Con una expectativa de inflación que llega facilmente al 35%. En el mes de julio se fugaron más de 4.000 millones de dólares, un 35% más que el año pasado. La salida de capitales acumuló en los primeros siete meses del año 20.028 millones de dólares, el doble que en igual lapso de 2017. En julio pasado, más de 1,3 millón de personas compraron divisas, en uno de los máximos niveles históricos. Aquí continúa la remake del clásico "Titanic" que en nuestra historia hemos visto tantas veces, ahora maquillado para parecer moderno pero en realidad es más torpe y bestial que nunca. Todo un "flan"!
El gobierno del Flan Tijeras Macri eliminó las vacunas de refuerzo contra la meningitis, en un desmantelamiento programado del programa nacional de inmunizaciones, y la gobernadora Hiena-Heidi Vidal echó a la funcionaria que garantizaba los abortos legales en Zona Norte. En la Provincia de Buenos Aires ir a las (deterioradas) escuelas es una arriesgada aventura donde los chicos se juegan la vida, literalmente. Con la caída del 6,7% publicada hoy por el INDEC, se confirma la recesión económica general, que para este año no bajará del 2%. La actividad industrial, una de las más dañadas, ya dilapidó el rebote de 2017, y está 10% debajo de los niveles del año 2015.
¿Hasta dónde, hasta cuándo, la sociedad argentina tolerará las despiadadas agresiones de un gobierno de sociópatas?
El CEOliberalismo que está conduciendo el país a velocidad crucero hacia el desastre, un Titanic que se hunde irreparablemente, prosigue distrayendo a su núcleo duro y fanatizado hasta un estadío cuasi idiota. La CEObanda y sus secuaces operadores de Comodoro Py, Clarín y La Nación implantan la estrategia de embobamiento, pero que no puede evitar el final: su política no sirve para tapar el derrape de las acciones que cotizan en Nueva York, lo cual lleva a la desesperación a los mesadineristas y medio ministros que intentan torpe y catrascalmente estabilizar la desquiciada macrieconomía que debe funcionar aunque sea a fuerza de una maniobra de pinzas entre los golpes de la policía a los manifestantes y la no menos violenta manipulación de las pantallas sobre los televidentes estupefactos.
En este escenario de pre-pesadilla el infrapresidente se dispone a viajar a yankilandia para rogarles a los fondos buitres inversores que sigan confiando en los flanes económicos amarillos (los que provocaron dólar cerca de 31, tasas de 45%, desempeño hiperinflacionario del 120% en poco menos de tres años, recesión de incierta salida, caída de la recaudación y largo etcétera) y no abandonen en la mala a un gobierno tan afin ideológicamente. Suena conmovedor... todos simulando no ver el final cada día más cercano, del actual mandato presidencial del Flancito Macri. Mandato que por sus paupérrimos resultados, puede definirse ya como fracasado.
Eso sí, para nosotros los ciudadanos de a pie, nunca más cerca ese icónico tema de Yupanqui titulado "El arriero"...
Las vaquitas, hoy más que nunca, son ajenas.
El macrismo tiene serias dificultades para pensar la sociedad como no sea bajo la forma de una familia embotada frente al televisor. Alguien les dijo que esos que a la noche se sientan a rascarse la panza en el infierno baboso de sus livings son los que deciden una elección y que así se construyen las sociedades postmodernas.
Poco importa el ser humano real y concreto que sufre las políticas en carne propia...
La realidad no pasa solamente por lo que te quieren mostrar por la TV los medios hegemónicos de comunicación. En La Plata esta semana se cruzaron las marchas multitudinarias que defienen por un lado la educación en Universidades Públicas, que aún no arrancó con el segundo semestre de clases y la que se manifestó en defensa de los puestos de trabajo en los Astilleros Río Santiago.
Transformando la necesidad en virtus: para Clarín, estar acorralado es "moda"...
