Artista: The Tangent
Álbum: Down And Out In Paris And London
Año: 2009
Género: Progresivo ecléctico
Duración: 64:30
Referencia: Progarchives
Nacionalidad: Multinacional
The Tangent se concibió originalmente para ser un proyecto en solitario de Andy Tillison, pero se convirtió en mucho más que esto desde el primer álbum. Sin embargo, se debe mencionar que Andy Tillison ha escrito casi el 100% de la música y las letras. Aunque la formación ha cambiado ligeramente de un álbum a otro, siempre ha habido al menos un par de suecos involucrados. Hasta ahora. En este disco tenemos una formación completamente de corte inglés, por primera vez.
Y acá Andy Tillison lo hizo de nuevo, otra vez volvió a cautivar con su magestuosa manera de hacer música y convirtiéndolo en uno de los referentes máximos del rock progresivo de la actualida, género que se nota que ama con toda el alma así como ama la buena música. Se nota y lo hace notar.
En este 2009 y tras varios cambios de formación, The Tangent volvieron al estudio a preparar un nuevo disco. La sombra de la duda se cierne sobre mi al ver la presteza que se han dado en componer este disco. No hablo de superar al anterior, porque eso, sinceramente, me parece imposible. Hablo de satisfacer unas humildes expectativas (bueno, humildes en base a la calidad que llevan años demostrando). Su nueva criatura lleva por nombre “Down And Out In Paris And London”. Un título que a más de uno le llevará a pensar en un disco en directo, pero nada más lejos de la realidad. Se trata de un nuevo trabajo, de un nuevo concepto, de una nueva y majestuosa construcción.
Escuchar un disco de The Tangent y disfrutarlo está al alcance exclusivo de aquellos oyentes de mente abierta, familiarizados con el rock progresivo y dedicarle a un disco las escuchas necesarias para, de una pequeña pintura, llegar a vislumbrar el inmenso paisaje.
Andy Tillison comanda una vez más el grupo hacia terrenos de magia, de sombras y luces, de sonidos inesperados, de melodías precisas y tan sutiles que te golpean como un martillo. La influencia Jazz característica del grupo sigue presente y los clásicos del rock progresivo siguen siendo la familia de esta banda, que se desmarca con una de las propuestas más personales de la escena, siendo comparable con grupos como Rush, The Flower Kings o incluso Pink Floyd. En esta nueva obra, nos encontramos con tan solo seis canciones. Parece poco material, sin embargo no me cabe duda de que cambiaréis de opinión a medida que vayáis descubriendo los temas.
Y es que el primer corte de este trabajo, titulado “Where Are They Now?”, tiene una duración de algo más de diecinueve minutos. Un titán sonoro que nos recibe con los brazos abiertos, dispuesto a atraparnos en su abrazo de estructuras tan vivas y vertiginosas como una serpiente de cascabel. Con una cálida introducción en la que desde la primera nota se percibe una gran atención en la producción, el grupo va ensamblado poco a poco piezas, dando entrada a los diferentes instrumentos, construyendo paso a paso, sin ningún tipo de prisa, un castillo de colores, de sonidos, de sensaciones, luces y sombras. Evolucionando, avanzando en un camino que parece imitar a la vida misma, desde la efusividad el color de la juventud hasta la melancolía y la profundidad de la madurez, nos lleva hacia los senderos menos explorados, acompañados por la voz de Tillison y la excelente guitarra de Jakszyk. Uno de los miembros más destacados en este tema es Rikard Sjoblom, encargado de los teclados y los sintetizadores junto al propio Tillision, una unión que resulta completamente efectiva y que hace de este corte algo mucho más grandilocuente si cabe. Especialmente atractiva me parece la parte del tema que arranca a partir del minuto 10, con la cálida voz de Andy sobre un íntimo piano y unos arreglos instrumentales perfectamente cuidados. Elevándose desde la paz y la calma más profundas hacia nuevas montañas rusas de sensaciones, poco a poco, paso a paso, en un trayecto casi imperceptible que te arrastra como un torrente. Una canción que avanza hacia un clímax majestuoso, con la particularidad de que ese clímax puede llegar en cualquier momento del tema, en cualquier minuto, siendo algo único y diferente para cada uno. Por mi parte, es en el momento en el que Andy pronuncia “For the first time in this sixty he glimpses what he did…” justo antes de lo que podríamos considerar el estribillo, cuando me sorprendo con el vello erizado y la voz escapando de mi garganta.
