Desde España aparece nuevamente Ekzilo, con un disco de este mismo año que es un verdadero bombazo. Ya habíamos presentado su muy buen disco debut homónimo, y acá reinventan su sonido y nos ofrecen casi una hora de un valiente progresivo ecléctico donde combinan con maestría infinidad de estilos junto con muy buenas melodías, y para definirlo lo mejor posible voy a copiar el comentario que leí en la red: "Uno de esos raros álbumes progresivos donde no se trata de presumir, sino de presentarse, por la música, por el sentimiento, por la esencia misma (...). Ekzilo, estos españoles locos, no tocan rock progresivo, lo transportan a su propio huracán cultural, lo transforman en flamenco, le añaden algunos gruñidos de Opeth solo para molestarte y luego te ofrecen una rosa con cariño. Con espinas (...). Sus líneas son vigorosas, enroscadas, de buen gusto y absolutamente capaces de arrancarte la oreja si se le provoca". Y creo que esa es una excelente descripción de lo que se van a encontrar en este super recomendable disco: variedad, valentía, experimentación, inconformismo, y sobretodo muy buena música de cambios permanentes pero al mismo mismo tiempo muy homogéneo, dando un resultado excelente y de excepción. Otro gran disco español de rock progresivo de este mismo año, y otro imperdible del blog cabeza.
Artista: Ekzilo
Álbum: Quantum Phase Transition
Año: 2025
Género: Progresivo ecléctico / Heavy prog
Duración: 54:42
Referencia: Progarchives
Nacionalidad: España
No le demos mucha vuelta al asunto que tenemos el comentario, en primer medida, de nuestro eterno comentarista involuntario de siempre, que nos cuenta lo siguiente sobre este trabajo que ahora presentamos...
Ya está culminando el primer tercio del año 2025 y siguen llegando estupendas novedades desde varios frentes de la escena progresiva internacional; en esta ocasión, nos estamos refiriendo al cuarteto español EKZILO y “Quantum Phase Transition”, su reciente segundo álbum. La actual conformación de EKZILO consta de José Ruiz [guitarras eléctricas y flamenca], Paul Rodríguez [teclados y canto], Ángel Veas [bajo] y Abelix Tudela [batería]: este último es el nuevo integrante de la banda. Ese álbum debut homónimo del año 2020 nos dejó una muy grata impresión en su momento y ahora tenemos a “Quantum Phase Transition” como un manifiesto de confirmación de la creatividad y la agilidad que aporta este grupo a la escena progresiva española del momento. La publicación se dio el último 18 de abril por vía del sello Astronomy Recording Music. Todas las composiciones son de Ruiz mientras que los arreglos son realizados colectivamente. El proceso de mezcla del material aquí contenido fue realizado a dos bandas: por Santi García (Ultramarinos Costa Brava) y Carlos Santos (Sandman Studios). Ulteriormente, la masterización se puso en manos de Víctor García en el primero de los estudios antes mencionados. El arte y diseño gráficos son de la autoría de Iago Méndez. Bueno, repasemos ahora los detalles estrictamente musicales de “Quantum Phase Transition”.
Los primeros 9 minutos y pico del álbum están ocupados por el poderoso tema ‘Patibulum’, el cual parece asentarse en un punto de confluencia entre PENDRAGON, RIVERSIDE y OPETH: de eso se trata, una cruza entre la calidez del neo-prog más gentil y el nervio aguerrido del prog-metal, más algunas trazas de una senda intermedia. La composición misma es bastante sencillo en lo estructural, pero la interacción entre los músicos concreta una sofisticación razonable para el desarrollo temático, cuyo swing se mantiene constante a través de su recorrido integral. El grupo vira de registro con el arribo del segundo tema, el cual se titula ‘La Fábrica De Barro’. Ya desde las primeras instancias se nota que el cuarteto se enrumba por un dinamismo prog-sinfónico muy afín a los CAMEL de la segunda mitad de los 70, y de paso, establece nexos estilísticos con bandas como OMNI y TRICANTROPUS. El vitalismo inherente a la composición es manejado con refinada exquisitez en base al sólido hermanamiento que hay entre el groove armado por la dupla rítmica y las bases armónicas de los teclados; dentro de esta matriz, los sucesivos solos de guitarra y de sintetizador van añadiendo variados recursos de fuerza de carácter. Una hermosa pieza cuya estela es, en parte, perpetuada por la siguiente, que se llama ‘Dunas’. En efecto, el armazón sonoro profundiza su caminata en el esquema de trabajo prog-sinfónico usando esta vez unas vibraciones rítmicas un poco más gráciles, las mismas que coquetean levemente con el jazz-rock. De hecho, este detalle permite al colectivo establecer su estructura comunitaria con una soltura nueva, la misma que se abre a variantes de groove en algunos pasajes estratégicos. En líneas generales, la guitarra tiene un lugar más protagónico dentro del entramado grupal. ‘Brujería’ es el cuarto tema del álbum y su función consiste en recibir los ecos de los dos temas precedentes para crear una arquitectura musical donde se combinen los discursos del prog y del jazz-fusión con raíces aflamencadas. La inclusión de un breve clímax percusivo y de un señorial solo de guitarra flamenca refuerzan solventemente esta estrategia creativa. La sección epilogar redondea la suntuosa faena musical.
