Ir al contenido principal

La Mesa Beatle: Con Alma y Vida

Hoy desde La Barra Beatles vamos con un recuerdo que tiene que ver con la mitología del rock argentino, cuando los rumores decidieron también darse una vuelta por ese movimiento. En el verano de 1973, en el club de nuestro barrio de Villa Crespo, Atlanta, se vivió una noche especial. Fuimos conmovidos por un recital que se recordó por muchos años. Alguien que desconozco tuvo una idea extraña: reunir a Alma y vida, Pappo’s blues y Sui Generis en una misma jornada. No sé si fue un valiente, un inconsciente o alguien con una apertura musical que iba a contramano de la cerrazón de ese tiempo.


Por Jorge Garacotche

Con un grupo de amigos llegamos temprano a la sede de Atlanta adonde se iba arrimando una verdadera multitud, que, sin duda, llegaba convocada por la banda del Carpo. Detrás de la cancha de Atlanta hay una estación del ferrocarril San Martín, lo que permitió que mucha gente del ‘Conurba’ se llegue hasta ahí. Villa Crespo es un barrio de fácil acceso, el tren San Martín, el ferrocarril Urquiza aterriza a unas 8 cuadras de allí, por el subsuelo conspira el subte B y unas cuantas líneas de colectivos nos visitan a cada rato. De manera que esto permitió que los rockeros y las rockeras desde varios puntos den el presente. Nosotros, que ya militábamos fielmente en el rock argentino, entonces conocíamos muy bien a los tres grupos y nos llamaba la atención el rejunte de estilos tan distintos. Llegamos hasta ahí con una importante carga de ansiedad, esto no se daba en el barrio todos los días.

Alma y vida era un grupo rodeado de rumores, todos estrambóticos y corridos del ambiente del rock, al menos para pibes como nosotros. De movida nadie entendía por qué tenía un cantante que parecía estar más cerca del Teatro Colón que del Luna Park. Una línea de caños en una época en donde con dos guitarras, un bajo y una batería todos se arreglaban, a lo sumo llamaban a un tecladista.

Repaso la lista de rumores. Se decía, y se percibía en sus discos, que los integrantes tocaban muy bien, un tipo me contó en la semana anterior al recital que eran sesionistas, precisamente la banda que acompañaba a un cantante de tremendo éxito popular como Leonardo Favio. Cuando éste decidió que iba a dedicarse enteramente al cine disolvió el asunto, pero la banda vio que había un camino para continuar ya como grupo.

Alguien, que tenía aires de poseer la posta en cada uno de sus bolsillos, nos dijo con envidiable seguridad: “ojo que le cantan un tema al Che Guevara”. Se refería al hit radial “Hoy te queremos cantar”. En el colegio una compañera secreteó en un recreo: “son comunistas, vas a ver que salen todos vestidos de negro”. Nunca supe asociar ese color con la filiación marxista, pero bueno, yo iba recogiendo opiniones e informaciones. En la pizzería de Corrientes y Dorrego otro sabiondo de bar se rió de eso del Che Guevara, y entre sonrisas cancheras confesó que el tema se refería al luchador negro Martin Luther King. Una profesora en Historia, del secundario donde yo concurría en Villa Luro, nos hizo el comentario de que Alma y vida tenía contactos con grupos guerrilleros y por eso le cantaba a los caídos en combate. Eran tiempos en donde la guerrilla urbana era una realidad que describían los diarios.

Interesante que Radio Pasillo se ponga de pie y lance una ola de chismes sobre una canción; logra que la gente le preste más atención, o la reciba como algo que traerá en unos minutos una verdad revelada, un secreto prohibido que debe ser transmitido en voz baja. El rock argentino comenzaba a crear sus propios mitos urbanos.

Muchos años después escuché al musicazo Gustavo Moretto contar que lo que buscó con esa letra era homenajear a la gente anónima que lucha, la que pone el cuerpo en marchas, protestas, y eso le cuesta la vida por la acción siempre salvaje, cobarde y criminal de la policía o los militares, esos que siempre dan grandes muestras de valentía frente a personas desarmadas. Hay que pensar que por esos años en Argentina cada dos por tres había un golpe de Estado y los militares, sus patrones, la clase dominante, buscaba domesticar y disciplinar a través de la censura, la persecución, la tortura y el asesinato sistemático.

