Así que últimamente andamos muy Genesianos amigas/os. Pues alegrense más por que hace su aterrizaje al blog cabezon lo más reciente del gran Steve Hackett, que no necesita presentación alguna. Como un fusor cultural, se ha editado su álbum número 25 de estudio, tres días después de iniciada la primavera, un reinventado Steve Hackett quintaesencia los matices musicales de otras culturales distribuidos alrededor de su obra pero que toman ahora en este álbum, su corpulencia y protagonismo. Habló de esos argumentos musicales basados en la world music que Hackett han utilizado desde sus primeras obras y que dados innumerables viajes por todo el mundo ha ido recolectando primero como aficionado y luego para imprimirla a su obra. Con la incursión de músicos de diferentes continentes, este ecléctico grupo de canciones influenciadas por la diversidad cultural se adaptan para crear una enriquecedora y exótica comunión de ideas y sonidos. Sea o no que tengan experiencia en la música del mundo, este álbum les resultara fascinante y enigmático. Una totalidad conceptual que se une al virtuosismo y estilo progresivo de este legendario guitarrista y con la noble misión de llevar un mensaje de paz a un vacilante mundo de violencia, cinismo y desigualdad. Un álbum que no decepciona en lo absoluto. Una verdadera maravilla con mayúsculas.
Pasen a leer mi comentario y demás detalles.
Pasen a leer mi comentario y demás detalles.
Artista: Steve Hackett
Álbum: The Night Siren
Año: 2017
Género: Rock Progresivo
Duración: 57:40
Nacionalidad: Reino Unido
Año: 2017
Género: Rock Progresivo
Duración: 57:40
Nacionalidad: Reino Unido
Lista de Temas:
1. Behind the Smoke2. Martian Sea
3. Fifty Miles from the North Pole
4. El Niño
5. Other Side of the Wall
6. Anything but Love
7. Inca Terra
8. In Another Life
9. In the Skeleton Gallery
10. West to East
11. The Gift
Alineación:
- Steve Hackett (guitar & vocals)- Roger King (keyboards & programming)
- Nad Sylvan (vocals on Inca Terra)
- Rob Townsend (all things wind)
- John Hackett (flute)
- Amanda Lehmann (vocals)
- Gary O'Toole (drums)
- Benedict Fenner (additional keyboards & programming).
- Kobi and Mira (singers)(Israeli and Palestinian)
- Nick D'Virgilio (drums) from the USA,
- Malik Mansurov (Tar) from Azerbaijan & Gulli Breim (drums & percussion) from Iceland.
- Christine Townsend (violin & viola)
- Dick Driver (double bass)
- Troy Donockley (Celtic Uilleann) and
- Leslie Bennett (keyboards on The Gift).
Dado que mi oído reconoce la obra y estilo de Hackett, no fui difícil asimilar el álbum. También han ayudado los entrenamientos que mi oído ha disfrutado por un periodo de años para asimilar la Word Music y les recuerdo que para el que aquí escribe, la Word Muisc es uno de sus géneros favoritos.
Pero después de sigilosas sesiones del The night Siren descubrí esa parte sinuosidad que llevaba en mi sique y me hacía divagar y divagar, ese parentesco que no permitía asimilar la obra en mi totalidad. Y la respuesta estaba en el album De Profundis de los gran After Crying que en el blog cabezon nos gustan demaciado. Esta percepción muy personal se la asigno al parentesco que hay entre algunas de las secciones más algidas de cuerdas de The Night Siren. Acepto que no se pueda compartir mi punto de vista, pero si de algo si tenemos que estar muy seguros es de la diversidad musical que abarca el disco:
Hay una lista prominente de músicos de sesión que interpretan una variedad de diferentes instrumentos étnicos como el Alquitrán de Irán, el Berimbau brasileño, así como la Citara de la India, el Charango peruano. También se escucha tocando un Tar, un tipo de laúd iraní. También escuchamos el Laúd árabe, las flautas y Gaitas célticas, además del Didgeridoo australiano, como también el Duduk armenio, la guitarra flamenca y la quena sudamericana. Cada uno de estos instrumentos (raros para muchos occidentales) que como dije, le agregan un sabor exótico y enriquecedor al resultado total sin que durante el desarrollo el disco no pierda la línea rock progresivo.
