Ir al contenido principal

El Trasfondo Cínico De La "Posverdad": Aceptando Las Mentiras

Cuando Eric Alterman y David Roberts aplicaron el término "posverdad" al discurso político, se referían a los actos de manipulación por parte de los representantes políticos, quienes, sin ningún escrúpulo, mentían para conseguir sus objetivos. La invención de la existencia de armas químicas en Iraq o la negación del cambio climático eran claros ejemplos de posverdades. En su origen, por tanto, el término apareció como eufemismo. Concebida de este modo, como disfraz de la mentira, la posverdad aludía a una realidad discursiva tan antigua como la retórica clásica. Efectivamente, desde que aparece la Retórica en el siglo V a.C., la verdad fue desplazada por la verosimilitud, auténtico objetivo del discurso político, pues la finalidad de la retórica política es el poder, para cuya conquista pueden ser más eficaces las falacias que los silogismos.


La histeria estalló en Washington mientras la OTAN montaba todo un dispositivo para acusar a Rusia de continuar la propaganda de la desaparecida Unión Soviética. Los medios dominantes tratan de desacreditar al nuevo presidente de Estados Unidos (uno de los reyes de la posverdad) acusándolo de cualquier cosa, y este los acusa a ellos de propagar noticias falsas. Este cruce interminable de acusaciones se ve amplificado por el súbito desarrollo de las redes sociales, que antes sirvieron al Departamento de Estado como herramienta contra los regímenes nacionalistas pero que ahora se convierten en foros populares contra los abusos de las élites… empezando por las de Washington.

Aún cuando la palabreja "posverdad" suene a novedad posmoderna, y contenga aires futuristas escondiendo intenciones retrógradas, tales construcciones de sentido no son nuevas. En todas las épocas los detentores de privilegios debieron elaborar argumentos para consumo de los oprimidos a fin de justificar lo injustificable. El emperador o rey descendiente o elegido por los dioses es una reliquia propagandística cuasi insuperable. Pero también las estratificaciones sociales, con sus respectivos estigmas de capacidad e incapacidad son muestra cabal de antiguas "posverdades".
Mucho se escribe hoy sobre la posverdad, sobre relatos mediáticos intencionales cuya misión no es informar o esclarecer, sino torcida- y escabrosamente, defender la visión del poder. Relatos y guiones que son escritos por usinas financiadas por el mismo poder y divulgadas con apenas algún matiz local por pedantes figurones de utilería periodística. Una especie de plantilla en las que se repiten motivos y argumentaciones, cambiando tan sólo los nombres y escenarios coyunturales.
A dichas matrices responde, por ejemplo, el sarampión pseudomoralista de las derechas contra la corrupción, habilitando así la cacería institucional en los juzgados. La casta judicial, fácilmente manipulable, corrompible y extorsionable, pasa entonces a cumplir tareas antes reservadas a cuerpos de seguridad en décadas anteriores. La intención de tales ataques es perfectamente legible y apunta, en el corto plazo, a ensuciar la imagen de líderes sociales a ojos de la opinión pública, desmoralizando a potenciales seguidores o votantes; El otro objetivo, de mucho mayor calado, es torpedear la confianza en la política y la organización colectiva como modalidad de posibles transformaciones, dejando así el camino expedito al mantenimiento del poder corporativo empresarial sobre el todo social.

Podríamos continuar con otros ejemplos. Sin embargo, el motivo de las presentes líneas no es la idea de abundar en el desenmascaramiento de falsedades que, a suficiente distancia histórica, parecen pueriles y sin embargo, en el esplendor de su respectiva época, fueron verdades absolutas, irrefutables, irremediables y eternas.
A continuación, la historia de cómo la mentira ha ido reemplazando a la verdad y cómo los pueblos lo han aceptado mensamente, incluso hasta en el hecho de votar, donde eligen a quien saben les miente con las promesas más bonitas.


