Ir al contenido principal

Pobres de Derecha: Amar la Esclavitud

"Nunca pensé que en la felicidad hubiera tanta tristeza"... esta frase de Mario Benedetti es ideal para representar la actualidad, este supuesto mundo de felicidades en el que aparentemente estaríamos viviendo, producto de habernos liberado de la "opresión populista", no para de sorprendernos con "ajustes" destinados a lograr que quienes antes ganaban mucho, ahora ganen más todavía, y los subsidiados de antes pasen a ser ahora los "subsidiadores" de los poderosos.
Más que nunca la dictadura mediática, en manos de corporaciones, busca las formas novedosas de implantar hegemónicamente imaginarios colectivos, narrativas, discursos, verdades e imágenes únicas. Si hace cinco décadas la lucha política, la batalla por la imposición de imaginarios se dilucidaba en la calle, en las fábricas, en los partidos políticos y movimientos, en los parlamentos (o en la guerrilla), hoy las grandes corporaciones atacan desde la televisión, radios, internet, celulares, incluso alejándose de la realidad y disociándose de ella, pudiendo fustigar a la oposición, reprimir, fusilar, desaparecer, tener presos políticos y una política de ajuste por un lado, y por otro vivir en la nube de pedos de la alegre realidad virtual, este nuevo "Soma" (la droga de la felicidad de "Un Mundo Felíz" de Huxley) al que la sociedad ya es adicta, mientras los jubilados terminan aceptando que les quiten beneficios, los trabajadores que les coarten derechos, los pequeños empresarios que les reduzcan el mercado interno y todos que les aumenten la edad jubilatoria.
Ya hace muchos años, Aldous Huxley nos advirtió: "Amaremos la esclavitud". Hoy parece confirmarse este hecho... Pero... ¿por cuanto tiempo?



En "Un Mundo Feliz" de Huxley, la gente no se resiste a la tecnología con la que el opresor aniquila su capacidad de pensar. Lo terrible reside en que no lo odia, se entrega a él voluntaria y alegremente. Huxley expresa que llegaremos a contar con tanta información que quedaremos reducidos a la pasividad, que no será necesario prohibir los libros porque nadie le interesará leerlos, ni ocultar la verdad porque pasará inadvertida en el océano de la irrelevancia. Versión esta última, de enorme vigencia y que refiere a uno de los síntomas de los efectos de la "sobre abundancia" informativa en las sociedades actuales y que se conoce como bulimia informativa.
Una comparsa de atontados los aplauden, creyéndose invitados a una fiesta de pocos y para pocos, a la que nunca accederán, salvo para servir las copas del engaño y la deshonra. Otra parte de la sociedad mira sin ver, esperando milagros que nunca llegarán. El resto no ve salidas posibles y terminan acurrucándose en los rincones de la desesperanza y el vacío existencial. Ante este espectáculo dramático, quienes ejercen el Poder aprietan el acelerador de sus maquinaciones destructivas, al ver allanado el camino para barrer con aquellas ilusiones de bienestar que ayudaron a destronar de las conciencias de las mayorías. Peor que nunca se advierte la degradación humana en la que nos sumergen, apoyados por la represión adiestradora de voluntades.

Algunos jueces federales se comportan como un bufete de abogados de la Casa Rosada. No había ningún motivo para que montaran el circo para detenerlos para que hablemos de eso y no de las cosas importantes que suceden en el país.
Oscar Parrilli, ex titular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI)

La triple reforma laboral, impositiva y previsional que lanzó el gobierno de Corpración Cambiemos S.A. implica un virtual reseteo de la economía con cuantiosas transferencias de ingresos entre sectores productivos y sociales. La laboral apunta a bajar sensiblemente el costo salarial para las empresas y facilitar lo que el secretario de Empleo, Miguel Ponte, propuso en enero pasado como objetivo oficial: que contratar y despedir personal "sea algo natural, como comer y descomer". Pero la clave del paquete es sin embargo la previsional.