Y apartando el ámbito musical el mensaje de The Night Siren nos invita a participar en la celebración de la diversidad multicultural y la unidad. Las connotaciones sociales y políticas están presentes desde el principio de la obra así como el título del álbum es una advertencia de los tiempos oscuros que podría ser la perdición de la humanidad si decide ir por el camino de la política nacionalista y la xenofobia. El álbum embargo, no nos dan una alternativa que es practicar el compañerismo, la comunión y la compasión.
Y bueno, además de que les dejare una buena entrevista para el final, entre lo más importante que ha dicho Hackett acerca de la obra se encuentran estás palabras:
”Comencé haciendo un álbum de rock, pero todas esas influencias en mi cabeza terminaron resultando en un álbum de world music. Tuve la fortuna de contactar talentosos músicos, y aunque suene pretencioso, los músicos son naturales embajadores de paz, ya que pude viajar y reunirme con gente muy diferente, y fuimos capaces de crear música juntos de una manera muy multicultural, tal como en verdad debe ser.”
“Con más compasión, comprensión mutua y menos odio el mundo podría ser un mejor lugar, y a aquellos quienes actualmente están hambrientos podría dárseles la oportunidad de una vida mejor. Siempre me he enfocado en lo ecléctico lo cual es particularmente cierto en este álbum donde exploro temas y géneros musicalmente contrastantes.”
Esta velada de la sirena inicia con el siniestro "BEHIND THE SMOKE", un gran tema de apertura concentrándose en la temática actual de los refugiados que huyen de sus países por causas de la guerra o persecuciones. En la letra se añade el desconcierto de como algunos gobiernos del mundo muestran su egoísmo e intereses propios que en tratar de ayudar a la gente. El maestro añade al respecto: "Mucha gente hoy en día está en esa posición , ignorando que cientos de miles de nosotros también tenemos ancestros quienes fueron refugiados. Algunos de los míos fueron judíos que escaparon de la persecución en Polonia durante el siglo XIX. Si Inglaterra no los hubiera dejado entrar, yo no estaría hoy en día aquí contándolo.
Ya en lo musical, desde sus primeros acordes de cuerdas se transpira un ambiente entre sombras que la voz ha logrado capturar. El ya dominado estilo de cuerdas que solo Steve sabe imprimir en su música se hace efectivo con alardes grandilocuentes y sofisticados, siendo puntuales a lo largo de los 7 minutos del tema; es inevitable mencionar que dichos arreglos tienen cierta similitud con "Kashmir" de Led Zeppelin. Sin embargo, el primer acto de virtuosismo del maestro se imprime en un solo de guitarra en la fracción del minuto y medio que sentencia la intensidad abrazadora del tema en conjunto con las dichas secciones de cuerdas. Llegando a este punto a la mitad del tema, los arreglos orquestales me recuerdan mucho a los de los After Crying, de su época De Profundis, que ya hemos presentado oportunamente en el blog cabezon. La última mitad del contestatario, se formula con un interludio tenso recreado por el Tar de Malik Mansurov, al que se le unen mas arreglos dark de cuerdas más una voz femenina de tintes arabescos y las percusiones de Gary O Toole para dar el balance exótico al tema. El tema cierra con el sello de la casa interpretando por Hackett con más solos de guitarras.
"MARTIAN SEA" se catapunta con una nutrida instrumentación dentro de sus 4:40 minutos. La entrada lo contrata un providencial arreglo de sitar Indio como apertura del mismo que servirá a lo largo del tema como base y también como coprotagonista junto a secciones bien trabajadas del gran batería Nick D'Virgilio marcado un ritmo melodioso y ágil más las consabidas destrezas del maestro. El interludio y a la par cierre de Martian Sea, inicia exóticamente por ahí de la mitad del tema con más indicios orientales, ahora con el Laúd que se les une al festin instrumental con un refulgente pasaje que bien podrían ser una recreación de De Profundis con una sicodelia retro, mística y oriental como la de The Serpent Power o 13th Floor Elevators aderezados con los exquisitos y frenéticos parpadeos de Hackett.
