Ir al contenido principal

El Asesinato Artístico de Bowie

Incomprendido en su momento, 25 años después "1. Outside" adquiere relevancia en una década dominada por la electrónica y sucedáneos del hip hop. "Es como pintar o esculpir... no estás del todo seguro de lo que estás haciendo. Pero cuando lo terminaste, lo reconocés como tuyo". Así describió David Bowie a "1. Outside", su decimonoveno álbum de estudio, cuando salió hace 25 años, el 26 de septiembre de 1995. Su grabación y composición -que se dio en simultáneo- coincidió con el momento en el que por fin se animó a mostrar en público sus aptitudes como artista plástico. Esa nueva faceta se coló de lleno en este trabajo, desde el concepto hasta la portada, y es una de las tantas obras del Duque Blanco que fueron incomprendidas en su momento, pero que el tiempo finalmente ubicó en el lugar correcto.

Por Daniel Bajarlía

1. Outside (subtitulado como The Nathan Adler Diaries: A Hyper-cycle) es el decimonoveno álbum de estudio del músico británico David Bowie, lanzado el 25 de septiembre de 1995 por Arista Records. Este álbum significó la reunión de Bowie con Brian Eno, con quien había trabajado, entre otros, en su Trilogía de Berlín en la década de 1970. Outside se centra en los personajes de un mundo distópico en la víspera del siglo XXI. El álbum volvió a poner a Bowie en la escena principal de la música rock con sus singles "The Hearts Filthy Lesson", "Strangers When We Meet" y "Hallo Spaceboy" (remezclada por Pet Shop Boys). 

Wikipedia

Bowie había iniciado la última década del segundo milenio tocando en la banda de hard rock (“a la Bowie”) Tin Machine, y cuando retomó su carrera solista en 1992 revisitó la música negra. En Black Tie White Noise volvió a trabajar con Nile Rodgers, pero en vez de hacer la secuela de Let’s Dance optó por explorar la veta melódica del R&B de esos años, fundamentalmente el hip-hop y el house. Al año siguiente, compuso un álbum ecléctico a partir de la banda sonora que le encomendaron para la serie de televisión de la BBC The Buddha Of Suburbia, adaptación de la clásica novela homónima de Hanif Kureishi. De ese disco, sólo el tema que lleva su nombre se usó en el programa. Las demás canciones mostraban a un músico inspirado cuya carrera podría haber tomado con éxito cualquier dirección.

Ese camino fue el de la música Industrial, que tras años en las sombras llegó al mainstream en 1994 de la mano de Nine Inch Nails con The Downward Spiral y el hit “Closer”. El creador de Ziggy Stardust admitió que no llegó al género a través de la banda de Trent Reznor (pese a que los eligió como teloneros de la gira presentación de este álbum). Ni siquiera encontró inspiración en los pioneros del Industrial, como Cabaret Voltaire o Throbbing Gristle. Siempre adelantado, el faro que siguió para 1. Outside fue la música de la banda suiza The Young Gods, en especial sus técnicas de sampling de riffs de guitarra.

Otra vez, fue Brian Eno el encargado de llevarlo por esos terrenos experimentales. Habían pasado dieciséis años de la trilogía de Berlín (los discos Low, “Heroes” y Lodger, fuertemente influidos por el Krautrock), pero ambos seguían de cerca lo que hacía el otro. En las notas de The Buddha Of Suburbia había elogios hacia el productor, mientras que el antiguo miembro de Roxy Music criticó la forma en que fue tratada esa banda sonora por parte de la prensa y el sello discográfico. Se reencontraron en 1992 en el casamiento de Bowie con la modelo somalí Iman Abdulmajid. Los dos pasaron música en la recepción de la boda y hablaron de cómo percibían el pop en ese momento. “Estábamos maravillados por el hecho de que no nos asombraba lo que estaba pasando en la música popular”, explicó el autor de “Life On Mars?”, para luego agregar: “Los dos estábamos interesados en mordisquear en la periferia”.

Con excepción de “Strangers When We Meet”, cuya versión original pertenece a The Buddha Of Suburbia, el resto de las canciones de 1. Outside nacieron de las sesiones de grabación. Bowie y Eno llegaron al estudio -el mismo en el grabaron Lodger en Montreux- en blanco y empezaron a descartar ideas y conceptos. Una vez que supieron por dónde no querían ir, buscaron inspiración con diferentes métodos. Las Estrategias Oblicuas de Brian Eno, tal como sucedió en Berlín, tuvieron un papel importante, aunque en esta ocasión evolucionaron hacia un juego de roles en el que cada miembro de la banda asumió un personaje, desde un miembro deprimido de una banda de rock sudafricana hasta un sheik que quiere casarse con la mujer de un hombre importante y debe impresionarlo tocando funk psicodélico árabe.