Como es sabido, la política es una realidad mediática (que conocemos a través de los medios) y mediatizada (condicionada por ellos), hecho que condiciona su inmersión en una lógica comercial: como trata de dirigirse a un blanco constituido por la mayor cantidad posible de receptores, buscará conmover emocionalmente al destinatario con un discurso muy simple que, a ser posible, active primitivas estructuras mentales que refuerzan la identificación, el sentido de pertenencia. De ahí que, con mucha frecuencia, el discurso político abandone el plano argumentativo, las pruebas racionales y la descripción objetiva de los hechos para vestirse de relato. Entonces ya no se rige por las reglas de la lógica, presentación de datos-pruebas, y verificación mediante el contraste con la realidad, sino que se conforma según las pautas del relato de ficción, donde la exigencia de verdad ha sido sustituida por cierta coherencia interna que hace creíbles, una vez situados en el plano de lo ficticio, la acción y la propia creación de los personajes. En esta labor de narrativización juegan un papel muy importante todo tipo de recursos retóricos. De hecho, el discurso político es, en sí mismo, una gran operación metonímica en la medida en que los medios seleccionan aquellas zonas de la realidad que desean iluminar y ocultan el resto. Hipérboles, metáforas, metonimias contribuyen a la configuración de ese mundo intermedio o pseudorrealidad mediática donde vivimos.

Aceptada la mentira como herramienta discursiva con una finalidad persuasiva, puede ocurrir que el divorcio entre el discurso de los políticos y lo que ocurre en la vida real de los ciudadanos sea tan radical que conduzca a su "desarticulación" o "dislocación" (E. Laclau y Ch. Mouffe), a una desconcertante "espiral del cinismo" (J. N. Capella y K. Jamieson), que despierta la desconfianza y el distanciamiento. Todos somos testigos recientes de cómo la verdad es sustituida por secuencias narrativas (verdaderas "retahílas" que venden humo, intrigas dosificadas en serie, con los correspondientes recuerdos de capítulos anteriores) donde casi todo vale, incluida la mentira en todas sus manifestaciones: la contradicción entre las palabras y los hechos, o entre enunciados presentes y otros anteriores; la falta de verdadera intencionalidad en los compromisos; la oscuridad o el silencio.






Hace ya, pues, muchos siglos que la mentira, en todas sus formas, es parte constitutiva del discurso político. Entonces… ¿qué hueco expresivo viene a cubrir la palabra posverdad? Si el eufemismo puede explicar el nacimiento del término, cabe preguntarse por las causas recientes de su recuperación después de 12 años de vida silenciosa. La conmoción social producida por la victoria de Trump o el Brexit han encontrado en el término, elegido como palabra del año por el Diccionario de Oxford, una expresión capaz de dar cuenta de las "circunstancias en que los hechos objetivos influyen menos en la formación de la opinión pública, que los llamamientos a la emoción y a la creencia personal". Parece interesante analizar si en el uso actual de la expresión se ha producido algún desplazamiento semántico con respecto a su valor original.

En principio, la mayoría de los artículos de prensa sobre el tema justifican la necesidad de recuperar el neologismo por la gran diferencia cuantitativa que se observa en nuestra época con respecto a otras anteriores en el uso de la mentira. De hecho, se ha convertido en lugar común hablar de época de la posverdad. No parece creíble, sin embargo, que los políticos de hoy mientan más que sus antecesores. La clave no parece estar en una sorprendente mutación de la naturaleza humana, sino más bien en los medios tecnológicos que tenemos a nuestro alcance. En este sentido, hoy el término aparece invariablemente asociado al uso de las redes sociales, que tienen la potencialidad de amplificar y expandir al infinito una noticia cualquiera gracias a la utilización de un criterio algorítmico en la selección, y como consecuencia de un ritmo tan vertiginoso en la producción que hace imposible su verificación.

Viendo las cosas con más detalle, se observa que los cambios en la designación no son solo cuantitativos. Para empezar, a diferencia de la definición original, que ponía el foco en el carácter del discurso (verdadero / falso) y en los sujetos que lo producían (la Administración Bush, los políticos que negaban el cambio climático), la de Oxford centra la atención en los receptores, esa opinión pública movida más por las emociones y creencias que por las razones. Ahora no se destaca el acto de la mentira en sí misma, sino la actitud de la población, para quien la verdad habría dejado de ser algo relevante, comportándose al modo del "electorado fascinado" de U. Eco, que no solo admite el engaño como parte natural de la política, sino que además parece aceptarlo gustosamente. En nuestra opinión, esta teoría del "receptor cínico" proyecta el cinismo de los representantes a los representados, pues la falta de interés por los aspectos racionales y objetivos del discurso puede explicarse por otros factores, entre ellos, la citada espiral del cinismo, que ha generado desconfianza, indiferencia y apatía en la población. Desprovisto el discurso político de todo apoyo argumentativo y desarraigado de lo real, no es nada extraño que la intención de voto se vea determinada por motivaciones irracionales: "Las creencias no necesitan ser coherentes para ser creíbles" (Bauman)