“Where Are They Now?” es simplemente magia. Es magia concentrada en una composición espectacular, excepcional, casi inalcanzable. Aunque no voy a revelar detalles sobre ellas, debo hacer hincapié en que las letras de este disco son particularmente importantes para disfrutar de su experiencia completa.
Unos sintetizadores, teclados y el saxo de Theo Travis nos dan la bienvenida a “Paroxetine 20mg”, el segundo tema de este disco. Una de las canciones cortas del disco, con solo siete minutos y cuarenta segundos de duración. Un tema en el que Theo y Andy se hacen protagonistas a la voz y el saxo respectivamente, ofreciendo un tema con un alto contenido ambiental, como es habitual en The Tangent, y un estribillo fácil de reconocer y de seguir, contrastando con la estructura general del tema, bastante compleja, y haciendo de la canción una pieza aún más atractiva.
La abundancia de los detalles resulta abrumadora, pero no podemos olvidarnos de destacar el trabajo en los arreglos y los “synths”, que le da cierto aire psicodélico-espacial al tema, con voces alteradas y distintas tesituras a lo largo del tema. A pesar de que, evidentemente, más de siete minutos y medio no son pocos para una canción, The Tangent consiguen variedad, ritmo y fluidez suficiente en esta canción para mantener la oyente atento, expectante. La paroxetina es un agente antidepresivo y fiel a su nombre, el tema transmite buenas vibraciones y una dosis apropiada de energía. Gran trabajo de Magnus Ostgren a la batería.
Es sorprendente que tras los drásticos cambios de formación que ha sufrido el grupo (salieron de la banda Jaime Salazar y Jonas Reingold abandonan el grupo por diferencias musicales, Jakko Jakszyk pasa a ser un colaborador puntual y Tillison suple su salida incorporando a la formación sueca Beardfish al completo) podamos estar disfrutando de un disco de la factura que presenta este “Down And Out In Paris And London”. Después de una buena dosis de Paroxetina, las envolventes melodías del grupo nos guían hasta un nuevo coloso, que en esta ocasión se dibuja sobre once minutos y medio largos de magia…perdón, de música. Bajo el nombre de “Perdu Dan Paris” se esconde uno de los temas más íntimos del grupo en este plástico. El inicio relajado y casi ambiental del tema nos atrapa en unas suaves redes cuando la voz de Andy hace presencia.
¿Cómo se describe la sutileza?¿Es posible explicar lo que se siente al contemplar un atardecer, sentando en una terraza de una hermosa ciudad que no es la tuya, sin ninguna otra preocupación que el café que tienes en las manos? Cerrar los ojos es suficiente para contemplar esta imagen y otras muchas de igual calibre cuando escuchas este tema. Cada detalle esta perfectamente cuidado, cada elemento en su sitio, funcionando como un engranaje de terciopelo, que funciona sin brusquedades, sin sobresaltos.
“Perdu Dan Paris” cuenta con el que para mí es, posiblemente, lo mejor estribillo del disco y con una sección instrumental sencillamente impecable. Guy Maning, Andy Tillision y Rikard Sjoblom se alzan como los grandes triunfadores en este tema. Tras un intimo vistazo a París, la formación nos ofrece un viaje por distintas carreteras en “The Company Car”. Un viaje que comienza suave, de la mano de una ligera melodía y las apariciones del saxo, sutiles pero determinantes. Theo Travis se alza protagonista en buena parte de este tema de aproximadamente seis minutos y medio, ganando protagonismo a medida que avanza la composición, siempre como un elemento sutil bajo la voz de Tillison. A pesar del gran trabajo de guitarras y bajo, y de la excelente labor de la batería, desde mi punto de vista es el saxo el instrumento más importante en “The Company Car”.
De uno de los temas más relajados del disco, pasa a convertirse en uno de los más cañeros gracias a un crescendo inesperado y realmente genial, que rompe en un puente perfectamente llevado por Andy y desemboca en una sección instrumental marca de la casa. A pesar de lo bien llevado que está el tema y del buen uso del saxo (un instrumento por el que siento una innegable predilección) “The Company Car” es el corte que menos me gusta en este redondo.
