La unión de ese genio italiano que es Fabio Zuffanti (Hostsonaten, Finisterre, Hostsonaten, La Maschera Di Cera) con Stefano Agnini (La Coscienza Di Zeno) junto con un batallón de buenos músicos italianos (algunos que participan en bandas como los mismos La Coscienza Di Zeno, La Maschera Di Cera, La Maschera Di Cera, Hostsonaten, y otros de bandas como Analogy, Il Tempio Delle Clessidre, Eris Pluvia, Saint Just, Latte e Miele o Nickelodeon) dió como resultado un disco genial por los cuatro costados. Un disco que es la unión de lo teatral, de la poesía, de las melodías, de lo clásico, de lo moderno, de las experimentación, todo con muchos climas que vienen y van (a veces tristes y nostálgicos, a veces inquietantes o terroríficos, a veces alegres y cercanos a la música popular italiana, pero siempre emocionante y maravilloso) en un verdadero festín del mejor rock progresivo italiano que se recuerde en mucho tiempo. Como digo en el último párrafo de mi comentario: La Curva Di Lesmo ha establecido un estándar especialmente alto con este debut, han puesto la bara bien alta, tan lleno de intrincados y atrevidos arreglos instrumentales con actuaciones vocales ricas y animadas, recordando lo más grandioso y pomposo del progresivo italiano de todos los tiempos, un disco emocionante y esencial para los fanáticos de estilo, tanto que incluso puede llegar a ser algo así como un clásico moderno. ¿Se lo piensan perder? Y hace rato que le estaba buscando un disco excepcional para dedicárselo a mi amiga Florencia, bueno, aquí está, he dado con lo que buscaba, y hace tiempo que no recomiendo algo con tanto énfasis como lo hago aquí.
Artista: La Curva Di Lesmo
Álbum: La Curva Di Lesmo
Año: 2015
Género: Rock Progresivo Italiano
Duración: 52:03
Nacionalidad: Italia
Ya hemos presentado varias obras de esa especie de Steven Wilson pero italiano que es Fabio Zuffanti, músico genial, sumamente imaginativo e incansable en sus proyectos, con trabajados geniales ya sea en las múltiples bandas en las que participa o en sus proyectos solistas. El primer álbum de La Curva Di Lesmo es una obra maestra del rock progresivo italiano de nuestros días. El objetivo aquí es retroceder en el tiempo cuando PFM, Banco, Le Orme y muchos otros estaban revolucionando la música rock en Italia, y por ello hicieron un álbum sonido cargado con chisporroteantes hechizos de teclado y atrayendo a una multitud de invitados de una variedad de bandas clásicas. Sólo 3 canciones, una de ellas con más de 26 minutos, álbum conceptual, influencias setenteras pero desde una perspectiva moderna, lleno de ritmos electrónicos y voces de invitados desplegando un estilo sinfónico clásico.
Basado en la primera historia de la serie de cómics italianos titulados "Valentina" de Guido Crepax, el dúo tomó elementos de esa historia y los aplicó a la música que sentían estaba en la misma línea atmosférica que Il Balletto di Bronzo, Semiramis y otros exponentes del progresivo italiano en su vertiente más clásica y sinfónico, pero con el agregado de elementos electrónicos. Compuesto por tres pistas que van de ocho a veintiséis minutos, el álbum abarca una aventurera gama de influencias folk, sinfónicas y electrónicas, y está lleno de la deslumbrante teatralidad vocal con sabores clásicos y góticos, de ese al que el rock progresivo italiano ya nos tiene acostumbrados y por lo que se ha ganada su fama a nivel mundial.
Los elementos modernos que se agregan aquí son sumamente entretenidos y le dan mucha profundidad a la producción, además las voces son completamente sensacionales, especialmente la manera en que las voces femeninas lloran desde su canto, aliada con los músicos que hacen un trabajo más que convincente. Un disco denso, nostágico, poético, teatral, muy melódico y profundamente emocional, y que me parece busca nuevos caminos para desplegar ese estilo que en el blog cabezón nos gusta tanto, pero con la mirada puesta en el futuro aunque tengan los pies en el pasado.
