La independencia judicial no existe y nunca existió en Argentina, recordemos que hace poco María Eugenia Vidal logró la destitución del juez Arias, un magistrado digno, porque se atrevió a fallar en contra de los tarifazos. Todos los demás jueces cedieron antes las presiones. Todos excepto uno, Carzoglio, que no solo resistió a las presiones de las corporaciones, del gobierno y de la propia casta judicial, sino que además denunció con todas las letras, con nombres y apellidos, a la mafia que opera sobre los tribunales para hacer una operación de depuración política, disfrazada de justicia, desde el Procurador General de la provincia de Buenos Aires que filtra información a los medios para que hagan su tarea sucia de linchamiento mediático tendiente a disciplinar a los jueces y fiscales díscolos, hasta periodistas a sobre (Majul, Lanata, Ventura, Feinmann) y por supuesto los propios medios hegemónicos, con Clarín y La Nación a la cabeza. Parece que algunos anticuerpos comenzaron a activarse: un Juez se niega a llevar adelante un proceso sin fundamentos contra un sindicalista que está protagonizando medidas de lucha contra el gobierno.
Bajo las históricas dictaduras, los jueces siempre fueron "indiferentes" e "independientes" de nuestros derechos y garantías y de la propia Constitución Nacional, cómplices de la tortura y la desaparición, del terror y de los planes económicos paralelos. Básicamente, las corporaciones económicas y políticas en la historia argentina han utilizado siempre al Poder Judicial aristocrático y a sus empleados de clase alta para convencer a la clase media de que las clases populares, los trabajadores y los pobres son culpables de todo.
Por fin aparece otro juez justo. No hizo lugar a un pedido de detención sin los elementos necesarios, e hizo caso omiso de los aprietes de los grupos mediáticos La Nación y Clarín y a periodistas con nombre y apellido.
La resolución del juez de garantías bonaerense Luis Carzoglio de rechazar el pedido de detención de Pablo Moyano (en una causa armada por el gobierno en su contra excede con creces los aspectos jurídicos del caso que aparentemente generaron un pedido insólito, a partir de una investigación direccionada -en las propias palabras del juez- por el fiscal para implicar al dirigente de Camioneros).
En eso lo actuado por el fiscal no difiere en nada del modus operandi habitual de la mafia de los jueces y fiscales que conforman un grupo de tareas al servicio del poder político y mediático, para meter presos a dirigentes políticos, sindicales o sociales que se oponen al gobierno del Flancito Macri y sus aliados, sean los jueces jujeños que mantienen presa a Milagro Sala, o los de Comodoro Py con Bonadío a la cabeza.
Pruebas inconsistentes, testigos y arrepentidos que se contradicen una y otra vez hasta dar la versión que mejor se acomode a los deseos oficiales, uso abusivo e indiscriminado de la prisión preventiva, violación de las garantías procesales más elementales, recursos que son despachados sin siquiera analizar sus fundamentos: el registro de lo que viene pasando: las causas judiciales comprometen a cualquiera que se enfrente al gobierno amarillo de Corporación Cambiemos.
Lo que dijo Carzoglio es conocido por muchos que caminan por los pasillos de los tribunales, y no es primera vez que se usa esta misma metodología. Pero no todos tuvieron sus huevos para denunciarlo, y encima administrar justicia según sus convicciones. Ya
Sirva entonces no solo para reivindicar a quien reivindicó su función, sino para que todos entiendan como funcionan realmente las cosas en este estado de excepción con barniz democrático cada día más delgado que se vive en el país, y nadie pueda hacerse después el distraído, o el sorprendido.
Así son las operaciones de prensa...
El diario Clarín aprovecha una foto poco agraciada del Juez y con una copa en la mano, para hacer referencia al juez "rebelde" Carzoglio, pero en la bajada dice que denuncia "supuestas presiones". No, muchachos de Clarín, el tipo denunció "presiones" y no "supuestas presiones". Les faltó poner como título: UN BORRACHO SALVA AL MAFIOSO!
El Juez se negó a llevar adelante un proceso sin fundamentos y le saltaron los perros a la garganta. El amarillo (y vidalista) procurador general Julio Marcelo Conte Grant ya pidió su cabeza. El procurador se defiende de lo indefendible.
Y como corolario Clarín y sus genuflexos "amenazan" a los jueces para que no se les ocurra seguir los pasos del juez rebelde.
Un juez de provincia dejó en bolas a los más fuertes
El recurso de una verdadera Justicia...
El 28 de Septiembre de 2018 en la multitudinaria exposición de figuras muy relevantes de la Justicia Argentina, en el Aula Magna de la UBA, Con el aula magna de la Facultad de Derecho de la UBA atestada por abogados, estudiantes y neófitos preocupados por la situación del Poder Judicial, donde se presentó en sociedad la organización civil Iniciativa Justicia. Se trata de una entidad que agrupa a juristas, catedráticos y profesionales de la abogacía muy conocidos en los Tribunales y que tienen en común un mismo diagnóstico: la certeza de que en la Argentina no se respetan las garantías constitucionales y los procesos judiciales.
