#Porlalibre 16! A mediados de los 90 un colectivo italiano le da la vuelta a la lógica del derecho de autor y a la de autor mismo (como sujeto de derechos), con la invención de un “nombre” bajo el que “habita” la obra de muchxs. Sobre esto platicamos hoy en el episodio 16 de Porlalibre, su podcast cabezón.
En 1994 un grupo de creadorxs italianxs puso en jaque a las industrias de medios mediante la invención de un autor: Luther Blissett, un ser inexistente que “firmaba” cuanta publicación o performance viniera a la mente de estxs locxs anónimxs, y que llegó hasta los editores de la obesa Mondadori (parte de ella hoy convertida en Random House y por tanto uno de los mayores especuladores del copyright global) evidenciando la lógica mercantil que inspira a la “noble” industria de los libros, así como el culto a la personalidad en que se funda todo marketing cultural.
Parte de lo que hizo posible esta alucinada aventura fue la inexistencia, en la legislación italiana, de lo que en otras partes se entiende como “uso justo” o “fair use” [el link va a un pdf en inglés]: nos dan chance de citar si es poquito, de reproducir si es en baja resolución, de leer si es en clase, de mirar si es fragmentito —y si aguantamos tres anuncios previos—, de acceder como quien mira el partido de la selección desde la banqueta en la tv que la gran tienda de departamentos puso en vitrina para la boquiabierta afición.
Hoy #porlalibre le rinde homenaje a nadie a través de la figura del gran e inexistente Luther B, autor de un célebre libro titulado Q (no le ponemos link porque los muy !"#$%&/=? lo siguen vendiendo) y a sus spinoffs, como el otro colectivo relacionado, Wu Ming (无名), y novísimas experiencias que llegan hasta nuestros días, como el grupo fb “Bots of New York” y las numerosas acciones de hiperliteratura de las que nos habla el blog SUB25 en este post que nos comparte @mazadrian_.
Comentarios
Publicar un comentario