Personalmente el disco me encanta, tiene el sonido melódico que Zuffanti logra imprimirle a sus proyectos, esas incursiones a todos los clásicos del progresivo italiano que tanto nos gustan, más pequeñas experimentaciones electrónicas que no hacen más que ampliar el arco iris musical que despliegan estos maestros tanos de la buena música. Imperdible y maravilloso!
Artista: La Curva Di Lesmo
Álbum: La Curva Di Lesmo
Año: 2015
Género: Rock Progresivo Italiano
Duración: 52:03
Nacionalidad: Italia
Ya hemos presentado varias obras de esa especie de Steven Wilson pero italiano que es Fabio Zuffanti, músico genial, sumamente imaginativo e incansable en sus proyectos, con trabajados geniales ya sea en las múltiples bandas en las que participa o en sus proyectos solistas. El primer álbum de La Curva Di Lesmo es una obra maestra del rock progresivo italiano de nuestros días. El objetivo aquí es retroceder en el tiempo cuando PFM, Banco, Le Orme y muchos otros estaban revolucionando la música rock en Italia, y por ello hicieron un álbum sonido cargado con chisporroteantes hechizos de teclado y atrayendo a una multitud de invitados de una variedad de bandas clásicas. Sólo 3 canciones, una de ellas con más de 26 minutos, álbum conceptual, influencias setenteras pero desde una perspectiva moderna, lleno de ritmos electrónicos y voces de invitados desplegando un estilo sinfónico clásico.
Basado en la primera historia de la serie de cómics italianos titulados "Valentina" de Guido Crepax, el dúo tomó elementos de esa historia y los aplicó a la música que sentían estaba en la misma línea atmosférica que Il Balletto di Bronzo, Semiramis y otros exponentes del progresivo italiano en su vertiente más clásica y sinfónico, pero con el agregado de elementos electrónicos. Compuesto por tres pistas que van de ocho a veintiséis minutos, el álbum abarca una aventurera gama de influencias folk, sinfónicas y electrónicas, y está lleno de la deslumbrante teatralidad vocal con sabores clásicos y góticos, de ese al que el rock progresivo italiano ya nos tiene acostumbrados y por lo que se ha ganada su fama a nivel mundial.
Los elementos modernos que se agregan aquí son sumamente entretenidos y le dan mucha profundidad a la producción, además las voces son completamente sensacionales, especialmente la manera en que las voces femeninas lloran desde su canto, aliada con los músicos que hacen un trabajo más que convincente. Un disco denso, nostágico, poético, teatral, muy melódico y profundamente emocional, y que me parece busca nuevos caminos para desplegar ese estilo que en el blog cabezón nos gusta tanto, pero con la mirada puesta en el futuro aunque tengan los pies en el pasado.
Personalmente el disco me encanta, tiene el sonido melódico que Zuffanti logra imprimirle a sus proyectos, esas incursiones a todos los clásicos del progresivo italiano que tanto nos gustan, más pequeñas experimentaciones electrónicas que no hacen más que ampliar el arco iris musical que despliegan estos maestros tanos de la buena música. Imperdible y maravilloso!
Solo tres pistas pero grandes desarrollos donde todo se mezcla, sonidos nuevos y clásicos, músicos actuales con algunas leyendas, creando una mezcla compleja de sonidos y texturas que necesitarán varias escuchas para asimilar, aunque se puede disfrutar desde la primera vez, y eso se los puedo asegurar. El material se basa en un famoso ícono del cómic italiano de los años 60 que era bastante popular en Italia en ese momento.
