LightbulbSun nos sumerge en la máquina del tiempo para llevarnos a la década del 90 ir recordar el primer pináculo del post-rock; esa efímera banda que se dio en llamar Bark Psychosis y su gran obra titulada "Hex", con muchos de los ingredientes que luego tomarían bandas como Radiohead, Tortoise, The Mercury Program, Stereolab, Mogwai y similares. Tomando referencias del ambient, de proyectos como Talk Talk, David Sylvian, y en menos medida de A.R. Kane, de Tangerine Dream, de The Blue Nile, ellos desarrollaron las ideas de toda esta gente con éxito y la enriqueceron con gran belleza, creando un disco evocador, cautivador, no demasiado complejo pero elaborado con evidente pasión y cuidado, con una composición que busca la emotividad y aplicando un refinamiento tecnológico con mucha elegancia. Y otro disco que podríamos definir como para amar o para odiar sin términos medios, pero esta vez un poquito diferente a los discos con esta característica que acostumbramos a publicar acá.
Artista: Bark Psychosis
Álbum: Hex
Año: 1994
Género: Post Rock, Experimental
Duración: 51:11
Referencia: Discogs
Nacionalidad: Inglaterra
En 1994 salió el "Hex" de Bark Psychosis y fue a partir de este álbum que el crítico musical Simon Reynolds acuñó el término "post-rock".
Pero no me detengo mucho en comentarios que ya hay muchos que escribieron sobre esto...
Y no les voy a mentir, pero NO SÉ ABSOLUTAMENTE NADA de la banda. Ni integrantes, ni años de actividad, lugar, etc… Pero no importa… El disco que les traigo es excelente, así que haré el intento por escribir algo entendible. Corto, pero bueno, ustedes saben que no es el estilo de este blog poner el link y ya.
Resulta que Bark Psychosis es una banda originaria de Londres, formada allá por 1986. Y es considerada una agrupación pionera dentro de lo que dio llamarse «post-rock».
Desde sus comienzos discográficos con su primer EP «Clawhammer» de 1988, editaron más de 8 singles y EPs hasta llegar a «Hex», su primer álbum completo. La grabación de «Hex» comenzó a fines de 1992, y debido a experiencias de EPs anteriores, gran parte del material fue grabado en la iglesia St. John de Londres, por la acústica del lugar. El sonido de Hex nos remite a bandas como Talk Talk (el hermoso sonido de «Spirit of Eden» y «Laughing Stock»), y en muchas ocasiones me ha hecho acordar a trazos de No-Man.
«Hex» tiene un sonido altamente variado, por momentos es acústico, por momentos es agresivo, pero siempre se mantienen texturas electrónicas, voces suaves, letras bastante extrañas. Y según el lider de la banda, Graham Sutton, «la concepción de música ambiental es la que más le sienta».
En una reseña del disco, en 1994, un periodista hizo alusión al término «post-rock», y en cierta manera lo masificó. Y Bark Psychosis quedó reconocida desde el comienzo como uno de los pilares. Y «Hex» ha mantenido un estatus de culto desde entonces, con buenas ventas y reconocimiento de la crítica.
Lamentablemente, «Hex» es casi el único disco de la banda, sin contar los EP. Sólo se editó otro álbum en 2004, pero el sonido ya no es el mismo. Desde «Hex», Graham Sutton fue inclinándose más al lado bailable-electro, alejándose de la instrumentación ambiental y acústica. Lo que hace de «Hex» un lanzamiento único, a la altura de grandes clásicos, y sin dudas sonando como una influencia para bandas como Mogwai.
The time is dead
Luego de todo lo que dice esta gente que escribe tantas cosas sobre los discos que escuchan, solo te queda prestarle atención (imagino que la mayoría de los que leen esto desconocían esta banda y este disco) y ver de qué lado estás vos: o te gusta o lo odiás.
Y vamos con el último comentario de terceros...
Bark Psychosis y Hex: germen e inspiración del post rock
A pesar de haber sido una banda relativamente efímera y con poco material editado, la importancia de Bark Psychosis fue fundamental para el desarrollo y expansión del lenguaje del rock durante los años 90, una influencia que recaló en bandas como Piano Magic, Hood, Rothko, Labradford, Matmos, Tortoise y muchas otras.
Tres décadas después de su único LP, Hex, su relevancia sigue incólume.
Fue con la aparición de ese disco debut que el periodista británico Simon Reynolds comenzó a utilizar la etiqueta “post-rock”-primero para la reseña en la revista Mojo y luego en un amplio artículo para The Wire– para referirse a una nueva camada de propuestas cuyo decidido afán de riesgo permitió ampliar las fronteras del rock, redimensionándolo a partir de procesos creativos libres de preconceptos y desprovistos de los típicos corsés que han aprisionado tradicionalmente a muchos músicos de rock.
