escobar, que proveen de verduras y flores a la Capital Federal, el Conurbano Bonaerense e incluso abastecen en parte a Rosario, Córdoba y el sur del país.
Estos avances no solucionaron todos los problemas del sector, pero plantearon canales de diálogo directo entre sus actores y el Estado, pudiéndose avanzar en necesidades concretas como asistencia técnica, acceso a financiamiento, creación de espacios de comercialización, entre otras cuestiones. Frente a estos avances, el cierre de la Delegación AMBA de la Secretaría de Agricultura Familiar (núcleo central de la producción de alimentos para la ciudad de Buenos Aires), el desmantelamiento de la Secretaría de Fortalecimiento Institucional y los despidos a trabajadores de la Secretaria en Jujuy muestran una clara decisión de revertir estos progresos alcanzados.
Se trata de volver a una política centralizada y tecnocrática, ligada al modelo agroexportador, donde no se produce para el mercado interno sino para la exportación, y sus actores son los grandes productores. Estas medidas se encuentran en línea con la quita de retenciones, megadevaluación, el cierre del Renatea y la vuelta al viejo esquema pro-esclavista conducido por la UATRE y las patronales agropecuarias.
Productividad, precios y concentración
Supuestamente estos cambios tienen como objetivo un aumento de la productividad en el sector y en la cantidad de producción, suponiendo que a partir de allí se mejorarán los precios de los alimentos y las condiciones de vida de quienes producen. Sin embargo, al considerar estas decisiones en su contexto vemos que hay un lectura errónea de la problemática.
El quite de las retenciones y la reducción de los controles a las grandes cadenas supermercadistas en paralelo al desmantelamiento del apoyo a los pequeños productores generará un panorama desolador para los mismos ya que pierden capacidad para negociar frente a los grandes actores, tanto de las cadenas de comercialización como los grandes productores.
Esto genera que en muchas ocasiones lo que se les ofrece como pago por unidad de producción es inferior al costo de producción de la misma. Ejemplos de esto es el caso de los productores rionegrinos que “tiraron” 100 mil kilos de pera por los bajos precios, dado que las exportadoras les ofrecían $ 2 por kg. (siendo el costo de la producción cercano a $ 4) y vendiéndose en el supermercado el kilo a $ 24. Similar denuncia se realizó desde la Unión General de Tamberos de la República Argentina, donde el litro de leche se pagaba a $3,80 el año pasado y hoy se paga a $2,20, generando una reducción del 30% en las ventas del sector y cierres de tambos con una frecuencia casi diaria, según denuncian.
Diagnosticar que el problema está sólo en la productividad de los pequeños productores sin considerar la concentración de los canales de distribución en el mercado interno y en el mercado de exportación es (al menos) un severo error. En este contexto, un crecimiento de la producción solo establece condiciones de oferta donde los beneficiados son los intermediarios, en especial las grandes cadenas comercializadoras. La reducción de la capacidad de negociación deja a los pequeños productores con muy limitadas posibilidades de colocar sus producciones a precios justos para ellos y para los consumidores.
El agravante en este caso es que el conjunto de las medidas adoptadas, como la devaluación y la quita de retenciones constituye una fuerte transferencia de ingresos hacia los sectores más concentrados. Ahora los pequeños productores deberán competir (por la tierra y los canales de comercialización) en aun mayor desventaja con las grandes empresas productoras. Es importante resaltar que la concentración de la producción de alimentos en grandes empresas hace que se define según rentabilidad la producción de alimento, es decir según el precio internacional de ese producto y su inserción en los mercados mundiales. También se equipararán los precios internos con los internacionales, al eliminar los desacoples que separaban ambos mercados.
El planteo de considerar como única vía de rentabilidad la exportación y al mercado interno al mismo nivel de precios nos coloca en la ya conocida historia de nuestro continente en la que producimos lo que el mundo, de forma divorciada de la satisfacción de las necesidades alimentarias de nuestros pueblos, dejando a los productores a merced de la competencia con las grandes cadenas y al resto de los ciudadanos a merced de pagar el precio que las grupos concentrados decidan. Este es el escenario que se avecina frente a los cambios en las políticas públicas hacia el sector.
La esperanza perdida del ciudadano medio
Cuenta una leyenda bíblica que un muchacho bello y flacuchento, pastor de profesión y, por los dichos de sus hermanos, un poco parlanchín, venció a un gigante, guerrero desde la infancia y armado hasta los dientes. Para defenderse, el joven pastorcillo no tenía más que un palo; y una fe inquebrantable…Catherine Fuhg
La historia de David y Goliat nos enseña que la victoria está al alcance de cada uno. Que el secreto reside en la pasión, el coraje y la imaginación. Esta enseñanza es una fuente que nos puede saciar en los momentos de descorazonamiento. Fresca, maravillosa, vigorizante. ¡Pero no! Basta de soñar. ¿Qué pasa en realidad?
