A continuación, un par de notas que no son mías, que ilustran no solamente el espíritu represor y perverso de aquellos que cierran este blog (no se engañen, no es el gordito troll que nos denunció quien es el responsable, él responde a toda una ideologia nefasta que venimos denunciando: el Neoliberalismo, la misma ideología que hoy detenta el poder). Porque además de ser sumamente perversos, son torpes, brutos, incompetentes y cretinos. Y lo peor es que están al mando de éste país.
Hay una máxima según la cual es mucho más difícil conservar el poder que conquistarlo. El ejemplo es, por estas horas, el gobierno de M&M. El dólar se vuelve imparable y consigo se lleva los precios; la reforma de Ganancias resultó un tiro por la culata; el papelón de la paritaria docente obliga al ministro Esteban Bullrich a ratificar la propuesta -luego vetada por el presidente- o a desencadenar un paro nacional de maestros. En el congreso está dependiendo del massismo para ver si avanza o no el DNU sobre coparticipación y la visita de Obama parece transformarse cada vez más en un suplicio porque hay una pregunta elemental que evidentemente no se hicieron ¿Puede dar algún rédito traer al presidente de la potencia que auspició el terrorismo de estado justo cuando se cumplen 40 años del golpe cívico-militar?
Gobernar es un arte complejo y hasta ahora todo indica que M&M y su equipo no están capacitados para esa tarea.
Lamento si a alguien aburro con estas entradas, entenderán que a esta altura me importa un carajo, a horas de que cierren este espacio. Y mientras pienso cómo seguimos (¿piensan que ésto se termina acá?) les comparto alguna interesantísima nota que describe a los tipos que tenemos manejando el timón: malos, tontos y brutos.
Cuando terminen de cerrar el blog, recuerden, duden de toda la información que circula, no sólo en éste gobierno (o des-gobierno), sino de cualquiera. Nunca crean ciegamente, cultiven el espíritu crítico, lean entre líneas y básense más en los hechos que en las palabras.
Y llévense todo lo que puedan del blog que aún está en pie.
Hay una máxima según la cual es mucho más difícil conservar el poder que conquistarlo. El ejemplo es, por estas horas, el gobierno de M&M. El dólar se vuelve imparable y consigo se lleva los precios; la reforma de Ganancias resultó un tiro por la culata; el papelón de la paritaria docente obliga al ministro Esteban Bullrich a ratificar la propuesta -luego vetada por el presidente- o a desencadenar un paro nacional de maestros. En el congreso está dependiendo del massismo para ver si avanza o no el DNU sobre coparticipación y la visita de Obama parece transformarse cada vez más en un suplicio porque hay una pregunta elemental que evidentemente no se hicieron ¿Puede dar algún rédito traer al presidente de la potencia que auspició el terrorismo de estado justo cuando se cumplen 40 años del golpe cívico-militar?
Gobernar es un arte complejo y hasta ahora todo indica que M&M y su equipo no están capacitados para esa tarea.
Lamento si a alguien aburro con estas entradas, entenderán que a esta altura me importa un carajo, a horas de que cierren este espacio. Y mientras pienso cómo seguimos (¿piensan que ésto se termina acá?) les comparto alguna interesantísima nota que describe a los tipos que tenemos manejando el timón: malos, tontos y brutos.
Cuando terminen de cerrar el blog, recuerden, duden de toda la información que circula, no sólo en éste gobierno (o des-gobierno), sino de cualquiera. Nunca crean ciegamente, cultiven el espíritu crítico, lean entre líneas y básense más en los hechos que en las palabras.
Y llévense todo lo que puedan del blog que aún está en pie.
Sobre las implicancias del arreglo con los buitres leíamos ayer en Infobae: "El Congreso probablemente derogará las leyes que impidieron al país poner fin a la disputa legal. Un acuerdo en el litigio permitiría al gobierno de Mauricio Macri acceder al mercado de bonos globales y reactivar la economía sin imponer el tipo de ajuste fuerte que erosionó el poder de otros gobiernos en el pasado, incluso causando su salida antes de término." (las negritas son nuestras)
Paul Singer ¿el piloto del helicóptero?