Comenzando con el tema "La Posa Dei Morti", una canción de apertura desplegando una hermosa femenina junto con los arrolladores sonidos de mellotrón, un ritmo constante de batería y melodías celestiales, "La Posa Dei Morti" sirve como una excelente introducción a las características teatrales que hacen que el rock progresivo italiano sea tan especial (quizás solo comparable con el progresivo francés, y nada mejor que seguir la saga que hace el cabezón Sergio Sir Galahad sobre la versión francesa del progresivo). Ya en esta primera canción tendremos toneladas de giros y vueltas con un montón de instrumentos arrojados al ring, azotados en un frenesí divino, solo para disminuir lentamente y sumergirse en dulzura pastoral en algún momento. las cadenas orquestales del mellotron se alzan alrededor de la voz inquietante, confiada y salvaje de la cantante, captando perfectamente la apasionada y controlada calidad teatral que todos los mejores cantantes de este estilo tienen como sello grabado a fuego. ¡Y el disco recién comienza! Y ya hay de todo, una serie de ondas electrónicas, majestuosos saltos de órgano y ensoñación de Moog, algunas heroicidades de guitarra encendidas, base sólida y mucho compañerismo musical que se nota en todos los instrumentos.
Le sigue el tremendo "L'Isola Delle Lacrime" que aumenta el tiempo de ejecución a 17 minutos. El ritmo va cobrando impulso a medida que las voces se deslizan desplegando toda la riqueza del concepto, mientras los sintetizadores resonantes que corean en el fondo añaden dimensión y extensió, presentando una inserción más delicada de ritmos electrónicos, sintetizadores sofocantes, intervenciones de flauta, teniendo a Max Manfredi de Latte e Miele canturreando junto con el gemido herido de Jenny Sorrenti, gruñendo guitarras pesadas danzando alrededor de violines inquietos y un ritmo inquietante que aumenta la tensión gótica, evocando imágenes que recuerdan a Goblin un tema exuberante, con mucha pasión, estilo, poder y un embriagador desarrollo, que cuando los dos vocalistas se unen al unísono, la música se mueve al territorio de la ópera, con violines sollozando y la suave flauta entre folcklórica y clásica actuando como aglutinador de todos los elementos, mientras el tema se va convirtiendo en un delicioso lamento donde no falta ni las palabras recitadas que aumentan la emoción, ni el infernal coro de Mellotron con efectos de horror tipo Goblin, ni la canción popular italiana con Luca Scherani (Trama, Hostsonaten, Finisterre) haciendo cosas agradables en el acordeón que hace contrastes con las disposiciones más modernas de los elementos electrónicos, conformando un temazo que impulsa la pieza a otro mundo.
Y aún faltan la casi media hora de "Ho Rischiato Di Vivere"!. Un tema colosal, profundamente melancólico, una sinfonía de varias partes que aborda una incursión vocal bastante difícil, con gruñidos, chillidos y aullidos, o con dulzura extrema o lamentos sollozantes. Esta es una ópera moderna que se convierte en un discurso progresivo completamente desarrollado, meciéndose con pasión y determinación incontrolada, un poco más al estilo de La Maschera di Cera, enormemente dramática y cargada de denso poder, oscuridad y esplendor operístico. Un trabajo vocal verdaderamente fabuloso, piano sombrío en todas partes, un violín que llora poderosamente. Con la demencia burlona y diabólica de Claudio Milano (Nichelodeon, Claudio Milano Project) gira alrededor de un Moog en espiral, aplastando baterías desplegadas en una marcha intimidatoria que golpea los sentidos mientras los teclados ronronean seductoramente. El ambiente electrónico se mueve a la deriva al lado de fantasmales llamadas espectrales, los bulliciosos estallidos de la voz de Matteo Merli rugen entre melancólicos lamentos de guitarra acústica, y el clímax de una oscura orquestación sinfónica y furiosas guitarras eléctricas, coro y sintetizador conforman el final apropiado a este épico track de larga duración.
Y para ir cerrando, qué mejor que traerlo a nuestro columnista involuntario de siempre, quien nos da su opinión sobre este discazo:
Cerrando mi comentario, La Curva Di Lesmo ha establecido un estándar especialmente alto con este debut, han puesto la bara bien alta, tan lleno de intrincados y atrevidos arreglos instrumentales con actuaciones vocales ricas y animadas, recordando lo más grandioso y pomposo del progresivo italiano de todos los tiempos, un disco emocionante y esencial para los fanáticos de estilo, tanto que incluso puede llegar a ser algo así como un clásico moderno.
