Continúa el derrotero de los que venían a cerrar la grieta, la instalan en el interior de cada aula y de cada escuela; y los que no iban a perseguir a nadie por pensar distinto, les piden que digan como piensan, para perseguirlos. Decidido a quebrar el paro docente (y por carácter transitivo, todo reclamo laboral), el gobierno jugó a la dama: Heidi-Forra-Vidal eligió confrontar mano a mano con los gremios docentes, poniendo en juego el capital político de la imagen que ha construido en los medios. La puesta en escena de la "dama buena" amenazada por el ogro sindicalista pretende disimular la apuesta por defender el núcleo duro del programa de Corporación Cambiemos: el retroceso de los salarios, la disminución de la participación de los trabajadores en el reparto de la torta y la precarización laboral como objetivos prioritarios; respecto de los cuáles el gobierno no está dispuesto a retroceder. Puesta a quebrar la huelga, Heidi-Forra-Thatcher-Vidal no vaciló en apelar a p