El Ministerio de Transporte evalúa un cambio en la modalidad de la tarifa de colectivo lo que incluirá un fuerte incremento en el precio del pasaje. Según trascendió a la prensa el boleto pasaría a costar alrededor de diez u once pesos, un incremento de más del 50 por ciento. En el País de la Felicidad el boleto mínimo pasará a $11 y todo seguirà en suba. La suba del boleto llegaría en medio del incremento del resto de los servicios públicos como el de la luz, con subas de entre el 61 y el 148 por ciento según el nivel de consumo eléctrico; los peajes, que aumentaron hasta 269,2 por ciento para los camiones y 120 por ciento para los autos; y los combustibles, un rubro donde el litro de nafta súper alcanzó los 18 pesos y el de Premium, 21. En cuanto a la tarifa de gas, el Gobierno nacional prevé un nuevo ajuste del 50 por ciento a partir de abril. Y el gobierno porteño también prevé un aumento del subte porteño, cuyo pasaje pasaría de 7,50 a 10.
Esta ilusoria "Máquina De Ser Feliz" que inventò Corporación Cambiemos S.A. y con la que engrupió a prácticamente la mitad del pueblo argentino, al fin cayó ante el pso de la realidad: la crisis creciente, los despidos que se multiplican, la inflación imparable, la inoperancia de los funcionarios (CEOs que eran parte del mejor equipo de los ùltimos 500 años) para con asuntos como incendios o inundaciones, el autoritaritarismo que mete en la hoguera a cualquier opositor, todo eso y miles de otras cosas que el hombre común comprueba día a día en su propia existencia, hacen que se descubra la verdad de esta "La Máquina De Ser Feliz" de Corporación Cambiemos: nunca existió más que en el marketing que tan bien saben manejar los Duràn Barba y Cia.
Encima, la difusión del acuerdo leonino del Grupo Macri por la deuda que tiene con el estado argentino, acuerdo firmado por el propio gobierno macrista en perjuicio del estado cuyos intereses debería defender, saca a la luz del día la matriz de negocios que cimentó la fortuna de los Macri a lo largo de décadas. Los Macri se hicieron ricos estafando al estado, desde la dictadura hasta hoy, sin interrupciones. La novedad de estos últimos 15 meses es que la misma familia atiende a ambos lados del mostrador. Todo ello mientras se acercan las paritarias en baja y otro aumento bestial.
El blindaje mediático puede seguir repiqueteando indefinidamente con la reapertura del Caso Nisman u otras operaciones similares, pero ya no podràn proteger al gobierno, como pretenden, sino le mostrarán a sus receptores, "la gente", que les brindan una fantasía disociada de lo real. Una vez rota, la "Máquina De Ser Feliz" no puede ser reparada porque nunca fue real.
Dicen que las Utopías las imaginan los que piensan en grande, y que el Poder tratará siempre que no se hagan realidad. Hoy en día, embarcados en un proceso político letal para la Nación y para su estructura económica y social, necesitamos como nunca, a miles, cientos de miles que empiecen a soñar con una Utopía que nos hagan soñar con el futuro tantas veces arrebatado. Y que nos impulsen a una imprescindible perseverancia, para triunfar en la lucha por recuperar la felicidad popular que nos robaron.
Quizás sea el momento de plantearnos utopías, de imaginar ideales. Porque las Utopías no son un destino si no una dirección. Por ello necesitamos de menos e ilusorias "Máquinas De Ser Feliz" y más de squellas esperanzadoras Utopías que abrieron las puertas a los mejores momentos del ser humano e inspiraron a toda rebelión a lo dado en la realidad. Sobretodo en un mundo sin espranzas, sin razones, sin sentimientos, donde prima el individualismo y el sálvese quien pueda, donde los estados nacionales han perdido su soberanía con el surgimiento de un paraestado manejado por el capital financiero internacional, donde la insatisfacción y la crisis (tanto económica como de valores) inundan las vidas de los habitantes de todo el mundo.
Por ello, hoy, en Argentina y en el mundo, está de más la realidad y sus ilusorias "Máquinas De Ser Feliz" y lo que hace falta son más Utopías que nos ayuden, de una vez, a cambiar el mundo. Y ya, más que una Utopía, pasa a ser una necesidad si queremos superar la crisis a la que nos ha arrojado el sistema que mercantiliza nuestras ilusiones.