¿Se entiende no?: la secuencia es 1) el Congreso sí o sí debe derogar la ley cerrojo y la de pago soberano local, 2) si no lo hace no hay acuerdo posible con los buitres, ni posibilidad de salir al mercado de capitales a endeudarse para pagarles, 3) si no solucionamos el diferendo con los buitres, no podremos acceder a los mercados de deuda para "financiar el crecimiento", 4) si no logramos endeudarnos, la economía no se pondrá en marcha, 5) si la economía no arranca, el gobierno se verá forzado a imponer un ajuste salvaje y 6) si lo hace, corre riesgo la continuidad del mandato de Macri.
De donde se seguiría que si uno se opone a derogar las leyes que impiden arreglar con los buitres en los términos propuestos por el gobierno (pagándoles el 75 % de lo que reclaman, de contado y con toma de nueva deuda), estaría siendo poco menos que un golpista, que quiere que Macri se vaya antes.
También sobre las implicancias del arreglo con los fondos buitres, leíamos en El Cronista: "Pese a tomar deuda, las reservas no van a crecer demasiado, porque el financiamiento se usará para pagar vencimientos y para que el nivel de consumo no caiga de forma drástica."
Tomar deuda nueva para pagar deuda vieja y para sustentar un consumo insostenible con los recursos propios, previamente deprimidos por las medidas que tomó el propio gobierno: devaluación, eliminación de retenciones, piso a las paritarias, desempleo disciplinador de los reclamos salariales y tarifazos.
Nada nuevo o que no se haya ensayado antes en el país, y que no haya fracasado estrepitosamente cada vez que se intentó: pocas veces tan cierto aquello de Einstein de que "locura es hacer lo mismo una vez tras otra, y esperar resultados diferentes".
Sin embargo, eso es exactamente lo que están planteando Macri y su gobierno, como única opción para salir del atolladero. Y no parece que tengan disponible a la mano un "Plan B", por si el "A" falla.
Si poner en manos de Paul Singer y los fondos buitres más reacios al acuerdo la llave para el despegue de la economía es -como estrategia negociadora- un completo disparate, como prospecto de horizonte futuro del país y su economía es -lisa y llanamente- para preocuparse.
El gobierno que se autodenominó "la revolución de la alegría" pretende extorsionar al Congreso y al conjunto de la sociedad para que le deje las manos libres para cerrar un acuerdo ruinoso para los intereses del país y que lo endeudará por 20 años o más (además del funesto precedente que sienta para futuras reestructuraciones de deuda).
Y la alternativa que ofrece es un ajuste aun más salvaje, como única salida para volver a crecer: otra idea novedosa.
Espanta comprobar como a menos de tres meses de gobierno y con un formidable respaldo mediático y del poder económico detrás, a Macri y su "mejor equipo de los últimos 50 años" se les quemaron los papeles, y las opciones solo serían taba (arreglo con los buitres, a como dé lugar) o culo: ajuste y helicóptero.
Lo que supone admitir que todos los "regalitos" que hicieron en este tiempo (devaluación, eliminación de retenciones, tarifazo, liberación de controles de capitales, desregulación del mercado financiero, eliminación de la ley de medios) no bastaron para "liberar a las fuerzas productivas" y que la economía despegue.
En todo caso, sirvieron para cagarnos a todos, no resolver ninguno de los problemas del país y por el contrario, empeorarlos y crear otros donde no los había.
Llegamos así al punto en el que nos preguntamos que mete más miedo: si tener un gobierno que tiene el rumbo claro y definido pero que nos lleva directo al iceberg; o uno al que se le perdió la brújula y ni siquiera sabe como evitarlo.
Nota sacada de aquí...