Pueden escuchar y comprar el disco en su espacio de Bandcamp. La verdad, una maravilla de nuestro tiempo.
Me saco el sombrero, y me dispongo a disfrutar otra vez de este trabajo...
Lista de Temas:
01. La Posa Dei Morti - 8:26
02. L'isola Delle Lacrime - 17:14
03. Ho Rischiato Di Vivere - 26:24
I. Ho Rischiato Di Vivere - Parte Prima
II. Ritratto Di Donna In Nero
III. Memoriale
IV. Gargoyle
V. Ho Rischiato Di Vivere - Parte Seconda
Alineación:
- Stefano Agnini / keyboards
- Fabio Zuffanti / bass, effects
With:
Beatrice Antolini: voice (1)
Gabriele Guidi Colombi (La Coscienza Di Zeno): bass (1)
Laura Marsano (La Maschera Di Cera / Zuffanti): acoustic and electric guitar
Andrea Orlando (La Coscienza Di Zeno / Finisterre): drums
Fabio Gremo (Il Tempio Delle Clessidre): classical guitar (2, 3)
Domenico Ingenito (La Coscienza Di Zeno): violin (2)
Loris Lombardo: percussion (2)
Max Manfredi: voice (2)
Edmondo Romano (Eris Pluvia): flutes (2)
Claudio Roncone: voice (2)
Luca Scherani (La Coscienza Di Zeno / Hostsonaten): accordion, strings arrangements (2, 3)
Jenny Sorrenti (Saint Just): voice (2, 3)
Sylvia Trabucco (Hostsonaten): violin (2, 3)
Matteo Merli: voice (3)
Claudio Milano (Nickelodeon): voice (3)
Jutta Nienhaus Taylor (Analogy): recitative (3)
Boris Valle (Finisterre): piano (3)
Comenzando con el tema "La Posa Dei Morti", una canción de apertura desplegando una hermosa femenina junto con los arrolladores sonidos de mellotrón, un ritmo constante de batería y melodías celestiales, "La Posa Dei Morti" sirve como una excelente introducción a las características teatrales que hacen que el rock progresivo italiano sea tan especial (quizás solo comparable con el progresivo francés, y nada mejor que seguir la saga que hace el cabezón Sergio Sir Galahad sobre la versión francesa del progresivo). Ya en esta primera canción tendremos toneladas de giros y vueltas con un montón de instrumentos arrojados al ring, azotados en un frenesí divino, solo para disminuir lentamente y sumergirse en dulzura pastoral en algún momento. las cadenas orquestales del mellotron se alzan alrededor de la voz inquietante, confiada y salvaje de la cantante, captando perfectamente la apasionada y controlada calidad teatral que todos los mejores cantantes de este estilo tienen como sello grabado a fuego. ¡Y el disco recién comienza! Y ya hay de todo, una serie de ondas electrónicas, majestuosos saltos de órgano y ensoñación de Moog, algunas heroicidades de guitarra encendidas, base sólida y mucho compañerismo musical que se nota en todos los instrumentos.
Le sigue el tremendo "L'Isola Delle Lacrime" que aumenta el tiempo de ejecución a 17 minutos. El ritmo va cobrando impulso a medida que las voces se deslizan desplegando toda la riqueza del concepto, mientras los sintetizadores resonantes que corean en el fondo añaden dimensión y extensió, presentando una inserción más delicada de ritmos electrónicos, sintetizadores sofocantes, intervenciones de flauta, teniendo a Max Manfredi de Latte e Miele canturreando junto con el gemido herido de Jenny Sorrenti, gruñendo guitarras pesadas danzando alrededor de violines inquietos y un ritmo inquietante que aumenta la tensión gótica, evocando imágenes que recuerdan a Goblin un tema exuberante, con mucha pasión, estilo, poder y un embriagador desarrollo, que cuando los dos vocalistas se unen al unísono, la música se mueve al territorio de la ópera, con violines sollozando y la suave flauta entre folcklórica y clásica actuando como aglutinador de todos los elementos, mientras el tema se va convirtiendo en un delicioso lamento donde no falta ni las palabras recitadas que aumentan la emoción, ni el infernal coro de Mellotron con efectos de horror tipo Goblin, ni la canción popular italiana con Luca Scherani (Trama, Hostsonaten, Finisterre) haciendo cosas agradables en el acordeón que hace contrastes con las disposiciones más modernas de los elementos electrónicos, conformando un temazo que impulsa la pieza a otro mundo.