Mientras en la radio escuchábamos a los complacientes de siempre esforzarse por cantar tonterías para hacernos creer que no había motivos para preocuparse, que la diversión venía provista de una lista de estupideces con las que había que ser muy prolijo y consecuente. En la televisión, los idiotas útiles ataban distintas calidades de mentiras, mientras en las series yankees una colección de héroes de cartón eran siempre los más piolas, se levantaban todos las minas, pegaban las mejores piñas, demostraban saber todo desde siempre envueltos en la bandera horrible de los Estados Unidos. Un cuadro perfecto para crecer y formarse en una oculta licenciatura en boludez, en superficialidad y, sobre todo, bajo el manto desesperanzador de la hipocresía. Pero le salió al cruce el rock y comenzó su curso de “avivar a los giles”, entonces de a poco fuimos apagando la tele, movíamos de manera inquieta el dial de la radio, comenzamos a comprar libros y revistas donde otra gente contaba cosas para el asombro.

En el año 1972 se publica el álbum de Alma y vida “Del gemido de un gorrión”, donde aparece la canción “Hoy te queremos cantar”, que de inmediato invadió las emisoras que la difundían constantemente. Pero creo que todos eran cuidadosos y no hacían ningún comentario sobre la letra. La calle se llenaba de rumores, pero los medios se cubrían de silencios, una constante de la época… ¿solo en esa época?

A mí, que ya era un declarado enfermo beatlemaníaco, me encantaba la canción porque tenía ese ritmo picado que armaban entre el piano y la guitarra al mejor estilo “Penny Lane” o “Your mother should know”, dos canciones con el sello de Mc Cartney y que uno asociaba al mundo beatle.

Claro que me llamaba la atención la voz de Carlos Mellino, un estilo novedoso que no se oía en la música popular. Las bases del baterista Alberto Hualde junto al bajo de Carlos Villalba ondeaban ahí atrás y bancaban todo dando substancia. La guitarra del maestro Juan Barrueco sonando distinta, limpia, prolija, medio jazzera. La sesión de caños con los futuros músicos influyentes Bernardo Baraj, en saxo, y Gustavo Moretto, en trompeta, completaban una banda que nos fue enseñando de qué se trataba eso del jazz-rock, un rótulo que sólo leíamos en algunas revistas.

Por supuesto que cuando aparecieron sobre el escenario, algo rudimentario, fue sorprendente. Por un lado eran varios, llevaban instrumentos poco comunes para una banda de rock y todos vestidos de negro, ¿reafirmando que eran comunistas? Hablaban muy seriamente, los gestos eran de tipos comunes, no parecían agentes encubiertos contactados con grupos guerrilleros. El turco Ismael dijo en un momento: “dicen que antes de presentar el tema hacen una proclama, por ahí anuncian algún acto o una marcha…”. Carlos Mellino contó que iban a tocar “Hoy te queremos cantar” y no hizo ningún gesto sospechoso, nadie se le arrimó para anunciar una protesta y empezó el tema. Sonaban bárbaro, yo nunca había escuchado una banda semejante, con esos arreglos que me hacían acordar a un grupo que empezaba a gustarme y lo conocí por la radio: “Chicago”, palabras mayores. Pero Alma y vida se la bancaba y bien bancada. Hasta le empezó a tapar la boca a esos que andaban de acá para allá diciendo en voz alta que habían venido a ver a Pappo y nada más. Querían Blues, Rock and roll, y no cosas livianas. Varios prometían irse al toque del final de Pappo’s Blues para no sufrir viendo el cierre de sus odiados Sui Generis. Los giles de siempre.

Yo comenzaba a pensar que se podía disfrutar de otros estilos, de otro tipo de músicos, de timbres diferentes que distaban de lo que conocía. Miraba esa trompeta, ese extraño saxo y me preguntaba cómo carajo hacían para tocar eso sin cuerdas ni teclas. Observaba al guitarrista Barrueco, su mano izquierda, a ver si pescaba algún acorde, pero la mayoría de los que usaba no figuraban en mi humilde cuaderno, parecían raras las posiciones de los dedos, iba cayendo en la cuenta que había que buscar un nuevo profesor, dejarse de joder y estudiar en serio, tocar otras cosas, tratar de arrimarse a lo complejo. Lo que veía es cierto que asustaba, lo que oía no parecía al alcance de la mano, no era solo cuestión de oreja y después tocarlo en algún cumpleaños. Tuve la triste sensación de que todo eso no se conocía en Villa Crespo, en el barrio nadie tocaba así ni por asomo. Fue preocupante ver todos esos acordes y no reconocer la cara de ninguno. Tocar ese ritmo, mantener el pulso, acá nadie se apuraba, nadie se iba quedando con el correr de la canción y las dificultades.