¿Cómo seguirá todo? Nadie lo sabe, pero una cosa es segura: cada vez hay más signos de que los poderosos no tienen el futuro comprado. En este juego se disputa el Humanismo y en Antohumanismo, y el futuro será para todos o para nadie. Las cartas están echadas...
Bajo las históricas dictaduras, los jueces siempre fueron "indiferentes" e "independientes" de nuestros derechos y garantías y de la propia Constitución Nacional, cómplices de la tortura y la desaparición, del terror y de los planes económicos paralelos. Básicamente, las corporaciones económicas y políticas en la historia argentina han utilizado siempre al Poder Judicial aristocrático y a sus empleados de clase alta para convencer a la clase media de que las clases populares, los trabajadores y los pobres son culpables de todo.
"Crean causas con fotocopias, y no las registran como manda la ley. A estos jueces los vamos a tener que juzgar. Este poder judicial es solamente comparable con el de los años ’30, que aprobó la Doctrina de la Revolución Triunfante, dándoles validez a los golpes de Estado, y lo curioso es que, entonces, el Procurador General se llamaba Horacio Rodríguez Larreta. La justicia nuestra es clasista, hipócrita y oligárquica, que se ha expresado muy claramente en enero de 2016, cuando Morales ordena la detención de Milagro Sala y después le empiezan a armar las causas, lo vimos a Macri tratando de meter jueces de la Corte por la ventana, y nos enteramos de lo que va a pasar en el fuero federal primero por los diarios, y lo hemos naturalizado".Juan Ramos Padilla. Juez de Cámara. Recordado por haber declarado la inconstitucionalidad de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final
"Se ha desatado en todo el continente la criminalización y persecución de los gobiernos y frentes políticos progresistas y populares. Se llama “lawfare” e implica usar el sistema judicial contra el enemigo en una especie de guerra judicial. No hay casualidades, esto es parte de la política de dominación para América Latina impulsada por los EE.UU. y sus agencias. Desde hace algunos años las embajadas norteamericanas de la región vienen trabajando muy cerca con actores de nuestros poderes judiciales a través de financiamiento, invitaciones a EE.UU. o a celebraciones en la residencia del embajador. Los resultados están a la vista: los que siempre viajan, reciben financiamiento y visitan la casa del embajador son los mismos que con simultaneidad inusitada están privando de derechos básicos a Lula Da Silva, a Cristina Kirchner y a Rafael Correa (...). Por eso ponerle nombre a la guerra judicial en Brasil se llama Red Globo, en Argentina Grupo Clarín, y en Ecuador Diario El Universo".Adolfo Pérez Esquivel
Por fin aparece otro juez justo. No hizo lugar a un pedido de detención sin los elementos necesarios, e hizo caso omiso de los aprietes de los grupos mediáticos La Nación y Clarín y a periodistas con nombre y apellido.
La resolución del juez de garantías bonaerense Luis Carzoglio de rechazar el pedido de detención de Pablo Moyano (en una causa armada por el gobierno en su contra excede con creces los aspectos jurídicos del caso que aparentemente generaron un pedido insólito, a partir de una investigación direccionada -en las propias palabras del juez- por el fiscal para implicar al dirigente de Camioneros).
En eso lo actuado por el fiscal no difiere en nada del modus operandi habitual de la mafia de los jueces y fiscales que conforman un grupo de tareas al servicio del poder político y mediático, para meter presos a dirigentes políticos, sindicales o sociales que se oponen al gobierno del Flancito Macri y sus aliados, sean los jueces jujeños que mantienen presa a Milagro Sala, o los de Comodoro Py con Bonadío a la cabeza.
Pruebas inconsistentes, testigos y arrepentidos que se contradicen una y otra vez hasta dar la versión que mejor se acomode a los deseos oficiales, uso abusivo e indiscriminado de la prisión preventiva, violación de las garantías procesales más elementales, recursos que son despachados sin siquiera analizar sus fundamentos: el registro de lo que viene pasando: las causas judiciales comprometen a cualquiera que se enfrente al gobierno amarillo de Corporación Cambiemos.
Lo que dijo Carzoglio es conocido por muchos que caminan por los pasillos de los tribunales, y no es primera vez que se usa esta misma metodología. Pero no todos tuvieron sus huevos para denunciarlo, y encima administrar justicia según sus convicciones. Ya
Sirva entonces no solo para reivindicar a quien reivindicó su función, sino para que todos entiendan como funcionan realmente las cosas en este estado de excepción con barniz democrático cada día más delgado que se vive en el país, y nadie pueda hacerse después el distraído, o el sorprendido.