Y aún faltan la casi media hora de "Ho Rischiato Di Vivere"!. Un tema colosal, profundamente melancólico, una sinfonía de varias partes que aborda una incursión vocal bastante difícil, con gruñidos, chillidos y aullidos, o con dulzura extrema o lamentos sollozantes. Esta es una ópera moderna que se convierte en un discurso progresivo completamente desarrollado, meciéndose con pasión y determinación incontrolada, un poco más al estilo de La Maschera di Cera, enormemente dramática y cargada de denso poder, oscuridad y esplendor operístico. Un trabajo vocal verdaderamente fabuloso, piano sombrío en todas partes, un violín que llora poderosamente. Con la demencia burlona y diabólica de Claudio Milano (Nichelodeon, Claudio Milano Project) gira alrededor de un Moog en espiral, aplastando baterías desplegadas en una marcha intimidatoria que golpea los sentidos mientras los teclados ronronean seductoramente. El ambiente electrónico se mueve a la deriva al lado de fantasmales llamadas espectrales, los bulliciosos estallidos de la voz de Matteo Merli rugen entre melancólicos lamentos de guitarra acústica, y el clímax de una oscura orquestación sinfónica y furiosas guitarras eléctricas, coro y sintetizador conforman el final apropiado a este épico track de larga duración.
Y para ir cerrando, qué mejor que traerlo a nuestro columnista involuntario de siempre, quien nos da su opinión sobre este discazo:
Hoy presentamos a LA CURVA DI LESMO, un nuevo proyecto progresivo italiano surgido en el seno de la prolífica escena progresiva genovesa, un proyecto donde participa Fabio Zuffanti, el hombre de las mil facetas y de las mil bandas. En este caso, se trata de un ensamble armado bajo el liderazgo dual del mencionado Zuffanti (al bajo y los efectos) y Stefano Agnini, uno de los teclistas de LA COSCIENZA DI ZENO. Creando una línea de trabajo que combina fluidamente el sinfonismo retro con expresiones modernas de la avanzada progresiva de las dos últimas décadas, la dupla de Zuffanti y Agnini se hace acompañar de una miríada de amigos/as y colegas del medio a la hora de concretar el repertorio de este disco homónimo publicado a mediados de octubre pasado. De hecho, la larga lista de figuras invitadas incluye al otro teclista, al bajista, al baterista y al violinista de LA COSCIENZA DI ZENO (Luca Scherani, Gabriele Guidi Colombi, Andrea Orlando y Domenico Ingenito, respectivamente), al bajista de IL TEMPIO DELLE CLESSIDRE que esta vez aporta intervenciones a la guitarra clásica, al inolvidable Boris Valle de FINISTERRE, al flautista de ERIS PULVIA Flavio Romano, a la bella Beatrice Antolini destacando su canto en la primera canción, y al maestro del canto experimental Claudio Milano que se luce como siempre en su peculiar visión artística donde música y teatro se convierten en “una sola cosa”. Agnini escogió el nombre de este proyecto a partir de la primera historieta creada por el maestro del cómic italiano Guido Crepax en torno al personaje de ciencia-ficción Valentina, allá por el año 1965: este personaje surgió inicialmente como prometida de Neutrón y pronto cobró protagonismo propio, asumiendo un rol muy proactivo además de una fuerte carga erótica en medio de un ambiente que oscila entre los futurista y lo surrealista. Nótese que el Sr. Crepax también fue el autor de la portada del primer disco del grupo GARYBALDI “Nuda”.César Inca
