Ir al contenido principal

Warren Zevon: La Cuenta Está Saldada

Una canción para Fin de Año: Warren Zevon estaba en su cuarto del Hollywood Hawaiian Hotel, contemplando su taza vacía de café y pensando que la gitana no le había mentido ("Vas a beberte todas las margaritas de Los Angeles"). El año era 1973 y el Hollywood Hawaiian Hotel, a pesar de su elegante nombre, no tenía playa propia ni vista al mar siquiera: era una cueva adonde desembocaban los borrachos y yanquis que ya no podían pagar ni el Tropicana. Sunset Boulevard y Gower Avenue: mejor que no se te rompiera el auto si andabas por ahí. Pero Warren Zevon había terminado en ese antro su descenso en palo enjabonado hacia el fondo de los fondos. El encargado lo había dejado encerrado en el cuarto hasta que pagara lo que debía. Ahí estaba, hecho una ruina, sentado en la cama con una taza vacía colgando de la mano, mirando la pared despintada que tenía delante y el aparato de aire acondicionado que, a pesar del ruido que hacía, no enfriaba ni medio, cuando una melodía empezó a abrirse paso en su cabeza. Vaya a saberse cuánto tiempo estuvo así hasta que, amparado en la oscuridad, se escabulló a la azotea por la ventanita del baño y saltó desde ahí a la caja de la camioneta de uno de los Beach Boys, que lo esperaba afuera. Hizo toda la maniobra tarareando la melodía esa que sonaba en su cabeza y, cinco años después, la convirtió en la canción más hermosa que compuso en su vida. Es como un aleph esa canción: todo lo que le pasó antes y todo lo que le pasó después en la vida a Warren Zevon está contenido en esos cinco minutos que él bautizó “Desperados Under the Eaves” (algo así como “Desesperados al reparo”), pero a Bob Dylan le gustaba llamarla “la sinfonía del aire acondicionado”.

Por Juan Forn


Podría contarles un poco de la vida de Zevon: que nació en Chicago en 1947 y llegó a California con su padre matón y su madre mormona, huyendo de la ley (y con el apellido cambiado de Zevotosky a Zevon). Que pasó de tocar el piano delante de Stravinsky en el Conservatorio de Los Angeles a enloquecer con su guitarra eléctrica a cualquier músico de la Costa Oeste que aceptara tocar con ese quinceañero precoz (“Tienes buenas ideas, Warren, pero te excitas demasiado”). Que tuvo dos intentos de suicidio. Que logró dejar el alcohol para caer en la heroína. Que dejó la heroína y juró no ver más a un médico hasta que, quince años después, le descubrieron un cáncer inoperable y le dieron tres meses de vida. Que ninguno de sus discos tuvo éxito pero lo admiraban Dylan y Jerry Garcia, Neil Young y Springsteen, los Pixies y los REM, Hunter Thompson y Stephen King. Da igual lo que cuente de él porque lo que tiene de extraordinario esa canción es que funciona como un queso gruyere: puro agujero, para que uno ponga adentro su propia historia y sienta que la canción habla de uno, de todos.

Empieza casi banalmente, con unos violines de fogata folk y un pianito detrás y la voz de Zevon diciendo: “Estaba en mi cuarto del Hollywood Hawaiian Hotel / mirando mi taza vacía de café / pensando que la gitana no me había mentido / y que me voy a beber todas las margaritas de Los Angeles”, y ahí nomás empieza a levantar la apuesta, en la letra y en la música: “Y aunque California se esté deslizando en el Océano / como dicen los místicos y los estadísticos / Yo predigo que este motel va a seguir en pie / hasta que yo pague mi cuenta”. Entonces viene el estribillo: “¿No parece fulminarnos el sol entre los árboles? / ¿No parecen ladrones crucificados, los árboles? / ¿No te sentís como un desesperado al reparo? / Despertándote cada mañana con temblor en las manos / Buscando todavía una chica que te entienda / pero nunca vas a ser libre salvo en tus sueños / y el sol te va a fulminar”. Entonces baja todo de golpe para empezar la segunda estrofa: “Estaba en mi cuarto del Hollywood Hawaiian Hotel / escuchando el rumor del aire acondicionado, que hacía así…”. Y, a partir de ahí, Warren sigue cantando pero con la boca cerrada, como si él fuera el rumor del aire acondicionado, como si cantara con la boca contra un peine forrado de papel metálico. La canción entera dura 288 segundos; los últimos 144 son ese murmullo. Pero por debajo se van sumando cuerdas y bronces y baterías y guitarras eléctricas y coros, y la canción crece y crece hasta que uno tiene la sensación de que está parado al amanecer frente al mar, con el viento en la cara, y todo el mundo comienza.