‘Evolution’ es la maratón de más de 18 ¾ minutos donde el grupo desarrolla los aspectos más masivamente ambiciosos de su ecléctico enfoque sobre el rock progresivo. Todo empieza con una sección prologar serena y relajada que invita a una espiritualidad contemplativa, siendo así que pronto emerge la faceta más propiamente extrovertida del grupo... y eso incluye algunos gruñidos propios del black metal; mientras tanto, el bloque instrumental se enfoca mayormente en una prolongación de los aires híbridos ya plasmados en los temas #3 y #4, calculando meticulosamente en qué pasajes se ha de realizar alguna que otra avalancha rockera. Hay una aristocrática apoteosis de teclados donde se hermanan el romanticismo refinado del estándar Genesiano y los vuelos cósmicos de talante Floydiano, tras el cual, una figura razonablemente sofisticada de bajo inicia el rumbo de otra sección animada de línea jazz-progresiva. Los sucesivos solos de teclado y guitarra activan eficazmente los índices temáticos con los que se arma el bloque sónico en curso. Dado que aquí se nota que hay un mayor despliegue de musculatura rockera, el terreno está sembrado para que el epílogo elabore recursos de estilizada garra expresiva: la voracidad majestuosa de dicho epílogo transporta al cuarteto a terrenos Yessianos dentro de un clímax contundente. Un viaje por varios lugares con la guía de un mapamundi de sonidos articulados. La miniatura oportunamente titulada ‘Epílogo’ se encarga de cerrar el repertorio con una guitarra solitaria que da rienda a una soltura pastoral marcada por una interesante riqueza de matices. Así fue nuestra experiencia con “Quantum Phase Transition”, el magnífico segundo álbum de EKZILO, un estupendo grupo que establece una transición hacia un área más abarcadora de sus inquietudes progresivamente eclécticas, así como una renovación dentro de sus inquietudes centradas en el refinamiento melódico. Muy recomendable.
Pero mejor, escuchalo...
Otro excelente álbum, ideal para que conozcas, esccuches y disfrutes en el fin de semana... pero tenmos más comentarios.
El disco debut de la banda española Ekzilo (homónimo, de 2020) fue el primer lanzamiento que reseñamos en las redes sociales de ProgJazz. En aquel entonces, José Ruiz nos habló por Facebook, ofreciéndonos una copia antes de su lanzamiento. Nosotros, que recién empezábamos con ProgJazz, estábamos sorprendidos y halagados. Más aún, considerando que el disco era muy bueno y diverso. Por fortuna, luego de cinco años, Ekzilo ha regresado, en gloria y majestad, con su segundo álbum: Quantum Phase Transition.
Editado el 18 de abril de 2025 por Astronomy Recording Music, Quantum Phase Transition presenta una remozada versión de Ekzilo. Esta vez, usando un título en inglés, que hace referencia al concepto físico de «transición de fase cuántica». Como no soy físico, supongo que podemos entender este título como parte de la infinita búsqueda de sonido que hacen (y que logran, de hecho). A ello, se suma una carátula que muestra un diseño moderno, enérgico, y con un universo lleno de luces y sombras.
También se observa el cambio de uno de sus integrantes respecto de su debut, con el ingreso de Abelix Tudela en la batería. Así, el grupo se completa por José Ruiz, en guitarra eléctrica y flamenca, Paula Rodríguez en los teclados y voz, y Ángel Veas en el bajo.
Las composiciones siguen a cargo de José Ruiz, por lo que el eclecticismo del álbum debut se mantiene intacto, aunque en esta ocasión añadiendo nuevos ingredientes estilísticos al disco. Esta diversidad de estilos, que en un disco cualquiera podría resultar incómoda, Ekzilo logra mantenerla ensamblada, fluida y fresca, lo que denota la atención a los detalles que el grupo ha colocado en este trabajo. A ello se suma una producción impecable, y una labor muy minuciosa en cada arreglo instrumental. Probablemente, Quantum Phase Transition sea el resultado de mucho, mucho tiempo de trabajo de Ekzilo, y eso no podemos sino agradecerlo.