La Cultura es la Sonrisa
Aquí, copio una buena nota publicada en Rosario12 y que tiene algunos conceptos muy interesantes
Derrotar culturalmente al enemigo es la tarea. Los romanos sabían que el triunfo valía si al fin era cultural. Y luego de vencer en el campo de batalla (reemplazado con el tiempo por otros escenarios hasta llegar a las urnas) destruían una parte de la cultura del enemigo y absorbían la otra: dioses, ritos, fiestas. Dicen que la mitología cristiana es un refrito de ritos y leyendas robadas por Roma en su paso imperial. Luego instalaban circos y acequias y esa parte del mundo pasaba a ser también Roma.Javier Chiabrando
El resto de las cosas son herramientas, la más destacable, el dinero. Antes lo fueron las armas. Hasta las enfermedades (peste o influenza) se utilizaron para batir al enemigo. Hoy del poder del dinero se desprende el resto: el poder mediático, institucional, la compra de los Bossio de turno (siempre hay, y siempre son baratos porque se usan y se tiran), y también las moneditas que se usan los funcionarios del gobierno de Mauricio de la Rúa para ser sorprendidos en el supermercado comprando tomates.
La guerra fría no fue un triunfo militar sino un triunfo cultural de los nuevos romanos, los EEUU. El mundo compró ese discurso en oposición al otro, menos colorido, menos fashion, y que, pecado de los pecados, no permitía ser rico. Hasta los muertos de hambre rechazan vivir en un sistema que no te deja ser rico. Para eso los EEUU diseñaron una cultura exportable, apoyada en el cine y la televisión primero y en la era de la hipercomunicación después.
La cultura occidental es la cultura del consumo. Si no se consume a lo pavo, el capitalismo caería. El resto es aleatorio. Quedó demostrado en Italia. Las autoridades debían recibir a una delegación iraní y taparon con sábanas las estatuas en bolas para no herir a los susceptibles visitantes. Los intelectuales europeos se pusieron como locos en lo que consideraron una claudicación de la cultura occidental. Pero los iraníes iban a Italia a invertir una ponchada de plata. La cultura del consumo se impuso a la tradición del arte y la belleza.
El gobierno de muchos globos y poca política de Mauricio de la Rúa tiene un plan para triunfar culturalmente (aunque con estos nunca se sabe si tienen un plan o siguen un protocolo de pavadas que creen simpáticas, como el perro en el sillón, etc.). El plan es mostrarnos un mundo ligero, liviano, lo que en la moda se diría "sobrio casual" y en francés décontracté, donde prevalecen las selfies, las risas y los emoticones. Ríen como si reír estúpidamente fuera un estado natural de los músculos de la cara.
Ríen ellos, sus esposas e hijos (ahora todos funcionarios). Ríen delante del telón para que no veamos los desastres que se esconden detrás: corrupción, papelones, improvisación (el límite de 25 por ciento para las paritarias que luego se transformó en 40 y que al fin no era cierto). Ríen delante del telón para que no sepamos que detrás hay ausencia de liderazgo (no es casual que yo lo llame Mauricio de la Rúa), y caras agrias que contradicen las sonrisas. Caras agrias de susto, de caminar sobre la cornisa, frente a la gente, a la (hasta ahora) indiferencia de los inversores extranjeros, de sus socios que no aceptan frenar la escalada de precios y no liquidan la soja estoqueada.
Esto, sumado al cierre de CCK, el San Martín, radios, centros culturales, orquestas infantiles. Y de postre balear a una murga de pibes, lejos de ser la demostración de su triunfo cultural, es la demostración de su propia derrota, la evidencia de su propio vacío. Es la risa del payaso que se ríe en la mitad del chiste y el público se queda con las ganas de saber si a ellos también les toca un cacho de esa felicidad. Pero no hay que olvidar que todo triunfo y derrota cultural son representativos de grupos de gente. Buena parte de ese público, es decir muchos argentinos, ríe con el payaso sin entender el chiste, ríe porque ríe el payaso. El chiste es lo de menos. Lo importante es reír. Por ahora.
