Artista: Galápagos
Álbum: Desierto Avant Garde
Año: 2010
Género: Rock progresivo psicodélico / Space rock / Stoner Rock
Nacionalidad: Argentina
Álbum: Desierto Avant Garde
Año: 2010
Género: Rock progresivo psicodélico / Space rock / Stoner Rock
Nacionalidad: Argentina
Lista de Temas:
1. Antenas Y Charcos
2. Y Los Días Por Llegar
3. Después De La Guerra
4. Desierto Avant Garde
5. En Línea Recta
6. Qué Se Puede Hacer
7. Nada Que Ver
8. Practicando Tiro Al Ego
9. Se Está Cayendo El Cielo
1. Antenas Y Charcos
2. Y Los Días Por Llegar
3. Después De La Guerra
4. Desierto Avant Garde
5. En Línea Recta
6. Qué Se Puede Hacer
7. Nada Que Ver
8. Practicando Tiro Al Ego
9. Se Está Cayendo El Cielo
Alineación:
- Alberto Ántola / guitars, lead vocals
- Patricio Claisse / bass, backing vocals
- Chacho Falcón / Fender piano, organ
- Lionel Fortunato / drums
Hay que aclarar, a pesar del título del álbum, esto no es avant garde ni experimentación, esto es un crudo stoner rock bien armado y con factura precisa, pero no corresponde con las vertientes más experimentales.
"Desierto Avant Garde" es el tercer y último (al menos que yo sepa, aunque el Rafa dice que están grabando su cuarto álbum) disco de los Galápagos, fue grabado en 2009 y editado en el 2010 por nuestro sello amigo "Viajero Inmóvil Records".
Con su estilo propio su retro-psicodélico-progresivo-pesado que pareciera emparentarlos con Pescado Rabioso o Invisible mezclado con Los Natas e incluso Black Sabbath, para su tercer álbum los Galápagos incorporaron a su alineación a un tecladista, y así, como cuarteto, diseñan sus sonidos potentes pero con más climas y texturas. El grupo incuestionablemente sigue el mismo camino, aunque actualmente se acerca a trabajos más contemporáneos, acercándolos a aquellos que gustan de grupos más "atemporales" como Pez.
Galápagos es una banda de rock psicodélico pesado de Argentina; no les voy a pasar más datos porque ellos tienen un muy lindo sitio que pueden investigar, en especial esta parte si biografías es lo que buscan. En su haber tienen tres discos, los cuales están disponibles para su descarga por acá. Elegí su último trabajo completamente al azar y todavía no revisé los otros pero pretendo hacerlo. Cabe destacar que la banda se encuentra trabajando en su cuarta placa.Rafa
Muy bien. Desierto Avant Garde. Para los acostumbrados al stoner rock, el desierto es un artilugio muy utilizado en letras y arte de este género, lo que concuerda con lo presentado por Galápagos. La segunda parte del título del disco podría hacer referencia a un mayor nivel de experimentación o una expansión de sus límites musicales, en una de esas ayudados por la adición de Chacho Falcón en teclas. La verdad es que, como dije, no escuché nada más de ellos y no me es posible estudiar su progreso, pero es claro que se diferencian de otras bandas de la escena.
Más concretamente, este tercer esfuerzo no tiene nada que envidiarle a nadie: la psicodelia y la distorsión abundan, bajo (Patricio Claisse) y batería (Lionel Fortunato) hacen un excelente trabajo rítmico en el que se toman ciertas libertades artísticas que hacen de Desierto Avant Garde muchas veces más interesante, mientras que Sebastián Antola en guitarra se encarga de aportar riffs cambiantes e innovadores, lejos del drone que tan poco me gusta. Similitudes con otras bandas hay, como siempre, pero creo que no vale tanto la pena en este caso. Solo escuchen a Galápagos y presten atención que se la merecen.