“Everyman’s Forgotten Monday” se presenta más oscuro, con unos arreglos casi espaciales y un gran uso de los “synths” y los teclados. Misterioso, casi místico, los casi seis minutos y medio de este tema nos envuelven poco a poco, guiándonos hasta un estribillo lleno de feeling y energía, en un tema que en ningún momento abandona el crescendo y que nos ofrece una de las secciones instrumentales más interesantes del disco, perfecta para el directo y soberbia en el estudio. Un aplauso para las guitarras de David Zackrisson por favor.
“The Canterbury Sequence Volume 2 – Ethanol Hat Nail” es el coloso encargado de cerrar el disco, con casi trece minutos de duración. La verdad es que no sabría decir si e gusta más o menos que los otros dos temas largos del disco. En realidad no sabría elegir un favorito en este disco. Se que “The Company Car” me gusta menos, pero entre los otros cinco las diferencias son tan pequeñas, la calidad está tan igualada, que resulta un calvario quedarse solo con uno. Todo depende de momentos, de sentimientos puntuales. En este último corte, con su inicio misterioso y casi diría “juguetón”, en un tempo mucho más rápido de lo que parece en primera instancia, con unos curiosos arreglos iniciales y una melodía que fluye, casi oculta, desapercibida hasta el momento exacto, cada detalle esta pensado para terminar el disco igual que comenzó: con una pequeña obra de arte.
Excelente labor a los teclados, el saxo, las guitarras y la voz. Tengo la sensación de repetirme, pero por mucho que piense, escriba, borre, vuelva a escribir y haga el pino, no me salen más que halagos. Me encanta este grupo, me encanta su música, me dice mucho más que la de la mayoría de grupos que pululan por ahí, incluso dentro de este estilo que tanto me apasiona. Debe ser por ese curioso matrimonio que tienen entre lo clásico, estilo sixties-seventies y lo más actual.
“Down And Out In Paris And London” es un nuevo gran disco en la carrera de The Tangent. Un nuevo acierto. No tan genial y sorprendente como “Not As Good As The Book”, al menos para mi, pero si lo suficiente como para estar entre mis favoritos de este año que ya se acaba.
Puntuación: 9,7
Y como no podía faltar en el blog cabeza, también está el comentario de nuestro eterno columnista involuntario de siempre, que nos dice de este disco lo siguiente:
Tal parece que Andy Tillison no se conforma con ser un cercano amigo de Roine Stolt, sino que también se propone compartir con él el cetro del “mayor trabajólico del progresivo actual”: así parece demostrarlo con su manera tan consistente e imparable de dirigir la trayectoria fonográfica de THE TANGENT, siendo así que el nuevo disco “Down And Out In Paris And London” acaba de salir al mercado casi al unísono de “Jitters”, disco de retorno de PARALLEL OR 90 DEGREES que ya fue reseñado por quien escribe en un momento anterior. A diferencia de este último THE TANGENT es un ensamble que se siente cómodo transitando por las composiciones de largo aliento dentro de un esquema progresivo retro. Ostentando influencias de YES, ELP y el VAN DER GRAAF GENERATOR 75-76 que se filtran a través de esquemas sonoros afines a los de THE FLOWER KINGS (etapa hasta “Flower Power”) y el SPOCK’S BEARD con Neal Morse, THE TANGENT vuelve a regalarnos una obra musical efectiva y atractiva. De este modo, se recupera la grandeza de “A Place In The Queue” después de los peligros de saturación con loso que había coqueteado el doble CD “Not As Good As The Book” – tras un puñado de primeras escuchas de “Down And Out In Paris And London”, siento que recupero mi motivación original por THE TANGENT. Con una formación renovada y totalmente británica, uno de los nuevos integrantes es el veterano baterista Paul Burgess (quien ha pasado por las filas de Camel, Jethro Tull, 10cc, entre otros).
