Ir al contenido principal

Las sociedades a veces se suicidan

Eduardo Grüner sostiene, recurriendo a Freud, que las sociedades están tan construidas sobre la agresión, el odio y el “instinto de muerte” como sobre la solidaridad y la cooperación, y afirma que no puede surgir ningún loco de la motosierra sino allí donde no se ha indagado sobre el proceso de fascistización social cotidiana, pero muy violenta, que ha venido creciendo en los últimos años.

Por Eduardo Grüner


Es interesante comprobar cómo, en situaciones de intensa crisis como la actual, inevitablemente se produce un ritornello de frases “optimistas”, destinadas a tranquilizar las conciencias biempensantes del progresismo cool. Por ejemplo, la que afirma que no hay que desesperar porque, a fin de cuentas, ninguna sociedad se suicida. ¿De dónde sacaron, quienes afirman tal cosa, esa peregrina idea? Basta leer rápidamente algún texto de Sigmund Freud – El Malestar en la cultura o Más allá del principio del placer, pongamos- para que una ventisca mínimamente realista barra con esa ilusión sin porvenir (para aludir a otro ensayo del mismo autor), y nos enteremos de que las sociedades están tan construidas sobre la agresión, el odio y el “instinto de muerte” -incluyendo la propia- como sobre la solidaridad, la cooperación, etcétera.

Ahora bien, si no se le quiere creer al insigne profesor vienés, no hay más que echar una sucinta ojeada a la historia. ¿O no se “suicidó” la muy culta y racional sociedad alemana en 1933? ¿O no se “suicidó” nada menos que el imperio romano hace cerca de 2000 años? ¿O acaso hoy mismo no se está “suicidando” -con todos nosotros adentro, claro- el capitalismo mundializado entero, que sabe muy bien que está destruyendo la naturaleza de la que dependemos para la vida, y sin embargo le importa un bledo? ¿O, a escala por ahora más acotada pero no menos dramática y más urgente, Rusia / Ucrania o Israel / Palestina? ¿Entonces, por qué los orgullosos argentinos habríamos de ser menos que esos ilustres ejemplos? ¿Invocaremos, una vez más, nuestra famosa “excepcionalidad”? No, señores, sepan que somos tan capaces de suicidarnos como cualquier otro país, sociedad, cultura o civilización. Faltaba más.

El problema es que no nos gusta mucho indagar críticamente las razones del suicidio. Preferimos adjudicarlas a no se sabe qué fatalidad del “país de mierda”. Que el próximo 22 de octubre, o quizá en noviembre, exista la posibilidad de un suicidio colectivo de magnitud descomunal, ¿es un azar, una contingencia fortuita, una maldición bíblica? Por supuesto que no: hay una historia. Y va de suyo que no todos/as tenemos la misma responsabilidad en el entramado de esa historia. Pero, al mismo tiempo, todos formamos parte de ella, y mejor que nos pongamos a pensar seriamente qué es lo que esa historia ha hecho con / de nosotros. Y más aún, como hubiera dicho Sartre, qué es lo que somos capaces de hacer con eso que nos han hecho y que hemos hecho -o dejado de hacer-.

Sí, también “dejado de hacer”. Entre tantas otras cosas, hemos dejado de ejercer, en el campo de lo político, una imaginación, una audacia, una resolución crítica que nos permitiera construir una alternativa popular autónoma que nos sustrajera a la dependencia respecto de las variantes repetitivas que el sistema se digna ofrecernos. Variantes que obviamente no son todas iguales – ¿hasta cuándo se nos obligará a repetir esta perogrullada? -, pero ninguna de las cuales, según los casos, pudo o quiso sustraerse a ser rehén de los verdaderos “poderes fácticos”, como se usa llamar ahora a la buena y vieja clase dominante.

