Devaluar nuestra moneda, endeudar al Estado, sacar capitales del país, aumentar las tarifas y los precios, ajustar el gasto público, impulsar la extracción a cualquier costo de minerales y combustible, el alto endeudamiento (deuda que siempre pagan los pueblos), la caída del salario real, del consumo y con ello del nivel de actividad y del PIB, etc.; lo podrán imponer mientras persista el engaño, mientras la deuda externa financie ese proceso, y se utilice la plata del Anses como prenda de cambio (un informe de CEPA estima que con las medidas que impulsa el Gobierno, la Anses perdería 114.956 millones el año próximo)
Uno se pregunta... ¿Cuál es el límite?Así han sido estos vendedores de humos de las felicidades del mercado. Son los herederos marketineros de la década de los 90s y también de mucho antes, derivan de la deuda rivadaviana de la Baring Brothers, a la que han "honrado" multiplicándola por millones. Son los negadores sarmientinos de los valores propios, enajenadores históricos de la identidad nacional y verdugos de su propio pueblo. Son los asesinos de civilizaciones nativas en nombre de sus incivilizadas ambiciones de tierras. Son los constructores de un pensamiento sin otras raíces que los intereses personales y de clase. CEOs que forman parte de los "Papeles del Paraíso" y cuanta off-shore se conozca: el propio Felino Macri y 50 funcionarios más de su gobierno formaron parte de la filtración de los Panamá Papers, pero siguen y seguirán apareciendo mientras rifan el país.
No, no habla de la época de Menem, bueno... también hablo de esa época que no está muy alejada tanto de la bestialidad amarilla como de la bestialidad dictatorial o cualquiera de las tantas bestialidades argentinas.
En eso, NO CAMBIAMOS!
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