Y al final, usando una cita de Robert Fripp, el alma mater de este monstruo llamado King Crimson, se llega a la perfecta conclusión de que:
"King Crimson es una manera de hacer las cosas"
El primer disco que escuche de King Crimson fue In The Court Of The Crimson King. Tenía 22 años y recuerdo que lo compre en el Mixup de Insurgentes de la Ciudad de México, donde antes había ya adquirido toda la discografía de Aerosmith (mi primera obsesión). El costo fue de 280 pesos, y lo recuerdo bien porque un año después me compre el Selling England By The Pound por 200 pesitos que me pareció perfecto gracias a un descuento que dicha gema tenía, y también recuerdo que eso paso justo el día de mi cumpleaños. De hecho, desde la compra de esas dos obras maestras, hasta la actualidad, ya es como una regla 'regalarme' un disco cada año el día de mi cumpleaños. Y hasta hoy, para mi es gusto muy divertido y agradable cuando cada vez que llegue el día de muertos sepa que es hora de elegir otra obra de arte y añadirla a mi colección.
Mi primera interacción geográfica con King Crimson comenzó en el mítico tianguis del Chopo de la ciudad de México, conocido por todo Rockero, Darketo y Punkqueto y en general por todo desmadroso que se guste del rock. La interacción fue a través de un librito que adquiri en un puesto de revistas, del maestrazo escritor Mexicano Jose Agustín, maravilloso escritor, con un gran conocimiento de la cultura popular de las épocas, y gran sabio de la cultura del Rock de todas las vertientes que se digan. No dude en adquirir dicho libro ya que tenía antes grandisimas referencias del maestro Agustin de su obra. Y de dicho libro fue mi primera interacción al arte Crimson cuando leí una corta, pero enigmatica, suculenta y personal reseña acerca de In The Court Of The Crimson King; acto que cambio mi manera de sentir un disco sin antes escucharlo, al mismo tiempo que miraba con pasmosidad, intriga y elocuencia la mítica arte de portada de grupo que venía siendo como la prueba mas fidedigna de lo que el maestro apuntaba. Una música esquizoide, abrupta y desafiante.
A decir verdad, hay un cierto grado de satisfacción por aquella primera impresión y audición del elepé. Tengo que decir redundante, que antes de que sucedieran estos hechos, mi oído ya gozaba de cierto entrenamiento sensorial para garantizar la comprensión musical de variados estilos musicales. Desde la sicodelia y rock de costa este a oeste estadounidense, hasta toda la ola inglesa del rock que conquistó america. Así mismo sospecho que ni entrenamiento más adecuado para comprender un primer álbum de King Crimson, fue la comprension dominada de escuchar las largas e íntimas sesiones de improvisaciones surrealistas de los Grateful Dead que se unía junto a la parte más experimental y sinfónica de los iconos The Moody Blues. Esta última parte no deja de ser la más 'cercana' al propio estilo musical Crimsoniano cuando la crítica de la época decía que eran una especie de Moody Blues. Desde luego que dicha propuesta estaba aún más enriquecida dentro de un concepto musical más amplio que King Crimson implantó.
No entrando tanto en detalles de este tipo, omito entablar una relación con la música y posición social dentro de la época, ya que servirá para una reseña del mismo Lp que prefiero dejar para una reseña ya más entrada en dichas cuestiones. Que sea entonces está, una simple experiencia acerca de mi primer acercamiento a este maravilloso mundo crimsoniano.