Alegres filas de felices pagadores se reunen frente a las ventanillas de pago para recibir las buenas nuevas de los aumentos de tarifas. Y pagarlas con el placer de ser parte de una época feliz. Un tiempo donde todo transcurre con la seguridad en que siempre se puede un poco más... Pagar un poco más, claro.
Es que la población ha comprendido la verdadera razón de su existencia: asegurarles a los dueños de las grandes empresas de servicios, permanentes aumentos en sus beneficios, aun resignando los propios, los cuales, "solidariamente", se transfieren a las cuentas offshore de estos magnánimos propietarios que, casualmente, ocupan ahora puestos claves en la estructura gubernamental. Esto, claro, para mejorar la calidad institucional.
Parece que al ocupar ambos lados del mostrador, la corrupción desaparece, ya que no necesitan pagar a funcionarios venales para obtener beneficios mayores y ganar licitaciones, porque en ellos mismos se subsumen los corruptos y los corruptores. Esto ahorra tiempo y esfuerzos, y la justicia ya no se recarga con inútiles esfuerzos persecutorios a coimeros, pudiendo dedicarse a encarcelar a perseguidos sin condenas o renovarles acusaciones sobre hechos que nunca sucedieron, pero que sirven para disciplinar voluntades molestas para sus fines.
Gas, electricidad y agua son como el tridente de un nuevo diablo. Con sus aumentos continuos se nos persigue cada día en una carrera enloquecida hacia la felicidad absoluta, la cual se completa con la disminución de los salarios y las jubilaciones reales, recibidas con beneplácito por los afectados, que entienden que postergar sus comidas les traerán futuros promisorios. Si es que sobreviven, por supuesto.
La tristeza del "virus de la felicidad sin sentido" será descubierta, tarde o temprano, por los infelices que no saben (todavía) que lo son. Ahí es cuando los fabricantes de tantas penas disfrazadas de alegrías habrán de descubrir que, tal como lo dijo alguna vez Miguel de Cervantes, “las tristezas no se hicieron para las bestias, sino para los hombres; pero si los hombres las sienten demasiado, se vuelven bestias”.
Roberto Marra

En la Primera Guerra Mundial, los corresponsales usaban palomas, telégrafos o mensajeros para difundir sus historias. Hoy, en esta guerra, se utilizan comunicaciones satelitales, inteligencia artificial y teléfonos inteligentes. Pero, mientras la tecnología ha dado saltos cuánticos, la verdad sigue siendo demasiado a menudo blanco (y rehén) de los poderes fácticos, y una víctima.
Muchas veces la "verdad" que se vislumbra a través de la televisión, los medios cibernéticos y los gráficos, no necesariamente corresponde a la realidad. La mayoría de la publicidad dirigida al gran público utiliza discurso, argumentos, personajes y entonación particularmente infantiles, muchas veces próximos a la debilidad, como si el espectador fuese una criatura de poca edad o deficiente mental. Cuanto más se intente buscar engañar al espectador, más se tiende a adoptar un tono infantilizante: en razón de la sugestionabilidad, ella tenderá, con cierta probabilidad, a una respuesta o reacción también desprovista de un sentido crítico como la de una persona de 12 años o menor aun.


Sin lugar a dudas, hacer uso del aspecto emocional es una técnica clásica para causar un corto circuito en el análisis racional, y finalmente al sentido crítico de los individuos. Por otra parte, el uso del registro emocional permite abrir la puerta de acceso al inconsciente para implantar o injertar ideas, deseos, miedos y temores, compulsiones, o inducir comportamientos. De eso se trata lo que algunso dieron en llamar la "Guerra de Cuarta Generación".





Desde 1991, al menos, se vienen construyendo de estas realidades-virtuales para el consumo de miles de millones de personas. Pero en 2016 se produjo un nuevo punto de quiebre en la historia de las noticias falsas. Tanto, que el Diccionario Oxford declaró la posverdad como palabra del año. Las fake news dejaron de ser un artilugio de los medios para conseguir más tráfico. Ese año, la elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos comprobó que las mentiras pueden llegar a ocupar el lugar del poder real. La ficción y la realidad virtual llegó a la Casa Blanca. Hoy, la posverdad es el arma de desorientación masiva de la opinión pública que emplean los grandes medios de comunicación y los líderes políticos.
La transformación de los medios de comunicación en factores de poder es acompañada con la aparición de una metodología para construir una realidad ficcional, como herramienta de manipulación y construcción de un discurso hegemónico cuyo objetivo es el control social. La comunicación de la verdad pierde su sentido ético y se transforma en mercadería, donde la espectacularización del mensaje ocupa el lugar del valor del contenido.