"FIFTY MILES FROM THE NORTH POLE", el gélido y larga duración, inspirado por otro de sus múltiples viajes de Hackett, inicia con un clima misterioso y de aires solitarios que refuerzan los acordes escuetos de Hackett y un contrabajo delicioso, pero al momento de hacer su aparición la voz se confirma un extraño aislamiento. Siendo un tema de 7:08 minutos se abordan diferentes y especiales segmentos melódiosos y mágicos como en sus ganchos con los arreglos corales femeninos y trabajos en los coros de Amanda Lehmann que resultan contagiosos y hasta sutilmente estremecedores entre ambos. Los arreglos ambientales siguen bien impregnados por esos espectrales arreglos de cuerdas que no me quitan de la cabeza ese extraordinario cuarto trabajo de After Crying y la fuerza contenida que proporciona la guitarra de Hackett se muestra de a poco a poco vigorosa y corpulenta. Estar bien preparados auditivamente porque este viaje en trineo lo estimula de manera abismal una de las secciones más intensas del álbum cuando entramos al minuto cuatro entre la congregación de las percusiones más oscuras, la adición de una retorcida trompeta y el porte poderoso del Digeridoo australiano. Lástima que solo dura poco menos del minuto. El resto del tema es para el lucimiento individual del que fue el guitarra de Génesis de su época más dorada. Un maravilloso tema.
Los temas magistrales que no cesan ahora se presenta con el álgido instrumental "EL NIÑO". Grandisimo ejercicio, conciso y voluptuoso desde el arranque, con mas arreglos de cuerdas oscuros definiendo el tema en toda su íntegridad, y un trabajo de un Hackett demostrando que sus 67 años está en gran forma, nos recuerda amorosamente los mejores tiempos de Defector a la guitarra con un fenómenal empleo a la percusión que le ha imprido un ambiente de dramatismo y deleitandonos con otro gran intermedio brillante que me sigue recordando todavía más a esos oriundos de Hungría. No en vano, El Niño es una de las tres canciones elegidas para representar al The Night Siren por el mundo aunado a que en una entrevista Hackett describe la canción como “una película para el oído y no para el ojo”.
"OTHER SIDE OF THE WALL" nos lleva ahora a las épocas del Please Don't Touch en sus cortes "Kim" y "How Can I?". Predomina la acústica y melodía romántica y dulce desde el inicio, lo cual es obvio para la trama de la letra sobre una pareja que vivió en otro siglo a los que no se les permitió estar juntos. La inspiración de la canción vino de una visita a un jardín de Wimbledon en el sur de Londres durante un día de verano cálido donde Hackett y su esposa llegaron a una una pared de ladrillo y leyeron e imaginaron esta historia.
Al ritmo de deliciosas percusiones que se recrean cuando la mano toca contra el cuerpo de la guitarra acústica, fielmente se nos presenta "ANYTHING BUT LOVE" con la incorporación de aires flamencos que me recuerdan la virtuosa manera de cómo alguna vez se fundió el rock progresivo y la musica flamenca en los 70s en uno mis álbumes favoritos de todos los tiempos llamado Fandangos In Space de los miticos Carmen. Después de esta pincelada española, se cede el terreno a incresendos ambientes rockeros guiados por un pegadizo y delicioso riff de guitarra de la escuela R.E.M. de Michael Stipe y compañía de la era Out Of Time que arreglan el escenario ideal para un bienvenido toque de blues emanado a mitad del tema de la mano de un rico solo de armónica siendo a su vez, catapunta y dama de compañía durante las secciones más intensas del tema. El momentos de estrellato no podía llegar sino del protagonista del álbum con su demostración de guitarra de gran soltura y una consagrada efervescencia y virtuosismo que guían y firman de manera exitosa un final cargado de éxtasis.