La cultura de la sonrisa es la elegida para alejar los fantasmas del kirchnerismo, que proponía defensa del trabajo nacional, política y mucha gestión. El macrismo ha cambiado esto por selfies sin gestión. Si a cualquier persona le preguntaran qué gestiones de gobierno (me refiero a la que involucra a la gente y a su futuro, no a sacarle impuestos al champán o inaugurar un Coto) llevaron adelante Vidal, Larreta, Mauricio de la Rúa y sus ministros, hablarían de la foto en los supermercados o el perro en el sillón. Igual, a la manera de los romanos, intentarán quedarse con algo de la mística kirchnerista. Pero lo harán mal, poco creíble, forzado, como cuando Mauricio de la Rúa anuncia cosas "para el pueblo y los chicos" y le tiembla la voz como si estuviera aprendiendo a hablar ruso.
Si el triunfo es cultural, el ganador se garantiza la permanencia en el tiempo. El Turco que lo Reparió lo logró por una década. Su proyecto cultural, mitad trivialización y mitad hacerle creer a la gente que el voto cuota era más importante que cualquier otra cosa, le bastó mientras gobernó. De la misma forma habrá triunfado el gobierno de Mauricio de la Rúa si impone que el vacío y las selfies y las sonrisas de los funcionarios, amigos y familiares es lo que está de moda esta temporada. Funcionará, mientras no se corra el telón.
Para imponer una idea cultural a un país, tenés que ser parte de esa cultura o ser capaz de generarla con discursos, relatos, hechos. El peronismo tiene en sus raíces la defensa de la mano de obra nacional. En ese sentido la tenía fácil. El PRO es un misterio.
Cualquier diría, a simple vista, que ellos son así de livianos. Que ríen incluso cuando echan gente, reprimen o cuando meten la pata del nivel de las que metía el Turco que lo Reparió: gaffes, verbos mal conjugados, el papelón de Michetti en el congreso, y una ristra de contradicciones y disparates que en Europa ya lo comparan con Berlusconi y acá lo llaman Mauricio de la Rúa (ese es copyright mío). Pero Berlusconi no canta mal.
Si no son así, la están pensando así. Y así nos las van a vender. Es una jugada inteligente. A la clase media mayoritaria, la que lo votó, le gusta pensar en dirigentes más parecidos al primo cabeza hueca de la familia que a dirigentes entronados en esa permanente mala palabra que es la política. Sino no se hubieran enojado tanto con el tema de las cadenas nacionales. También les gusta sentirse parecido a los millonarios, ser parte de esa cultura, aunque la vean de afuera de la reja del country.
¿Por qué es importante triunfar culturalmente? Para hacer negocios y ganar más dinero. Y acá se cierra el círculo. La herramienta principal pasa a ser el fin último. EEUU nos vende su cultura exportable (no deja de sorprenderme que en la televisión se hable de los espectáculos del entretiempo del súper bowl, al que los más colonizados llaman confianzudamente súper tazón), y alguien factura en algún lugar.
El triunfo final del gobierno de Mauricio de la Rúa apunta a que sus amigos y socios sigan saqueando el país y que mucha gente crea que lo hacen por ellos, la parte blanca y educada del pueblo. Eso y la teoría del derrame. Más tienen, más gastan, más dilapidan, y una parte de ese dinero va a parar al pueblo. Ese es el círculo que se cerraría al triunfar culturalmente.
Pero las culturas mueren, se atrofian, mutan. O, lo que es peor, desfallecen. Se van diluyendo sin gloria, sin honor, sin épica. En ese sentido el peronismo, con todas sus contradicciones, ha sabido sobrevivir incluso a las traiciones. Ha creado una mística que aguanta. Ha muerto varias veces, y ahí está, vivito y coleando. Mientras tanto el esfuerzo de Mauricio de la Rúa por instalar una nueva cultura se seguirá dando en un sonsonete: los peronistas son corruptos, Cristina está loca, etc.
Y olvidan que cada cosa es atribuible al PRO, incluso indexada. El kirchnerismo es mesiánico, pero si desapareciera Macri el PRO se atomizaría. El PRO es corrupto (Niembro, Calcaterra, Caputo), manipula el INDEC, son intolerantes, prepotentes, y apoyan la minería del fucking fracking, y sin cobrarle impuestos. Una joyita que ya asusta a muchos que ayer (¡ayer!) eran socios y alcahuetes.