Los medios son utilizados hoy como un arma de combate en la nueva guerra ideológica. La información, por su explosión, por su multiplicación, por su sobreabundancia, se encuentra hoy literalmente contaminada, envenenada por toda clase de mentiras, rumores, distorsiones y manipulaciones. Cada vez es más difícil parta los ciudadanos encontrar un referente que les asegure que la información que van a consumir es una información válida, seria, segura, verídica, verdadera. Las noticias falsas no son algo nuevo. Preceden a Facebook, a Twitter y a los miles de sitios que cada día intentan captar la atención en un mundo de concentración informativa y crisis del periodismo. El ciudadano Kane de Orson Welles ya había mostrado en 1941 a un magnate de medios frío, en el trono de su imperio informativo, como el espejo del poder de la prensa para dirigir la opinión de un país. La historia tuvo muchos ejemplos, siempre con buenas relaciones con la política y sobre todo el poder, para confundir la realidad en favor del más poderoso.

Es la "dictadura sin lágrimas" mencionada por Huxley...

Es el asesinato de la verdad a manos de esa falsedad llamada "pos-verdad", o su sustitución por una realidad-virtual, difícil de comprobar, que sirve para adocenarnos, doblegarnos. ¿Cómo combatir en esta guerra de ideas, en esta batalla cultural, donde las viejas armas, las viejas herramientas ya no son útiles, dónde las viejas consignas de reparto equitativo de las frecuencias de radio y televisión -diciendo que eso significa democratizar la comunicación- parecen no tener sentido, cuando lo que es el tema central son los contenidos.
El mundo cambia sí, pero el tema de la comunicación, de los medios de comunicación social, sigue siendo, como en 1980 cuando apareció el "Informe McBride", fundamental para el futuro de nuestras democracias. El problema de hoy es la concentración oligopólica: 1.500 periódicos, 1.100 revistas, 9.000 estaciones de radio, 1.500 televisoras, 2.400 editoriales están controlados por sólo seis trasnacionales. Pero ese no es el único problema. Una sociedad conectada es una sociedad espiada, y una espiada es una sociedad controlada, las redes sociales, la publicidad personalizada de acuerdo al perfil que cada uno va autodiseñándose en su navegación y datos ingresados en su buscador favorito.

Amaremos la esclavitud

Aldous Huxley dijo una vez que “en la próxima generación habrá un método farmacológico para hacer a las personas adorar su esclavitud y producir la ‘dictadura sin lágrimas’, por así decirlo. Aldous Huxley y George Orwell fueron dos de los grandes pensadores que temían la tiranía de un futuro distópico. Aldous Huxley nos advirtió: “Amaremos la esclavitud”.
En la novela distópica Un mundo feliz de Huxley, los ciudadanos son controlados mediante el condicionamiento psicológico como parte de un sistema inmutable de castas. Un mundo sin rejas donde el esclavo prefiere vivir en su cómoda “celda”.

¿Lavado de cerebro a través de fármacos?

Adolf Huxley dijo una vez que “en la próxima generación habrá un método farmacológico para hacer a las personas adorar su esclavitud y producir la ‘dictadura sin lágrimas’, por así decirlo. Producir una clase de campo de concentración sin dolor para sociedades enteras. Las personas no tendrán libertad, pero disfrutarán bastante porque estarán distraídas de cualquier deseo de rebelarse por la propaganda, o el lavado de cerebro, o el lavado de cerebro reforzado por métodos farmacológicos. Y esto parece ser la revolución final”.
Podría parecer sensata la idea de la manipulación a través de la propaganda, pero demasiado exagerado lo de control a través de “métodos farmacológicos“. Sin embargo, os dejamos un dato curioso para invitaros a la reflexión: en países como España, el consumo de somníferos y ansiolíticos ha aumentado un 57% en 12 años. El consumo de benzodiazepinas, familia de medicamentos de los somníferos y los ansiolíticos, es de los más elevados de Europa.
Y puede parecer que el hecho de que un ciudadano, de forma particular, opte por tomarlos no nos afecta como sociedad. Sin embargo, están asociados a una peligrosa adicción con efectos adversos, que se multiplican si además se mezclan con alcohol, como el deterioro cognitivo y los comportamientos desinhibidos o impulsivos. Estos, sí que podrían afectarnos como sociedad, ¿no crees?

