Los tuvimos a Lopèz Rega en el 75, a Camps o Luciano Benjamin Menendez durante la dictadura. Hoy tenemos un combo entre las políticas de EEUU, los medios, el poder juducial y la mayoría de los políticos. Ayer, el Juez Ramos Padilla desentrañó el más grande combo de Fake News de la historia Argentina, de una gravedad inusitada en la historia de la democracia desde 1983, durante cuatro horas y media el juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, expuso en el Parlamento los alcances de la investigación que está desarrollando sobre lo que definió como una red de espionaje ilegal que cometió delitos durante varios años y que involucra a la justicia y al periodismo. Cómo comenzó y en qué estado está hoy el caso que afecta al Estado de Derecho y a sus principales instituciones. Sus referencias a la prensa y sus relaciones con los servicios de inteligencia. Qué rol cumplían los medios en el proceso de ilícitos de esa organización. Todo eso te lo pueden informar los medios alternativos, porque el apagón informativo en los medios es monstruoso.
Ayer el Juez Ramos Padilla expuso en el Congreso de la Nación (en el marco de la investigación por extorsión y espionaje ilegal que involucra al detenido Marcelo D’Alessio y el fiscal Carlos Stornelli) lo que varios sabían: Juez revela trama de espionaje de grandes magnitudes realizada por agencias de EEUU en el país, echando luz sobre la oscuridad de cloacas profundas del aparato estatal, de los medios, del poder económico y de los factores externos que tienen injerencia cada vez más desembozada en nuestros asuntos internos. Y cuando a las cloacas se les levanta la tapa, lo que sale es mucho olor a podredumbre acumulada por años.
Trabajando en absoluta soledad contra todo el aparato de poderes oscuros e intereses inconfesables que nos esquilman el alma a todos los argentinos (a los que lo identifican y a los que no), un juez federal mostró, frente a diputados y diputadas atónitos:
Dicho esto en voz alta y oficialmente en el ámbito de uno de los poderes del estado debiera haber sido un escándalo cubierto por la totalidad de los medios. Podemos observar que no fue así y que tal como en otros tiempos se protege y oculta desde los medios, que son una parte del aparato de persecución y represión, y cercenamoento de la verdad. Justamente lo que denuncia el juez.
Curiosamente, ayer, durante la tarde y noche, C5N lideró el rating de los canales de cable e incluso superando a programas de televisión de aire, y por momentos a todos los medios juntos. La razón es sencilla. Fue el único canal que se ocupó en directo de la transmisión de la investigación del juez Ramos Padilla y el tratamiento de la información que se recibían en la cámara de diputados.
El resto silencio y ausencia, incluso en los medios gráficos de hoy a la mañana salvo Página 12. Ausencia que llamativamente llegó tambíén a legisladores de la oposición que prefirieron estar del lado oculto del oficialismo.
El juez expuso que D´Alessio realiza desde hace tiempo operaciones vinculadas con la actividad de los poderes judiciales, los ministerios públicos, las fuerzas de seguridad, los poderes políticos y los medios de prensa. Detalló el accionar de una red de espionaje político y judicial ilegal de grandes magnitudes. Lo que expuso Ramos Padilla es ni más ni menos que el deterioro del Estado de Derecho, algo que se veía desde hace tiempo en la realidad cotidiana, y por aquí lo hemos dicho varias veces.
Cuando se escriba la historia de estos tiempos tenebrosos, no habrá archivos de nada de lo que Ramos Padilla contó ayer en los medios que callaron, con un silencio estruendoso y espeso, tan espeso como el burdo intento de blindar mediáticamente la realidad: si el periodismo es -dicen- la primera versión de la historia, el periodismo hegemónico de estos tiempos es el primer paso hacia su falsificación, para ocultamiento de la verdad en tiempo presente, y de cara a las generaciones futuras. Pero ya no les resultará tan fácil, porque la contundencia de la investigación del juez (y la torpeza de los titiriteros, como no) develó la trama, los hilos, los personajes, los blancos, las víctimas: todo está allí, expuesto para el que lo quiera ver.
Las revelaciones del juez son un puñetazo en la cara de la estupidez de quienes se reían de las visiones presuntamente conspirativas que enfatizaban sobre la importancia de factores como los medios, la embajada, los servicios de inteligencia o las estrategias de "law fare" en la disputa política. Tanto que en esas cloacas puestas a la luz aparecen como siempre se supuso que eran personajes tenebrosos como Carrió y su corte de bufones, que han construido toda una carrera política a base la infamia y el tráfico de pescado podrido; personajes que "defienden la república", degradando a la democracia.