Y es así que llegamos a esta instancia donde todas las variantes potencialmente ganadoras en las próximas elecciones, no por no ser iguales (¡ufa!) dejan de ser todas “de derechas”. Es decir que, como diría Alejandro Horowicz, el verdadero ganador de las próximas elecciones va a ser el PNA (Partido Nacional del Ajuste)[1]. Hasta ese punto hemos perdido la batalla: estamos presos de una extorsión de facto, por la cual se nos conmina a que votemos a la derecha “aceptable” para impedir que gane la derecha insoportable, según el ya clásico y afrancesado modelo “Macron, para que no Le Pen”. Es obvio que necesitamos que gane lo menos peor; pero es una “ganancia” puramente negativa:  no se nos puede exigir que nos enamoremos de una necesidad, o siquiera que la convalidemos con un voto deseante, cuando -si es que lo cometemos- ese voto sería apenas crasamente instrumental, o patéticamente resignado.  Y si alguien se resiste a olvidar sus principios para tragarse semejante gigantesco sapo, se lo acusará de hacerle el juego… a la derecha.

O sea: con el viejo truco del chivo emisario, se lo hará responsable de que gane el “malpeorismo” sobre el “malmenorismo”, como si el verdadero responsable no fuera un gobierno pusilánime -por no decir cómplice- que fue el que (después del puntapié inicial de Macri, de acuerdo) terminó de hacer posible la aparición del monstruo y del enojado hartazgo de “la gente”, que es su alimento. Y así estamos ante la posibilidad del mayor triunfo que el “sistema” podría pedir: que ante la inoperancia de las políticas “progres” retornaran Menem y Macri disfrazados de ¡¡lo “nuevo”!!, bajo la hoja dentada de una motosierra (aún) sin estrenar. Como decía el genial Kierkegaard, una auténtica repetición siempre aparece como una novedad.

Y sin embargo, la cosa tiene su lógica, que no es solamente culpa de los gobiernos: a través de las últimas décadas, el poder del capital mundializado, con la inestimable ayuda de los grandes medios y las redes antisociales (sus nuevos aparatos ideológicos), produjo un profundo proceso de des-ciudadanización y des-politización, un barrial de indiferencia y / o desconfianza hacia la política -esa política que sigue siendo “la de arriba”, puesto que no supimos imponer “la de abajo”-, en el que pescan a sus anchas las neoderechas que fingen ser “off-casta”. Que ellas sean o no “fascistas” es una discusión más complicada. Tal vez también aquí estemos pecando de falta de imaginación, recurriendo a categorías histórico-generales que tenemos a mano, y absolviéndonos de pensar la singularidad de ciertos fenómenos. Puede ser que después de un detallado análisis crítico lleguemos a la conclusión de que, efectivamente, tal o cual candidato melenudo y gritón es fascista (o su candidata a vice, que en ese terreno parece más consistente). Pero todavía falta ese análisis. Y, además, no se trata simplemente de las personas. No nos hagamos la vida tan fácil.

Fotografía: Sacrificio – Andréi Tarkovski.

Mientras tanto, de todos modos, y como todavía no hemos descubierto la manera de pensar sin conceptos (aunque sabemos bien que jamás podrán ser totalmente reducidos a ellos los objetos concretos), propongamos, para tratar de empezar a pensar la “novedad”, los siguientes: primero, el de Nihilismo. Entendemos por tal cosa -en un sentido amplio que puede vincularse a la antigua categoría sociológica de anomia– el dramático hundimiento de valores, principios, códigos simbólicos, etcétera, que caracteriza al estado actual de muchas sociedades occidentales, no solo la nuestra. Ya a principios de la década del 60 Theodor W. Adorno comenzaba a detectar este síntoma, que él llamaba neutralización. Y advertía que no se trataba de un simple ánimo de pesimismo inofensivo, sino que su “está todo mal”, en lugar de convocar a una transformación positiva de la realidad, es un llamamiento abstracto a la destrucción de lo humano, como ya lo había demostrado lo que taquigráficamente se llama “Auschwitz”[2].

El segundo concepto a proponer es el de Ridículo, o mejor, ridículo político, idea acuñada hace algunos años por la filósofa Marcia Tiburi[3]. Esta noción da cuenta de una sustitución “estética” (en el sentido de la “estetización de lo político” de la que hablaba Walter Benjamin): si en los fascismos clásicos operaba el registro de lo trágico, en las “nuevas” neoderechas es reemplazado por el de lo cómico-ridículo (que es el semblante de personajes como Trump, Bolsonaro, y no digamos Milei). Pero, que no se nos malentienda: este rasgo de ridiculez no quita un ápice de peligrosidad a la situación. En el contexto nihilista / neutralizador / destructor del “que se vaya todo al carajo”, la enorme seducción de la comicidad es que se puede hacer el peor de los males sin culpa, como si fuera un gran chiste. Para que todos nos matemos, literalmente, de risa.