Zevon tardó cinco años en grabarla porque la quería grabar así. Se sorprendía cuando les pasaba en pentagrama a los músicos lo que tenían que tocar y ellos le pedían que mejor se los mostrara en la guitarra. “Todas mis canciones pueden reducirse a su mínima expresión, para cuando mi carrera se hunda definitivamente y termine tocando en bares de camioneros. Pero, si hay dinero, prefiero dejar una versión de estudio que se parezca más al modo en que suena esa canción en mi cabeza”, dijo una vez. “Tengo una teoría muy aburrida y más bien deprimente. Toda forma de arte evoluciona y muere, o se deshace en las formas que vienen después. Yo quería ser un compositor de sinfonías. Pero el último de esa raza fue, no sé, Webern, Bartok, Schoenberg. Cuando llegué, la música clásica ya se había deshecho en mil pedazos. Yo fui juntando los pedazos que encontré, y me temo que no anduve por los lugares correctos, precisamente. La decrepitud, la supervivencia, me parece un eje más apropiado que la rebeldía juvenil para mis canciones”.

Warren Zevon volvió al Hollywood Hawaiian Hotel cinco años después de su huida. Se presentó en el mostrador y dijo que venía a pagar su cuenta. El encargado le preguntó qué cuenta. Warren le alcanzó una copia de su disco y le dijo que pusiera el último tema. El encargado escuchó la canción y dijo que, con firmarle la tapa del disco, la cuenta quedaba saldada. Cada Navidad y Año Nuevo desde que me prohibieron el alcohol (y van a ser veinte años ya de eso), a la hora de brindar, yo escucho esa canción en mi cabeza y pienso lo mismo: la cuenta está saldada, amanece en el mar, el mundo comienza.

Juan Forn



Comentarios

Lo más visto de la semana pasada

Los 100 Mejores Álbumes del Rock Argentino según Rolling Stone

Quizás hay que aclararlo de entrada: la siguiente lista no está armada por nosotros, y la idea de presentarla aquí no es porque se propone como una demostración objetiva de cuales obras tenemos o no que tener en cuenta, ya que en ella faltan (y desde mi perspectiva, también sobran) muchas obras indispensables del rock argento, aunque quizás no tan masificadas. Pero sí tenemos algunos discos indispensables del rock argentino que nadie interesado en la materia debería dejar de tener en cuenta. Y ojo que en el blog cabezón no tratamos de crear un ranking de los "mejores" ni los más "exitosos" ya que nos importa un carajo el éxito y lo "mejor" es solamente subjetivo, pero sobretodo nos espanta el concepto de tratar de imponer una opinión, un solo punto de vista y un sola manera de ver las cosas. Todo comenzó allá por mediados de los años 60, cuando Litto Nebbia y Tanguito escribieron la primera canción, Moris grabó el primer disco, Almendra fue el primer ...

Iterum Nata - From the Infinite Light (2024)

"Iterum Nata" significa "Born Again" en latín, una descripción apropiada para lo que presenta este disco, el quinto álbum de estudio de este proyecto que me ha puesto en un brete a la hora de catalogarlo ¿folk rock, folk picodélico, post rock, post metal, prog folk, rock progresivo,  black y doom metal?. Lo mejor es que es todo eso, pero todo junto. Desde Finlandia presentamos un trabajo que nos envuelve con una música atmosférica oscuramente melódica y lírica, influenciada por el paganismo y el ocultismo, y que podemos describir como un cruce entre los grupos neofolk melancólico como Tenhi, el folk psicodélico de Linda Perhacs más el misticismo musical espectral de Dead Can Dance y el progresivo de Strawbs, junto con los primeros King Crimson, sumadas a las inquietantes narrativas de Nick Cave, y tendremos algo parecido a la propuesta musical, política y filosófica de Iterum Nata, algo que creo que ya podemos intuir al ver su arte de tapa. Artista: Iterum Na...