“Hay cosas que no verás más, porque ya no estás (te vimos luchar), porque te secaron, como un lirio con sus gotas de metal, como a un río te dejaron sangrando en la ciudad, todos te vimos caer, caer sin poder llorar…”.

Me llevé esas palabras y a la noche, mientras intentaba dormir, sabía que el mensaje de aquellas frases calaban hondo, no me llevarían a un comando Montonero, no pertenecería de inmediato al Partido Comunista, no quemé un corcho para emular a Luther King, simplemente me quedé pensando. Venían a mi cabeza un sinnúmero de imágenes, esas que jamás recibía de la televisión. Me levanté, fui al baño, busqué mi rostro en el espejo y me dije en voz baja que no tenía cara de boludo, así que era hora de empezar a retirarme de varios lugares incómodos. Escuchar una gilada tras otra no traería novedades, no prometía crecimiento eso de admirar a los farsantes, si seguía repitiendo argumentos ajenos un día me iba a encontrar frente a un abismo y todos esos no llegarían para rescatarme; ni siquiera se enterarían de mis padecimientos.

Las canciones para mí fueron una tabla de salvación, un manual gigante de enseñanzas, los libros fueron mundos, las películas unos anteojos para ver otros universos.

Jorge Garacotche - Músico, compositor, integrante del grupo Canturbe y Presidente de AMIBA (Asociación Músicas/os Independientes Buenos Aires).





Comentarios

Lo más visto de la semana pasada

David Gilmour - Luck and Strange (2024)

Una entrada cortita y al pie para aclarar porqué le llamamos "Mago". Esto recién va a estar disponible en las plataformas el día de mañana pero ya lo podés ir degustando aquí en el blog cabeza, lo último de David Gilmour de mano del Mago Alberto, y no tengo mucho más para agregar. Ideal para comenzar a juntar cositas para que escuchen en el fin de semana que ya lo tenemos cerquita... Artista: David Gilmour Álbum: Luck and Strange Año: 2024 Género: Rock Soft Progresivo / Prog Related / Crossover prog / Art rock Referencia: Aún no hay nada Nacionalidad: Inglaterra Lo único que voy a dejar es el comentario del Mago... y esto aún no existe así que no puedo hablar de fantasmas y cosas que aún no llegaron. Si quieren mañana volvemos a hablar. Cae al blog cabezón, como quien cae a la Escuela Pública, lo último del Sr. David Gilmour (c and p). El nuevo álbum de David Gilmour, "Luck and Strange", se grabó durante cinco meses en Brighton y Londres y es el prim

Isaac Asimov: El Culto a la Ignorancia

Vivimos una época violenta, muy violenta; quizás tan violenta como otras épocas, sin embargo, la diferencia radica en que la actual es una violencia estructural y mundial; que hasta la OMS retrata como "epidemia mundial" en muchos de sus variados informes de situación. En ese engendro imperial denominado (grandilocuentemente) como "el gran país del norte", la ignorancia (junto con otras bestialidades, como el supremacismo, el racismo y la xenofobia, etc.) adquiere ribetes escandalosos, y más por la violencia que se ejerce directamente sobre aquellos seres que los "ganadores" han determinado como "inferiores". Aquí, un texto fechado en 1980 donde el genio de la ciencia ficción Isaac Asimov hace una crítica mordaz sobre el culto a la ignorancia, un culto a un Dios ciego y estúpido cual Azathoth, que se ha esparcido por todo el mundo, y aquí tenemos sus consecuencias, las vivimos en nuestra cotidaneidad. Hoy, como ayer, Cthulhu sigue llamando... ah,

King Crimson - Red (Elemental Mixes) (1974 - 2024)