‘Where Are They Now?’ ocupa los primeros casi 20 minutos del disco, y claro está, se trata de una suite progresiva épica a la vieja usanza, con pretensiones artísticas inocultadas que se muestran a lo largo de su secuencia de motivos varios y utilización de compases poco habituales. Tras un inicio calmo marcado por punteos adustos a lo Gilmour, la pieza no tarda en desarrollar una fastuosidad donde confluyen las herencias del YES de “Relayer” y el ELP estándar. La primera sección cantada tiene un predominio del compás 5/4, mientras que el entusiasta jam que comienza a partir del séptimo minuto incorpora algunas cadencias de tipo Canterbury (especialmente en ese vibrato que se pone a algunos sonidos de órgano) aunque sin perder el núcleo sinfónico, e incluso utilizando unos frenéticos trucos space-rock sobre el camino. Pasada la barrera de los 10’30”, nos topamos con una sección lenta dirigida por el canto y el piano, desde la cual se reelabora el motivo inicial y se transporta hacia nuevos caminos de desarrollo melódico trazados con fluidez y soltura. La parte final, ceremoniosa y potente, incluye un excelente solo de saxo a cargo del siempre infalible y refinado Theo Travis: no me hubiese importado que se recortara un poco el solo de guitarra con tal de dar unos segundos más a dicho solo, pero por lo demás, no tengo nada que objetar a este final tan poderoso. ‘Paroxetine 20 mg’ elaborar una confluencia entre contundentes sonoridades rockeras y cadencias rítmicas de corte R’n’B. A pesar del uso recurrente de su compás en 4/4, hay suficientes variantes de melodía, ambientación y atmósfera como para mantener el interés a un nivel tremendamente interesante. ‘Perdu Dans Paris’ es otro tema extenso, esta vez durando 11 ¾ minutos. A pesar de que el canto (habitual) de Tillison tiene un aura un tanto distante, influido por el estilo de Hammill en su obra solista, la canción porta una melancolía descorazonada, incluso en aquellos pasajes del interludio en los que la pieza adquiere un incremento en su compás. El refinado estilo de Jakko M. Jakszyk genera texturas cautivantes a través de los solos de guitarra. Se trata, a fin de cuentas, de un tema muy bello, emotivo a la vez que bien articulado. ‘The Company Car’ tiene un comienzo un poco engañoso con su esquema de balada sami-acústica, pero a medida que se van introduciendo las psicodélicas líneas de sintetizador y el canto se hace gradualmente más rasposo, se cimienta la vía para un nuevo despliegue sofisticado de claro talante progresivo. Yo percibo que el fade-out pudo llegar un poco más tarde, como para dar más espacio a los últimos solos de sinte y de saxo.
El setlist que contiene 6 temas corresponde a la edición especial del disco, pues su repertorio “oficial” solo debe constar de 5 temas. El bonus track no aparece al final sino en penúltimo lugar – me refiero a ‘Everyman’s Forgotten Monday’, una power-ballad progresiva de claros tintes floydianos, mezclando ambientaciones del “Wish You Were Here” y del “A Momentary Lapse Of Reason”. El disco culmina con ‘The Canterbury Sequence Volume 2: Ethanol Hat Nail’, un tema conceptualmente ligado a otro que formaba parte del ya lejano disco debut “The Music That Died Alone”. Bueno, y como indica el título, esta pieza es un tributo a esa vertiente tan especial de la añeja tradición progresiva: los ágiles sabores jazzeros abundan, así como los adornos juguetones y los sonidos “anticuados” de órgano y piano eléctrico, creando así un homenaje múltiple a HAFIELD & THE NORTH, CARAVAN, MATCHING MOLE y NATIONAL HEALTH, además de ocasionales efectos cósmicos de sintetizador que nos remiten a GONG. Atención a la secuencia densa y pesada que comienza a eso del minuto 8, ¡¡formidable!! Este tema está muy bien armado, no pierde el foco a través de su diversidad interna, y supone un redondeo bien definido de la ideología ecléctica que preconiza THE TANGENT. Como balance general, “Down And Out In Paris And London” resulta a mis oídos un disco recomendable para los obsesivos melómanos progresivos de siempre.
Y por alguna razón bastante gente escribió mucho sobre este disco, así que traemos algunos comentarios, y dejo en claro que el álbum me gusta mucho pero no creo que sea la obra cumbre de la agrupación, pero por algún motivo el disco parece haber tocado la sensibilidad de mucha gente...