El juez federal de Dolores detalló que la metodología empleada constaba en la "recopilación de información, la producción de inteligencia y el almacenamiento de datos sensibles de manera paralela a las causas judiciales que se utilizaban para luego llevar a cabo acciones coactivas intimidatorias y extorsivas con la finalidad de influir en causas judiciales". Ramos Padilla no dijo nada nuevo o que no se supiera, pero que ahora adquiere contornos dramáticos revelado públicamente por un juez, en el Congreso de la nación, y con registros fílmicos que quedan como testimonio para cuando se escriba la historia de estos tiempos. Les puso nombres, apellidos, circunstancias de modo, tiempo y lugar, relaciones, hilos y vínculos a ese Estado o para-Estado en las catacumbas que siempre ha existido, pero que desde diciembre del 2015 y con el gobierno de Macri constituye el núcleo central del plan político oficial, al servicio del cual pusieron todo el peso de instituciones que prostituyeron, o terminaron de prostituir: la justicia, los servicios de inteligencia, los vínculos con embajadas extranjeras, el poder mediático concentrado.
No concurrieron a la exposición de Ramos Padilla los legisladores de Corporación Cambiemos. Los legisladores Amarillos anticiparon su ausencia y alegaron que la participación del juez "se usa para generar un show que busca embarrar la cancha. No nos vamos a prestar a la farsa". Sin embargo es imposible para toda persona con dos dedos de frente, sortear el hecho de la corrupción judicial que ha aplicado el gobierno de Corporación Cambiemos para imponer un estado policíaco de corrupción, para proteger los negocios de la camarilla de empresarios y oligarcas a cargo del gobierno nacional y entregar el país a los designios e intereses de los Estados Unidos en la entente entre este país e Inglaterra e Israel.
Argentina hoy está en un nivel de indefension cultural fenomenal. Donde cualquier operación que ingresa al tejido social del país prende. Por eso esto fue un verdadero acto patriota que consistió en desentrañar el más grande combo de Fake News de la historia Argentina. Y recién empieza. Porque más tarde o más temprano buena parte de esa runfla va a pagar.
Ayer el Juez Ramos Padilla expuso en el Congreso de la Nación (en el marco de la investigación por extorsión y espionaje ilegal que involucra al detenido Marcelo D’Alessio y el fiscal Carlos Stornelli) lo que varios sabían: Juez revela trama de espionaje de grandes magnitudes realizada por agencias de EEUU en el país, echando luz sobre la oscuridad de cloacas profundas del aparato estatal, de los medios, del poder económico y de los factores externos que tienen injerencia cada vez más desembozada en nuestros asuntos internos. Y cuando a las cloacas se les levanta la tapa, lo que sale es mucho olor a podredumbre acumulada por años.
Ayer dimos un enorme paso para conocer la verdad. El Juez Ramos Padilla mostró la mayor red de espionaje político de la que tengamos memoria en Democracia.— Eduardo Valdés (@eduardofvaldes) 14 de marzo de 2019
Se trata de una mafia dedicada extorsionar, quebrar, torturar y hasta desaparecer ciudadanos. pic.twitter.com/AWM93Po43J
Trabajando en absoluta soledad contra todo el aparato de poderes oscuros e intereses inconfesables que nos esquilman el alma a todos los argentinos (a los que lo identifican y a los que no), un juez federal mostró, frente a diputados y diputadas atónitos:
- Pruebas sobre la injerencia casi total de los servicios extranjeros y embajadas sobre las decisiones políticas locales.
- Pruebas de operaciones de espionaje a empresarios argentinos para que vendan sus empresas a capitales foráneos.
- Pruebas de la guerra de acción psicológica contra la ciudadanía argentina.
- Pruebas de la sincronicidad político- mediática -judicial para perseguir y hostigar personas a través de organizaciones paraestatales.
- Pruebas que ningún representante del oficialismo pudo escuchar porque no se presentaron en el recinto.
Dicho esto en voz alta y oficialmente en el ámbito de uno de los poderes del estado debiera haber sido un escándalo cubierto por la totalidad de los medios. Podemos observar que no fue así y que tal como en otros tiempos se protege y oculta desde los medios, que son una parte del aparato de persecución y represión, y cercenamoento de la verdad. Justamente lo que denuncia el juez.
Curiosamente, ayer, durante la tarde y noche, C5N lideró el rating de los canales de cable e incluso superando a programas de televisión de aire, y por momentos a todos los medios juntos. La razón es sencilla. Fue el único canal que se ocupó en directo de la transmisión de la investigación del juez Ramos Padilla y el tratamiento de la información que se recibían en la cámara de diputados.
El resto silencio y ausencia, incluso en los medios gráficos de hoy a la mañana salvo Página 12. Ausencia que llamativamente llegó tambíén a legisladores de la oposición que prefirieron estar del lado oculto del oficialismo.
El juez expuso que D´Alessio realiza desde hace tiempo operaciones vinculadas con la actividad de los poderes judiciales, los ministerios públicos, las fuerzas de seguridad, los poderes políticos y los medios de prensa. Detalló el accionar de una red de espionaje político y judicial ilegal de grandes magnitudes. Lo que expuso Ramos Padilla es ni más ni menos que el deterioro del Estado de Derecho, algo que se veía desde hace tiempo en la realidad cotidiana, y por aquí lo hemos dicho varias veces.