Algunas ideas surgieron de la visita al hospital psiquiátrico Gugging, en las afueras de Viena, Austria, donde entrevistaron y fotografiaron a algunos de sus pacientes. Esta clínica es tristemente célebre por haber sido uno de los centros en donde los nazis aplicaron su programa de eutanasia. Sin embargo, a fines de los ’50 adquirió relevancia cuando el psiquiatra Leo Navratil descubrió que muchos internos tenían un gran talento para pintar. El artista francés Jean Dubuffet acuñó el término art brut (o arte marginal) para definir las obras que provenían de Gugging, que empezaron a despertar interés en el ambiente.

Bowie llevó algunas piezas que había adquirido en el hospital al estudio, además de un caballete, lienzos y pinceles. La pintura había entrado en su vida en 1975, pero recién en los ‘90 se animó a mostrarla en público, nada menos que en la portada de 1. Outisde, un autorretrato de una serie de cinco que pintó en 1995 titulado “The Dhead – Outside”.

Por otra parte, el concepto del álbum tiene su origen en las artes plásticas. El cantante tenía un interés particular en las obras modernas más morbosas y sangrientas. Tal como explica en las notas del disco, de allí proviene la historia del protagonista, el detective Nathan Adler, que preside una oficina que, además de definir qué es arte y qué no, investiga una modalidad de crimen calificado de “artístico”. En un distópico 1999, la mutilación y el asesinato es una nueva y oscura forma de arte y Adler debe encontrar al responsable de la muerte de una adolescente de catorce años.

ganchos
La jetée, Twin Peaks, Scott Walker, el art brut: influencias que nutrieron al Duque en los ’90.

Los personajes nacieron de una improvisación de tres horas que Bowie y Eno elaboraron tras su paso por Gugging y que, una vez encontrada la línea argumental, finalmente quedó reducida a setenta y cinco minutos. Sirvió mucho el hecho de que la revista Q le pidiera al Duque Blanco un diario personal de sus últimos diez días. “Pensé que resultaría aburrido contar que iba al estudio, volvía a mi casa y me iba a dormir, por eso me imaginé lo que habría estado haciendo Nathan Adler. En lugar de diez días, terminé contando quince años de su vida”, admitió, aunque con una narrativa claramente influida por Twin Peaks de David Lynch. El texto que escribió para la revista fue incluido en el álbum bajo el título “The diary of Nathan Adler or the art-ritual murder of Baby Grace Blue: A non-linear Gothic Drama Hyper-cycle” (“El diario de Nathan Adler o el asesinato artístico-ritual de Baby Grace Blue: un híper-ciclo de drama gótico no lineal”).

Como obra conceptual, el relato de 1. Outside es desordenado. Así lo comentaba Bowie: “Nos dimos cuenta de que habíamos construido un hilo narrativo aproximado con esta pequeña variedad de personajes, y que había una secuencia de la trama que desembocaba constantemente en aspectos conflictivos. Como en la vida real, no había finales ni principios precisos y perfectos: todo era como un gran lío y pensamos que así debía ser. Decidimos no intentar perfeccionarla”, explicó.

Parte de ese caos se debe a que las letras fueron escritas con la clásica técnica de recortes que popularizó William Burroughs y que Bowie utilizó en los ’70. El avance de la tecnología le permitió utilizar un software llamado Verbasizer que tomaba las palabras que él mismo insertaba y las reordenaba al azar de forma automática.

El objetivo principal de 1. Outside no era contar una historia sino reflejar el pulso, las vibraciones que vivía el mundo en el epílogo del siglo XX. “Su contenido es en realidad la textura de 1995. La historia es tan solo el esqueleto: la carne y la sangre son la manera de sentir de la época”, decía Bowie, que se puso como objetivo editar un álbum por año hasta llegar a los 2000 para capturar lo que sentía la sociedad a medida que el fin del milenio se acercaba.