Galápagos parece haber encontrado el mejor punto con su tercer álbum de estudio... Con influencias que van del heavy a la psicodelia y canciones con estructuras más breves, se destacan la variedad en las composiciones que van de lo pesado a lo acústico, y el gran trabajo del guitarrista Sebastián AntolaClaudio Kleiman, para Rolling Stone
Galápagos es una de las bandas más power del circuito under porteño. Con una impronta setentera, recuerda a viejas glorias del pasado como Pappo’s blues, Pescado Rabioso e Invisible. Para ellos, simplemente, rock vanguardista porteño. Las canciones combinan riffs zeppelenianos, climas extensos, armonías blueseras, aunque también hay lugar para lindas melodías que se te pegan. “Desierto avant garde” es su tercer disco, después de casi diez años en la ruta y tocando en diversos escenarios del underground. Con un sonido mucho más maduro y la incorporación de Andy Raffo en piano rodhes y organo, la banda también conformada por Sepi Antola en guitarra y voz, Lionel Fortunato en batería y Patrico Claisse en bajo y coros, se destaca como una de las propuestas más atractivas para descubrir dentro de la extensa escena del indie.crisologobp
“Y los días por llegar”, con su mezcla de power y climas floydianos, la conmovedora “Tiro al ego”, y la que le da nombre al disco “Desierto avant garde” son algunas de las gemas que nos deja este disco. Vale la pena escucharlo.
Esta vez les quiero hablar del grupo argentino GALÁPAGOS, una banda ya experta dentro de la actual vanguardia rockera de su país, y que con su tercer disco “Desierto Avant Garde” logra darle una expresión madura y especialmente vibrante a su propuesta de rock psicodélico de vieja escuela. El fulgor de los pesados riffs de guitarra se conjuga con las tendencias melancólicas y reflexivas de las melodías básicas y letras. Habiendo comenzado sus días como un power-trío, la adición de un teclista en los últimos años ha servido para cimentar su sonido básico con la inclusión de texturas interesantes. El estilo de GALÁPAGOS me parece obviamente reflejado en las influencias de PESCADO RABIOSO e INVISIBLE, tiene ese sabor especial del rock duro clásico de los 70s que tan buenos réditos e intensas vibraciones generó en los inquietos escenarios argentinos; el guitarrista/vocalista Alberto Ántola se esmera en añadir matices heavy extra a sus guitarreos que pueden también inspirarse en los estándares de BLACK SABBATH y URIAH HEEP, además de adornos lisérgicos que nos pueden también hacer recordar al Gilmour de la etapa pre-“Meddle”.César Inca
Este disco es muy breve como tal – ¡solo dura menos de 35 minutos! Posiblemente éste sea un reproche que yo pueda hacer a la banda cuando elabora los arreglos de sus ideas musicales: casi todos los temas de este repertorio (por no decir todos) pudieron expandirse en arreglos más expansivos a fin de que la polenta y el gancho que tienen alcanzaran niveles más intensos de lo ya por sí plasmados en el repertorio actual del disco. Pero posiblemente será el único reproche que se lea en esta reseña, pues la música que se escucha en “Desierto Avant Garde” destila garra y carisma a pesar de que son los medios tiempos los que predominan y no viajes sónicos marcados por compases trepidantes. ‘Antenas Y Charcos’, ‘Y Los Días Por Llegar’ y ‘Después De La Guerra’ instalan concienzudamente las líneas predominantes del disco: los dos primeros establecen un lirismo envolvente atravesado de convincente energía rockera (siendo éste un poco más filudo que aquél), mientras que el tercero dispone de la fuerza bajo un esquema más constreñido en aras de impulsar una melancolía más pronunciada. Una vez instalado este panorama general, llega el tema homónimo para explayarse en la antes mencionada melancolía y arroparla bajo un esquema un poco más sofisticado, producto básicamente de la incorporación de ciertas cadencias jazzeras a cargo de la dupla rítmica: esta atmósfera grisácea resulta bastante atrapante.