Cuando se escriba la historia de estos tiempos tenebrosos, no habrá archivos de nada de lo que Ramos Padilla contó ayer en los medios que callaron, con un silencio estruendoso y espeso, tan espeso como el burdo intento de blindar mediáticamente la realidad: si el periodismo es -dicen- la primera versión de la historia, el periodismo hegemónico de estos tiempos es el primer paso hacia su falsificación, para ocultamiento de la verdad en tiempo presente, y de cara a las generaciones futuras. Pero ya no les resultará tan fácil, porque la contundencia de la investigación del juez (y la torpeza de los titiriteros, como no) develó la trama, los hilos, los personajes, los blancos, las víctimas: todo está allí, expuesto para el que lo quiera ver.
Las revelaciones del juez son un puñetazo en la cara de la estupidez de quienes se reían de las visiones presuntamente conspirativas que enfatizaban sobre la importancia de factores como los medios, la embajada, los servicios de inteligencia o las estrategias de "law fare" en la disputa política. Tanto que en esas cloacas puestas a la luz aparecen como siempre se supuso que eran personajes tenebrosos como Carrió y su corte de bufones, que han construido toda una carrera política a base la infamia y el tráfico de pescado podrido; personajes que "defienden la república", degradando a la democracia.
"El caso puede involucrar al fiscal (Stornelli), aunque sabemos que no es el único sino que hay varios. Involucra a periodistas, y a un juez. Lo que estamos viendo puede perjudicar las relaciones con Estados Unidos, con Venezuela, con Israel y con Uruguay, porque esta organización tuvo incidencia en distintos ámbitos de incumbencia de estos países. (...) Encontramos documentos, legajos de inteligencia, cuadernos con anotaciones de datos sensibles acerca de los hijos, esposas, de los allegados que eran objetivos, elementos de espionaje tales como cámaras ocultas entre llaveros, drones, un arma que llamo la atención de todos".Juez federal Alejo Ramos Padilla
El juez federal de Dolores detalló que la metodología empleada constaba en la "recopilación de información, la producción de inteligencia y el almacenamiento de datos sensibles de manera paralela a las causas judiciales que se utilizaban para luego llevar a cabo acciones coactivas intimidatorias y extorsivas con la finalidad de influir en causas judiciales". Ramos Padilla no dijo nada nuevo o que no se supiera, pero que ahora adquiere contornos dramáticos revelado públicamente por un juez, en el Congreso de la nación, y con registros fílmicos que quedan como testimonio para cuando se escriba la historia de estos tiempos. Les puso nombres, apellidos, circunstancias de modo, tiempo y lugar, relaciones, hilos y vínculos a ese Estado o para-Estado en las catacumbas que siempre ha existido, pero que desde diciembre del 2015 y con el gobierno de Macri constituye el núcleo central del plan político oficial, al servicio del cual pusieron todo el peso de instituciones que prostituyeron, o terminaron de prostituir: la justicia, los servicios de inteligencia, los vínculos con embajadas extranjeras, el poder mediático concentrado.
No concurrieron a la exposición de Ramos Padilla los legisladores de Corporación Cambiemos. Los legisladores Amarillos anticiparon su ausencia y alegaron que la participación del juez "se usa para generar un show que busca embarrar la cancha. No nos vamos a prestar a la farsa". Sin embargo es imposible para toda persona con dos dedos de frente, sortear el hecho de la corrupción judicial que ha aplicado el gobierno de Corporación Cambiemos para imponer un estado policíaco de corrupción, para proteger los negocios de la camarilla de empresarios y oligarcas a cargo del gobierno nacional y entregar el país a los designios e intereses de los Estados Unidos en la entente entre este país e Inglaterra e Israel.
Argentina hoy está en un nivel de indefension cultural fenomenal. Donde cualquier operación que ingresa al tejido social del país prende. Por eso esto fue un verdadero acto patriota que consistió en desentrañar el más grande combo de Fake News de la historia Argentina. Y recién empieza. Porque más tarde o más temprano buena parte de esa runfla va a pagar.
una mas (quizá muy grande si) de las miles de vergüenzas y miserias de este gobierno...
ResponderEliminarSi la bomba nuclear fétida no estalla ahora, será dentro de unos meses; pero espero que el tsunami de mierda que provoque se lleve para siempre a la murga neoliberal y deje bien lastimado al multibosta Clarinete.- Si Mauricio Pelotudito Macrimbécil y toda su piara: Demencia Carrió, Peña, Bullshit; Bonadío, Angelici y el resto de mamones terminan mugrientos, será un triunfo para la pobre República.- Y un comienzo...
ResponderEliminar