Por otra parte, la gran cantidad de publicaciones sobre el tema, que se han sucedido justo tras la victoria de Trump, revelan un cambio en la naturaleza del sujeto "posverdadero", esto es, en el agente de la mentira. En principio, el término se refería al discurso elaborado por los medios de comunicación del sistema, que difundían las consignas del poder (E. Alterman). "La diferencia ahora consiste en que el Diccionario Oxford no sitúa la posverdad como un arma a disposición de la clase política dominante, sino como un poderosísimo y descontrolado recurso de los súbditos" (R. Amón, El País, 17/11/2016) A estas alturas, se diría que el tema en cuestión no tiene que ver con la reivindicación de la verdad, sino más bien con el monopolio de la mentira. Efectivamente, si leemos con detalle las publicaciones, observamos que la alarma social que lleva al reconocimiento del neologismo nada tiene que ver con el hecho mismo de mentir o con el aumento escandaloso de las mentiras, sino con la naturaleza del actual sujeto de la posverdad, las redes sociales: "… en el pasado las grandes mentiras eran una construcción nacional que sólo podían ser creadas por los aparatos de propaganda estatales. Mientras que la actual fragmentación de las fuentes de información, especialmente las promovidas por las redes sociales, permite mentir en gran escala a provocadores, agitadores, mercenarios y activistas…" (J. Fontevecchia, Perfil, 25/09/2016).

Es sabido que las redes sociales suponen un enorme apoyo, pero también una gran amenaza para los medios tradicionales, los cuales han perdido la exclusividad como fuentes primarias de información. Internet supone la transformación de las relaciones de poder (Gallardo-Paúls y Enguix Oliver), la instauración de una nueva lógica política (Innerarity). Las redes establecen marcos de debate, y, en esta medida, intervienen también en el establecimiento de la agenda, y, frente a los medios tradicionales, ofrecen inmediatez, rapidez y acceso directo a los datos, desintermediación. Todo esto supone la alteración del sistema comunicativo, y, en definitiva, del control discursivo que permite el acceso al poder. Ciertamente, puede afirmarse que los medios han perdido gran parte del poder de distribuir sus noticias. Doce años después de su creación, Facebook, con 1.800 millones de usuarios y unas ventas publicitarias de 27.000 millones de dólares al año, puede considerarse como el medio de información por excelencia del planeta, y, en principio, no dispone de límites o regulaciones externas.

La posverdad renace justo en el momento en que las redes se van consolidando cada vez más como actores políticos que producen información, generan debate social y logran movilizar a la población de forma imprevisible. Ante tal subversión en el mundo de la comunicación, los medios tradicionales han actuado culpando a Facebook del triunfo de Trump, lo cual supone una sobrevaloración del poder de las redes y una minusvaloración de la libertad y capacidad de reflexión del electorado. ¿De verdad puede afirmarse que el triunfo de Trump se debe simplemente a la difusión de mentiras por Facebook? Causas más profundas, como la gran crisis económica y social que afecta al país, la tasa creciente de paro por la destrucción del tejido industrial o la precarización de la vida en todos los niveles han podido condicionar un voto "antisistema", una reacción negativa contra lo establecido. No obstante, ante la presión del grupo dominante que ostenta el poder, Zuckerberg ha anunciado un plan de siete puntos contra las noticias falsas en Facebook (R. Jiménez Cano, El País, 21/11/2016) en el que se contempla la actuación de grupos humanos externos (especialmente procedentes de los medios de comunicación tradicionales) que intervendrían en la selección y verificación de las noticias. Nada se dice, sin embargo, acerca de los criterios que se utilizarán para determinar el carácter verdadero o falso de un texto. Hay quien ha propuesto incorporar a sus algoritmos "excepciones para medios que invierten en información, son sometidos a controles de calidad y rinden cuentas" (D. Alandete, El País, 27/11/2016). En el fondo, "se trata de corregir el rumbo de la promoción de noticias" (R. Jiménez Cano, El País, 16 /11/2016), esto es, de seguir monopolizando la selección de temas y su enfoque discursivo.