Los Grillos - Vibraciones Latinoamericanas (1976)

Nuestro amigo Julio Moya sigue con su tarea de palentólogo del rock latinoamericano y ahora nos presenta la historia de Los Grillos, y resumiendo les diría que si Jethro Tull hubiera sido andino, probablemente hubiese grabado este disco, ya que encontrarás flautas similares a Ian Anderson, junto con instrumentos de viento autóctonos. Un disco con 8 temas con una duración total que no alcanza la media hora. De alguna manera puede trazarse un paralelismo con Los Jaivas de Chile, pero se debe tener en cuenta que la raíz folclórica es diferente y con un sonido propio de altiplano. Aquí, uno de los discos más importantes de la historia del rock en Bolivia, y una de las mayores joyas del rock boliviano, expresión del folk rock temprano donde Los Grillos fundadon el sonido del Neo Folclore Andino, incursionando en el Moog a modo de "sintetizador andino". Si disfrutaste de "Alturas de Macchu Picchu" de Los Jaivas, o los bolivianos Wara o los argentinos Contraluz, descubrirá...

El Ritual - El Ritual (1971)

Quizás aquellos que no estén muy familiarizados con el rock mexicano se sorprendan de la calidad y amplitud de bandas que han surgido en aquel país, y aún hoy siguen surgiendo. El Ritual es de esas bandas que quizás jamás tendrán el respeto que tienen bandas como Caifanes, jamás tendrán el marketing de Mana o la popularidad de Café Tacuba, sin embargo esta olvidada banda pudo con un solo álbum plasmar una autenticidad que pocos logran, no por nada es considerada como una de las mejores bandas en la historia del rock mexicano. Provenientes de Tijuana, aparecieron en el ámbito musical a finales de los años 60’s, en un momento en que se vivía la "revolución ideológica" tanto en México como en el mundo en general. Estas series de cambios se extendieron más allá de lo social y llegaron al arte, que era el principal medio de expresión que tenían los jóvenes. Si hacemos el paralelismo con lo que pasaba en Argentina podríamos mencionar, por ejemplo, a La Cofradía, entre otros muchos ...

The Beatles - Get Back (2021)

Los tres episodios del documental "The Beatles: Get Back" y el reencuentro con la felicidad. Siempre elegimos algo especial para empezar la semana pero esta vez es distinto. Y es que comenzamos la semana en el blog cabeza con un tremendo aportes de LightbulbSun, al que le anexamos una certera nota de Marcelo Figueras para Cohete a la Luna el 10 de diciembre último. Se trata de nada menos que "Get Back", el documental beatle, el material de archivo inédito de la realización de el legendario álbum "Let It Be", un reality show diferido por más de 50 años de la que quizás fue la banda de rock más influyentes de la historia, en un documental que ya es legendario. ¿Cómo han renido tanto material  oculto todos estos años a tantos millones de fans? y otro de los grandes aportes del blog cabeza (y de LightbulbSun) para comenzar la semana con todo. Artista: The Beatles Película: Get Back Año: 2021 Género: Documental Duración: 468 minutos Nacionalidad:...

Jano - Faros Eolos (2024)

Una belleza sinfónica con aires tangueros. Y nos vamos para Córdoba, Argentina, porque tenemos el agrado de presentar un disco que es hermoso por donde se lo escuche, con una composición madura y lograda, basada en un concepto rico y profundo. Ya presentamos el anterior trabajo de Jano, y ahora éste, su último álbum que forma parte de un concepto presentados en cuatro discos, de los cuales es el segundo que continúa con las historias dibujadas en oníricos paisajes donde dominan los climas forjados por islas desiertas, soledades innombrables, faros que no guían sino que repelen, y donde fantasía y realidad se unen a través de la música, donde temas atmosféricos, hipnóticos y melancólicos fusionan de manera experta estilos de los 70 con marcas urbanas argentinas pero con un sonido moderno y una producción extremadamente cuidada. Musicalmente, estrictamente hablando, tiene un claro enfoque bastante metido en el rock progresivo sinfónico italiano y con influencias marcadas de bandas como...

Don Cornelio y la Zona - Don Cornelio y la Zona (1987)

"Hola, les saludo desde Ecuador, he seguido la página desde hace unos años y han sido un gran soporte emocional en mi vida gracias a la música que me han compartido. Quería preguntarles si pueden revivir este álbum que descubrí hace poco". ¿Y cómo negarnos ante ese comentario?. Como homenaje al recientemente desaparecido Palo Pandolfo (uno de los cantautores más destacados de la música argentina en las últimas tres décadas), reflotamos un discos que Artie había publicado hace ya mucho tiempo. Acá está, entonces, el disco homónimo de Don Cornelio, muy pedido por varios, como recuerdo de ese referente del rock argento que fue el poeta del rock "Palo" Pandolfo, con su combinación de lirismo y violencia reconocible en su rock, algunos dicen que fue heredero artístico de Pescado Rabioso , y desde hace 35 años que vino siendo bastante más que el flaquito que vino a poner oscuridad en el pop alfonsinista. Artista: Don Cornelio y la Zona Álbum: Don Cornelio y la Zona ...