Lo que mi experiencia étnica musical había notado desde Fifty Miles From The North Pole, en la turista "INCA TERRA" se ha transformado en toda una realidad. Quizá el tema más ecléctico del disco donde la riqueza de la parte más surrealista de Steve Hackett se une en grácil magia con los senderos del Machu Picchu y el espíritu Inca. Cómo si se tratase de la introducción del Sounds Of Silent de Simon And Garfunkel arranca está tremendo séptimo corte donde los oyentes podrán disfrutar en su primera sección, de grandes variaciones y estilos de percusiones, efectivas funciones de registros vocales y los consabidos megestuosos arreglos de cuerdas. El tema alcanza momentos de verdadera altura cuando la opulencia de la flauta rodea al tema con su mantra sudamericano y acompañado de armonía vocales al puro estilo mas Hackett. Una segunda sección que inesperadamente toma una dirección imprevista hacia un énfasis más progresivo y rítmico donde el estilo particular de Hackett hace duplas con más inesperados momentos culturales como de nuevo la aparición del Digeridoo, instrumento que la obra de Philip Glass del 2004, Orion, me mostró en su fastuosa apertura justamente del Digeridoo australiano de más de 12 minutos de poderosa atracción y fuerza marcando una huella en mi de por vida. Inca Terra es sin duda uno de mis temas favoritos del álbum, temas a los que de hecho nos vamos ya acercando.
No sin antes presentar a "IN ANOTHER LIFE" comenzando con una guitarra acústica ligeramente céltica y de gran viveza que inmediatamente recrea un emotivo ambiente de algún lugar la gran Escocia en contraparte con su lírica que habla sobre una relación que ha quedado desgarrada por la guerra que parecía tener lugar durante la revolución americana reflejada correcta y sobriamente por una buena interpretación vocal. El esquema acústico (que como ocurre en casi toda la estructura del álbum), se rompe con una sección entre partes pesadas de percusión y solos de guitarra eléctrica como medio estelar, como todos los solos de Hackett lo son. Además este precioso tema tiene como coda una de las secciones mas elevadas y fastuosas del álbum cuando el tema se inclina para recoger un hermoso y profundo solo de Gaita Irlandesa recordándome el porque este instrumento está entre mis cinco favoritos de mi sentido melómano. Un perfecto final como preludio a lo que a continuación es toda una revelación en mi:
El escenario ideal de Gaitas para que "IN THE SKELETON GALLERY" entre con toda su gala de elegantes y rítmicos compases letargicos. Aquí la oscuridad se mezcla con una belleza sutil y fastuosa. Pero vayamos por partes: "En la Galería del Esqueleto" con semejante título es mi tema favorito del album, la marca de la casa está desde el primer segundo del tema, lo que ha hecho de Steve Hackett una de mis cinco guitarras favoritas de todos los tiempos está presente en todo el tema. ESTOS SON LOS TEMAS QUE DESCRIBEN MI PERSONALIDAD Y ESPÍRITU MAS LIBREMENTE. El tema que te engancha desde el primer segundo, combinada con escalas armónicas de sugerentes ambientes egipcios en las cuerdas más el aderezo de encantadores elementos fantasmagóricos y sobrenaturales. Hay un ambiente denso, pero lo enigmático de la representación de la voz se engala con la aplicación de un saxofonista soprano que motiva al tema hacia terrenos más darks y espectrales como si se tratara de una fantasmagórica marcha de muertos. La intensidad de una experiencia inolvidable en la guitarra muestra a un Hackett poseído y rejuvenecido y un solo del saxofón en medio de la conglomerasion espectral le termina de dar forma y ambiente a este impresionante tema a su vez también me fortalecen y rejuvenen a mi, aun sin que yo sea un hombre de 67 sino porque me siento en mis propios senderos de misterio, magia y enigmática oscuridad.
El tema que ya entro directo a un top 10 de mis temas favoritos de Hackett es otro de los estandartes del álbum que fueron utilizado para representarlo por toda la tierra. Y vaya que fue una gran elección y visión.
Y hablando de tierra, la redentora esperanza e inspiración de "WEST TO EAST" ondea justamente de "Occidente a Oriente" la bandera del planeta tierra como un mensaje de paz que refleja lo dicho en “Behind the Smoke”. Musicalmente, hay cantantes tanto de Israel como de Palestina (Kobi Farhi y Mira Awad) quienes grabaron juntos sus participaciones. Hackett ha dicho al respecto: “Con más compasión, comprensión mutua y menos odio, el mundo podría ser un mejor lugar, y a aquellos quienes actualmente están hambrientos podría dárseles la oportunidad de una vida mejor. Siempre me he enfocado en lo ecléctico lo cual es particularmente cierto en este álbum donde exploro temas y géneros musicalmente contrastantes.”
