Este es un interesante artículo sobre los orígenes del "otro rock", el que demanda oídos atentos, abiertos, deseosos de experimentar, de exponerse a otras corrientes sonoras y no las mismas de siempre. Hay mucha gente ahora que ahora habla de él, pero hubo un tiempo en que nadie daba dos pesos por unas bandas que, por necias, cabezaduras y tozudas siguieron haciendo rock progresivo cuando aún nadie las escuchaba. Verdaderamente marginal a partir de la década de los ochenta, y aún hoy ajeno a los éxitos comerciales de la moda, narramos una historia no exclusivamente del rock progresivo sino también de derivados, un poco de jazz, fusión, música experimental, alguna cosa de la psicodelia y que comienza desde antes de los dorados 70s.
Hay una historia oficial y otra que se teje alrededor o detrás de ella. La primera busca imponerse y las más de las veces lo logra; la otra, contracultural o de resistencia, lucha constantemente por espacios. La primera tiene de lado una poderosa industria mediática; la segunda encuentra en el boca a boca, medios alternos y en su honestidad su principal arma de difusión, pero batalla para hacerse escuchar.
La música es una de las cosas que puede salvar al mundo, porque un hombre que busca y encuentra y se solaza horas y días y años y años luz, a través de generaciones, con la belleza, ¿qué otra cosa puede querer que un mundo mejor?Atahualpa Yupanqui
No hay ámbito de la vida en donde no se lleva a cabo esta desigual lucha y el rock no es la excepción. El rock es poliédrico y la industria es incapaz de cubrir todas sus expresiones —y aunque pudieran hacerlo no se atreverían ni les conviene-. Ese rock que explora géneros tan diversos como el doom, el thrash, distintas fusiones, el punk más radicalizado, etc., y cuya cabida en los medios masivos es prácticamente imposible, forma eso a lo que he llamado el otro rock. Dentro de ellos, quizás el progresivo, aquel género que nació por la puerta grande y que conoció el fracaso y el olvido, fue el semillero para cantidad de bandas under, desconocidas y nada difundidas, que nacieron en las cenizas de la época de oro. Desde Hungría, Suecia y casi todos los países nórdicos, hasta toda Latinoamérica y los más recónditos lugares de todo el mundo fueron tierra fértil para que a partir de la infame década de los 80s, en todas partes del mundo el under viera nacer a grupos que hacían música rara, fuera de las normas, tomando como raíz esos dinosaurios extraños que ya no estaban a la moda... Ese rock que se gesta en las calles o en los conservatorios de música y se ampara en los múltiples antros, ese un rock que cree en sus posibilidades de decir y apuesta por letras inteligentes o arriesgadas instrumentaciones, y donde también hay cabida para la denuncia y retratar la realidad.
Es un rock que abraza sonidos extremos, ese rock, que se permite experimentar y desconoce contenciones aún hoy en día es rebelde, como lo fue en su principio. Muchas veces, ni siquiera lleva letra, pero ello no le impide dar a conocer su inconformidad únicamente a través de los sonidos. Ese otro rock hay que buscarlo en las calles, en las radios por Internet, en las pocas revistas especializadas, pero especialmente hay que irlo a buscar a los antros, a las casa de cultura, a los lugares públicos. Hay que escucharlo con atención y buscar en lo escondido en donde habita no necesariamente por elección.
Al otro rock hay que irlo a buscar y una vez que se le ha encontrado, no te dejará nunca. Y para terminar, cito a un enano talentoso y medio loco, que nos habla siempre de esto, más o menos así:
La función de la música es la de ser escuchada (...) el público debe trabajar tanto como el músico, a veces incluso más, el público debe escuchar activamente. Mi trabajo no es entretener, aunque a veces hay que ayudar al público, seducirlo para que entre en la música. Pero el entretenimiento es para los robots, la escucha activa es para los seres humanos libres.Robert Fripp
Aquí, a continuación, la nota en cuestión... Todo lo demás fue cháchara...
Rock Progresivo - Estilo, Orígenes e Historia
Actualmente, bandas como Dream Theater, Queensryche, Tool, Porcupine Tree, Pain of Salvation, Opeth o Symphony X se han ganado el respeto de los músicos y los oyentes más jóvenes. Es común encontrar jóvenes talentos que versionan a estas grandes bandas, pero... ¿De dónde surge el progresivo moderno?
Lo cierto es que el rock progresivo no es un género, en absoluto, nuevo, y su historia resulta difícil de catalogar. Bandas como The Mother of inventions, Procol Harum, Pink Floyd, Yes o, incluso, Led Zeppelin o Deep Purple, contienen elementos de los que se alimenta el género, por lo que establecer una fecha o un evento (disco clave) en la creación del estilo, es poco menos que imposible.