Y para empezar la semana siempre vamos con algo bueno ¿Y qué decir de esto que ahora nos trae El Mago Alberto?, tenemos uno de los disco claves del Rey Carmesí con temas inéditos, y me copio de uno de los comentarios de esta entrada: "El último gran álbum de los mejores King Crimson, los de la década de los ’70, veía la luz en aquel Noviembre de 1974. "Red" nacía proyectando su propia sombra densa, vestida de elementos de su sinfónico pasado, de un oscuro y rauco jazz y del naciente heavy metal, marcado este último por las distorsionadas guitarras y sus pétreos riffs, que dieron una visión un tanto peculiar de aquel primogénito del Hard Rock desde el especial prisma de Robert Fripp. (...) Este álbum sin duda marcó un antes y un después en la carrera de la banda, pues tras 7 años de silencio después de "Red", la banda volvió entrados los ’80 con otra onda completamente distinta, otra visión y concepción de su sonido, sonando también interesantes y originales, pe

El Ritual - El Ritual (1971)

Quizás aquellos que no estén muy familiarizados con el rock mexicano se sorprendan de la calidad y amplitud de bandas que han surgido en aquel país, y aún hoy siguen surgiendo. El Ritual es de esas bandas que quizás jamás tendrán el respeto que tienen bandas como Caifanes, jamás tendrán el marketing de Mana o la popularidad de Café Tacuba, sin embargo esta olvidada banda pudo con un solo álbum plasmar una autenticidad que pocos logran, no por nada es considerada como una de las mejores bandas en la historia del rock mexicano. Provenientes de Tijuana, aparecieron en el ámbito musical a finales de los años 60’s, en un momento en que se vivía la "revolución ideológica" tanto en México como en el mundo en general. Estas series de cambios se extendieron más allá de lo social y llegaron al arte, que era el principal medio de expresión que tenían los jóvenes. Si hacemos el paralelismo con lo que pasaba en Argentina podríamos mencionar, por ejemplo, a La Cofradía, entre otros muchos

Bill Bruford - The Best of Bill Bruford The Winterfold & Summerfold Years (2024)

Empezamos la semana con la nueva versión del "Red" de King Crimson, seguimos luego con Bill Bruford´s Earthworks y parece que seguimos en la misma onda porque ahora presentamos, gracias al Mago Alberto, algo recién salido del horno: "The Best of Bill Bruford The Winterfold & Summerfold Years", que no otra cosa que una retrospectiva completa que cubre amplias franjas del trabajo del legendario baterista, desde su homónima banda de jazz-rock hasta la encarnación final de su célebre banda de jazz Earthworks, un conjunto de tres discos que está lleno de numerosas colaboraciones; su compañero de Yes Patrick Moraz, el pianista holandés Michiel Borstlap, Luis Conte, Chad Wackerman y Ralph Towner, entre otros. Artista: Bill Bruford Álbum: The Best of Bill Bruford The Winterfold & Summerfold Years Año: 2024 Género: Jazz Rock /  Fusion Referencia: Link a Discogs, Bandcamp, Youtube, Wikipedia, Progarchives o lo que sea. Nacionalidad: Inglaterra Ante

Alejandro Matos - Carnaval De Las Víctimas (2024)

Tras el impresionante "La Potestad" en el 2015, y casi diez años después llega el nuevo y  magnífico álbum del multiinstrumentista Alejandro Matos "Carnaval De Las Victimas", otro trabajo de primer nivel que para constatarlo se puede ver simplemente el lugar que ocupa en Progarchives, dentro de los mejores discos del este año 2024 a nivel mundial, y con eso ya nos damos una idea de la valía de este nuestro trabajo, donde Alejandro Matos se ocupa de todos los instrumentos salvo la batería, conformando un trabajo oscuro, cinematográfico, elegante y ambicioso, y toda una reflexión sobre los tiempos que corren, en base a buenos riffs y melodías cautivadoras, hasta su bucólica y triste belleza. Un trabajo que llevó tres largos años, que cursa su travesía desde un medio tiempo en casi toda su extensión y se escucha como un oscuro regalo de los dioses... o de los demonios, uno vaya a saber, pero que definitivamente tenemos que recomendar al selecto público cabezón. Ide

The Alan Parsons Project - Pyramid (Super Edtion Deluxe) (2024)