Y continúo redactando una anécdota por igual personal que incluí a la hora de mencionar a mis olvidados Aerosmith. Porque bien recuerdo que en ese momento del pasado, mi fanatismo por dicha banda se extendio irracionalmente cuando alguna vez le dije a una chica con la que hablaba acerca de mi amor por Aerosmith: "yo podría morir en paz" cuando asista a un concierto de Aerosmith. Porque ese era mi mayor sueño musical de la época. Y dicha invocación se presento aquel 7 de abril cuando tuve la posibilidad de asistir al recital de Aerosmith en el Foro Sol de la Ciudad de México, y cuales fueron mis impresiones de mirar a todo el público y caer en la cuenta de que no estaba nada solo en mi amor por Aerosmith y mirar que el recinto estaba cubierto en un 85 o 90 % de su capacidad. Era un chico soñador e idealista que hasta ese momento se sentía como 'el mayor fanático de Aerosmith del mundo'. Y sentí un poco de envidia al saber que miles eran igual o mas fanáticos que yo. Inclusive de mirar que los fans de filas a metros de distancia de Steven Tyler y compañía que gozaban de un privilegio muy mayor al mio.
Sin embargo, esta vez es diferente. Ya sé que no soy el mayor fanático de King Crimson del mundo, pero King Crimson me enseñó la afición y disciplina de ser un investigador y buen melómano. Quiero decir que a partir de su segundo elepé, In The Wake Of Poseidon yo me convertí a las filas de los fans acérrimos al indagar y buscar todo tipo de información, datos, detalles, nombres, fechas, personajes, de todo lo relacionado al grupo, devore numerosas biografías y me envolví del misticismo y magia que causa el enigma King Crimson. Lo que más me gustó y disfrute, es aquella disciplina y cordura de saber lo que decían en las biografías acerca de los mejores discos del grupo y no 'aventarme' a escucharlos de una vez por todas. Les comparto a todos que yo escuche la discografía de King Crimson en orden y despacio. Mi ímpetu investigador me hacia recopilar toda la información que fuese posible, todo comentario y reseña del cada álbum para después, ahora si, sentarme con la emoción, enigma y ansia ya recopilada por corraborar e imprimir mi propia experiencia de la audición de cada uno de sus discos. Y asi fue como lo hice en cada una de sus gemas.
Me parecía cada vez más intelectual y deliciosos, los conceptos que King Crimson metía en su arte y estilo, y a su vez me impregnaban a mi de cierto grado de inteligencia y altivez por degustar y aprender de conceptos así de cerebrales. Y sin mencionar lo que padecía y sentía de escuchar aquellos asombrosos musicos y al desafío al que me llevaban en cada escucha y sesión y descubrir el más mínimo detalle de cada sonido emanando de los instrumentos. A decir verdad siempre me pareció King Crimson un desafío que todavía hoy lo siento como en aquella época. Pienso que King Crimson me hizo místico y enigmático. Con Crimson termine de desarrollar mi oído y definió el camino que seguí y sigo de mis gustos musicales. Es cierto que disfruto y gusto de música de muchos más estilos, pero King Crimson me definio interior y exteriormente. Me dio una personalidad musical como no me la dieron Aerosmith, The Beatles, o la sicodelia ni el Rock de muchas grandes bandas que devoraba en aquellos años. Cuántas camisas ya me acabe de King Crimson Jajajaja.
Es muy cierto y una realidad de que su música y conceptos me dieron un grado intelectual para comprender todo lo que he descubierto como amante del Rock Progresivo y me prepararon para ese maravilloso universo.
Ya no podría decir que 'ya puedo morir en paz' despues del viernes, pero si existe una mirada de redención en mi por el hecho de que siempre imaginaba este momento en mi cabeza y lo proyectaba en un lugar así de cerrado e íntimo como lo es el Teatro Metropolitan. Me imaginaba justo así con esa mirada de euforia y a la vez serena y redenciado musicalmente. Me imaginaba no en primera fila, pero si a solo unas cuantas de la primera justo como lo marcan ahora mis boletos.
No puede ser mejor escuchar este recital a estas alturas de mi vida, porque ahora comprendo y vuelvo a comprender que aquello que siempre se desea con toda la fuerza de tu interior, siempre se ha de desarrollar y se nos presentara. No es algo relacionado con el destino ni con el karma, sino algo aún mayor donde el universo y la fuerza del pensamiento interactúan y hacen que dicho deseo se haga una realidad. ¡!Simplemente es solo la necesidad de ese deseo lo que hace que las cosas sucedan!! No hay otra explicación. Esto parece muy simple, pero la fuerza del pensamiento es lo que guía muchas veces nuestra existencia.