‘En Línea Recta’ y ‘Qué Se Puede Hacer’ nos muestran a la banda explorando su faceta más “dulce”, estando la primera más inclinada hacia ambientes serenos y la segunda ahondando más en la languidez emocional del momento. El contraste necesario lo otorga ‘Nada Que Ver’, pieza que nos devuelve al sonido INVISIBLE/PESCADO RABIOSO “sabbathizado” que tan efectivo había resultado para las dos primeras piezas del disco. ‘Practicando Tiro Al Ego’ es la pieza más larga: basada en una razonablemente introspectiva atmósfera, su segunda mitad instrumental tiene mucho del estándar etéreo que PINK FLOYD patentizó entre 1969 y 1971. Las cosas culminan con ‘Se Está Cayendo El Cielo’, balada con base de guitarra acústica que brinda una ocasión de meditación casi pastoral para la despedida. La experiencia con “Desierto Avant Garde” ha sido agradable y motivadora; en lo personal, ojalá que GALÁPAGOS se aventure hacia actitudes más expansivas en lo compositivo para sacarle todo el jugo a la consistencia sonora que desde hace buen rato exhibe su propuesta.
Too short, really too short, it lasts less than 35 minutes!... but a very good album is "Desierto Avant Garde", Galápagos' third release. This band stands out as one of the most important new bands devoted to the recapitulation of old-fashioned psychedelic heavy rock. Having started their days as a power-trio, the addition of a permanent keyboard to the augmented line-up really helped the now quartet to expand on the artsy side of their own rock sound: one might argue that Galápagos should have taken advantage of the sonic framework and go for longer developments of at least most of the tracks in this album's repertoire, and I actually would agree 100% with them; but, all in all, the fact remains that this album is appealing and interesting. The opener 'Antenas y Charcos' sounds like a Sabbath-ish version of Pescado Rabioso and Invisible (two essential references of 70s Argentinean hard rock), 'Y Los Días Por Llegar' goes to a more Purple-meets-Uriah territory without letting go of the Pescado/Invisible standard, 'Después De La Guerra' brings the prevalent heaviness through a more constrained rhythmic structure in order to provide a more reflective feel. These first three tracks set a clear indication to the listener about the musical essence to be developed dominantly all the way towards the end. In this way, we can notice that the title track remains on the constrained realm installed by the preceding track and enriches it with a jazzier treatment of the rhythm section, which in turn helps to emphasize a certain grayish aura in the basic compositional idea: the result is a particular exercise on psychedelic rock, something that the guys of Big Elf might have been proud of, for instance. 'En Línea Recta' and 'Qué Se Puede Hacer' find the band delivering a sweeter side, with the former bringing a serene mood and the latter surpassing the former in terms of emotional languidness: up to this point, there has not been one single track that couldn't have been expanded some more time so the thematic development in each of them could generate some exceptionally impressive impact on the listener. What we have here is a catalogue of very good songs that could and should have been longer. 'Nada Que Ver' brings back the Pescado Rabioso thing to the fore, not unlike the firs ttwo songs. 'Practicando Tiro Al Ego' is the longest track in the album: reasonably introspective, quite solid concerning the psychedelic standard, very similar to "Meddle"-era Pink Floyd during its expanded interlude that eventually turns into a 3 minute closure. The album's final song, 'Se Está Cayendo El Cielo', states an acoustic guitar-based closing statement a-la Neil Young, so the whole experience motivates a meditative attitude as some sort of farewell. This nice end culminates the good qualities of this album, which (I reiterate) could have exploited its artsy potential more thoroughly: good psychedelic rock from South America for the new millennium thanks to Galápagos.Cesar Inca
www.myspace.com/losgalapagos
Download: (MP3 y Flac)
ResponderEliminarhttp://losgalapagos.bandcamp.com/album/desierto-avant-garde