Otro gran aporte del Mago Alberto, se trata del tercer álbum de Alan Parsons Project, pero ahora reeditado en este 2024. "Pyramid" fue un álbum conceptual centrado en las pirámides de Giza, que se grabó en los estudios Abbey Road con una variedad de vocalistas y músicos un conjunto de 4 CD que incluyen una nueva remasterización del álbum por Miles Showell y 67 temas adicionales, 54 de ellos inéditos, incluidas tomas descartadas de sesiones de estudio y demos de Eric Woolfson o "Songwriting Diaries", como se las conoce. Y lo presentamos basándonos en un comentario que nos dejó hace tiempo nuestro amigo El Canario, que como siempre se disfruta mucho. Que lo disfruten, tanto al texto como a esta nueva versión de este clásico. Artista:  The Alan Parsons Project Álbum:  Pyramid (edición remasterizada y ampliada, 2008) Año: 1978 - 2024 Género:  rock progresivo, rock sinfónico Duración: 1:03:40 Nacionalidad:  inglesa De todo lo que he escuchado de Alan Par

King Crimson - Larks' Tongues In Aspic 50th Anniversary Edition Elemental Mixes (1973 - 2023)

Para ir cerrando la semana vamos con uno de los clásicos experimental de todos los tiempos, pero presentado de un modo nuevo gracias al Mago Alberto que se zarpa nuevamente para quemarla las válvulas a más de un cabezón, mientras que a algunos más les funde algunas lamparitas. Hablo de un álbum que rompió nuestra percepción del mundo de la música, donde Fripp, Bruford, Wetton, Cross y Muir crean un disco bisagra en la historia del Rey Carmesí, pero ahora en otra versión distinta a la que conocés, y sobre ello nos dice el Mago: "Una nueva edicion de Larks Tongues in Aspic commemorando los 50 años de la salida de esta enorme obra, y así como sucedió con RED nos encontramos con un nuevo lanzamiento con nuevas versiones y mezclas, esta vez a cargo de David Singleton, van a poder disfrutar también de versiones alternativas del mismo álbum. Cuando se lanzo este disco King Crimson rompió con todos los moldes existentes hasta el momento, la instrumentación era exquisita y la grabación era

Solaris - Martian Chronicles III: I Or A.I. (2024)

Comenzamos la semana con más de 80 minutos del mejor progresivo sinfónico nuevamente de la mano de los húngaros Solaris, en otro capítulo de su ya famoso "Martian Chronicles", y en otro de los mejores discos del 2024, algo recién salido del horno que nos presenta el Mago Alberto. Todo un festín de buena música, desafiante, melódica, potente, con toda la pasta que estos tipos vienen imprimiendo a su música desde hace décadas, "Martian Chronicles III" se compone de largas suites, una marca registrada de Solaris que nunca ha dejado de lado, creando una obra maestra de la música actual que no podemos dejar de recomendarles encarecidamente. Artista: Solaris Álbum: Martian Chronicles III: I Or A.I. Año: 2024 Género: Rock sinfonico Duración: 41:37 + 39:43 Referencia: Discogs Nacionalidad: Hungría Recordamos que el primer "Martian Chronicles" apareció como su álbum debut en 1984 y causó sensación de inmediato, tanto que todavía se lo menciona

The Beatles - Get Back (2021)

Los tres episodios del documental "The Beatles: Get Back" y el reencuentro con la felicidad. Siempre elegimos algo especial para empezar la semana pero esta vez es distinto. Y es que comenzamos la semana en el blog cabeza con un tremendo aportes de LightbulbSun, al que le anexamos una certera nota de Marcelo Figueras para Cohete a la Luna el 10 de diciembre último. Se trata de nada menos que "Get Back", el documental beatle, el material de archivo inédito de la realización de el legendario álbum "Let It Be", un reality show diferido por más de 50 años de la que quizás fue la banda de rock más influyentes de la historia, en un documental que ya es legendario. ¿Cómo han renido tanto material  oculto todos estos años a tantos millones de fans? y otro de los grandes aportes del blog cabeza (y de LightbulbSun) para comenzar la semana con todo. Artista: The Beatles Película: Get Back Año: 2021 Género: Documental Duración: 468 minutos Nacionalidad:

Ideario del arte y política cabezona

Ideario del arte y política cabezona


"La desobediencia civil es el derecho imprescriptible de todo ciudadano. No puede renunciar a ella sin dejar de ser un hombre".

Gandhi, Tous les hommes sont frères, Gallimard, 1969, p. 235.