Lógicamente, quienes defienden la existencia de una época de la posverdad presuponen una anterior en la que lo objetivo, lo racional y la verdad eran criterios dominantes. El término, claramente valorativo, opone una hipotética Edad de la luz, ya agotada, frente a la actual Edad Oscura. En este sentido, la necesidad de recuperar el concepto no tiene que ver tanto con el deseo de reivindicar la verdad como con la frustración de ciertas expectativas: "el Brexit o la victoria de Donald Trump constituyen dos posverdades en la medida en que "una y otra noticia han sobrepasado cualquier expectativa ortodoxa o racional…" (R. Amón, El País, 17/11/2016)

A la vista de todo esto, se diría que la actual cruzada por "la verdad" de los medios tradicionales esconde el intento desesperado de mantener el control de la información y la continuidad en el poder. Tampoco esto es nada nuevo. En la base de toda esta teorización late la imagen de un electorado primitivo, nada reflexivo, apático y fácilmente manipulable que se mueve ligero por las redes sociales sin la necesidad de depender de la intermediación del periodismo profesional para comunicarse con la sociedad. La palabra posverdad da forma al temor por la falta de intermediación, que puede dejar las decisiones políticas relevantes al "errático e histérico humor de las masas que hasta hoy creen controlar" (J. Fontevecchia, Perfil, 25/09/2016). No hablamos de la verdad, sino del monopolio en la distribución de la información, de límites a la libertad de expresión y comunicación. Del mismo modo, la permanente descalificación de lo emocional, que sirve de base al ataque contra el populismo y a las iniciativas plebiscitarias, no deja de ser una coartada para la censura. Los espectaculares avances de la neuropsicología no nos permiten ya hoy mantener la dicotomía razón / emoción, ideas / sentimientos. Ya lo decía Gabriel Miró, "Nadie burle de estas realidades de nuestras sensaciones donde reside casi toda la verdad de nuestra vida".
María Márquez Guerrero - Universidad de Sevilla




Comentarios

Lo más visto de la semana pasada

David Gilmour - Luck and Strange (2024)

Una entrada cortita y al pie para aclarar porqué le llamamos "Mago". Esto recién va a estar disponible en las plataformas el día de mañana pero ya lo podés ir degustando aquí en el blog cabeza, lo último de David Gilmour de mano del Mago Alberto, y no tengo mucho más para agregar. Ideal para comenzar a juntar cositas para que escuchen en el fin de semana que ya lo tenemos cerquita... Artista: David Gilmour Álbum: Luck and Strange Año: 2024 Género: Rock Soft Progresivo / Prog Related / Crossover prog / Art rock Referencia: Aún no hay nada Nacionalidad: Inglaterra Lo único que voy a dejar es el comentario del Mago... y esto aún no existe así que no puedo hablar de fantasmas y cosas que aún no llegaron. Si quieren mañana volvemos a hablar. Cae al blog cabezón, como quien cae a la Escuela Pública, lo último del Sr. David Gilmour (c and p). El nuevo álbum de David Gilmour, "Luck and Strange", se grabó durante cinco meses en Brighton y Londres y es el prim...

Don Cornelio y la Zona - Don Cornelio y la Zona (1987)

"Hola, les saludo desde Ecuador, he seguido la página desde hace unos años y han sido un gran soporte emocional en mi vida gracias a la música que me han compartido. Quería preguntarles si pueden revivir este álbum que descubrí hace poco". ¿Y cómo negarnos ante ese comentario?. Como homenaje al recientemente desaparecido Palo Pandolfo (uno de los cantautores más destacados de la música argentina en las últimas tres décadas), reflotamos un discos que Artie había publicado hace ya mucho tiempo. Acá está, entonces, el disco homónimo de Don Cornelio, muy pedido por varios, como recuerdo de ese referente del rock argento que fue el poeta del rock "Palo" Pandolfo, con su combinación de lirismo y violencia reconocible en su rock, algunos dicen que fue heredero artístico de Pescado Rabioso , y desde hace 35 años que vino siendo bastante más que el flaquito que vino a poner oscuridad en el pop alfonsinista. Artista: Don Cornelio y la Zona Álbum: Don Cornelio y la Zona ...