¿Esclavos del consumo desinformado?

Amaremos la esclavitud
Huxley se mueve en la misma línea ideológica que Noam Chomsky en relación al poder “educador” que ejerce la publicidad en nuestra forma de tomar decisiones. El objetivo es crear consumidores desinformados que se acostumbren a tomar decisiones irracionales y, según ellos, por ello la publicidad no se basa en datos, sino en frases emocionales pero poco objetivas o racionales. Después, consiguen que el ciudadano, a través del sistema de representación democrático, lleve a cabo sus elecciones de voto de la misma manera. El objetivo, en este caso, es crear un electorado desinformado y acostumbrado a la “desinformación” que ve normal tomar decisiones irracionales aunque, a menudo, estas vayan contra de sus propios intereses.
Amaremos la esclavitud
María Hidalgo








Comentarios

Lo más visto de la semana pasada

David Gilmour - Luck and Strange (2024)

Una entrada cortita y al pie para aclarar porqué le llamamos "Mago". Esto recién va a estar disponible en las plataformas el día de mañana pero ya lo podés ir degustando aquí en el blog cabeza, lo último de David Gilmour de mano del Mago Alberto, y no tengo mucho más para agregar. Ideal para comenzar a juntar cositas para que escuchen en el fin de semana que ya lo tenemos cerquita... Artista: David Gilmour Álbum: Luck and Strange Año: 2024 Género: Rock Soft Progresivo / Prog Related / Crossover prog / Art rock Referencia: Aún no hay nada Nacionalidad: Inglaterra Lo único que voy a dejar es el comentario del Mago... y esto aún no existe así que no puedo hablar de fantasmas y cosas que aún no llegaron. Si quieren mañana volvemos a hablar. Cae al blog cabezón, como quien cae a la Escuela Pública, lo último del Sr. David Gilmour (c and p). El nuevo álbum de David Gilmour, "Luck and Strange", se grabó durante cinco meses en Brighton y Londres y es el prim

Isaac Asimov: El Culto a la Ignorancia

Vivimos una época violenta, muy violenta; quizás tan violenta como otras épocas, sin embargo, la diferencia radica en que la actual es una violencia estructural y mundial; que hasta la OMS retrata como "epidemia mundial" en muchos de sus variados informes de situación. En ese engendro imperial denominado (grandilocuentemente) como "el gran país del norte", la ignorancia (junto con otras bestialidades, como el supremacismo, el racismo y la xenofobia, etc.) adquiere ribetes escandalosos, y más por la violencia que se ejerce directamente sobre aquellos seres que los "ganadores" han determinado como "inferiores". Aquí, un texto fechado en 1980 donde el genio de la ciencia ficción Isaac Asimov hace una crítica mordaz sobre el culto a la ignorancia, un culto a un Dios ciego y estúpido cual Azathoth, que se ha esparcido por todo el mundo, y aquí tenemos sus consecuencias, las vivimos en nuestra cotidaneidad. Hoy, como ayer, Cthulhu sigue llamando... ah,

King Crimson - Red (Elemental Mixes) (1974 - 2024)

Y para empezar la semana siempre vamos con algo bueno ¿Y qué decir de esto que ahora nos trae El Mago Alberto?, tenemos uno de los disco claves del Rey Carmesí con temas inéditos, y me copio de uno de los comentarios de esta entrada: "El último gran álbum de los mejores King Crimson, los de la década de los ’70, veía la luz en aquel Noviembre de 1974. "Red" nacía proyectando su propia sombra densa, vestida de elementos de su sinfónico pasado, de un oscuro y rauco jazz y del naciente heavy metal, marcado este último por las distorsionadas guitarras y sus pétreos riffs, que dieron una visión un tanto peculiar de aquel primogénito del Hard Rock desde el especial prisma de Robert Fripp. (...) Este álbum sin duda marcó un antes y un después en la carrera de la banda, pues tras 7 años de silencio después de "Red", la banda volvió entrados los ’80 con otra onda completamente distinta, otra visión y concepción de su sonido, sonando también interesantes y originales, pe