El trabajo de Bark Psychosis fué innovador y revolucionario desde el comienzo, haciendo muy difícil la tarea de definirlo. Una exquisita y esbelta mezcla de atmósferas electrónicas y mutantes ritmos pop, pasajes de corte experimental, lánguidas vocalizaciones, translúcidas guitarras y bases rítmicas multi tímbricas, hicieron de Bark Psychosis una banda única en su estilo, con indudables deudas al sonido de Talk Talk de los discos Spirit of Eden y Laughing Stock.
El origen de Bark Psychosis y el camino hacia Hex
Sin duda, la acuñación del término post-rock, vago y abstracto, fue apropiada.
Bark Psychosis fue formada en 1986 por cuatro adolescentes, Mark Simnott (batería), Graham Sutton (voz principal, guitarra), John Ling (bajo) y Daniel Gish (teclados), cuyas inquietudes iniciales estaban focalizadas en el sonido de Sonic Youth, Swans y Joy Division, influencias que depurarían años más tarde.
Al primer single, Clawhammer (1988) siguieron el magnífico All Different Things (1989) y el sorprendente Nothing Feels (1990), que fue el preámbulo de las posteriores maravillas. Unos meses después editan el EP Manman (1991) continuando su imparable crecimiento, agregando a su paleta el naciente interés de Sutton por el techno y las técnicas del sampling y la programación de teclados (lo que desembocó en su proyecto Boymerang).
La evolución de su propuesta los llevó a editar el monumental single Scum (1992), una contemplativa pieza compuesta por improvisaciones ambientales que fue grabada en vivo en la iglesia de Strafford, Inglaterra.
Hex, primer pináculo del post rock
En el pináculo de su creatividad, y luego de esta espaciada cadena de singles, Bark Psychosis comienza a grabar su primer y muy esperado disco de larga duración, un proceso que se extendería durante un año y que los dejaría financiera y emocionalmente colapsados.
El resultado fue Hex (1994), un disco de grandes proporciones que fue ampliamente aclamado por crítica y público.
El otoñal comienzo con «The Loom«, pone las pautas desde un comienzo. El piano de Gish, el contrabajo de Ling, la voz de Sutton y las cuerdas de The Duke Quartet, conforman una puerta de entrada fenomenal.
Enseguida surge uno de los temas claves, «A Street Scene«, con una batería de sonido ahogado que revienta en un ritmo jazzeado, un bajo que lleva el hilo conductor, la voz sosegada, y la gran trompeta de Del Crabtree.
El final casi en cámara lenta, con una guitarra de cuidados arpegios, nos va hipnotizando
El sonido de la última etapa de Talk Talk orbita en «Absent Friend«, con Matt Simmott muy en línea con el estilo multitímbrico de Lee Harris, Sutton casi susurrando y creando atmósferas con la guitarra.
El vibráfono en el tramo final de Pete Beresford embellece aún más al tema.
«Big Shot» es un tema de espíritu paisajista y si no fuera porque estaba ocurriendo en paralelo, pudiéramos afirmar que hay influencia de Tortoise. Es el puente perfecto para el trío de monumentales piezas finales, todas por encima de los ocho minutos.
«Fingerspit» transcurre con sigilo durante todo su desarrollo, con algunos breves destellos; «Eyes and Smiles» vuelve al espíritu de Laughing Stock con un lento desarrollo que va ganando en densidad, tanto rítmicamente como por la presencia de la trompeta, todo ello envuelto por una guitarra cíclica; y el gran final con los diez planeadores minutos de «Pendulum Man» es sencillamente extraordinario.
Sin embargo, a pesar de la excelente aceptación que tuvo por parte de la crítica, al poco tiempo se disuelven, dando apenas tiempo para la aparición, el mismo año, de dos singles, Blue y A Street Scene.
Dos retrospectivas póstumas, Independency (1994) y Game Over (1997) contienen buena parte de sus singles y colaboraciones, convirtiendo a estos dos discos en trabajos esenciales dentro de su discografía, suplementarios a Hex. (...)
Lo podés escuchar desde acá:
https://open.spotify.com/intl-es/album/7j98uMKCZuBQU1SPcrQAxP
O desde acá:
https://barkpsychosis.bandcamp.com/album/hex
Lista de Temas:
1. The Loom (5:15)
2. A Street Scene (5:35)
3. Absent Friend (8:20)
4. Big Shot (5:20)
5. Fingerspit (8:21)
6. Eyes & Smiles (8:30)
7. Pendulum Man (9:53)
Alineación:
- Graham Sutton / vocals, guitar, piano, Hammond organ, melodica, sampler, programming
- Daniel Gish / piano, keyboards, Hammond organ
- John Ling / bass, sampler, programming, percussion
- Mark Simnett / percussion, drums
With:
Dave Ross / djembe
Neil Aldridge / triangle, programming
Peter Beresford / vibraphone
Phil Brown / flute
Del Crabtree / trumpet
The Duke Quartet:
Louise Fuller / violin
Rick Coster/ violin
John Metcalfe / viola
Ivan McCready / cello



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