Uff!! No temo decirlo, simplemente me dejo llevar, en terrenos musicales no debe haber límites y creo que de "Occidente a Oriente" sería mi segundo tema favorito del álbum. Melódica, tranquila, algo teatral, el estribillo creo que es de lo que todos hablan. No es para menos. Pero a mí el comienzo de esta canción simplemente me pega durísimo. Toda la elegancia compasiva de la sección orquestal me hace suspirar muy hondo, tiene algo de trágico, pero a la vez redentor a la vez elegante. Gran cantidad de dosis que también hace crecer mi perfil personal. Cuando su muscular estribillo llega, reconozco que Hackett me hace creer en su mensaje de paz aún cuando vivo en ambiente nihilista apartado de acontecimientos mundiales y sociales y mas aún cuando a la mitad del tema se levantan cantos estilo QAWWALI que mi sentido melómano reconoce en el gran Paquistaní Nustat Fate Ali Khan del que se cita como la voz más grande de todos los tiempos. Sublime. Pero el otro sello de la casa: la guitarra, no podía faltar, para degustarnos más solos de guitarra mientras lo fastuoso de las cuerdas recorren impetuosamente el tema y terminar con ese estribillo perdiéndose a la distancia. Que verdadera flor de canción...
A manera de despedida y con delicada reverencia, el ciclo "THE GIFT" es un bello y perfecto ejercicio de Hackett donde nos demuestra el porque su guitarra tiene la capacidad de volar muestras que abajo, la sección de cuerdas apoya y añade el toque celestial y meditativo, y que por supuesto, ya se establece como 'El Regalo' perfecto para terminar esta maravillosa y compleja obra.
Vayamos votandolo para lo mejor del año. ¡Tenía que ser Steve Hackett!
El link en la biblioteca...
A continuación y a manera de cierre, un reveladora entrevista:
– Hola Steve, lógicamente esta entrevista tiene como principal motivo la edición de tu nuevo trabajo ‘The Night Siren’ que verá la luz el 24 de marzo. ¿Cómo es musicalmente, en opinión del creador y principal protagonista, que eres tú, este álbum? ¿Qué van a encontrar en el disco tus seguidores?
Steve.- Bueno, creo que es notorio que ha colaborado mucha gente en el disco, 20 personas de diferentes partes del mundo, de todos los sitios; Israel, Palestina, Hungría, Suecia, Azerbaiyán, EE UU, Inglaterra… Hay partes que se han grabado en Inglaterra, en Miami, hay instrumentos peruanos, celtas, hindúes, muchas cosas, es un álbum con infinidad de matices. De verdad es disco de naciones unidas de músicos, una representación de la música del mundo sin dejar de ser un disco de rock.
– ‘The Night Siren’ te muestra como el guitarrista de prestigio y gran clase que siempre fuiste, con más fuerza que nunca. ¿Cómo te ves como guitarrista y músico tú mismo, en la actualidad, tras tantos años, en este nuevo álbum?
Steve.- Respecto a la guitarra, escucho muchos estilos de guitarra distintos, a veces trabajo con rock, Blues o música clásica, pero por ejemplo nunca había trabajado con flamenco, al menos no de manera apropiada hasta ahora, y creo que he incorporado algunas de esas influencias a este álbum. Hay un poco de flamenco al principio de "Anything but Love", creo que la influencia española está bastante presente en esa canción por ejemplo. También hay influencias de los 60 adaptadas a la tecnología de ahora, lo que hace que en ocasiones me recuerde a los GENESIS de los 80 mezclados con los BEATLES de los 60. Es una combinación de muchos estilos y épocas.
– Pero poco o casi nada se puede aprender tras tantísimo tiempo, ¿no?
Steve.- Bueno, si tienes curiosidad no dejas nunca de aprender, yo he metido muchas cosas en este disco y he aprendido muchísimo a pesar de haber pasado tantos años.