Sin embargo, trataremos de remontarnos a la segunda mitad del siglo XX para, así, poder sumergirnos en el rock progresivo y delimitar mejor su historia y los grupos que cimentaron el estilo, para después hacer un repaso de los discos más importantes (obviamente, mediante un criterio subjetivo) para el género.
Los orígenes y cimientos:
Manuel Báez
Para hacer un repaso a la historia del rock progresivo debemos comprender que lo que diferencia este género del rock tradicional, es la incorporación de elementos estilísticos y conceptuales que provienen, no sólo de estilos musicales diferentes, si no de las tendencias artísticas.El concepto de progresivo ha sido muy estudiado por los críticos del género, llegando a diversas conclusiones y opiniones diferentes que no han de ser incompatibles entre sí. ¿Qué es el término "progresivo"? ¿En qué se basa el uso de esa etiqueta y qué lo diferencia, si es que existe diferencia, de otros subgéneros?
Por una parte, el concepto de progresivo se refiere a la utilización de progresiones armónicas, elemento en el que el estilo se asemeja más a la música clásica, el jazz, o la música experimental y de vanguardia. El rock parte del blues y estilos como el country o el soul, con una estructura armónica muy marcada. El rock clásico se basa en el uso de tres grados (I - IV - V), los grados tonales, que se intercalan en una estructura repetitiva, al igual que ocurre en el blues clásico. En cambio, el progresivo toma elementos de jazz y música clásica, realizando movimientos y cadencias que lo diferencian. Del Jazz toma los cambios de modo e intercambios tonales, así como elementos de música modal, y las sucesiones largas de progresiones, mientras que del clásico toma cadencias diferentes a las que se usan en la música del siglo XX, arreglos melódicos, o progresiones melódicas.
También se entendía progresivo como un "progreso" dentro del rock, una forma diferente de incorporar elementos para hacer del estilo algo menos hermético y más maleable, lo cual resulta claro en las estructuras de los temas. El rock se basa en el llamado género de "canción". La canción es una estructura con formato cíclico, formada por diversas partes como son la estrofa, el pre estribillo, y el estribillo. Estas distintas secciones se repiten un número determinado de veces con algunas variantes, resultando así ideales para ser memorizadas y utilizadas para el gran consumo.
En cambio, en el progresivo, la estructura no tiene por qué obedecer a un ciclo, y la repetición es una opción, nunca una obligación. La estructura es, en ese sentido, más parecida al mundo clásico, pues utilizan motivos musicales que se repiten y varian constantemente, que se transforman, haciendo que la canción progrese hacia áreas completamente diferentes, buscando la sensación y el cambio a través de pasajes.
Aquí es importante también comprender que el mundo del progresivo, la psicodelia, el rock sinfónico y el rock espacial son similares porque comparten un gusto por el arte moderno y la abstracción. En muchas ocasiones, estas etiquetas resultan difusas e incluso innecesarias, puesto que el progresivo suele tener elementos sinfónicos y psicodélicos, la psicodelia elementos espaciales o sinfónicos, etc.
El elemento común de todos estos estilos es la búsqueda de sensaciones y texturas, para lo cual se sirven de una "imagen musical", es decir, la relación entre el arte no musical y la música, pretendiendo con ello inspirarse en fuentes ajenas al sonido. Cubismo, abstracción, expresionismo, dadaísmo... son elementos utilizados comunmente, hasta el punto de que muchos artistas trabajan con músicos a lo largo de los años, y estos se inspiran en los propios artistas para crear sus composiciones.
Gran parte del nacimiento del disco conceptual proviene de estas influencias, puesto que el artista quiere expresar, como ocurría en el clásico, un concepto general a lo largo de su obra, lo que además le permite jugar con los motivos musicales y un desarrollo no lineal, una progresión constante hacia nuevos pasajes.
El elemento onírico (los sueños y sus características) y el uso de efectos y sonidos se convierten en una constante, y las variaciones rítmicas y de tempo pretenden provocar la ruptura del arte, como ocurre con el expresionismo. Se busca un comprensión de la realidad diferente, para lo que se utiliza cualquier herramienta disponible que diferencie el estilo de otros.
En el plano rítmico y musical, el estilo adopta formas alejadas del rock y las incorpora al lenguaje tradicional y el sonido característico del rock. Música folk, jazz y motivos clásicos se suman a escalas poco tradicionales (whole tone, disminuída, modos alterados), la música modal y las escalas y tensiones características de la música oriental, que cobra fuerza en el género.
Bandas como The Beatles se convierten en un referente aún sin ser progresivos, al añadir instrumentos orientales y comenzar a colaborar con compositores e intérpretes de todo el mundo.