Los 100 Mejores Álbumes del Rock Argentino según Rolling Stone

Quizás hay que aclararlo de entrada: la siguiente lista no está armada por nosotros, y la idea de presentarla aquí no es porque se propone como una demostración objetiva de cuales obras tenemos o no que tener en cuenta, ya que en ella faltan (y desde mi perspectiva, también sobran) muchas obras indispensables del rock argento, aunque quizás no tan masificadas. Pero sí tenemos algunos discos indispensables del rock argentino que nadie interesado en la materia debería dejar de tener en cuenta. Y ojo que en el blog cabezón no tratamos de crear un ranking de los "mejores" ni los más "exitosos" ya que nos importa un carajo el éxito y lo "mejor" es solamente subjetivo, pero sobretodo nos espanta el concepto de tratar de imponer una opinión, un solo punto de vista y un sola manera de ver las cosas. Todo comenzó allá por mediados de los años 60, cuando Litto Nebbia y Tanguito escribieron la primera canción, Moris grabó el primer disco, Almendra fue el primer ...

King Crimson Collector's Club (1998 - 2012)

Artista: King Crimson Álbum: King Crimson Collector's Club Año: (1998 - 2012) Género: Progresivo ecléctico Nacionalidad: Inglaterra Lista de Discos: KCCC 01 - [1969] Live at the Marquee (1998) KCCC 02 - [1972] Live at Jacksonville (1998) KCCC 03 - [1972] The Beat Club Bremen (1999) KCCC 04 - [1982] Live at Cap D'Agde (1999) KCCC 05 - [1995] On Broadway - Part 1 (1999) KCCC 06 - [1995] On Broadway - Part 2 (1999) KCCC 07 - [1998] ProjeKct Four - The Roar Of P4 - Live in San Francisco (1999) KCCC 08 - [1994] The VROOOM - Sessions April - May (1999) KCCC 09 - [1972] Live At Summit Studios Denver, March 12 (2000) KCCC 10 - [1974] Live in Central Park NYC (2000) KCCC 11 - [1981] Live at Moles Club Bath (2000) KCCC 12 - [1969] Live in Hyde Park, July 5 (2002 KCCC 13 - [1997] Nashville Rehearsals (2000) KCCC 14 - [1971] Live at Plymouth Guildhall, May 11 (2CD) (2000) KCCC 15 - [1974] Live In Mainz, March 30 (2001) KCCC 16 - [1982] Live in Berkeley (2CD) (200...

El Ritual - El Ritual (1971)

Quizás aquellos que no estén muy familiarizados con el rock mexicano se sorprendan de la calidad y amplitud de bandas que han surgido en aquel país, y aún hoy siguen surgiendo. El Ritual es de esas bandas que quizás jamás tendrán el respeto que tienen bandas como Caifanes, jamás tendrán el marketing de Mana o la popularidad de Café Tacuba, sin embargo esta olvidada banda pudo con un solo álbum plasmar una autenticidad que pocos logran, no por nada es considerada como una de las mejores bandas en la historia del rock mexicano. Provenientes de Tijuana, aparecieron en el ámbito musical a finales de los años 60’s, en un momento en que se vivía la "revolución ideológica" tanto en México como en el mundo en general. Estas series de cambios se extendieron más allá de lo social y llegaron al arte, que era el principal medio de expresión que tenían los jóvenes. Si hacemos el paralelismo con lo que pasaba en Argentina podríamos mencionar, por ejemplo, a La Cofradía, entre otros muchos ...

Los hijos de puta: Si esta no es la casta... ¿la casta dónde está?

Si acá no está la casta ¿la casta dónde está? En la Argentina se habla mucho de la pobreza: como se mide, cuantos pobres hay, si sube o baja, que políticas o gobiernos la hicieron crecer o bajar. En el discurso, les preocupa a todos: Macri hizo campaña en el 2015 prometiendo alcanzar la "pobreza cero", y Milei basa su cruzada contra el socialismo en que son "zurdos empobrecedores". De lo que no se habla tanto (casi nada) es de la riqueza y de los ricos: quiénes son, cuan ricos son, como y por qué se hicieron ricos. Y menos que menos se habla de la relación directa y necesaria que hay entre las dos cosas: en el capitalismo salvaje que vivimos, para que haya (pocos, cada vez menos) ricos cada vez más ricos, es imprescindible que haya pobres (cada vez más, y cada vez más pobres). Hablan mucho de la pobreza para no hablar nunca de la riqueza. Ése es el truco.   De los pobres sabemos mucho, o nos cuentan bastante: quien los manipula políticamente o los emplea como man...