En fin, ya sabemos que en la política que realmente importa la instancia electoral es solo un momento. Pero sería necio negar que hay “momentos” que condensan de forma catastrófica, en la superficie, todas las corrientes subterráneas que atraviesan cotidianamente a la sociedad. Es eso lo que tendríamos que haber aprendido a observar con más cuidado, para no vernos tan sorprendidos. No puede surgir ningún loco de la motosierra sino allí donde de alguna forma se ha creado un consenso sobre la conveniencia de talar el bosque. El loco es un efecto, no la causa. Y eso va mucho más lejos, y más profundamente, y más atrás en el tiempo, que el anecdotario de las ridiculeces de un candidato. No se trata tanto de discernir si tal o cual candidato es “fascista”, sino de indagar en la fascistización social, “microfísica”, cotidiana, pero muy violenta, que ha venido creciendo en los últimos años, y que ha transformado en verosímiles cosas que hace no mucho tiempo hubieran sido impensables.

Y algo más. Tendremos que hacernos a la idea de que la política, tal como la conocimos en los últimos 40 años, no existe más. La motosierra es un síntoma y un símbolo -lástima que de contornos siniestros-: el sistema de partidos, la lógica representativa, la idea misma de “representación”, han volado por los aires. El Estado como árbitro más o menos “bonapartista” tiene muy debilitado su prestigio. El Mercado (ese del que en los ´90 se decía, muy sabiamente, que “vota todos los días”) organiza hasta lo que podemos o no concebir en nuestras cabezas, con el comando a distancia del Imperio y del “sociometabolismo del capital”[4]. Y nuestro lenguaje político -del cual ya decía Aristóteles que era lo que nos hacía propiamente humanos- se ha degradado hasta el punto en que ya no sabemos bien cómo hablar, ni qué decir.

Ya estamos pues en un período de barajar y dar de nuevo, o bien de esfumarnos como “lo sólido que se desvanece en el aire” que citaba Marx. El destructivo ridículo nihilista que parece ser el estado dominante en nuestro mundo solamente puede ser contenido y combatido -perdón por la insistencia- “desde abajo” y multitudinariamente. Porque, como solía decir nuestro amigo y maestro León Rozitchner, “cuando la sociedad no sabe qué hacer, la filosofía no sabe qué pensar”.

Referencias:
[1] Horowicz, Alejandro: El kirchnerismo desarmado, Buenos Aires, Ariel, 2023
[2] Adorno, Theodor W.: Sobre la teoría de la historia y de la libertad, Buenos Aires, Eterna Cadencia, 2019
[3] Tiburi, Marcia: Ridículo Político, Ed. Record, 2017
[4] Noción ya canónica que le debemos a Istvan Meszárós, para indicar que “capital” no es solo una categoría estrechamente económica, sino el ordenamiento mismo de la vida, incluyendo la “psicofísica”. Sin duda, tiene un parentesco con el biopoder de Foucault o la biopolítica de Agamben o Esposito, pero a nuestro juicio cala más hondo. Cfr. Beyond Capital, Londres, Merlin Press, 1995.

 

Eduardo Grüner - Buenos Aires, 16 de octubre de 2023.
Sociólogo, ensayista y crítico cultural. Doctor en Ciencias Sociales de la UBA.



Comentarios

Lo más visto de la semana pasada

David Gilmour - Luck and Strange (2024)

Una entrada cortita y al pie para aclarar porqué le llamamos "Mago". Esto recién va a estar disponible en las plataformas el día de mañana pero ya lo podés ir degustando aquí en el blog cabeza, lo último de David Gilmour de mano del Mago Alberto, y no tengo mucho más para agregar. Ideal para comenzar a juntar cositas para que escuchen en el fin de semana que ya lo tenemos cerquita... Artista: David Gilmour Álbum: Luck and Strange Año: 2024 Género: Rock Soft Progresivo / Prog Related / Crossover prog / Art rock Referencia: Aún no hay nada Nacionalidad: Inglaterra Lo único que voy a dejar es el comentario del Mago... y esto aún no existe así que no puedo hablar de fantasmas y cosas que aún no llegaron. Si quieren mañana volvemos a hablar. Cae al blog cabezón, como quien cae a la Escuela Pública, lo último del Sr. David Gilmour (c and p). El nuevo álbum de David Gilmour, "Luck and Strange", se grabó durante cinco meses en Brighton y Londres y es el prim...