En el plano rítmico, el rock progresivo se sale del esquema habitual del rock clásico, que suele estar en 4/4 o en 12/8 en el caso de algunos temas más orientados al blues rock o el rockabilly. Es común el uso de compases compuestos (de amalgama) y figuras irregulares, que provienen de autores clásicos experimentales de finales del siglo XIX y comienzos del XX, como Debussy o Bela Bartok, así como síncopas y contratiempos extraídos del jazz y estructuras de compases impares (muy utilizadas por Coltrane). También encontramos mezclas habituales entre compases de subdivisión binaria y ternaria. Tampoco existe el concepto de continuidad rítmica. Un tema no tiene por qué empezar como comienza y sus distintas partes pueden sufrir grandes alteraciones a nivel rítmico, buscando de nuevo una ruptura y la creación de nuevas sensaciones y elementos que provocan una reacción visceral en el oyente. En ocasiones, incluso se busca el rechazo o la disconformidad de este, con elementos como la polirritmia.
El virtuosismo y los solos no son un elemento diferenciador; de hecho, muchas bandas de rock progresivo están formadas por grandes músicos que no hacen solos o apenas se explayan en ese sentido (caso de Yes o Supertramp). Asociar el virtuosismo al rock progresivo es un error común. De hecho, el metal progresivo, derivado de este, tampoco requiere del uso de solos y secciones virtuosas. Grandes bandas como Queensryche o Fates Warning no utilizan estos elementos puesto que beben más de las fuentes tradicionales y tratan de generar las texturas y los cambios de sensaciones de los que hemos hablado.
Los años clave y la instauración del progresivo:
Los años clave para el devenir futuro del progresivo son 1966 y 1967, años en los que se lanzan una serie de obras, de carácter más o menos progresivo, que sientan las bases del futuro del género. A partir de 1968 ya encontramos bandas que se convertirán en la base del rock progresivo a lo largo de los años 70, como Yes, King Crimson, Jehtro Tull, Uriah Heep, Soft Machine, Camel, Rush, Gentle Giant, Genesis... sumados a la incipiente escena del progresivo italiano de los 70, de los que hablaremos en el siguiente artículo.
En 1966 Frank Zappa, una de las personalidades más míticas e influyentes de la música moderna, lanza junto a sus compañeros The mothers of invention, su disco debut, Freak Out!
Esta obra rompe los esquemas de la época, muy arraigada en el formato canción del rock y el pop, así como el blues y el jazz tradicional, y huye de los arquetipos establecidos. Con un sonido más denso pero a la vez radiable, y elementos del jazz moderno (Davis, Coltrane) y la psicodelia, The mothers of invention añaden además al cóctel el elemento abstracto del arte y la incorporación de formas armónicas poco conocidas en occidente, abriendo los horizontes musicales y las mentes de los artistas posteriores, que siempre citarían este disco como una referencia. En si mismo, puede no ser progresivo, pero se trata de una obra clave, si no la más importante, a la hora de sentar las bases del género.
En 1967 los acontecimientos se suceden uno tras otro y se solapan, con el lanzamiento de diversas obras y la irrupción o consolidación de bandas claves para el género. De hecho, algunos temas de los discos que tratamos, si que pueden ser considerados progresivos por méritos propios.
Por una parte, The Beatles, banda que utilizaba estructuras herméticas de formato canción, publican su gran obra, Sgt. Pepper's lonely hearts club band, uno de los primeros discos conceptuales de la historia, en el que el uso de instrumentos orientales, la música folk, o las formas artísticas cubistas y abstractas toman protagonismo, llegando al gran público sin perder el toque desenfadado de los británicos, pero con arreglos muy serios y una relación clara entre concepto/historia del disco y sensaciones/imágenes generadas mediante la música.
El mismo año, Procol Harum lanzan su único y gran éxito, A whiter shade of pale, un tema inspirado en el formato clásico con arreglos cuidadísimos que se convertiría en la piedra filosofal del progresivo en su intento de recrear texturas y su forma alejada de la tradición pop del siglo XX, algo que también ocurre con el éxito, el mismo año, de la banda The Moody Blues, que milita en la misma discográfica. Estas bandas serán una gran influencia en grupos como Supertramp o Queen.
Por último, y no menos importante, 1967 es el año en el que Pink Floyd publican su primer gran éxito, The piper at the gates of dawn, último disco liderado por Syd Barret, en el que las formas de pop psicodélico que viene practicando la banda ocultan algunos temas de corte marcadamente progresivo, como Astronomy Domine. La influencia del pop británico es cada vez menor y la figura de Roger Waters asoma en el horizonte en forma de arreglos sobre los temas del todopoderoso Barrett, siendo quizás la primera banda que presenta en una de sus obras un tema totalmente progresivo.
En el siguiente artículo hablaremos de discos clave y de alta calidad del rock progresivo, atendiendo, evidentemente, a un criterio subjetivo y expuesto a crítica. Siendo este un mundo complejo, trataremos de cubrir diferentes aspectos, que incluirán el rock progresivo moderno, del que no hablaremos por existir ya en el foro un artículo dedicado a discos de metal progresivo.
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