El Ritual - El Ritual (1971)

Quizás aquellos que no estén muy familiarizados con el rock mexicano se sorprendan de la calidad y amplitud de bandas que han surgido en aquel país, y aún hoy siguen surgiendo. El Ritual es de esas bandas que quizás jamás tendrán el respeto que tienen bandas como Caifanes, jamás tendrán el marketing de Mana o la popularidad de Café Tacuba, sin embargo esta olvidada banda pudo con un solo álbum plasmar una autenticidad que pocos logran, no por nada es considerada como una de las mejores bandas en la historia del rock mexicano. Provenientes de Tijuana, aparecieron en el ámbito musical a finales de los años 60’s, en un momento en que se vivía la "revolución ideológica" tanto en México como en el mundo en general. Estas series de cambios se extendieron más allá de lo social y llegaron al arte, que era el principal medio de expresión que tenían los jóvenes. Si hacemos el paralelismo con lo que pasaba en Argentina podríamos mencionar, por ejemplo, a La Cofradía, entre otros muchos

Bill Bruford - The Best of Bill Bruford The Winterfold & Summerfold Years (2024)

Empezamos la semana con la nueva versión del "Red" de King Crimson, seguimos luego con Bill Bruford´s Earthworks y parece que seguimos en la misma onda porque ahora presentamos, gracias al Mago Alberto, algo recién salido del horno: "The Best of Bill Bruford The Winterfold & Summerfold Years", que no otra cosa que una retrospectiva completa que cubre amplias franjas del trabajo del legendario baterista, desde su homónima banda de jazz-rock hasta la encarnación final de su célebre banda de jazz Earthworks, un conjunto de tres discos que está lleno de numerosas colaboraciones; su compañero de Yes Patrick Moraz, el pianista holandés Michiel Borstlap, Luis Conte, Chad Wackerman y Ralph Towner, entre otros. Artista: Bill Bruford Álbum: The Best of Bill Bruford The Winterfold & Summerfold Years Año: 2024 Género: Jazz Rock /  Fusion Referencia: Link a Discogs, Bandcamp, Youtube, Wikipedia, Progarchives o lo que sea. Nacionalidad: Inglaterra Ante

Alejandro Matos - Carnaval De Las Víctimas (2024)

Tras el impresionante "La Potestad" en el 2015, y casi diez años después llega el nuevo y  magnífico álbum del multiinstrumentista Alejandro Matos "Carnaval De Las Victimas", otro trabajo de primer nivel que para constatarlo se puede ver simplemente el lugar que ocupa en Progarchives, dentro de los mejores discos del este año 2024 a nivel mundial, y con eso ya nos damos una idea de la valía de este nuestro trabajo, donde Alejandro Matos se ocupa de todos los instrumentos salvo la batería, conformando un trabajo oscuro, cinematográfico, elegante y ambicioso, y toda una reflexión sobre los tiempos que corren, en base a buenos riffs y melodías cautivadoras, hasta su bucólica y triste belleza. Un trabajo que llevó tres largos años, que cursa su travesía desde un medio tiempo en casi toda su extensión y se escucha como un oscuro regalo de los dioses... o de los demonios, uno vaya a saber, pero que definitivamente tenemos que recomendar al selecto público cabezón. Ide

The Alan Parsons Project - Pyramid (Super Edtion Deluxe) (2024)