Las zapadas en el estudio con su banda dejaron bastante material para hacer un disco doble o triple. De hecho, circula un bootleg de más de setenta minutos titulado The Leon Suites que muestra el verdadero curso que quería darle Bowie al álbum. Además de tener a su lado a Eno, que él mismo consideró como el colaborador con quien más sintonía tuvo, llamó a viejos conocidos para la grabación: a los guitarrista Carlos Alomar y Reeves Gabrels, al bajista Erdal Kızılçay, al pianista Mike Garson y al baterista Sterling Campbell. No apuntaba a grabar música comercial y por eso quiso hacer algo con total libertad y con gente de su confianza. La versión original de 1. Outside es oscura y sumamente compleja, aún más claustrofóbica que Blackstar. Está conformada por tres suites de más de 20 minutos cada una y predominan el noise, el ambient y el spoken word, con la voz del cantante alterada electrónicamente para representar a los diferentes personajes. Sin embargo, por presiones de su discográfica tuvo que reorganizar el álbum de una forma más tradicional y agregar canciones más “digeribles”, como “Thru’ These Arquitect Eyes”, “We Prick You” y “I Have Not Been To Oxford Town”. Aun así, el disco terminó siendo uno de los más extensos y extraños de su catálogo.

Con treinta años de carrera, cualquier leyenda del rock ya se hubiera asentado en su propio estilo. En realidad, eso es lo estaban haciendo los pesos pesados en ese momento. Él, sin embargo, siguió explorando nuevos universos. Luego de descartar la secuela de 1. Outside, se volcó al jungle y al drum’n bass con su siguiente álbum, Earthling, editado en 1997, para luego volver a una senda más tradicional.

A 25 años de su lanzamiento, 1. Outside sigue siendo uno de los trabajos más misteriosos y difíciles de David Bowie. Ese halo experimental que le insufló Brian Eno –en lo que fue una verdadera colaboración entre ellos- lo terminó posicionando casi como un anacronismo dentro de su discografía, mucho más cerca de sus últimos discos, The Next Day y sobre todo de Blackstar, que de Black Tie White Noise o Hours… (1999). A su vez, funciona como nexo entre esa última etapa y la trilogía de Berlín.

En retrospectiva, vale preguntarse, ¿podría haber sido ésta la línea definitiva que Bowie intentó trazar a lo largo de su carrera, mientras que sus discos de los ’80 fueron una mera distracción? La respuesta queda a cargo de cada uno, pero lo que sí es seguro es que en el siglo XXI, en donde el rock quedó relegado y el hip hop y la electrónica en sus vertientes infinitas ganaron terreno, 1. Outside tiene todo para adquirir la relevancia que merece. Como toda obra disruptiva, el paso del tiempo lo terminó revalorizando y hoy suena mejor que nunca.

Daniel Bajarlía



Comentarios

Publicar un comentario

Lo más visto de la semana pasada

Los 100 Mejores Álbumes del Rock Argentino según Rolling Stone

Quizás hay que aclararlo de entrada: la siguiente lista no está armada por nosotros, y la idea de presentarla aquí no es porque se propone como una demostración objetiva de cuales obras tenemos o no que tener en cuenta, ya que en ella faltan (y desde mi perspectiva, también sobran) muchas obras indispensables del rock argento, aunque quizás no tan masificadas. Pero sí tenemos algunos discos indispensables del rock argentino que nadie interesado en la materia debería dejar de tener en cuenta. Y ojo que en el blog cabezón no tratamos de crear un ranking de los "mejores" ni los más "exitosos" ya que nos importa un carajo el éxito y lo "mejor" es solamente subjetivo, pero sobretodo nos espanta el concepto de tratar de imponer una opinión, un solo punto de vista y un sola manera de ver las cosas. Todo comenzó allá por mediados de los años 60, cuando Litto Nebbia y Tanguito escribieron la primera canción, Moris grabó el primer disco, Almendra fue el primer

Los Grillos - Vibraciones Latinoamericanas (1976)

Nuestro amigo Julio Moya sigue con su tarea de palentólogo del rock latinoamericano y ahora nos presenta la historia de Los Grillos, y resumiendo les diría que si Jethro Tull hubiera sido andino, probablemente hubiese grabado este disco, ya que encontrarás flautas similares a Ian Anderson, junto con instrumentos de viento autóctonos. Un disco con 8 temas con una duración total que no alcanza la media hora. De alguna manera puede trazarse un paralelismo con Los Jaivas de Chile, pero se debe tener en cuenta que la raíz folclórica es diferente y con un sonido propio de altiplano. Aquí, uno de los discos más importantes de la historia del rock en Bolivia, y una de las mayores joyas del rock boliviano, expresión del folk rock temprano donde Los Grillos fundadon el sonido del Neo Folclore Andino, incursionando en el Moog a modo de "sintetizador andino". Si disfrutaste de "Alturas de Macchu Picchu" de Los Jaivas, o los bolivianos Wara o los argentinos Contraluz, descubrirá