Don Cornelio y la Zona - Don Cornelio y la Zona (1987)

"Hola, les saludo desde Ecuador, he seguido la página desde hace unos años y han sido un gran soporte emocional en mi vida gracias a la música que me han compartido. Quería preguntarles si pueden revivir este álbum que descubrí hace poco". ¿Y cómo negarnos ante ese comentario?. Como homenaje al recientemente desaparecido Palo Pandolfo (uno de los cantautores más destacados de la música argentina en las últimas tres décadas), reflotamos un discos que Artie había publicado hace ya mucho tiempo. Acá está, entonces, el disco homónimo de Don Cornelio, muy pedido por varios, como recuerdo de ese referente del rock argento que fue el poeta del rock "Palo" Pandolfo, con su combinación de lirismo y violencia reconocible en su rock, algunos dicen que fue heredero artístico de Pescado Rabioso , y desde hace 35 años que vino siendo bastante más que el flaquito que vino a poner oscuridad en el pop alfonsinista. Artista: Don Cornelio y la Zona Álbum: Don Cornelio y la Zona ...

Los 100 Mejores Álbumes del Rock Argentino según Rolling Stone

Quizás hay que aclararlo de entrada: la siguiente lista no está armada por nosotros, y la idea de presentarla aquí no es porque se propone como una demostración objetiva de cuales obras tenemos o no que tener en cuenta, ya que en ella faltan (y desde mi perspectiva, también sobran) muchas obras indispensables del rock argento, aunque quizás no tan masificadas. Pero sí tenemos algunos discos indispensables del rock argentino que nadie interesado en la materia debería dejar de tener en cuenta. Y ojo que en el blog cabezón no tratamos de crear un ranking de los "mejores" ni los más "exitosos" ya que nos importa un carajo el éxito y lo "mejor" es solamente subjetivo, pero sobretodo nos espanta el concepto de tratar de imponer una opinión, un solo punto de vista y un sola manera de ver las cosas. Todo comenzó allá por mediados de los años 60, cuando Litto Nebbia y Tanguito escribieron la primera canción, Moris grabó el primer disco, Almendra fue el primer ...

King Crimson Collector's Club (1998 - 2012)

Artista: King Crimson Álbum: King Crimson Collector's Club Año: (1998 - 2012) Género: Progresivo ecléctico Nacionalidad: Inglaterra Lista de Discos: KCCC 01 - [1969] Live at the Marquee (1998) KCCC 02 - [1972] Live at Jacksonville (1998) KCCC 03 - [1972] The Beat Club Bremen (1999) KCCC 04 - [1982] Live at Cap D'Agde (1999) KCCC 05 - [1995] On Broadway - Part 1 (1999) KCCC 06 - [1995] On Broadway - Part 2 (1999) KCCC 07 - [1998] ProjeKct Four - The Roar Of P4 - Live in San Francisco (1999) KCCC 08 - [1994] The VROOOM - Sessions April - May (1999) KCCC 09 - [1972] Live At Summit Studios Denver, March 12 (2000) KCCC 10 - [1974] Live in Central Park NYC (2000) KCCC 11 - [1981] Live at Moles Club Bath (2000) KCCC 12 - [1969] Live in Hyde Park, July 5 (2002 KCCC 13 - [1997] Nashville Rehearsals (2000) KCCC 14 - [1971] Live at Plymouth Guildhall, May 11 (2CD) (2000) KCCC 15 - [1974] Live In Mainz, March 30 (2001) KCCC 16 - [1982] Live in Berkeley (2CD) (200...