Así son las operaciones de prensa...
El diario Clarín aprovecha una foto poco agraciada del Juez y con una copa en la mano, para hacer referencia al juez "rebelde" Carzoglio, pero en la bajada dice que denuncia "supuestas presiones". No, muchachos de Clarín, el tipo denunció "presiones" y no "supuestas presiones". Les faltó poner como título: UN BORRACHO SALVA AL MAFIOSO!
El Juez se negó a llevar adelante un proceso sin fundamentos y le saltaron los perros a la garganta. El amarillo (y vidalista) procurador general Julio Marcelo Conte Grant ya pidió su cabeza. El procurador se defiende de lo indefendible.
Y como corolario Clarín y sus genuflexos "amenazan" a los jueces para que no se les ocurra seguir los pasos del juez rebelde.
Un juez de provincia dejó en bolas a los más fuertes
El día de ayer puede tomarse como una condensación del acelerado deterioro político del gobierno macrista. El comienzo de la debacle puede fecharse en su mala lectura del más que auspicioso resultado que el régimen obtuvo en las elecciones de medio término. Pensaban que, como aprobaron el test de la mitad del mandato, habían logrado superar las dudas que siempre despierta la gobernabilidad de una gestión no peronista. Supusieron que endureciéndose y abriendo decenas de conflictos simultáneos, multiplicando los adversarios -ya no solo Cristina o los "ultraK", sino el sindicalismo, los empleados públicos, los docentes, los artistas, los científicos-, iban a salir fortalecidos, lo que no está verificándose.Oscar Cuervo
Hace un año el macrismo se entusiasmaba con un tránsito sencillo hacia su reelección. Hoy ese objetivo parece lejano y esta grave crisis política que hoy padece no se debe a una dura oposición partidaria (que no la tuvo) sino a una asombrosa sucesión de errores políticos. Su principal error es subestimar la resistencia social: no la política, ni la sindical, ni la periodística, más fácilmente apretables, sino la base social, incluso su propia base social.
¿Cuándo comenzó a joderse el macrismo?
Quiero aclarar que no estoy evaluando sus resultados por el bienestar que sería capaz de llevar a la población, ni por la prosperidad de la economía nacional o por las perspectivas auspiciosas de cara al futuro; ni siquiera por el cumplimiento de sus promesas de campaña. En cualquiera de estos rubros podría saberse antes de que asumiera que el macrismo sería nefasto. Propongo acá hacer una evaluación más técnica, en sus propios términos: su capacidad para asegurar la gobernabilidad, para mantener o acrecentar el capital político que ganaron con su triunfo electoral e, incluso, como objetivo de máxima: para fundar un partido de derecha con perdurabilidad electoral, con el mínimo de represión posible. Es en este plano donde el macrismo resulta más fracasado.
Había un par de motivos para pensar que macri gobernaría con cierta comodidad: el férreo alineamiento de las clases dominantes locales y el auspicio del poder financiero internacional que aborrece del kirchnerismo, por un lado; y la crisis política en que quedó sumido el peronismo/kirchnerismo después de varias derrotas electorales consecutivas. Pero por más poder de facto que un proyecto político aglutine y por más debilitado que se muestre ocasionalmente su adversario, hay otras condiciones que se requieren para el éxito de ese proyecto. Una es la inteligencia para alcanzar sus objetivos y otra las condiciones externas propicias. La virtud y la fortuna.
(...) Lo que más desconcierta del macrismo es su falta de inteligencia para aprovechar sus ventajas concedidas y la rapidez con la que está licuando su capital político. En sus mejores momentos, el régimen se mostró astuto para sacar ventajas ocasionales, sobre todo para que sus funcionarios favorezcan sus intereses privados. Y un terrible poder de daño para comprometer el futuro nacional. Este poder dañino es el único rubro en el que el macrismo podrá considerarse exitoso. Los futuros gobiernos, incluso si fueran de su mismo signo, encontrarán una situación socioeconómica desastrosa y un deterioro institucional muy difícil de reparar.
Si juzgamos su gestión en términos de éxito/fracaso político, lo que puede confundir es que en su primer período lograron esa gobernabilidad que siempre se duda que un gobierno no peronista pueda obtener. El macrismo gobernó los primeros dos años sin sobresaltos y eso se expresó en las elecciones de medio término. Pero macri evaluó erróneamente que esa victoria electoral lo habilitaba para mostrar desembozadamente su auténtica naturaleza.