Lo que haré después de aquel viernes, es seguir viviendo intensamente ya con otra experiencia así de personal como la que viviré y que me llevaré y atesoraré por siempre hasta que me llegue mi hora de partir. No se si tendría que añadir algo más, pero creo que dije lo que quería decir. Ohh, y tambien avisarles que guardaré recuerdos y anécdotas para incluirlas en esta casa a la que estoy invitando del Blog Cabezon. Otro de mis ejemplo y ejercicios de que un pensamiento fuerte hace que las cosas sucedan: ¡siempre quise un espacio como este para compartir mis gustos musicales y apuntes descabellados! Así que le estaré de por vida agradecido al blog por regalarme este espacio para expresar tanta subjetividad como lo he hecho ahora. ¡Muchas gracias! En especial a mi ahora amigo de la distancia Moebius... alias Vampiro... de nombre...no no, eso no, por respeto a él omitiré dar su nombre. Pero ¡Gracias amigo!
No olviden que nos gustan sus comentarios y que nos gusta compartir, así que los ánimo enardecido a qué compartan y comenten.
Y si hay alguno de entre toda la comunidad cabezona del mundo que seguirá el mismo trayecto que yo al Teatro Metropolitan pasado mañana, les deseo la mejor de las experiencias y el mejor de los recuerdos por su música favorita y por su persona.
El cabezón Sergio...
(Sir Galahad)
In the Court fue tambien mi introduccion al rock progresivo, apenas con 14 años. Cientos de albumes despues nadie los ha igualado, ni a In the Court ni a Lizard.
ResponderEliminarMe encanta Lizart! Y realmente no habrá otra banda como el Rey Carmesí. Estoy de acuerdo!
ResponderEliminarSaludos?!
Sin duda Crimson altero la actividad neuronal de unos cuantos.
ResponderEliminarParticularmente el primer disco que llego a mis manos fue "Red", automáticamente se transformo en mi banda favorita. Lamentablemente las bandas de la edad de oro del progresivo jamas serán igualadas y mucho menos superadas.
Buenísimo el blog cabezón reciclado!!
Es como cuando te pasan la cero, el pelo después sale con mas fuerza.
Vaya que caíste en el hechizo Crimsoniano con semejante disco! Vaya manera de iniciarse!
ResponderEliminarMi actividad neuronal comienza mañana por la noche, y estate atento que estaré subiendo imágenes en nuestro Facebook!
Tenés razón, una época jamás igualada, pero mira que hay grandisimas bandas desde hace 25 años que hacen un Prog elevadísimo rememorando lo que alguna vez fue la época dorada del mismo.
Jajajaja! Buscamos darle estética al blog Cabezon para darle otra experiencia a ustedes y arranquemos con más fuerza cuasi cabello rapado!
Que bueno que te guste!
Saludos!
Obviamente que hay bandas que son dignos hijos de los viejos dinosaurios, pero si las comparamos con YES, ELP, etc... o que se yo capaz que me estoy poniendo vintage y melancólico (viejo nunca a lo sumo me convertiré en un clásico).
EliminarMañana a la noche estaré atento querido Sergio, firme como rulo de estatua junto a los cabezones.
No no! Viejos nunca! Mejor digamos clásicos. Eso me gusta!! Saludos!!
EliminarMe encantan estas historias, porque a mi criterio un disco no es solo un disco en si, sino una suma de experiencias, de una época, de situaciones, momentos y cosas vividas para cada persona que lo escucha. Buena Vida para todos...
ResponderEliminarY buena y larga vida para vos también torrentinto! Nos halagan visitantes como vos!
EliminarAbrazos!