Como ya es habitual en cada disco, el cambio de formación no se hace esperar. Tangent son ahora un quinteto con Tillison, Manning, Travis y dos nuevos invitados: Jonathan Barret como bajista fichaje de su anterior grupo Parallel y el veterano Paul Burgess en la batería (Tull, Camel…etc). El estilo de Tillison ya está perfectamente encaminado y aunque es un progresivo multi-funcional con un amplio menú de sabores de los mejores 70´s, nos damos perfecta cuenta como dijo la semana pasada J.J. Iglesias de que esto es un género musical perfectamente consagrado como lo es el Jazz, la clásica, el blues, el rock, o la tradición folk milenaria.
Si modificamos el estilo con la pretensión de “innovar”…sinceramente tendría que nacer un nuevo Frank Zappa o un nuevo Christian Vander o un nuevo Keith Emerson y queridos míos, eso no se prodiga precisamente en la historia. Los que afirman que el rock progresivo clásico ha muerto y que cuatro “advenedizos” post-metálicos han abierto un nuevo camino son unos snobs pretenciosos con discutibles conceptos de música. Dream Theater por poner un ejemplo fácil, pueden haber revolucionado y enriquecido el heavy metal y claro que a los que aquí escribimos nos gustan alguno de sus discos(no todos), pero eso es otro estilo.
El resto de nuevas bandas, lo que hacen en un 99% está inventado y lo más dramático es que es para peor y en la mayoría de los casos, de escasa calidad. Tengo el atrevimiento de decirlo y la necesidad, para evitar que engañen al chaval que acaba de descubrir esta maravillosa música, y sepa qué y cual, es el camino correcto (al menos para mí, ojo!). La base y su legado es estupenda, solo hace falta hacerla bien y enriquecerla no empobrecerla que es lo que quizá con buenas intenciones (no lo dudo) están haciendo algunas páginas de la web, y muchas de sus bandas subdelegadas. Pero no sé si lo hacen por interés o por ignorancia. Efectivamente por educación no voy a nombrarlas.
Expuesto mi manifiesto (ya me vale) es para reivindicar que efectivamente The Tangent no han inventado un nuevo progresivo, para eso habrá que esperar que nazca un nuevo genio y posiblemente cuando lo haga ya estaremos todos criando malvas. Tangent son fieles al estilo y claro que lo han mejorado, posiblemente tocan mucho mejor que algunas leyendas, pero no son de ésa época. Bastante hacen con hacerlo bien. Género ya clásico no moda. Algunos parecen no entenderlo.
El nuevo disco de Tangent posee quizás la mejor suite de inicio de toda su discografía y seré cauto en la afirmación pero “donde están ahora…?” o “Where are They Now” con sus 19 mtos es una de las piezas que no desentonan en nada con épicas pasadas en 40 años de progresivo clásico. Claro que nos es familiar…como no iba a serlo!!...diría yo. Esos sonidos, melodías y vericuetos fantásticos ya los llevamos en la sangre desde que éramos adolescentes y descubrimos esta música. Es como decirnos…Eh!!... es lo que te gusta y sigue vivo!!.
Esta larga pieza tan emocional contrasta con la siguiente: “Paroxetina 20 mg”. La paroxetina es un antidepresivo inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina parecido al prozac y al citalopran: la serotonina es un neurotrasmisor cerebral que controla nuestro estado anímico y causante de las depresiones. Todo química y bastante habitual de joderse en los que no nos gusta la vida y el mundo en que vivimos. Un sinfónico depresivo es lo normal… si no, no eres sinfónico sino un hierbas…un happyflower… o uno del PP que aún es peor. (hoy estoy sembrao). Por fin han descubierto que la depresión es el estado normal del ser humano mínimamente inteligente. La pieza en cuestión es más agresiva y urbana, con su toque funky-soul y doliente melodía, sinte gritón y sucio ambiente por momentos. Yo la encuentro no obstante algo inofensiva y lírica para tratar semejante tema, pero vale como muestra.
Perdu Dans Paris” tiene ese toque nostálgico y tristón de día gris y lluvioso con botella de whysky barato en frio apartamento y chica o señora experta, que te ha mandado a la mierda y por qué será…? El desarrollo musical se anima pero no la alegría. Te jodes.
“The Company Car” es un tema que no dice gran cosa, anodino en The Tangent y algo aburrido. No me extraña pues la primera pieza de este disco ensombrece al resto completamente.