Pero el gobierno de Mauricio de la Rúa ya triunfó en una parte de esa imposición cultural: demostró que a la gente se la puede adoctrinar con bastante facilidad, y que luego podés hacerle casi cualquier cosa: bajarle los sueldos, venderle cara la comida, y apenas se moverá de su lugar porque está colonizada, ha sido invadida simbólicamente.
Pero la gente también aprende, o se deja colonizar por otro vendedor de baratijas. O quiere volver a vivir como en el pasado. Nunca se sabe. Los triunfos culturales ya no duran siglos como el imperio romano, sino años, o meses, como la moda de los pantalones rotos, y son reemplazados por otras modas venidas de cualquier lugar. Porque la gente es angurrienta y quiere cosas nuevas, como quiere zapatos nuevos cada temporada. Ahí ya no les bastará reírse. O tendrán que reírse el doble, a riesgo de que se les desencaje la mandíbula.
La campaña del miedo
Esto se decía en lo que se llamó "la campaña del miedo". El tema es que quien ahora está siguiendo los pasos de "la campaña del miedo" es el mismo gobierno. Que alguien les avise a los CEOs que sólo era una campaña de los que eran sus opositores! parece que se lo creyeron.
La resistencia
El gobierno argentino, y lo dijimos nosotros antes de que asuma el gobierno (para los que nos dijeron que predecíamos el futuro, no, no somos Orangel, solamente interpretamos con lupa lo que es evidente) tratará de... ¿gobernar es la palabra? gracias al apoyo de los medios de comunicación y de la Justicia.
Prepara la represión, que será inevitable, se ocultarán conflictos y no tendrán piedad. El miedo será su caballo de batalla (pensar que muchos que los votaron lo hicieron porque proponían alegría).
Toda la maquinaria mediática se pondrá en contra de cualquier intento de resistencia. Y para quienes intenten tratar de polarizar el conflicto diciendo que se refiere a una disputa entre kirchneristas contra el gobierno, no le creas. Organizaciones de base de todo tipo están empezando a organizar lo que será la única manera de salvarnos, luchando por lo nuestro.
Como ejemplo de lo que digo, se empezarán a ver más anuncios como el siguiente...
Y para que algún desprevenido, le doy la mejor sugerencia, para él, para nosotros, para todos: Nunca debemos apoyar a los políticos (sean del partido que sea) que priorizan las relaciones con el sistema financiero o a las corporaciones económicas mundiales por encima de la salud, la educación y el bienestar de su pueblo. Nunca más deberemos apoyar al Neoliberalismo.
Nunca me agradó que se mezcle la política con las cosas que me gustan, ya sea música, fútbol, etc. Lo mismo con este blog, que a partir de las elecciones ya hacía con toda seguridad predicciones a futuro (erradas o no).
ResponderEliminarCibermilitantes hay en todos lados, y que te denuncien y te toquen el lado "ilegal" del blog era algo que iba a pasar ante cualquier herida a las susceptibilidades o creencias ajenas, critiques a este gobierno o al anterior. Sobre todo porque a la gente le gusta dar golpes bajos porque sí, más si no te conocen. Digo, no creeeo que Macri ni sus secuaces persigan un simple blog (ojo, me estoy arriesgando).
Desde que descubrí Cabeza de Moog no paré de descubrir música genial, pero se embarra bastante con la política, ya sea porque uno entra acá para despejarse un poco de eso y otras cosas. Estaría buenísimo que si se sigue esto pudieran hacer un blog completamente abocado a la política y otro también así para la música.
Saludos!