Una propaganda del diario Clarín, en tiempos de gobierno kirchnerista, afirmaba que a la realidad se la puede tapar o hacer tapa. Poco tiempo después, el efectivo slogan se le volvió en contra y tanto ese medio impreso como otros grandes medios argentinos (sobretodo La Nación) demostraron que el periodismo objetivo es una utopía. Y crece también la moda de no ir a trabajar y quedarte en tu casa todo el día viendo qué corno vas a hacer y pensando cómo llegaste hasta acá! Está de re onda hacer eso! Lástima que los grasas del Astillero Río Santiago no lo entienden!
Ahora el núcleo duro flanero espera que los departamentos de Cristina sean allanados y ella misma encarcelada. Lo curioso es que cualquier escenario imaginable aumenta el temblequeo del flan: si convierten a Cristina en presa política es probable que, en lugar de descabezar al kirchnerismo, eleven el liderazgo de la ex-presidenta a una instancia superior, un proceso que ya se registra en Brasil con procedimientos similares contra Lula. Cada minuto de Cristina en prisión contrastaría con los cotidianos aumentos de tarifas, alimentos, transporte y remedios, escuelas y universidades en paro, violencia callejera creciente, despidos, frentes de batalla que el macrismo va abriendo sin lograr cerrar ninguno. Pero si Cristina no fuera presa y la saga de cuadernos fotocopiados y los arrepentidos sin delito se prolongara indefinidamente, esto irritaría más a ese núcleo duro que pide sangre. ¿Encerrarse cada vez más en sus ultras desquiciados o defraudarlos perdiendo así su mayor base de sustentabilidad? Planteadas así las cosas, no tienen salida honorable. ¿En cuál de todas estas muertes el gato se puso a pensar?.
Mientras, los medios meten manija a full para militar el ajuste... Desde notas que causan gracia hasta tapas que bastardean la inteligencia de sus lectores y el rol del periodismo, las tapas y titulares son de antología... la postverdad a tope mientras el Titanic se va al Fondo (literalmente).
Es que hay una evidente incongruencia entre el hipnotismo embrutecedor aplicada por el macrismo y los resultados que esperan: ¿Por qué creer que un bombardeo mediático abrumador del que ningún miembro de la población pudiera escaparse lograría anular la percepción de la realidad presente de los sujetos no enloquecidos? ¿Qué confianza nos pueden dar para puede hacernos olvidar del daño que el gobierno nos ocasiona día a día? Faltan conectores lógicos entre la cortina de humo que el macrismo, sus medios y sus jueces propagan cada día y el efecto que esperan producir. La inviabilidad práctica de la vida que el régimen propone impide aceptar la insistente invitación a vivir en el desierto que nos ofrece.
Por ello, ya algunos periodistas y analistas ya empezaron a hablar del posmacrismo. Les queda poca correo, pero ojo que pueden resultar aún muy pero muy dañinos.
Ah, la última que me pareció buenísima...
El gobierno del Flan Tijeras Macri eliminó las vacunas de refuerzo contra la meningitis, en un desmantelamiento programado del programa nacional de inmunizaciones, y la gobernadora Hiena-Heidi Vidal echó a la funcionaria que garantizaba los abortos legales en Zona Norte. En la Provincia de Buenos Aires ir a las (deterioradas) escuelas es una arriesgada aventura donde los chicos se juegan la vida, literalmente. Con la caída del 6,7% publicada hoy por el INDEC, se confirma la recesión económica general, que para este año no bajará del 2%. La actividad industrial, una de las más dañadas, ya dilapidó el rebote de 2017, y está 10% debajo de los niveles del año 2015.
¿Hasta dónde, hasta cuándo, la sociedad argentina tolerará las despiadadas agresiones de un gobierno de sociópatas?