Termina este trabajo con la “Canterbury Sequence Vol 2- Ethanol-Hat -Nail” casi trece minutos que podrían encontrarse en cualquier disco de los National Health época Dave Stewart con Tillison metamorfoseado en él sin complejos de ningún tipo y con órgano y sintes marca registrada incluida.
Si no fuera por el abismo que hay entre el interés de unas piezas con otras, nos encontraríamos con el mejor trabajo hasta la fecha. Pero no es posible. Como digo el listón de “Where Are They Now” es tan alto que tapa la labor del resto.
Ya sabemos que en el universo del rock progresivo, actualmente existen dos frentes o enfoques principales. Por una parte, las bandas que optan por adaptar el estilo a la actualidad musical más rabiosa, y por otra las que se nutren casi en exclusiva de influencias de la era dorada del género en los setenta. The Tangent son un punto y aparte en el progresivo más retro, disciplina tan válida como cualquier otra, pero no especialmente saludable en estos momentos. De hecho son capaces de tratar de tu a tu a los actuales grandes del género, aunque se llamen Porcupine Tree, pero desgraciadamente el muro de los prejuicios ha impedido un apropiado acceso a esta excelente banda. Desde que Andy Tillison tomó el mando absoluto de la nave, es decir, desde que The Tangent dejó de ser un supergrupo, que la cosa ha mejorado de forma rotunda.
Ya se sabe que lo de los supergrupos, por lo general, mucho ruido y pocas nueces, y lo cierto es que cuando apareció aquel tercer trabajo “A Place in the Queue”, Andy Tillison empezó a dar lo mejor de sí mismo y The Tangent crecieron definitivamente como banda. “Down and Out in Paris and London” es el quinto trabajo del grupo e indudablemente uno de los mejores. De hecho se puede decir que está al nivel de “A Place in the Queue” y supera a su predecesor “Not as Good as the Book” o por lo menos obtendrá mayor reconocimiento que éste, demasiado largo para muchos. Desde el extenso tema inicial “Where are they Now?”, Tillison y su banda dejan claro que se encuentran en un momento insuperable de forma, en el que es quizás su álbum más canterburiano y jazzy hasta la fecha.
Sin olvidar las influencias clásicas (Van der Graaf Generator, Genesis, Yes, ELP, King Crimson), el grupo se viste más que nunca de etiqueta en un marcado ejercicio de distinción jazzy, retomando el legado del sonido Canterbury de los Caravan, Hatfield and the North, Matching Mole o incluso Gong. Sin bajar el liston del mencionado tema inicial, “Perdú dans Paris” es pura elegancia vandergraafiana, mientras que el más breve “The Company Car” es otra delicatessen en la que no falta un preciso punto de rabia. Rabia que desatan en la impresionante pieza final “Ethanol Hat Nail (Canterbury Sequence Vol. 2)”, que marca cierto contraste en un álbum especialmente contenido. En la edición especial se incluye un bonus track, “Everyman's Forgotten Monday”, que no está mal y juega bien su papel de tema de regalo.
Retro no es sinónimo de desfasado o caduco, y The Tangent lo demuestran con hechos, en un álbum de rock progresivo de alto standing, de patrones clásicos pero perfectamente vigente. Clase por los cuatro costados en uno de los trabajos infaltables del año. Por cierto, Andy Tillison edita simultaneamente su nuevo álbum con su otra banda, Parallel or 90 Degrees, radicalmente opuesto a este, situándose en la vertiénte del progresivo más actualizado.
Y seguiremos con más The Tangent en esta semana... agradezcan a Lisandro.
Lista de Temas:
1.- Where Are They Now?
- I Prologue
- II The Losing Game
- III Europe By Ebay
- IV Watershed
- V And The Kids Grow Up
- VI Earnest In The Resthome
- VII Another Earnest, On The Sorpe Dam
- VIII Find God
2.- Paroxetine - 20mg
3.- Perdu Dans Paris
4.- The Company Car
5.- The Canterbury Sequence Volume 2
Alineación:
- Jonathan Barrett / Bajo
- Paul Burgess / Bateria
- Jakko M. Jakszyk / Guitarra
- Guy Manning / Guitarra, Vocal
- Andy Tillison / Guitarra, Teclados, Vocal
- Theo Travis / Flauta, Saxo
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