Varios Artistas - Reimagining in the Court of the Crimson King (2024)

La realeza de la música rock se reunió para recrear uno de los álbumes más importantes e influyentes de la historia, la obra maestra de King Crimson de 1969, "In ​​The Court Of The Crimson King", y Jorge Nuñez se volvió a acordar de ustedes y es por ello que ahora lo presentamos en sociedad: uno de los álbumes más icónicos de la historia de la música, considerado por los críticos como una grandiosa obra maestra, vuelve a ser noticia porque recién salió del horno su última resurrección, con reversiones a cargo de miembros de King Crimson, como Mel Collins y Jakko M. Jakszyk, así como de Todd Rundgren, Chris Polonia (Megadeth), Ian Paice (Deep Purple), Joe Lynn Turner (Rainbow), James LaBrie (Dream Theater), Carmine Appice (Vanilla Fudge, Cactus, Pappo's Blues, etc.), Steve Hillage (Gong) y más. Y lo más divertido es que seguramente quedarás paralizado de oír como cada tema es interpretada por esta extraordinario banda de músicos. Para que te entretengas en el finde, es

Spinetta y el sonido primordial

“Si vinieron para que les hable de mí, me voy –dijo Luis Alberto Spinetta al tomar el micrófono–. Yo les voy a hablar de la música en una faz filosófica: del origen de la materia sonora y su repercusión en la civilización. Y solo contestaré preguntas sobre eso, no sobre Spinetta.” Eran pasadas las 19.30 del lunes 2 de julio de 1990 cuando el Flaco dio comienzo a su “clínica de poesía musical” en la Casa Suiza –ubicada en Rodríguez Peña 254 de la ciudad de Buenos Aires–, con entrada libre y gratuita, ante más de cuatrocientas personas. Años después, esa charla se convertiría en un libro apócrifo: El sonido primordial. Por Patricio Féminis Esta es la historia de aquella conferencia de Spinetta que llegaría a tener una edición pirata, como si fuera un libro suyo, y que llegaría a venderse por dos editoriales distintas en Mercado Libre. Aquel lunes invernal de 1990, el guitarrista, cantante y creador asistió para exponer en la Casa Suiza (hoy tapiada por un edificio en construcción)

La Mesa Beatle: Borges y el Squonk de Genesis. Un homenaje a las aventuras íntimas de los perdedores

Buenos días desde La Barra Beatles, hoy nos vamos rumbo a la Inglaterra de los 70´s, una era de oro que pone melancolía en La Barra. La idea es  rememorar a una de las grandes bandas de rock progresivo, que en Argentina empezamos a conocer años después de sus primeros lanzamientos. En 1976 Genesis publica el primer disco luego de la traumática partida de su cantante y miembro fundador Peter Gabriel. Representó todo un reto, porque mucha gente teorizó que con esa separación el grupo había sufrido una herida de muerte. Perder un cantante y compositor de la talla de Peter creo que preocupa a cualquiera, pero los muchachos no arrugaron y decidieron continuar, el resultado fue uno de sus mejores trabajos: “A trick of the tail”. Para algunos la traducción literal sería “Un truco de la cola”, otros hablan de un giro idiomático que sería algo así como “El diablo estuvo metiendo la cola”, también lo traducen como “Un golpe de timón”. Por Jorge Garacotche Este bellísimo álbum fue grabado entre

La indiferencia de los tiranizados duele como la crueldad de los tiranos

Para John Berger, "las tiranías no solo son crueles por sí mismas, sino que, además, ejemplifican la crueldad y, por consiguiente, fomentan la capacidad para serlo y la indiferencia frente a ella entre los tiranizados". Estamos frente a una avanzada masiva sobre nuestras vidas. Hacia donde miremos vemos catástrofe. Despidos, comedores sin comida, cierre de programas que garantizaban derechos, desfinanciamiento de las universidades públicas, desregulación de las tarifas, represión de la protesta, el endeudamiento como mecanismo de reducción de la posibilidad de vivir y una larga  lista que se actualiza día tras día. Frente a esto, se suceden expresiones que intentan revalorizar las vidas dañadas: "Nuestro trabajo era importante", "no todos somos ñoquis" o ―peor aún― "yo no era ñoqui", "lxs docentes no adoctrinamos", "perdimos compañerxs que hacían". Tenemos que producir valor a partir de la desgracia. Vivir se convirtió en

Miguel Abuelo & Nada - Miguel Abuelo & Nada (1973)