El CEOliberalismo que está conduciendo el país a velocidad crucero hacia el desastre, un Titanic que se hunde irreparablemente, prosigue distrayendo a su núcleo duro y fanatizado hasta un estadío cuasi idiota. La CEObanda y sus secuaces operadores de Comodoro Py, Clarín y La Nación implantan la estrategia de embobamiento, pero que no puede evitar el final: su política no sirve para tapar el derrape de las acciones que cotizan en Nueva York, lo cual lleva a la desesperación a los mesadineristas y medio ministros que intentan torpe y catrascalmente estabilizar la desquiciada macrieconomía que debe funcionar aunque sea a fuerza de una maniobra de pinzas entre los golpes de la policía a los manifestantes y la no menos violenta manipulación de las pantallas sobre los televidentes estupefactos.
En este escenario de pre-pesadilla el infrapresidente se dispone a viajar a yankilandia para rogarles a los fondos buitres inversores que sigan confiando en los flanes económicos amarillos (los que provocaron dólar cerca de 31, tasas de 45%, desempeño hiperinflacionario del 120% en poco menos de tres años, recesión de incierta salida, caída de la recaudación y largo etcétera) y no abandonen en la mala a un gobierno tan afin ideológicamente. Suena conmovedor... todos simulando no ver el final cada día más cercano, del actual mandato presidencial del Flancito Macri. Mandato que por sus paupérrimos resultados, puede definirse ya como fracasado.
Eso sí, para nosotros los ciudadanos de a pie, nunca más cerca ese icónico tema de Yupanqui titulado "El arriero"...
Las vaquitas, hoy más que nunca, son ajenas.
En las arenas bailan los remolinos,
El sol juega en el brillo del pedregal,
Y prendido a la magia de los camios,
El arriero va, el arriero va.
Es bandera de niebla su poncho al viento,
Lo saludan las flautas del pajonal,
Y apurando a la tropa por esos cerros,
El arriero va, el arriero va.
Las penas y las vaquitas,
Se van por la misma senda,
Las penas y las vaquitas,
Se van por la misma senda,
Las penas son de nosotros,
Las vaquitas son ajenas,
Las penas son de nosotros,
Las vaquitas...
El macrismo tiene serias dificultades para pensar la sociedad como no sea bajo la forma de una familia embotada frente al televisor. Alguien les dijo que esos que a la noche se sientan a rascarse la panza en el infierno baboso de sus livings son los que deciden una elección y que así se construyen las sociedades postmodernas.
Poco importa el ser humano real y concreto que sufre las políticas en carne propia...
La realidad no pasa solamente por lo que te quieren mostrar por la TV los medios hegemónicos de comunicación. En La Plata esta semana se cruzaron las marchas multitudinarias que defienen por un lado la educación en Universidades Públicas, que aún no arrancó con el segundo semestre de clases y la que se manifestó en defensa de los puestos de trabajo en los Astilleros Río Santiago.
Carta de un trabajador del Astillero Río SantiagoDenis Vilardo
Mi nombre es Denis Vilardo. Trabajo desde hace 14 años en el Astillero Río Santiago, en el taller de estructuras. Ayer durante la movilización vi que agarraban a un compañero y me metí a ayudarlo. Me agarraron entre varios y un policía de civil me partió una baldosa en la cabeza. Cuando estaba en el piso me empezaron a pegar. Después me precintaron las manos y me llevaron detenido.
En la comisaría 1a de La Plata éramos cinco y nos metieron en un cuartito. Los policías entraban y nos pegaban patadas en el piso. Las manchas de sangre en la pared que se ven en una de las fotos son mías, por la herida en la cabeza.
Tengo dos nenas, una de tres años y otra de diez meses. El recorte en mi salario por los rubros que nos descontaron es entre el 25 y el 30 por ciento, unos seis mil o siete mil pesos. Muchos compañeros ya no pueden llegar a fin de mes y se tienen que endeudar.
El proceso de vaciamiento del Astillero empezó hace dos años y medio. Con la paralización de los contratos se volvió más grave: el gobierno no trajo ningún contrato nuevo y empezó a comprar en el exterior buques que podríamos fabricar acá. Día a día nos van dejando sin trabajo. No nos dan los insumos para terminar las obras y nos descuentan rubros que desde hace 25 años son parte de nuestro salario.