– En el álbum has contado con diferentes colaboradores, cantantes de Israel y Palestina, quienes han estado peleando duro para juntar a la gente judía y árabe. También hay músicos americanos y de Iraq y una multiplicidad de sonidos, incluyendo algunos exóticos de la India y de Oriente Medio, la belleza ética del charango peruano y hasta gaitas célticas. Primeramente, quería preguntarte, ¿por qué has optado por estos invitados? Me imagino que habrá tenido mucho que ver tu fama de viajero empedernido, y el deseo que hacer amigos en todas partes…
Steve.- La verdad es que surgió de forma natural contar con tanta gente distinta y ha sido un proceso muy orgánico porque he hecho amigos por todo el mundo y simplemente se ha tratado de empezar a trabajar juntos. Nunca pretendí sacar un disco de músicas del mundo, es en lo que se ha convertido. Todo indica que era el momento justo para hacer algo así, la música puede existir sin fronteras y sin prejuicios, y sí yo puedo hacer esto, puedo honrar a mis ancestros de hace 100 años que escaparon de Polonia debido a la persecución religiosa de aquel momento para llegar a Inglaterra y solicitar asilo político. Ahora hay una nueva corriente de nacionalismo y tendencias de derechas y yo pienso que la esperanza del mundo es la diversidad multicultural. Tenemos que entretenernos unos a otros con las cualidades que tengan cada una de las naciones, las más notorias y las mejores. Poder salir cualquier día de la semana y elegir restaurante, ya sea japonés, francés o italiano. Lo que quiero decir, que estoy empezando a divagar, es que podría ser un mundo fantástico si cada uno ofreciera lo mejor de sí mismo. Pienso que si queremos una tercera guerra mundial vamos por el camino adecuado y mi disco es una alternativa a todo eso.
– ¿Que han aportado a las canciones estas colaboraciones? Lo digo porque incorporar al álbum tantos y tan diferentes sonidos, instrumentos, músicos y cantantes de diferentes partes del mundo es algo atípico y altamente atractivo…
Steve.- Sí, sin duda. La primera vez que estuve en Perú lo hice como turista, después fui a tocar allí, pero en esa primera ocasión tuve la oportunidad de conocer un instrumento local llamado charango, un pequeño instrumento de cuerda, al que acompañaban con una flauta tradicional de allí. El sonido conjunto de los dos instrumentos te transporta inmediatamente a Perú, y quise utilizar esa influencia combinándola con el Tar de Malik Mansurov de Azerbaiyán. En el primer tema hay una sección instrumental que se convierte en un fragmento acústico en el que utilicé estos instrumentos sonando juntos, diría incluso que por primera vez en condiciones. Estoy muy orgulloso de ello porque encajan perfectamente y parecen hechos para sonar juntos. Me he dedicado a recopilar datos para luego asimilarlos y poder manipularlos creando estas combinaciones únicas.
– En alguna parte de la información sobre este disco he leído que has hablado de una cita de Platón: ‘Cuando la música cambia, las murallas de la ciudad tiemblan’. ¿Cómo has aplicado esto a tu música?
Steve.- Creo que los movimientos de protesta de los 60 pavimentaron el camino para los derechos que conocemos hoy y que se encuentran claramente amenazados. Creo que Bob Dylan y los BEATLES ayudaron mucho a avanzar en ese sentido porque introdujeron a músicos de países como India y de repente la gente ya no estaba obligada a escuchar solo música inglesa o americana, se dio a conocer la música étnica, y de algún modo yo estoy intentando reintroducir eso. Creo que la globalización de la música es posible y sé que no soy el único que está haciendo esto de cara al futuro.
– Además de los cantantes Kobi y Mira (Israelí y Palestino), también te acompañan Nick D’Virgilio (batería) de Estados Unidos, Malik Mansurov (Tar) de Azerbaiyán y Gulli Breim (batería y percusión) de Islandia, además de Troy Donockley de NIGHTWISH, junto a tus colaboradores frecuentes como son Roger King, Nad Sylvan, Gary O’Toole, Rob Townsend y Amanda Lehmann. ¿Cómo ha sido el trabajo y las aportaciones de cada uno de ellos?