Mucho antes de agitar la primavera alfonsinista de la recién llegada democracia con la segunda encarnación de Los Abuelos de la Nada allá por los años 80, había nacido en Francia la primera versión de esta agrupación, pariendo además un disco maldito del que poco se llegó a conocer por estos parajes, e inclusive la primera edición para el mercado argentino de este disco salió no hace mucho. Un disco particular, donde hay hard rock, psicodelia, experimentación, y además una historia muy rica donde terminan apareciendo muchos de los máximos referentes del rock argentino, y donde Miguel Abuelo, ese niño de la calle devenido en poeta iluminado por la psicodelia y el folclore del noroeste es el protagonista casi casi, principal. Recién lo acabamos de presentar y ahora revivimos este disco tan particular. Un disco de culto que no puede estar afuera del blog cabeza. Artista: Miguel Abuelo & Nada Álbum: Miguel Abuelo & Nada Año: 1973 Género: Hard rock / Rock psicodélico Duració

Incredible Expanding Mindfuck (I.E.M.) - I.E.M. (2010)

Una reedición de la discografía completa de I.E.M., y convengamos que estos temas de I.E.M. eran muy difíciles de encontrar dado que sus ediciones fueron de una tirada muy limitada que ya se había por descatalogada ya hace mucho tiempo. Otro enorme aporte de LightbulbSun, y para aquellos que no están familiarizados con esto, les cuento que estos son los álbums en formato boxset de I.E.M., o Incredible Expanding Mindfuck, o el apodo de Steven Wilson para sus exploraciones psicodélicas y krautrock creadas entre lo que va de 1996 hasta el 2001 que pueden resultarte una especie de shock. Este compilado reúne con los 3 álbumes de estudio en este período, y definitivamente har algunas joyas aquí que seguramente serán muy apreciadas por el público cabezón. E ideal para cerrar otra semana a pura música en el blog cabeza, aquí tienen mucha música por si el fin de semana se presenta feo y lluvioso y se te joda el asado... con esto no te vas a aburrir. Artista: Incredible Expanding Mindfuck Á

El arte es para el aire: El aplausómetro, según Spinetta

"No puedo evaluar lo que hago con el aplausómetro. Me importa un belín. La pregunta es, si un pintor que sabe que es bueno sabe también que no va a poder mostrar sus cuadros, ¿los pintaría? Más bien. Le chupa un huevo. Un novelista, un poeta que es capaz de escribir versos, ¿qué necesita? Nada; va a Pippo, se pide un fresco y batata, se sienta y en el mantel, nomás, escribe LAS palabras. ¿Tecnología? Nada ¿Costo? Cero. Si uno hace música y sabe que suena bien, no importa si otro cree que no es tan buena. ¿Qué? ¿La voy a parar y no la voy a componer? No. Me importa un pito. Es el aire para quien yo la estoy haciendo y es el aire el que me va a devolver lo que yo quiera sembrar allí. ¿Acaso una novela se aplaude? Se lee en soledad. El arte es un trabajo individual y suena dentro del recinto en el que se lo trabaja. De ahí a que se crea que es una necesidad que otro lo escuche hay un largo espacio. Y, por otro lado, cuando la música es buena, cura. Cura. Sólo eso. Entonces, ahí sí

Bosón de Higgs - Los Cuentos Espaciales (2023)

Para terminar la semana presentamos un disco doble muy especial, desde Ecuador presentamos a una banda que ya tiene un nombre particular que los define: Boson de Higgs, que como ópera prima se manda con un concepto inspirado en el cosmos, la astronomía en un viaje interestelar de 15 temas que tienen además su versión audiovisual, en un esfuerzo enorme que propone la divulgación científica y cultural de un modo nuevo, donde se aúnan la lírica en castellano, el rock alternativo, la psicodelia, el space rock, el hard rock y el rock progresivo. Un álbum doble sumamente ambicioso, con muy buenas letras y musicalmente muy bien logrado y entretenido en todos sus temas (algo muy difícil de conseguir, más pensando si es su primera producción) y donde puede verse en todo su esplendor en su versión audiovisual que obviamente no está presentado aquí salvo en algunos videos, pero que pueden ver en la red. En definitiva, dos discos muy buenos y realmente asombrosos para que tengan para entretenerse

Ideario del arte y política cabezona

Ideario del arte y política cabezona


"La desobediencia civil es el derecho imprescriptible de todo ciudadano. No puede renunciar a ella sin dejar de ser un hombre".

Gandhi, Tous les hommes sont frères, Gallimard, 1969, p. 235.