Soy delegado del turno noche y miembro de la comisión directiva de ATE Ensenada. Decidimos enfrentar esta política de recorte y vaciamiento. Nos exigen que aceptemos los despidos y nos negamos. Ayer nos movilizamos. Marchamos desde la autopista Buenos Aires-La Plata hasta el centro de La Plata. Nos levantaron una reunión paritaria que teníamos con el Ministerio de Trabajo y fuimos a la Casa de Gobierno a pedir que nos reciban. A los diez minutos que llegamos la policía empezó a reprimir.
Cuando me detuvieron me tuvieron dos horas en la comisaría y me llevaron al hospital San Martín, donde me hicieron una ecografía, varias placas y me cosieron. Seis puntos me dieron. De ahí me llevaron a la fiscalía. Cerca de la 1.30 de la madrugada nos largaron. Nos imputaron resistencia a la autoridad y otros delitos. También por la rotura de un patrullero. Pero el único que vi yo fue el que usaron para trasladarme.
Transformando la necesidad en virtus: para Clarín, estar acorralado es "moda"...
Una propaganda del diario Clarín, en tiempos de gobierno kirchnerista, afirmaba que a la realidad se la puede tapar o hacer tapa. Poco tiempo después, el efectivo slogan se le volvió en contra y tanto ese medio impreso como otros grandes medios argentinos (sobretodo La Nación) demostraron que el periodismo objetivo es una utopía. Y crece también la moda de no ir a trabajar y quedarte en tu casa todo el día viendo qué corno vas a hacer y pensando cómo llegaste hasta acá! Está de re onda hacer eso! Lástima que los grasas del Astillero Río Santiago no lo entienden!
Ahora el núcleo duro flanero espera que los departamentos de Cristina sean allanados y ella misma encarcelada. Lo curioso es que cualquier escenario imaginable aumenta el temblequeo del flan: si convierten a Cristina en presa política es probable que, en lugar de descabezar al kirchnerismo, eleven el liderazgo de la ex-presidenta a una instancia superior, un proceso que ya se registra en Brasil con procedimientos similares contra Lula. Cada minuto de Cristina en prisión contrastaría con los cotidianos aumentos de tarifas, alimentos, transporte y remedios, escuelas y universidades en paro, violencia callejera creciente, despidos, frentes de batalla que el macrismo va abriendo sin lograr cerrar ninguno. Pero si Cristina no fuera presa y la saga de cuadernos fotocopiados y los arrepentidos sin delito se prolongara indefinidamente, esto irritaría más a ese núcleo duro que pide sangre. ¿Encerrarse cada vez más en sus ultras desquiciados o defraudarlos perdiendo así su mayor base de sustentabilidad? Planteadas así las cosas, no tienen salida honorable. ¿En cuál de todas estas muertes el gato se puso a pensar?.
Mientras, los medios meten manija a full para militar el ajuste... Desde notas que causan gracia hasta tapas que bastardean la inteligencia de sus lectores y el rol del periodismo, las tapas y titulares son de antología... la postverdad a tope mientras el Titanic se va al Fondo (literalmente).
Es que hay una evidente incongruencia entre el hipnotismo embrutecedor aplicada por el macrismo y los resultados que esperan: ¿Por qué creer que un bombardeo mediático abrumador del que ningún miembro de la población pudiera escaparse lograría anular la percepción de la realidad presente de los sujetos no enloquecidos? ¿Qué confianza nos pueden dar para puede hacernos olvidar del daño que el gobierno nos ocasiona día a día? Faltan conectores lógicos entre la cortina de humo que el macrismo, sus medios y sus jueces propagan cada día y el efecto que esperan producir. La inviabilidad práctica de la vida que el régimen propone impide aceptar la insistente invitación a vivir en el desierto que nos ofrece.
Por ello, ya algunos periodistas y analistas ya empezaron a hablar del posmacrismo. Les queda poca correo, pero ojo que pueden resultar aún muy pero muy dañinos.
Ah, la última que me pareció buenísima...
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