Steve.- También hay colaboradores de Hungría que eran padre e hija y que además ha sido la primera vez que tocan juntos. Aparecen en un tema llamado “50 Miles From The North Pole”, y es una gran combinación. Amanda (Lehmann; cantante) es mi cuñada, la hermana de mi mujer, y tiene unas ideas musicales muy creativas que me gustan mucho, me gusta trabajar con ella. También he disfrutado con Troy Donockley de NIGHTWISH que se ha encargado de las gaitas, le ha dado un toque muy celta a algunas partes y ha reflejado muy bien la naturaleza de los paisajes escoceses. Gulli Breim de Islandia toca la batería en dos temas para los que sacó unos ritmos que suenan muy, muy bien. Es un batería muy atípico pero muy musical, también toca el cajón y muchos instrumentos de percusión, es una especie de virtuoso. Tiene discos muy interesantes que me han influenciado mucho a la hora de hacer un tema como “50 Miles From The North Pole”. Por supuesto Nick D’Virgilio de EE UU, un batería muy rápido y con mucha definición.
– ¿Cómo es en tu opinión el tema "In The Skeleton Gallery”?
Steve.- Creo que comencé "In The Skeleton Gallery”como dos canciones separadas que fueron fundiéndose. Es como un viaje, habla de la infancia, de los terrores nocturnos que tenía de pequeño, pero también de lo fácil que me resultó deshacerme de ellos. Creo que los niños tienen mucha imaginación, solía tener sueños muy realistas de pequeño y veía ondas sonoras, me encantaba esa habilidad y me encantaría volver a aprenderla. Los niños tienen facilidades y limitaciones, y de eso habla un poco el tema.
– Háblame de “El Niño”, por favor…
Steve.- Con “El niño” quería hacer un tema que hablara de mantenerse en el ojo del huracán aguantando mientras todo eso te rodea. Los instrumentos que he utilizado, la orquesta, las cuerdas, los instrumentos de viento, clarinete, etc., todo eso mezclado con las baterías tribales y con una banda de rock se consigue un tema que tiene de todo. Toda esa mezcla luchando por la supremacía le da a la canción cierto aire tormentoso que te rodea haciéndote sentir en medio de todas esas fuerzas.
– ¿Y sobre el penúltimo tema "West to East"?
Steve.- En "West to East" participan dos personas. Como has dicho está Kobi Farhi y Mira Awaḍ, de Israel y Palestina respectivamente que cantan juntos y que son amigos. La canción habla de la franja de Gaza, una pequeña zona pegada a Tel Aviv; no hay frontera, simplemente pasas de un sitio a otro, en la que se están matando entre sí, y en cierto modo el tema es una súplica de paz. Una apoyo a la idea de que el mundo tiene recursos suficientes si conseguimos trabajar juntos. Las naciones ricas pueden compartir con los países pobres. Este disco es una manera de decir que las fronteras son un modo de infligir violencia a la gente pobre, y toda esa gente debería tener una oportunidad de ser asimilada en un proyecto económicamente viable. Parece que vamos directos a una tercera guerra mundial con todas esas políticas de derechas, los eslóganes de Trump me recuerdan a Hitler en el 33 y me hace pensar que no hemos aprendido nada de la historia. Parece que reina la estupidez.
Mi disco es una manera de mostrar al mundo como he sido capaz de trabajar con gente de todo el mundo, y de hacer ver que eso sería posible a todos los niveles.
– Hablamos de otros temas. Has anunciado 15 fechas en Reino Unido en abril del 2017 para dar vida al show ‘Genesis Revisited’, celebrando el 40 aniversario del clásico de GENESIS, ‘Wind and Wuthering’ y posteriormente una larga gira que pasa por España el 23 de marzo en el Gran Teatro Liceu de Barcelona y al día siguiente en Kursaal, Sala de Camara de San Sebastian. ¿Qué músicos te acompañarán en dichas actuaciones?
Steve.- Básicamente será mi banda habitual, Roger King (teclados), Nad Sylvan (voces), Rob Townsend (vientos), Nick Beggs al bajo y Gary O’Toole (batería). Todos ellos son una parte muy importante, hemos ensayado los temas de GENESIS y nuestras versiones son muy auténticas, especialmente las de “Wind & Wuthering” ya que es el cuadragésimo aniversario del disco. Tocamos ese trabajo entero y el tema “Inside & Out”, que iba a incluirse en él pero que al final se quedó fuera. Para mí es una canción muy buena y quería hacerle justicia. Hacemos una versión muy fiel en directo pero creo que conseguimos llevarla a otro nivel en la segunda parte con el saxo de Rob Townsend.