Esta ilusoria "Máquina De Ser Feliz" que inventò Corporación Cambiemos S.A. y con la que engrupió a prácticamente la mitad del pueblo argentino, al fin cayó ante el pso de la realidad: la crisis creciente, los despidos que se multiplican, la inflación imparable, la inoperancia de los funcionarios (CEOs que eran parte del mejor equipo de los ùltimos 500 años) para con asuntos como incendios o inundaciones, el autoritaritarismo que mete en la hoguera a cualquier opositor, todo eso y miles de otras cosas que el hombre común comprueba día a día en su propia existencia, hacen que se descubra la verdad de esta "La Máquina De Ser Feliz" de Corporación Cambiemos: nunca existió más que en el marketing que tan bien saben manejar los Duràn Barba y Cia.
Encima, la difusión del acuerdo leonino del Grupo Macri por la deuda que tiene con el estado argentino, acuerdo firmado por el propio gobierno macrista en perjuicio del estado cuyos intereses debería defender, saca a la luz del día la matriz de negocios que cimentó la fortuna de los Macri a lo largo de décadas. Los Macri se hicieron ricos estafando al estado, desde la dictadura hasta hoy, sin interrupciones. La novedad de estos últimos 15 meses es que la misma familia atiende a ambos lados del mostrador. Todo ello mientras se acercan las paritarias en baja y otro aumento bestial.
El blindaje mediático puede seguir repiqueteando indefinidamente con la reapertura del Caso Nisman u otras operaciones similares, pero ya no podràn proteger al gobierno, como pretenden, sino le mostrarán a sus receptores, "la gente", que les brindan una fantasía disociada de lo real. Una vez rota, la "Máquina De Ser Feliz" no puede ser reparada porque nunca fue real.
Dicen que las Utopías las imaginan los que piensan en grande, y que el Poder tratará siempre que no se hagan realidad. Hoy en día, embarcados en un proceso político letal para la Nación y para su estructura económica y social, necesitamos como nunca, a miles, cientos de miles que empiecen a soñar con una Utopía que nos hagan soñar con el futuro tantas veces arrebatado. Y que nos impulsen a una imprescindible perseverancia, para triunfar en la lucha por recuperar la felicidad popular que nos robaron.
Quizás sea el momento de plantearnos utopías, de imaginar ideales. Porque las Utopías no son un destino si no una dirección. Por ello necesitamos de menos e ilusorias "Máquinas De Ser Feliz" y más de squellas esperanzadoras Utopías que abrieron las puertas a los mejores momentos del ser humano e inspiraron a toda rebelión a lo dado en la realidad. Sobretodo en un mundo sin espranzas, sin razones, sin sentimientos, donde prima el individualismo y el sálvese quien pueda, donde los estados nacionales han perdido su soberanía con el surgimiento de un paraestado manejado por el capital financiero internacional, donde la insatisfacción y la crisis (tanto económica como de valores) inundan las vidas de los habitantes de todo el mundo.
Por ello, hoy, en Argentina y en el mundo, está de más la realidad y sus ilusorias "Máquinas De Ser Feliz" y lo que hace falta son más Utopías que nos ayuden, de una vez, a cambiar el mundo. Y ya, más que una Utopía, pasa a ser una necesidad si queremos superar la crisis a la que nos ha arrojado el sistema que mercantiliza nuestras ilusiones.
A mi ver la victoria electoral no fue nunca "Ganó Macri", sino "Perdió el peronismo".. La nostalgia de un pueblo que estaba cansado de las irregularidades opta por otra poza corrupta pero con otra cara.. Dejo este gran video de este gran autor anti-capitalista: https://www.youtube.com/watch?v=k-8oD9TwpYs&t=1126s
ResponderEliminarGracias por el video de Zizek.
EliminarYo creo que la pregunta básica no es cómo se supera al capitalismo, al macrismo o a cualquier "ismo", sino como creamos verdaderas Utopías que direccionen a las sociedades, lo demás viene en consecuencia.
Y ojo que "crear una Utopía" no es ajeno a tu vida, a lo que construis todos los días, y se empieza por apagar la TV, poner un buen CD y dejar volar la imaginación y el corazón hasta que los pies se despeguen del suelo. Vamos! Práctiquenlo!
Lo del CD es muy utópico en todo su contexto, la gente es tan floja que no se da el lujo de poner un álbum y a estudiarlo a ojos cerrados.. Por eso no se demanda buena música sino ruido simple y aburridor..
Eliminar