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Pez - Pez (2010)


Artista: Pez
Álbum: Pez
Año: 2010
Género: Punk Rock / Rock Progresivo
Duración: 33:35
Nacionalidad: Argentina


Lista de Temas:
1. Latigazo
2. ¡Vamos!
3. Al Tun tun
4. Cassete
5. Volar Volar Volar
6. Las Escondidas
7. Estableciendo Comunicación
8. Vos no Sabés Mentir
9. Soñar Soñar
10. Un Nuevo Juego
11. Y Eso Vale
12. Y Ella Besó Sus Manos
13. Suerte de Plegaria

Alineación:
- Ariel Minimal / vocals, guitar
- Franco Salvador / drums, vocals
- Fósforo García / bass, vocals
- Pepo Limeres / electric piano, organ


Otro gran aporte de Agustín en esta semana de aportes de amigos, acá tienen 33 minutos de power rock para escuchar y somperse la cabeza de moog.


Pez es el decimosegundo disco, y segundo disco homónimo, del grupo de rock argentino Pez. Fue grabado en enero de 2010 en los Estudios del Abasto y editado por el propio grupo de forma independiente y autogestionada.
El responsable de grabación y mezcla fue Álvaro Villagra. Fue asistido en la grabación por Mauricio Escobar, con grabaciones adicionales de Mauro Taranto. El diseño del arte de tapa fue realizado por la banda misma, con fotos de Mr. Martínez.
Wikipedia


Y estamos hablando de un disco de Pez, uno de los bien eléctricos, y no tiene sentido seguir hablando de ello salvo que no conozcas nada del grupo y entonces te diría que revises los discos que tenemos publicados acá y luego vuelvas por este disco.

Un nuevo año, un nuevo gran disco de Pez. Parece casi una costumbre, y el peligro de las costumbres es que son cosas que uno hace casi sin darse cuenta. Entonces, como Pez siempre está ahí, puede llegar a pasar desapercibido sin que nos demos cuenta realmente de lo bueno que es este grupo. Su (¡atención!) duodécimo álbum, puede ser visto como una continuación del anterior, El porvenir (2009) y, quizá, también del tercero (1998), otro álbum titulado simplemente con el nombre del grupo. Pero decir que es un regreso a los comienzos sería una simplificación. Hay espíritu punk, y también la huella de todo el camino recorrido desde entonces por Minimal y sus compadres, que incorpora la complejidad melódica y la ingenuidad lírica del primer rock nacional. Son trece canciones en 33 minutos, bombas pequeñitas que no dan respiro salvo hacia el final, cuando el ritmo descansa y la melodía se eleva en esa "Suerte de plegaria": "Hay que comprometerse a full todos los días… y sacarse tanta mierda de encima y despertar". La idea de renacer, de un nuevo comienzo, está presente en varias de las letras, como en "Un nuevo juego", "Y eso vale" y "¡Vamos!", donde las declaraciones de principios se mezclan con vívidos detalles que aportan la cuota de cotidianeidad ("tu entrada de Pearl Jam"). Grabado en Estudios del Abasto por Alvaro Villagra, el sonido de Pez tiene la inmediatez y densidad analógica de una banda que sigue construyendo su propio camino al costado del mundo.
Claudio Kleiman

Y aquí, les dejo una selfie-pez:


Pez: Espíritu Punk y llamado Existencial
Pez. Sencillamente con ese título, la banda que continúa como cuarteto con Ariel Minimal en voz y guitarra, Fósforo García en bajo, Franco Salvador en batería, y Pepo Limeres en Piano eléctrico y órgano, decidió editar su décima segunda placa de estudio. Grabado en Estudios del Abasto, contó nuevamente con Mauro Taranto y fue producido por Pez. Se edita bajo el sello independiente que tiene la banda, Azione Artigianale.
Son 13 tracks, que transcurren uno atrás de otro y a máxima velocidad (el álbum dura apenas 33 minutos). En él, se condensan y fusionan varios géneros, bien al estilo de Pez, que en cada nueva placa incorpora nuevas temáticas musicales a su sonido potente y agresivo. Al ritmo punk que gobierna la obra en general, se le suma una gran amplitud de estilos: hay Rock Psicodélico, Hard Rock, Rock Progresivo y hasta Blues. Los constantes pero precisos arreglos de teclado recuerdan a los Doors y a Deep Purple, y la furia y crudeza de la música, a los Stooges y al primer Grunge. La voz de Ariel Minimal se escucha como siempre: a flor de piel.
A lo largo de todo el disco hay varias frases que resumen el concepto general de la obra, que motivan la idea de seguir siempre hacia adelante y llaman a la acción (… “la verdad es que solo pienso en seguir”, o “… hay mucho por hacer, no hay tiempo para hablar”), y que priorizan la noción de disfrutar el presente y de vivir el aquí y ahora (… “cada emoción es acción, siempre es el momento…”, o “… hay que comprometerse a full todos los días…”). Es espíritu Punk e Indie-Rock, no solo en lo sonoro, sino también en el mensaje. El hazlo tú mismo cobra aquí más sentido que nunca.
Esta lírica concientizante y combativa, bañada con un trasfondo existencialista, atraviesa todo el disco y parece resumir perfectamente la metodología de Pez: no perder el tiempo y demostrar con acciones y no tanto con palabras: Nuevo año, nuevo disco, parece ser la fórmula de Pez. Una nueva producción de esa fuente inagotable de energía y música que es Ariel Minimal.
“Latigazo”, es la canción que abre el disco: Un Rock rápido y potente, donde la letra nos dice: “empecé a vivir, la tierra estaba blanda, le di forma con mis manos y una forma de ser…”, que bien puede aplicarse a la historia de la banda. De cómo se han abierto paso dentro del under porteño, a fuerza de un sonido propio y característico, sin hacer concesiones comerciales y con discos cada vez mejores. Le sigue “Vamos!”, que ya desde su título imperativo, nos llama a levantarnos y romper las cadenas que nos atan. Un relato existencialista y melancólico (… “y un cajón de recuerdos, escritores muertos y tu entrada de Pearl Jam…”), con un paso arrasador y veloz, que como todo este disco, nos deja sin aliento. Luego “Al tun tun”, otro rock acelerado y potente y de nuevo la misma idea de vivir cada instante como si se tratase del último.
El relato se torna emotivo con “Casette”, un punk rock con referencias al primer rock nacional y a los Hippies iniciales. En este tema, como en muchos de este disco, la canción se abre con la batería, que rápidamente comienza a marcar el ritmo veloz y punk que caracteriza a este álbum.
Ese paso casi fugaz y atronador de las canciones, queda reflejado con dos de ellas, que juntas duran tan solo 3 minutos: “Volar, volar, volar”(1:00) y“Las Escondidas”(1:59). Dos tracks conectados y sucesivos, en los cuales hay pasajes de Punk melódico, Power trío y Rock Psicodélico, todo ello en solo 3 minutos.
Entre tanta furia, llega un momento de calma y descanso con “Estableciendo comunicación”, justo en la mitad del disco, un rock mid-tempo, con una bella melodía y hasta un final gospel, en donde Pez se acerca más al formato canción. El pulso guitarrero de Pez arremete nuevamente con “Vos no sabés mentir”:los riffs de guitarra irrumpen, en la canción quizás más ácida del álbum, con una letra acusatoria y arreglos de teclado que recuerdan a los Doors.
La declaración de principios se hace presente con “Soñar, soñar”,cuando Minimal recuerda un pasado añorado y exige “Honrar la ansiada libertad, luchar y el perseguir los sueños,
y sin saber porqué estamos acá, hacer que esto resulte bueno”.
Hacia el final del disco se destacan, entre tanta furia sonora, guitarras distorsionadas y la pasión vocal de Ariel Minimal, los cambios de ritmo y tempo de “Y eso vale”,y el paso suave y melódico de “Suerte de Plegaria”,una gran balada de raíces bluseras con la letra más intimista y personal del disco, donde Minimal nos dice: “hay que comprometerse a full todos los días… lo único que hay es tiempo y yo se lo dedico todo…”. Tiempo que le dedica, en sus ratos libre junto con su banda (recordemos que todos tienen trabajos particulares) a componer excelentes canciones. Un cierre a toda orquesta, de una gran canción y para un gran disco.
Matías Roveta

Y como esta gente es tan fructífera que saca discos y discos sin parar, nos falta mucho para completar la colección, pero si nos ayudan y dan una mano quizás, al menos, podremos achicar la brecha.
Espero que lo disfruten...




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