– ¿Cómo serán dichos shows? Parece que aparte de tocar temas de dicho disco, también haréis felices a los fans gracias a temas como "The Musical Box", incluso canciones que nunca se tocaron en su día… ¿Será un repertorio similar al disco editado en otoño de 2012?
Steve.- Bueno, mi último trabajo fue “Wolflight” de 2015, y en cierto modo está conectado con “The Night Siren” ya que también tiene instrumentos de todo el mundo, aunque he ido un poco más lejos con el nuevo. El rollo es que vamos a hacer tres temas del nuevo disco; “El niño”, “In The Skeleton Gallery” y también “Behind The Smoke”. Todos tienen un aire de músicas del mundo de una forma u otra. Intentaremos honrar el presente pero también el pasado.
Comencé haciendo dos repertorios, uno de Steve Hackett y otro de GENESIS, pero después empecé a mezclarlos en los conciertos y me he convertido bastante flexible en ese sentido. Quiero recordar el pasado pero también introducir a la gente a mi música, no quiero ser recordado solo por ser el ex – guitarrista de GENESIS.
Hemos hecho un concierto en Búfalo, con la Orquesta Filarmónica de Búfalo, que demostró que es posible hacer conciertos con una orquesta, fue un gran éxito. Tenemos las partes de orquesta compuestas, así que ahora estamos empezando ese proceso, tocar con la orquesta en otros sitios. El problema es que organizar eso lleva tiempo y no se puede planear a corto plazo, pero sí que quiero tocar con orquestas. Siempre tuve en la cabeza la idea de que GENESIS tenían que haber sido una orquesta en lugar de una banda.
– ¿Sigues en contacto con tus ex-compañeros? ¿Qué nos puedes contar al respecto?
Steve.- Sí, hablamos de vez en cuando y aunque somos muy objetivos en privado, en público siempre hay cierta competencia. No creo que ninguno dijera públicamente como se sienten al respecto pero así funciona el grupo.
– En 2013 participas en el disco de Arjen Anthony Lucassen, “The Theory of Everything”, donde realizas un solo de guitarra en el tema "The Parting". ¿Cómo fue la experiencia?
Steve.- Sí, me suena, pero para ser sincero toco con mucha gente y cuando alguien me pide colaborar en algo normalmente digo que sí. Mi vida está muy ocupada, la gente me dice que he tocado en este disco o en este otro, pero tengo muy mala memoria y muchas veces no me acuerdo de todos los sitios en los que he tocado. Creo recordar que salió muy bien no obstante.
– ¿Tienes previsto algún otro proyecto similar?
Steve.- Ahora mismo no, pero como hago discos de rock, creo que en algún momento haré algo de corte clásico, o material acústico, no lo sé. Me gusta expandirme de una idea a otra y tocar diferentes estilos.
– ¿Cómo quieres terminar la entrevista?
Steve.- Muchas gracias por la entrevista, ha sido un placer hablar contigo. Espero visitar España pronto.
“Con más compasión, comprensión mutua y menos odio el mundo podría ser un mejor lugar, y a aquellos quienes actualmente están hambrientos podría dárseles la oportunidad de una vida mejor"
El disco está buenazo, la reseña es estupenda, gracias, gracias, gracias.
ResponderEliminarGran disco! Me gusto mucho mucho también!
ResponderEliminarSaludos paisano!! :)
Disculpa calle nep, de que parte del país eres?
ResponderEliminarSoy chilango paisano, pero ya se me quitó después de 15 años en Perú. ¿Y tú de dónde eres? ¡Saludos!
EliminarMira nadamas! Resides en Peru! Ok!
EliminarMira, yo soy del Estado de México, pero ya bien cerquita de la Cuidad de México. Te mando un abrazo y muchas muchas gracias de que te gusto mi reseña.
Muchas gracias por el post. Hace tiempo que no escuchaba un disco en esta onda tan bueno de principio a fin. Fantástico
ResponderEliminarEsta muy bueno Tabo! Sigue disfrutandolo. Al igual que todo el contenido del blog que hacemos para ustedes! Saludos!
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