Buenos días, mi turno de compartir un tema desde La Barra Beatles y esta vez lo fui a buscar a Salta. Para muchos Eduardo Falú fue el mejor guitarrista argentino, esos rankings en la música suelen ser una farsa pero a veces uno duda y se queda meditando. Mi maestro de guitarra, Walter Malosetti, decía que no se puede tocar de todo, que interpretar bien un género lleva toda la vida, creo que estaba en lo cierto. Vi en vivo a Falú y me quedé sorprendido al verlo cantar mientras con la guitarra rasgueaba, punteaba y hacía dibujos extraordinarios. Esta zamba tiene música suya, una melodía exquisita, melancólica. La letra es, a mi criterio, de uno de los mejores poetas argentinos, de esos que entendió a la perfección el viaje del vino, la sanidad del alcohol que acompaña a la poesía desde tiempos remotos. Hablo de otro salteño, el enorme Jaime Dávalos, uno de esos que sabía ponerle palabras a las cosas más bellas.
Jorge Garacotche (Canturbe)
Qué frase esa genial: "no tengo miedo al invierno con tu recuerdo lleno de sol". O esa otra: "herida la de tu boca que lastima sin dolor".
Cuando yo era adolescente y empezaba a tratar de escribir letras empecé a caer en la cuenta del valor de los poetas, seres descomunales, me di cuenta que la poesía es un país para quedarse pero que es complicado para llegar. Siempre confieso que el rock argentino tiene dos antecedentes que le abonaron el camino lírico, el tango y el folclore, pusieron la vara muy alta y comprometieron a todos a pensar y reflexionar mucho sobre el poder de las palabras.
Otra cosa que siempre noté en esta canción es la relación perfecta entre música, letra y paisaje, hacen un todo que a uno lo subyuga y se deja ir, algo muy difícil de conseguir. Falú y Dávalos nos regalaron obras maravillosas, esta "Tonada del viejo amor" es de 1962 para la historia.
Jorge Garacotche
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