En realidad, todos los hombres están sometidos a una misma fuerza suprema cuya clave no poseen. Una fuerza imposible de corromper, engatusar o enmendar. Este estado de igualdad sigue siendo lo único comprobado. Aparte, la humanidad está dividida en castas más o menos al reparo de los golpes duros de la vida. Es que ningún David, ninguno, tiene los medios de vencer al más mínimo Goliat. Porque sus adversarios no son extranjeros suprapoderosos ni fáciles de distinguir, son imposibles de identificar. ¿Quién es el enemigo de los más pequeños? ¿El hombre mismo, malo por naturaleza? ¿La economía de mercado? ¿O bien una fuerza oculta cuyo objetivo es instaurar un nuevo orden en el mundo?
Frente a un mundo al que se considera cada vez más pequeño, porque las distancias ya no existen, y que la comunicación y todo el resto de la cantinela… el ser humano se ve confrontado a sistemas complejos que ya no entiende, que parecen escapársele a sus padres, produciendo más complejidad sin cesar. Una suerte de cáncer.
Privados de visibilidad, los seres humanos se sientes débiles, pequeños y cada vez más vulnerables. Su imaginación, que gira al máximo en busca de soluciones a sus problemas cotidianos, al no encontrarlas, inventa historias de complot y de fuerzas obscuras. Ellos creen en ellas a rajatabla. Y, de hecho, ¿por qué no? Estos cuentos no son más descomunales que las múltiples mentiras que ya les hicieron tragar. Ya nada les parece increíble – ¿acaso no se dice que mientras más grande...?
Hay otros que se indignan contra todo, no importa cómo, y que se quedan sin voz de tanto vociferar “todos juntos” para convencerse de que no tienen miedo. Finalmente, otros cometen lo peor. Lo peor para ellos, lo peor para todos. Lo peor es la obra monstruosa de la impotencia humana. Acabamos, recientemente, de sufrirla en carne propia.
¿Qué hacer entonces? ¿Tenemos los medios para volver atrás? ¿Para restablecer un equilibrio? Por lo menos, un poco de justicia cuando sea posible.
¿No podríamos rever, por ejemplo, el juicio absurdo a un herborista parisino por haber osado oponerse a los farmaceutas?
El tribunal correccional de París el mes pasado se expidió contra Jean-Pierre Raveneau, condenándolo a pagar 50.000 euros de multa, un año de pena condicional y tres de sumisión a la condena: prohibición de ejercer su profesión. ¿Qué crimen cometió? El de ejercer un oficio que desapareció de los radares en 1941. Ese año, el Consejo superior de farmacia presionó al régimen de Vichy para que se suprimiera la formación de herboristas. Así, solo los farmaceutas podrían comerciar con plantas medicinales y preparaciones magistrales. Salvo que después, con el gran auge de los antibióticos en la posguerra, nadie se interesó más en las plantas y sus virtudes hasta estos últimos años en que el entusiasmo popular por la medicina natural cambió las cosas. ¿Y entonces que pasa con el señor Raveneau? Doctor en farmacia, bastaría con que se inscriba en el registro de farmaceutas y su problema estaría solucionado. Aunque entonces estaría obligado a vender medicamentos y no solo plantas. Cosa que no desea. Pero, una pregunta más: ¿su diploma no basta? No, no es suficiente. Cuestión de orden finalmente. Trabado de esta manera, este herborista como hay pocos, por falta de formación, no podrá durante tres años seguidos aliviar los dolores de los que lo necesitan.
¿Qué hay de aligerar un poco la carga sobre los productores y de todos los agricultores? Destrozados por normas establecidas por tecnócratas que deciden fehacientemente sobre la base de informes concebidos por burócratas. Cientos de productores cerraron sus puertas discretamente o fueron absorbidos por gigantes que no tienen ninguna tradición que transmitir ni defender.
Latinoamérica, España y Grecia
América Latina ha sido el escenario privilegiado de ofensivas de la derecha, porque es la región del mundo donde la derecha ha quedado más desplazada. Ha perdido sucesivamente elecciones en los países con gobiernos progresistas y ha pasado a apelar a intentos de desestabilización política valiéndose de su elemento más fuerte: el monopolio privado de los medios de comunicación.Emir Sader - Sociólogo brasileño, coordinador del Laboratorio de Políticas Públicas de la Universidad Estadual de Rio de Janeiro.
En el momento de elecciones, la derecha se jugó por entero intentando ganar: Ecuador, Bolivia, Brasil, Uruguay, Argentina y Venezuela. Acumulando nuevas derrotas, pero también victorias, cada vez se logra posicionar mejor en la región, y cuando no logra hacerlo la derecha pasa a poner en práctica planes de desestabilización política, como son los casos actuales de Brasil, Ecuador y Bolivia.
La oposición brasileña ha intentado, hasta donde pudo, cuestionar la reelección de Dilma Rousseff, haciendo que el segundo mandato de Dilma sea un periodo de crisis, de amenazas de ingobernabilidad. Toda operación se agota, al igual que en Argentina (caso Nissman, Aníbal Fernandez, etc.) pero los gobiernos salen de ella debilitados. En Bolivia, una región – Potosí – constituyó un comité cívico y, con una plataforma de reivindicaciones locales al gobierno, hizo una huelga regional y organizó una marcha en tono belicoso hacia la capital. El gobierno alega que ha atendido las principales reivindicaciones, pero los huelguistas lo niegan, suspendiendo su movimiento, pero con amenazas de retomarlo.