Bueno, vayamos ahora a los detalles del repertorio de “La Curva Di Lesmo”. A grandes rasgos, los dueños de este proyecto lo describen como una cruza entre la vieja tradición nacional de los 70’s (con especial énfasis en los legados de IL BALLETTO DI BRONZO, CERVELLO, OPUS AVANTRA y SEMIRAMIS), la línea de cantautor (FABRIZIO D’ANDRÉ) y la avanzada electrónica vintage (citando a bandas olvidadas como SIGNORI DELA GALLASSIA y AUTOMAT): definitivamente, ambos “directores de orquesta” dan rienda suelta a la línea de trabajo retro-progresiva que ya han desarrollado en sus propios grupos aparte. Durando poco menos de 8 ½ minutos, ‘La Posa Dei Morti’ pone en marcha las cosas ostentando inicialmente una languidez reflexiva convenientemente arropada bajo una fastuosidad lírica de la mano de las capas de teclado (mellotrón y órgano); el canto de Beatrice Antolini sirve para reforzar el aura reflexiva del momento. A poco de superada la barrera del segundo minuto y medio, el asunto vira hacia un filudo motif en 5/4 donde no solo sale a relucir una precisa polenta rockera sino también una cierta aureola amenazante. Este interludio no es muy extenso que digamos, pero al haber dejado una huella, el momentáneo regreso al pasaje inicial ya instala la expectativa ante variaciones ulteriores, y de hecho, la ilación de los dos siguientes motivos instrumentales desarrolla un perfil sinfónico ameno y agradable, un poco al modo de una cruza entre PREMIATA FORNERIA MARCONI y CAMEL pero con un talante moderno que ya conocemos en el paradigma de LA MASCHERA DI CERA y los primeros álbumes de FINISTERRE. La suave coda con tarareo y piano eléctrico abre la puerta al arribo de ‘L’Isola Delle Lacrime’, pieza que se extiende por un espacio de 17 ¼ minutos. Su espiritualidad general es ceremoniosa, apoyada en climas grisáceos cuyos recursos centrales están a cargo de los colchones de los sintetizadores y los sobriamente aguerridos riffs de guitarra: en los primeros minutos, se siente un aire de gracilidad electrónica al modo de un krautrock “contaminado” con estilizaciones propias del modelo sinfónico. Para cuando llegamos a la frontera del octavo minuto, nosotros ya hemos disfrutado de una sección marcada por un groove ameno y llamativo y otra signada por un romanticismo cálido, siempre contando con la teatralizada dupla vocal de Jenny Sorrenti y Max Manfredi, con aportes adicionales de Claudio Roncone. Las siguientes secciones de esta suite transitan desde el sinfonismo estandarizado hasta el folk-rock de raíces renacentistas (algo así como un paseo por aromas de la tradición progresiva mediterránea bajo la guía del paradigma Genesiano), aterrizando finalmente sobre un reprise del primer motivo que, al preservar la presencia de las flautas que asumieron un rol importante en la sección de cariz renacentista, resulta enriquecido.
En fin, ‘Ho Rischiato Di Vivere’ es la suite más larga del álbum: durando poco menos de 26 ½ minutos, cierra el disco con un esplendor fastuoso y ambicioso. Las cinco secciones de que consta esta suite se titulan ‘Ho Rischiato Di Vivere - Parte Prima’, ‘ Ritratto Di Donna In Nero’, ‘Memoriale’, ‘Gargoyle’ y ‘Ho Rischiato Di Vivere - Parte Seconda’. Para la ocasión, Claudio Milano (sí, el mismo de NICHELODEON y otros proyectos avant-progresivos radicales) se luce como invitado estrella al canto. Con un ritmo marcial de la batería empieza a instalarse el primer motivo, el mismo que guarda enormes aires de familia con precedentes propuestas de música progresiva de tendencia tenebrista (GOBLIN, MORTE MACABRE, DEVIL DOLL), además del proyecto L’OMBRA DELLA SERA (donde también estuvo involucrado Zuffanti, mira por dónde). El siguiente pasaje alterna momentos de ágil luminosidad con otros en los que se perpetúa el tenebrismo antes mencionado, lo cual repercute eficazmente en que se enfatice la teatralidad: una sonata sobriamente