Naikaku - Shell (2006)

Artista: Naikaku Álbum: Shell Año: 2006 Género: Heavy Progresivo/Jazz Rock Duración: 61 minutos Nacionalidad:  Japón Lista de Temas: 1. Crisis 051209 (15:18)  2. Resentiment (8:55) 3. I Found A Deep Dark Hole And I Am Going To Jump In!... (7:01) 4. Lethe (9:01) 5. Shell (16:28) 6. Tautrogy (3:46) Alineación: - Satoshi Kobayashi / Bajo eléctrico - Kazumi Suzuki / Flauta traversa - Norimitsu Endo / Batería - Mitsuo / Guitarras eléctrica, acústica y trompeta Invitados: - Kei Fushimi / Guitarra eléctrica - Daishi Takagi / Teclados Nuevamente aparece el Mago Bondadoso de Alberto y les trae un gran disco que habían estado pidiendo y que teníamos caído desde hace rato. El alocado estilo prog japonés en un disco (y un grupo) que les recomiendo....

King Crimson Collector's Club (1998 - 2012)

Artista: King Crimson Álbum: King Crimson Collector's Club Año: (1998 - 2012) Género: Progresivo ecléctico Nacionalidad: Inglaterra Lista de Discos: KCCC 01 - [1969] Live at the Marquee (1998) KCCC 02 - [1972] Live at Jacksonville (1998) KCCC 03 - [1972] The Beat Club Bremen (1999) KCCC 04 - [1982] Live at Cap D'Agde (1999) KCCC 05 - [1995] On Broadway - Part 1 (1999) KCCC 06 - [1995] On Broadway - Part 2 (1999) KCCC 07 - [1998] ProjeKct Four - The Roar Of P4 - Live in San Francisco (1999) KCCC 08 - [1994] The VROOOM - Sessions April - May (1999) KCCC 09 - [1972] Live At Summit Studios Denver, March 12 (2000) KCCC 10 - [1974] Live in Central Park NYC (2000) KCCC 11 - [1981] Live at Moles Club Bath (2000) KCCC 12 - [1969] Live in Hyde Park, July 5 (2002 KCCC 13 - [1997] Nashville Rehearsals (2000) KCCC 14 - [1971] Live at Plymouth Guildhall, May 11 (2CD) (2000) KCCC 15 - [1974] Live In Mainz, March 30 (2001) KCCC 16 - [1982] Live in Berkeley (2CD) (200...

Emerson, Lake & Palmer - Brain Salad Surgery (Jakko M Jakszyk Stereo Mix) [B Side Singles] (1973 / 2014)

Para ir cerrando otra semana a pura música y sorpresas, el Mago Alberto nos trae una de sus clásicas rarezas, o dos porque esta es una versión de dos discos, y ahora copio su propia explicación de esto que está presentando ahora, por sus propias palabras: "En la maratón cibernética a la que nos somete la divina internet, y con la velocidad que nos obliga a correr, muchas veces nos perdemos de pequeñas grandes cosas, tal es el caso de la edición de esta joya que hoy nos convoca, "Brain Salad Surgery" (obra compleja y hermosa del mundillo progresivo si las hay), pues bien la Edición Deluxe del 2008 y que oportunamente se posteara en CDM, nada tiene que ver con esta edición, tampoco tiene que ver la nueva mezcla del año 2000, acá puso los deditos el señor Jakko M. Jakszyk (King Crimson) y el resultado es una versión totalmente distinta a la original, pero no hablamos de planos o efectos, acá desde los primeros acordes todo suena distinto, hay pequeños sonidos nuevos, las in...

Ideario del arte y política cabezona

Ideario del arte y política cabezona


"La desobediencia civil es el derecho imprescriptible de todo ciudadano. No puede renunciar a ella sin dejar de ser un hombre".

Gandhi, Tous les hommes sont frères, Gallimard, 1969, p. 235.