En Ecuador, dos medidas tributarias que el gobierno envió al Congreso que recaen sobre el 2% más rico de la población, llevó a que la oposición – juntándose, una vez más, sectores de la ultra izquierda con la derecha - desatara una reacción amplia y violenta, hablando de un "levantamiento" en contra del gobierno. Apoyada en sectores minoritarios del movimiento indígena y sindical, la oposición se topó con grandes movilizaciones populares en apoyo al gobierno de Rafael Correa.
Pero no es sólo en América Latina que se da esta contraofensiva. En la medida en que Grecia y España aparecían como los países en los que surge una nueva izquierda en Europa, con el agotamiento de los partidos tradicionales, reducidos todos ellos a la política de austeridad, ahí también la derecha retomó su ofensiva. Syriza y Podemos han pasado a cuestionar la austeridad y a capitalizar el descontento generalizado de la población. En Grecia, la derecha tuvo que actuar más duramente, porque era inminente el riesgo de que un gobierno cuestionara concretamente a la austeridad. La Unión Europea ha actuado con toda su brutalidad para derrotar y humillar al nuevo gobierno griego e intentar demostrar a toda Europa que, fuera de la austeridad, no habría vida posible.
Esa línea de acción tiene los ojos puestos en el resto de Europa, pero especialmente sobre España, donde Podemos se apoyaba en la experiencia griega como posible vía de superación de la austeridad. En contra del ascenso de Podemos, se ha desatado una estrategia que combina varios planes. En primer lugar, los medios de comunicación han fabricado mecanismos de rechazo a la nueva organización, mezclando denuncias sobre el comportamiento de algunos de sus dirigentes, y organizando una nueva organización de centroderecha – Ciudadanos -, que disputará con Podemos los efectos del desgaste del bipartidismo, volviéndose el blanco principal de la actuación de los dos partidos tradicionales – PP y Psoe -, ambos en pánico, y actuando juntos para poner límites al ascenso de Podemos.
El fracaso del intento de Syriza con miras a romper con la austeridad vino a complementar la operación de contención en contra de Podemos y mantener la bipolaridad española, condición indispensable para mantener la austeridad. El PP juega su suerte en la posibilidad de agregar Ciudadanos a una alianza que le permita seguir gobernando, como si nada hubiera pasado en España. Caso contrario, tendría que apelar al abrazo de ahogado del Psoe, reabriendo caminos para que Podemos vuelva a cuestionar la bipolaridad todavía con más fuerza.
Todo lo que se hace en Grecia y en España representa el capítulo europeo de la contraofensiva conservadora global, que tiene en América Latina su epicentro, porque es en esa región donde el modelo neoliberal es más fuertemente cuestionado. Frente a la fragilidad del modelo neoliberal, la derecha reacciona con intentos de desestabilización de gobiernos que ponen en jaque su modelo, pero también con bloqueos a las nuevas posibilidades de construcción de alternativas. Pero al no presentar propuestas renovadoras de su modelo, la contraofensiva de la derecha en escala global revela su corto, pero destructivo, aliento.
Crisis política hacia la radicalización y el desenlace en Brasil
El interrogatorio forzoso del exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva por la Policía Federal, este viernes 4 en São Paulo, apunta a una radicalización de la crisis política en Brasil, reforzando así el intento de inhabilitar a la presidenta Dilma Rousseff.Análisis de Mario Osava
Lula fue sometido a la llamada "conducción coercitiva" e interrogado durante tres horas sobre supuesta riqueza indebida, que habría recibido de empresas constructoras acusadas de pagar sobornos a políticos y miembros del gobierno, a cambio de millonarios contratos con la compañía estatal petrolera Petrobras.
Fue una coerción innecesaria, que solo se explica por objetivos mediáticos, según Lula, porque él ya atendió voluntariamente a las convocatorias para aclarar las acusaciones de que las constructoras pagaron obras en una finca que frecuenta con su familia, propiedad de un amigo, y en un apartamento que no llegó a adquirir. "Me sentí encarcelado", dijo el expresidente (2003), al terminar el procedimiento y reunirse de inmediato con militantes del gobernante Partido de los Trabajadores (PT). Allí anunció que reaccionará a la "persecución" que le hacen el Ministerio Público Federal (fiscalía general), la Policía Federal y medios de comunicación, recorriendo el país y movilizando a sus "compañeros".
La oposición convocó para el 13 de marzo protestas en todo el país contra el gobierno y por la inhabilitación o la renuncia de la presidenta Rousseff, su sucesora y también del PT, repitiendo manifestaciones de marzo y agosto del año pasado, que reunieron a centenares de miles de personas. La política brasileña, dominada por los órganos judiciales y represivos en la llamada Operación Lava-jato (autolavado), que investiga la corrupción en negocios petroleros, vuelve así a los foros usuales y a las calles.
La crisis entra a su apogeo, al alcanzar a los blancos principales de la Operación, Lula y la actual presidenta.
El blog progresivo! Grandes cabezones!
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