El primer acto de ese desvelamiento fue la reforma previsional de diciembre pasado, un duro golpe para una parte decisiva de su electorado: los jubilados. En un solo día los síntomas del desbarajuste se manifestaron con una velocidad sorprendente para todos. Una manifestación de los sectores organizados de la oposición a la tarde, duramente reprimida y muy operada desde los medios, fue seguida por una manifestación espontánea nocturna, protagonizada por sectores espontaneístas. Lo reprimido volvió. Esa articulación de la movilización organizada y la espontánea en un solo día desnudó los límites del esquema oficial. ¿Fue el más grave error político del macrismo no saber leer las señales de esa sociedad que repentinamente manifestaba un hartazgo inesperado? A partir de esa jornada, macri y sus principales funcionarios ya no pudieron mostrarse en la calle sin recibir sonoros repudios. Ahí empezó a cantarse el hit del verano. El gobierno creyó sin lucidez que, acentuando el endurecimiento, la intransigencia política, la brutalidad represiva y el blindaje mediático, podría torcer la adversidad que empezaba a manifestársele. Sobreactuó una autoridad que no tenía.
Ese endurecimiento podría denominarse el "esquema Marcos Peña" de gobierno: antiperonismo, operaciones mediáticas, acosos judiciales, apriete a jueces y periodistas indóciles, manipulación de las redes sociales y represión acotada contra la oposición organizada. Esta fórmula es la que en estos días está caducando. Parece tarde para que macri cambie, aunque todo el establishment nacional e internacional -Clarín, La Nación, la Rural, la AEA, el FMI, Trump- haga ingentes esfuerzos para sostenerlo.
Lo que se está rompiendo ahora es la cohesión interna del oficialismo. La Carrió volvió a hablar de la naturaleza mafiosa de la fortuna macrista, como lo hacía antes de unirse a ellos para derrotar al peronismo. Sigue apoyando a macri incluso cuando en sus declaraciones lo demuele. Los radicales están inquietándose porque recuerdan sus propias debacles y empiezan a oler un fin de ciclo. El sector colaboracionista de los peronismos provinciales y de la burocracia sindical -¡el ex-Triunvigato!- ya evalúan la desventaja de situarse cerca de un poder declinante. La ancha avenida del medio se le angosta rápido al massismo y a los periodistas coreanos del centro.
Las encuestas miden la creciente impopularidad de macri y el bajón alcanza a su figurita preferida, Mariu. El poder financiero internacional tiene cada vez más dudas sobre la capacidad del régimen cumplir con los acuerdos en negociación. Las discrepancias internas entre macri/peña y el llamado "sector político" del PRO puro -Vidal, Larreta, Frigerio, Monzó- son ya inocultables. Vidal se distancia para no quedar salpicada por la caída de macri y Clarín ensaya si conviene más inflar su figura o la de Massa. Los medios ultraoficialistas calculan la mejor manera de que el deterioro de macri no afecte su credibilidad y sus negocios.
En este clima político, un juez de garantías bonaerense esperó el horario de los noticieros de la noche para apuntar contra todos los muñecos juntos: denunció aprietes oficiales, mencionó explícitamente al Procurador Conte Grand (familiar de Majul y funcionario de Vidal), puso en evidencia a Clarín, La Nación, Lanata, Majul, Feinman y Ventura como chantajistas, en vivo y en directo y por sus propias pantallas. El juez Carzoglio se la está jugando, su futuro se ve amenazado por seguros escraches mediáticos, carpetazos, intentos de remoción: tocó intereses muy fuertes.
Pero el síntoma más impresionante de su gesto político es haber hablado en nombre de tantos otros funcionarios judiciales apretados en estos tres años. Su palabra cortante transmitida en cadena nacional, cuando la máquina de la posverdad esperaba en vano algún desliz que pudiera ser tergiversado para hacer una cortina de humo, es un signo de que al macrismo ahora se le empiezan a animar funcionarios de segunda línea. Clarín, La Nación, Lanata, Majul podrán empeñarse desde hoy en demoler su buen nombre y honor.
La pelea es tan desigual que se convierte en una demostración de debilidad de los más fuertes.
El recurso de una verdadera Justicia...
El 28 de Septiembre de 2018 en la multitudinaria exposición de figuras muy relevantes de la Justicia Argentina, en el Aula Magna de la UBA, Con el aula magna de la Facultad de Derecho de la UBA atestada por abogados, estudiantes y neófitos preocupados por la situación del Poder Judicial, donde se presentó en sociedad la organización civil Iniciativa Justicia. Se trata de una entidad que agrupa a juristas, catedráticos y profesionales de la abogacía muy conocidos en los Tribunales y que tienen en común un mismo diagnóstico: la certeza de que en la Argentina no se respetan las garantías constitucionales y los procesos judiciales.
¿Cómo seguirá todo? Nadie lo sabe, pero una cosa es segura: cada vez hay más signos de que los poderosos no tienen el futuro comprado. En este juego se disputa el Humanismo y en Antohumanismo, y el futuro será para todos o para nadie. Las cartas están echadas...
Comentarios
Publicar un comentario