fúnebre de piano y unas flotantes capas de sintetizador acompañan a una recitación seguida de un canto sutilmente torturado. En una tercera instancia nos preparamos para recibir un despliegue de musicalidades aguerridas que se emparentan apropiadamente con los pasajes más robustos de la suite precedente. Los ornamentos provistos por los violines ayudan mucho a recordar el parentesco con el paradigma de los legendarios DEVIL DOLL, y lo mismo sucede con el pasaje inmediatamente posterior, el cual comienza con una base de guitarra acústica para luego ir ascendiendo en un crescendo rockero sumamente imponente en su crepuscular densidad emocional. Aquel ritmo marcial del inicio reaparece brevemente para inaugurar la pauta de los siguientes motivos, los cuales despliegan climas de juguetona neurosis sobre esquemas rítmicos viscerales que son manejados con típica exquisitez progresiva: esto nos recuerda una vez más al modelo de LA MASCHERA DI CERA, y cómo no, también a ciertas estrategias creativas que hemos hallado antes en discos de HÖSTSONATEN, LA COSCIENZA DI ZENO, LE PORTE NON APERTE y NOT A GOOD SIGN. Los últimos minutos de la suite se desarrollan sobre un compás lento que irradia una abrumadora nostalgia, no totalmente exenta de las vibraciones claroscuras y tenebristas que tuvieron un peso tan significativo en las primeras secciones: el llenado contundente de los teclados y el peso de las bases armónicas de la guitarra proporcionan un oportuno despliegue de majestuosa emotividad.
Nos ha gustado mucho lo producido por esta nueva iniciativa italiana: LA CURVA DI LESMO y “la Curva Di Lesmo” son nombres a tener muy en cuenta en el catálogo de una buena fonoteca progresiva actualizada pues su propuesta es manifestación de una curva de sabiduría musical.
Calificación: 8/10
Cerrando mi comentario, La Curva Di Lesmo ha establecido un estándar especialmente alto con este debut, han puesto la bara bien alta, tan lleno de intrincados y atrevidos arreglos instrumentales con actuaciones vocales ricas y animadas, recordando lo más grandioso y pomposo del progresivo italiano de todos los tiempos, un disco emocionante y esencial para los fanáticos de estilo, tanto que incluso puede llegar a ser algo así como un clásico moderno.
Pueden escuchar y comprar el disco en su espacio de Bandcamp. La verdad, una maravilla de nuestro tiempo.
Me saco el sombrero, y me dispongo a disfrutar otra vez de este trabajo...
Lista de Temas:
01. La Posa Dei Morti - 8:26
02. L'isola Delle Lacrime - 17:14
03. Ho Rischiato Di Vivere - 26:24
I. Ho Rischiato Di Vivere - Parte Prima
II. Ritratto Di Donna In Nero
III. Memoriale
IV. Gargoyle
V. Ho Rischiato Di Vivere - Parte Seconda
Alineación:
- Stefano Agnini / keyboards
- Fabio Zuffanti / bass, effects
With:
Beatrice Antolini: voice (1)
Gabriele Guidi Colombi (La Coscienza Di Zeno): bass (1)
Laura Marsano (La Maschera Di Cera / Zuffanti): acoustic and electric guitar
Andrea Orlando (La Coscienza Di Zeno / Finisterre): drums
Fabio Gremo (Il Tempio Delle Clessidre): classical guitar (2, 3)
Domenico Ingenito (La Coscienza Di Zeno): violin (2)
Loris Lombardo: percussion (2)
Max Manfredi: voice (2)
Edmondo Romano (Eris Pluvia): flutes (2)
Claudio Roncone: voice (2)
Luca Scherani (La Coscienza Di Zeno / Hostsonaten): accordion, strings arrangements (2, 3)
Jenny Sorrenti (Saint Just): voice (2, 3)
Sylvia Trabucco (Hostsonaten): violin (2, 3)
Matteo Merli: voice (3)
Claudio Milano (Nickelodeon): voice (3)
Jutta Nienhaus Taylor (Analogy): recitative (3)
Boris Valle (Finisterre): piano (3)
Los zurditos ya tienen su "GUACHITO GIL"
ResponderEliminarNo rompan más las bolas