Las canciones del álbum
En Quantum Phase Transition, Ekzilo nos ofrece seis piezas, que suman casi 55 minutos. La primera de ellas, Patibulum, presenta un sonido moderno, con elementos estilísticos con influencias de Riverside. La batería ejecuta algunas variaciones que dan dinamismo al sonido, con punzantes golpes de bajo y arreglos más atmosféricos de guitarra y teclado. De hecho, a lo largo de la canción, la guitarra de Ruiz va salpicando acompañamientos y armonías más que riffs o solos desenfrenados, entregando el protagonismo a sus compañeros de equipo. Una pieza equilibrada y suficientemente potente para esperar más de lo que viene.
La voz de Rodríguez se desliza con calidez, hasta el minuto y medio, en que el ánimo cambia brevemente hacia voces desgarradas propias del death metal, y que acerca al grupo a influencias de bandas como Opeth. Un sonido inédito en Ekzilo, y que ya demuestra, por sí mismo, que esta banda no tiene miedo de explorar y ampliar su propuesta. Poco a poco, Patibulum nos sigue ofreciendo cambios de ritmo y melodías, que se desenvuelven con fluidez en cada transición.
La Fábrica de Barro es la segunda pieza. Un instrumental inspirado en melodías españolas (al no ser español, no sabría decir de qué región o de qué época), en el cual la guitarra cobra un mayor protagonismo. Con un ritmo agradable y ágil, moldea un aire propio de los años 70, algo más en la línea de temas de su álbum debut. Le sigue Dunas, otra pista instrumental, de pulso más pausado. Este tema suena en un clave moderna, y con la guitarra eléctrica cobrando mayor protagonismo, con líneas elegantes y sobrias. Uno de los aspectos clave del sonido de José Ruiz es, justamente, su capacidad para guardar para los momentos precisos todo su talento y técnica en la guitarra, lo que realza la expresividad de su interpretación. El acompañamiento instrumental es soberbio, que se enriquece por los diversos sonidos que entregan los teclados de Paula Rodríguez.
El álbum parece cobrar todavía más fuerza con Brujería, otro tema instrumental de marcada inspiración mediterránea. Un obsesivo arpegio muteado de guitarra eléctrica abre paso al resto de los instrumentos, para desenvolver una melodía con influencias andaluzas, especialmente en algunas secciones en 6/8. Hacia la mitad de esta pieza surge un melodioso solo de guitarra, que se transforma en un conjunto de feroces golpes de bajo, brillando aquí la sección rítmica. La tensión comienza a acumularse para desembocar en una hermosa guitarra flamenca, una especialidad de la casa, y que nos recuerda ciertos pasajes de su disco debut. El cierre es un despliegue de energía, digno para una de las pistas más fuertes del álbum.
Sin embargo, esto no es sino el anticipo de algo más grande: Evolution, la primera epopeya de Ekzilo, que bordea los 19 minutos de extensión. Aquí el grupo parece haber vertido todo lo que tenía que decir. El silencio discográfico de cinco años tiene, en esta pieza, su punto culminante, en que Ekzilo despliega todo su arsenal. Rodríguez exprime su registro vocal y los instrumentos tienen sus momentos de brillo individual y en conjunto. A ello se suma una variedad de sonidos amplísima, incluso para el eclecticismo de Ezkilo.
Así, tenemos momentos de rock y de metal (donde regresan los guturales) al inicio, hasta una sección intermedia de mayor calidez, y que abre otra de jazz rock. Desde aquí, su energía se incrementa hacia el final, derrochando fuerza para un cierre arrollador. Una fusión que abraza distintos estilos y épocas, y que probablemente represente el plato fuerte del álbum.
Ekzilo cierra Quantum Phase Transition con Epílogo. Una breve muestra de guitarra eléctrica interpretada en estilo flamenco de menos de dos minutos, y que ofrece un descanso auditivo después de la experiencia de Evolution. Un necesario cierre para un disco que promete destacar durante este 2025.
En definitiva, con Quantum Phase Transition tenemos un álbum audaz, y que no claudica en la búsqueda de sonidos e influencias diversas. Al compararlo con su disco debut, a ratos pareciera que Ekzilo se hubiera reinventado, realmente. Casi como si fuera otra banda. Y si bien esto es parcialmente cierto, el espíritu inquieto de sus composiciones se mantiene intacto. Y eso, precisamente, es lo que parece definir la propuesta de Ekzilo.
Mi recomendación es que no te lo pierdas, vos verás...
Lo podés escuchar desde Spotify:
https://open.spotify.com/intl-es/album/37XlC3k2Uz7kNuCIR1K8qL
O desde Bandcamp:
https://astronomyrecordingmusic.bandcamp.com/album/quantum-phase-transition
Lista de Temas:
1 Patibulum
2 La Fábrica de Barro
3 Dunas
4 Brujería
5 Evolution
6 Epílogo
Alineación:
- Jose Ruiz / electric guitar, flamenco guitar, composition
- Abelix Tudela / drums, arrangements
- Paula Rodríguez / keyboards, vocals, arrangements, production
- Angel Veas / bass, arrangements
Comentarios
Publicar un comentario