Copio una nota aparecida en Mágicas Ruinas crónicas del siglo pasado, que habla de una gran banda fugaz (llamada justamente Fugaz) que derivó en otra igualmente efímera, pero muy talentosa, que se denominó Krill. Texto basado, a su vez, en una nota aparecida en la famosa revista Pelo en marzo de 1982, cuenta la historia en un momento donde Krill parecía estar en su mejor momento y donde los músicos parecían querer comerse el mundo. Quizás como una alegoría de lo transitorio y breve que resultan algunos proyectos, no solamente en el rock (aunque especialmente en él), sino que esa brevedad la podemos llevar a muchos momentos de nuestra vida y hasta al aspecto social. Aquí, parte de la historia de Fugaz / Krill, dos bandas perdidas en el rock argentino.
Hace siete años atrás, apareció en la escena local Fugaz, un grupo de música elaborada de muy buen nivel. Con todas las posibilidades a favor, incluyendo un contrato de grabación. Fugaz desapareció de la escena de un día para otro. Detrás de ese hecho se escondía una sórdida historia que recién ahora pudo ser revelada.
En 1975, Invisible, la banda que en ese momento lideraba Luis Alberto Spinetta, daba un concierto en Vélez Sarsfield al que asistieron unas seis mil personas. El público esperó pacientemente por más de una hora la aparición de los músicos. Cuando éstos subieron al escenario, la sorpresa fue mayúscula: no se trataba de Invisible, sino de un grupo desconocido. La reacción no tardó en hacerse sentir: gritos, protestas, silbidos. Finalmente, Spinetta encaró al público; le reprochó su actitud y le pidió que escucharan a aquellos desconocidos que, según él, tocaban "mejor que muchos que tienen un gran cartel". Spinetta se retiró en medio de una ovación y Fugaz se convirtió en ese momento en el único grupo soporte con que contó Invisible durante su historia.
Formado en la zona sur del Gran Buenos Aires, Fugaz se inició junto a Vox Dei y luego actuó con Invisible en ese recital. Encabezó un concierto en el teatro IFT, actuó con León Gieco y Nito Mestre, tomó parte en un festival llevado a cabo en el Luna Park junto a Orions, Litto Nebbia y El Reloj, más dos grupos a nivel presentación, y luego actuó en La Plata junto a Nebbia y Pastoral. La formación original del grupo estaba integrada por Carlos Stefan (guitarrista), Oscar López (bajo), Ricardo Moguilevsky (batería) y Guillermo Lechner (saxo) y, más tarde, se les agregó Jorge Martinelli en teclados.
EL TRISTE FINAL
El grupo despertó el interés del sello CBS que les ofreció un interesante contrato para grabar un álbum. Por ese entonces participaron junto a Alas y Los Jaivas de un concierto en el Luna Park. Ante l posibilidad de grabar un disco, el grupo decidió cambiar su instrumental y vendió el que estaba usando en esos momentos.
Carlos Stefan: "Todo fue muy bien hasta ese momento. Una vez que vendimos los instrumentos ocurrió lo imprevisible: uno de los organizadores del festival del que tomamos parte en el Luna Park nos estafó y desapareció con todo nuestro dinero. Nos quedamos sin nada. No teníamos instrumentos, no podíamos hacer el disco y aunque lo hubiéramos hecho no podíamos pensar en recitales, en presentarlo, en nada. Por eso, de común acuerdo con CBS decidimos no 'hacer la grabación."
El desaliento de Fugaz fue total. Durante algún tiempo, siguieron dando pequeños recitales en clubes, pero sin ninguna posibilidad de recuperación. Alejandro Pensa reemplazó a Ricardo Moguilevsky en la batería hasta que el grupo terminó por desaparecer silenciosamente.
C.S.: "Fueron casi tres años de inactividad. Luego de la desaparición del grupo cada uno se fue por su lado. Yo estudié, los otros se dedicaron cada uno a lo suyo, pero la idea de grupo estaba presente en nosotros. Por fin, cuando nos recuperamos, cuando cada uno de nosotros volvió a contar con su instrumento, espontáneamente nos volvimos a reunir. Ricardo Moguilevsky volvió al grupo, no así Guillermo Lechner, al que reemplazamos por Roberto Medina en violín. Por eso, y porque Fugaz era un capítulo cerrado en nuestra historia, decidimos cambiar el nombre de la banda, y así nació Krill."
¿Por qué Krill? No suena muy a grupo de rock.
C.S.: "Krill es un poco la contraposición de Fugaz. Ese grupo, desgraciadamente, tuvo una carrera como su nombre: fugaz, breve y brillante. Krill es el alimento del futuro, como todos saben. Y nosotros esperamos ser la música del futuro."
EL RENACIMIENTO
El grupo ya se presentó en el interior junto a Raíces. Actualmente se desempeñan en una obra que está en cartel en un hotel céntrico. En ese mismo hotel, Krill espera presentarse oficialmente en dos recitales a realizarse hacia fines de marzo. El grupo planea hacer dos presentaciones, una destinada a hacer conocer el grupo a empresarios, grabadoras y periodistas, y otra para el público.
Musicalmente se ubican entre los grupos de fusión. Su música contiene elementos de jazz-rock y es exclusivamente instrumental, aunque el grupo no descarta la posibilidad de incorporar a un cantante en el futuro:
C.S.: "Nuestra música es difícil de definir. Yo hablaría de música urbana con elementos de fusión. Bueno, quizás sea más correcto decir que se trata de música suburbana..."
En oportunidad de su presentación junto a Alas y Los Jaivas, Fugaz mostró un espectáculo audiovisual, consistente en su música, diapositivas y efectos sonoros, como complemento. Krill piensa continuar con esta modalidad pero con cierta retracción en el principio:
C.S.: "Lo que ocurre es que acá las cosas cambiaron mucho desde que vinieron los grandes grupos extranjeros. El público, aprendió mucho y se hizo más exigente por lógica. Después de ver un espectáculo como el que dio Queen en Vélez, no podés pensar en salir a un escenario con un equipo cualquiera, trabajar con el proyector que un amigo tuyo se compró para ver las fotos de las vacaciones, y te presta porque es bueno, ni en fotografiar con la cámara que te prestó otro o pedir la ayuda de tus amigos para organizarte. Las cosas las tenés que hacer bien, o no hacerlas."
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