Lucio, no decimos que el gobierno persiga a este insignificante blog, decimos que un hecho de censura y persecusión corresponde a ideologías de derecha y neoliberales, está en su ADN, de su clase dirigente y de quienes los apoyan, en este caso el troll salame que nos denunció. Uno puede estar de acuerdo o no con el gobierno anterior, pero (por más que la prensa concentrada haya querido imponerlo y hasta muchos se lo creyeron) nunca censurarían a nadie, incluso a en su mandato escuché "yegua", "puta", "ladrona", "conchuda" y un sinfín de epítetos, pero no se cerró nada, no se hechó a nadie y no hubo persecución. Uno puede estar de acuerdo o en desacuerdo en muchas cosas, pero la censura no estaba en su ideología. En la derecha neoliberal sí, es parte de su ideología y manera de ver al mundo (entre muchas asquerosidades).
EliminarLo que no te guste que se mezcle la política con la música, ya es tema de cada uno, otros lo agradecen. En mi caso, y ya lo he dicho, absolutamente siempre se mezcló la política con la música, inclusive en los primeros posteos hay muchísimo de política entre la descripción de los discos, y siempre hemos hablado de temas sociales, por ejemplo con el lío mediático de los Fondos Buitres. Y el funcionamiento del blog mismo, participativo, abierto, solidario, es la puesta en práctica de ideas políticas (no partidarias, sino políticas y sociales), así que no podrías disociar al blog de la política y lo social porque también está en su ADN.
Lo que sucedió es que, cuando las papas quemaron, nos pusimos claramente en una vereda, pero fue por desesperación, porque esto es un tema de supervivencia, realmente estoy convencido que el avance del neoliberalismo en las sociedades es suicida, y es literal (la sociedad de consumo se está comiendo al mundo, ecológicamente, socialmente, etc.), así que verdaderamente no me importa si a alguien no le gusta que estéticamente se mezcle el agua y el aceite, solamente utilicé lo que tenía a mano para gritar que vamos hacia el abismo.
Quizás lo veas demasiado tremendista, en 30 años, 20 quizás, hablaremos de ésto si es que podemos. Ojalá pudiese publicar y hablar solamente de música, sería lo que más quiero, pero en estas condiciones me es absolutamente imposible.
Moe (bius), estimado, calmate un poco. Está bien luchar pero no te amargues la vida ni dejes que se te tupan los sesos. Enfermarse hace que no se pueda seguir luchando. Esperá un poco y resucitá en otro blog. Si te callan ganan una batalla. Tranquilidad, paciencia y firmeza. Espero encontrar tu próximo blog......seguro que será tan bueno como este.-
ResponderEliminarJuancito
Juancito, yo no me amargo ni me preocupo, sólo me ocupo.
EliminarMe llamó mucho la atención el escaneo de dos tickets de farmacia, ya que el flutivent X 60 DOSIS tenía un precio de $ 164.28 en noviembre, mientras que el flutivent X 120 DOSIS cuesta $ 335.50 desde el 01/02/2016.
ResponderEliminarLamentablemente el escaneo del ticket de la farmacia no indica la cantidad de dosis del remedio adquirido en cada compra, pero la realidad es que estamos comparando dos cosas incomparables; la primera compra es de un remedio que trae 60 dosis, la segunda es del mismo remedio pero que trae 120 dosis.
Si queremos comparar los $ 335.50 que cuesta el de 120 dosis al día de hoy, lo deberíamos comparar con los % 303.66 que costaba en noviembre. El aumento es
del 10.5% y no del 105% como se insinúa.
O tal vez podríamos comparar los $ 164.28 con los $ 177.05 que cuesta hoy el de 60 dosis. El aumento en este caso es 7.7%.
Buen punto Ignacio! gracias por la aclaración.
EliminarEstoy tan preocupado como vos con este tema.
ResponderEliminarLo que no deja de sorprenderme como la gente lo apoya. Da miedo, verdadero miedo y mucha bronca, porque son mis hermanos.
Apoyen o no, ve viene jodida la cosa, y lo peor es que los que los hayan votado y los que no, los que apoyen o no, la van a ligar igual de feo.
JA! esto es lo que usa cabeza de Xonga en su twitwer para acusarte de golpista a pesar de que comienza con la aclaración de que las notas no son tuyas.
ResponderEliminarCreo que nunca aplique tan bien la palabra pajero para definir a una persona.