Otro gran aporte del Mago Alberto, se trata del tercer álbum de Alan Parsons Project, pero ahora reeditado en este 2024. "Pyramid" fue un álbum conceptual centrado en las pirámides de Giza, que se grabó en los estudios Abbey Road con una variedad de vocalistas y músicos un conjunto de 4 CD que incluyen una nueva remasterización del álbum por Miles Showell y 67 temas adicionales, 54 de ellos inéditos, incluidas tomas descartadas de sesiones de estudio y demos de Eric Woolfson o "Songwriting Diaries", como se las conoce. Y lo presentamos basándonos en un comentario que nos dejó hace tiempo nuestro amigo El Canario, que como siempre se disfruta mucho. Que lo disfruten, tanto al texto como a esta nueva versión de este clásico. Artista:  The Alan Parsons Project Álbum:  Pyramid (edición remasterizada y ampliada, 2008) Año: 1978 - 2024 Género:  rock progresivo, rock sinfónico Duración: 1:03:40 Nacionalidad:  inglesa De todo lo que he escuchado de Alan Par

King Crimson - Larks' Tongues In Aspic 50th Anniversary Edition Elemental Mixes (1973 - 2023)

Para ir cerrando la semana vamos con uno de los clásicos experimental de todos los tiempos, pero presentado de un modo nuevo gracias al Mago Alberto que se zarpa nuevamente para quemarla las válvulas a más de un cabezón, mientras que a algunos más les funde algunas lamparitas. Hablo de un álbum que rompió nuestra percepción del mundo de la música, donde Fripp, Bruford, Wetton, Cross y Muir crean un disco bisagra en la historia del Rey Carmesí, pero ahora en otra versión distinta a la que conocés, y sobre ello nos dice el Mago: "Una nueva edicion de Larks Tongues in Aspic commemorando los 50 años de la salida de esta enorme obra, y así como sucedió con RED nos encontramos con un nuevo lanzamiento con nuevas versiones y mezclas, esta vez a cargo de David Singleton, van a poder disfrutar también de versiones alternativas del mismo álbum. Cuando se lanzo este disco King Crimson rompió con todos los moldes existentes hasta el momento, la instrumentación era exquisita y la grabación era

Charly García - La Lógica del Escorpión (2024)

Y ya que nos estamos yendo a la mierda, nos vamos a la mierda bien y presentamos lo último de Charly, en otro gran aporte de LightbulbSun. Y no será el mejor disco de Charly, ya no tiene la misma chispa de siempre, su lírica no es la misma, pero es un disco de un sobreviviente, y ese sobreviviente es nada más y nada menos que Charly. No daré mucha vuelta a esto, otra entrada cortita y al pie, como para adentrarse a lo último de un genio que marcó una etapa. Esto es lo que queda... lanzado hoy mismo, se suma a las sorpresas de Tony Levin y del Tío Franky, porque a ellos se les suma ahora el abuelo jodón de Charly, quien lanza esto en compañía de David Lebón, Pedro Aznar, Fito Páez, Fernando Kabusacki, Fernando Samalea y muchos otros, entre ellos nuestro querido Spinetta que presenta su aporte desde el más allá. Artista: Charly García Álbum: La Lógica del Escorpión Año: 2024 Género: Rock Referencia: Rollingstone Nacionalidad: Argentina Como comentario, solamente dejar

The Beatles - Get Back (2021)

Los tres episodios del documental "The Beatles: Get Back" y el reencuentro con la felicidad. Siempre elegimos algo especial para empezar la semana pero esta vez es distinto. Y es que comenzamos la semana en el blog cabeza con un tremendo aportes de LightbulbSun, al que le anexamos una certera nota de Marcelo Figueras para Cohete a la Luna el 10 de diciembre último. Se trata de nada menos que "Get Back", el documental beatle, el material de archivo inédito de la realización de el legendario álbum "Let It Be", un reality show diferido por más de 50 años de la que quizás fue la banda de rock más influyentes de la historia, en un documental que ya es legendario. ¿Cómo han renido tanto material  oculto todos estos años a tantos millones de fans? y otro de los grandes aportes del blog cabeza (y de LightbulbSun) para comenzar la semana con todo. Artista: The Beatles Película: Get Back Año: 2021 Género: Documental Duración: 468 minutos Nacionalidad:

Ideario del arte y política cabezona

Ideario del arte y política cabezona


"La desobediencia civil es el derecho imprescriptible de todo ciudadano. No puede renunciar a ella sin dejar de ser un hombre".

Gandhi, Tous les hommes sont frères, Gallimard, 1969, p. 235.