David Gilmour - Rattle That Lock (2015)

Artista: David Gilmour Álbum: Rattle That Lock Año: 2015 Género: Rock, Blues, Jazz Duración: 51:17 Nacionalidad: Inglaterra Lista de Temas: 1. 5 A.M. 2. Rattle That Lock 3. Faces Of Stone 4. A Boat Lies Waiting 5. Dancing Right In Front Of Me 6. In Any Tongue 7. Beauty 8. The Girl In Yellow Dress 9. Today 10. And Then ... Alineación: - David Gilmour / electric & acoustic guitars, bass, percussion, piano, Hammond organ, electric piano, saxophone, vocals, cumbus, bass harmonica - Guy Pratt / bass - Phil Manzanera / piano, keyboards - Polly Samson / piano, vocals - Steve DiStanislao / drums - Mica Paris / vocals - Louise Marshall and The Liberty Choir / vocals

Tantor - Tantor (1979)

Artista: Tantor Álbum: Tantor Año: 1979 Género: Jazz rock Nacionalidad: Argentina Lista de Temas: 1. Guerreras club 2. Niedernwohren 3. Llama siempre 4. Oreja y vuelta al ruedo 5. Halitos 6. El sol de la pobreza 7. Carrera de chanchos Alineación: - Carlos Alberto Machi Rufino: bajo - Héctor Starc: guitarra - Rodolfo García: batería Invitados: - Leo Sujatovich - Lito Vitale Seguimos con las resubidas, Sandy nos trae estos dos discos dificilíiiiiiisimos de conseguir, mejor dicho, imposible. Banda de músicos excelentes, todos EX de otras grandes bandas del rock nacional de los 70s, luego de la separación de sus grupos fundacionales, grupos como Almendra y Aquelarre. Quizás dos álbums demasiado menospreciados dada su calidad, principalmente porque los tipos tuvieron la chispa creativa pero la misma no pegó en el público y en su momento no tuvieron la difusión y reconocimiento que se merecían. Desde este humilde espacio volvemos a hacer otra reparación histórica...

21st Century Schizoid Band - Live in Barcelona (2024)

Otra vez revisitamos esta banda que es esencialmente un equipo de figuras clave dentro de King Crimson sin las estrellas obvias Robert Fripp y Greg Lake, y los volvemos a traer para cerrar otra semana llena de buena música y sorpresas. Grabado en Barcelona en 2003., podemos ver un grupo que tiene un gran talento y sigue siendo inventivo en el antiguo repertorio, incluso hablando de Peter Giles, que se retiró de la música profesional en 1970. No daremos mucha vuelta sobre esto, porque ya hemos hablado mucho en su momento, así que viene a completar la historia de este proyecto que hemos expuesto en demasía en el blog cabeza. Y con esto me despido de ustedes hasta la próxima semana, donde volveremos con más música, más sorpresas y más ganas de hincharle las pelotas a este deshumanizado mundo de mierda que tanto nos hace sufrir día a día... y en algún instante será momento de que la tortilla se de vuelta de una vez por todas, mientras tanto, a disfrutar de tanta música y tantas cosas buena...

Sin conexión a Internet: día 7

¿No era que todo lo solucionaba el mercado? Personal, Telecentro y todos los proveedores de la zona de Flores y Floresta, se pueden ir la la reput&$%!@~€|Ç^[!!!. Desde le viernes no tengo conexión a Internet así que hasta que se reestablezca la conexión (increíble en estos tiempos), el blog cabeza tendrá servicios reducidos. Luego volveremos a la locura de siempre y a la que ya seguramente están  acostumbrados...

Ideario del arte y política cabezona

Ideario del arte y política cabezona


"La desobediencia civil es el derecho imprescriptible de todo ciudadano. No puede renunciar a ella sin dejar de ser un hombre".

Gandhi, Tous les hommes sont frères, Gallimard, 1969, p. 235.