El Ritual - El Ritual (1971)

Quizás aquellos que no estén muy familiarizados con el rock mexicano se sorprendan de la calidad y amplitud de bandas que han surgido en aquel país, y aún hoy siguen surgiendo. El Ritual es de esas bandas que quizás jamás tendrán el respeto que tienen bandas como Caifanes, jamás tendrán el marketing de Mana o la popularidad de Café Tacuba, sin embargo esta olvidada banda pudo con un solo álbum plasmar una autenticidad que pocos logran, no por nada es considerada como una de las mejores bandas en la historia del rock mexicano. Provenientes de Tijuana, aparecieron en el ámbito musical a finales de los años 60’s, en un momento en que se vivía la "revolución ideológica" tanto en México como en el mundo en general. Estas series de cambios se extendieron más allá de lo social y llegaron al arte, que era el principal medio de expresión que tenían los jóvenes. Si hacemos el paralelismo con lo que pasaba en Argentina podríamos mencionar, por ejemplo, a La Cofradía, entre otros muchos ...

Los hijos de puta: Si esta no es la casta... ¿la casta dónde está?

Si acá no está la casta ¿la casta dónde está? En la Argentina se habla mucho de la pobreza: como se mide, cuantos pobres hay, si sube o baja, que políticas o gobiernos la hicieron crecer o bajar. En el discurso, les preocupa a todos: Macri hizo campaña en el 2015 prometiendo alcanzar la "pobreza cero", y Milei basa su cruzada contra el socialismo en que son "zurdos empobrecedores". De lo que no se habla tanto (casi nada) es de la riqueza y de los ricos: quiénes son, cuan ricos son, como y por qué se hicieron ricos. Y menos que menos se habla de la relación directa y necesaria que hay entre las dos cosas: en el capitalismo salvaje que vivimos, para que haya (pocos, cada vez menos) ricos cada vez más ricos, es imprescindible que haya pobres (cada vez más, y cada vez más pobres). Hablan mucho de la pobreza para no hablar nunca de la riqueza. Ése es el truco.   De los pobres sabemos mucho, o nos cuentan bastante: quien los manipula políticamente o los emplea como man...

David Gilmour - Rattle That Lock (2015)

Artista: David Gilmour Álbum: Rattle That Lock Año: 2015 Género: Rock, Blues, Jazz Duración: 51:17 Nacionalidad: Inglaterra Lista de Temas: 1. 5 A.M. 2. Rattle That Lock 3. Faces Of Stone 4. A Boat Lies Waiting 5. Dancing Right In Front Of Me 6. In Any Tongue 7. Beauty 8. The Girl In Yellow Dress 9. Today 10. And Then ... Alineación: - David Gilmour / electric & acoustic guitars, bass, percussion, piano, Hammond organ, electric piano, saxophone, vocals, cumbus, bass harmonica - Guy Pratt / bass - Phil Manzanera / piano, keyboards - Polly Samson / piano, vocals - Steve DiStanislao / drums - Mica Paris / vocals - Louise Marshall and The Liberty Choir / vocals

Tantor - Tantor (1979)

Artista: Tantor Álbum: Tantor Año: 1979 Género: Jazz rock Nacionalidad: Argentina Lista de Temas: 1. Guerreras club 2. Niedernwohren 3. Llama siempre 4. Oreja y vuelta al ruedo 5. Halitos 6. El sol de la pobreza 7. Carrera de chanchos Alineación: - Carlos Alberto Machi Rufino: bajo - Héctor Starc: guitarra - Rodolfo García: batería Invitados: - Leo Sujatovich - Lito Vitale Seguimos con las resubidas, Sandy nos trae estos dos discos dificilíiiiiiisimos de conseguir, mejor dicho, imposible. Banda de músicos excelentes, todos EX de otras grandes bandas del rock nacional de los 70s, luego de la separación de sus grupos fundacionales, grupos como Almendra y Aquelarre. Quizás dos álbums demasiado menospreciados dada su calidad, principalmente porque los tipos tuvieron la chispa creativa pero la misma no pegó en el público y en su momento no tuvieron la difusión y reconocimiento que se merecían. Desde este humilde espacio volvemos a hacer otra reparación histórica...

21st Century Schizoid Band - Live in Barcelona (2024)

Otra vez revisitamos esta banda que es esencialmente un equipo de figuras clave dentro de King Crimson sin las estrellas obvias Robert Fripp y Greg Lake, y los volvemos a traer para cerrar otra semana llena de buena música y sorpresas. Grabado en Barcelona en 2003., podemos ver un grupo que tiene un gran talento y sigue siendo inventivo en el antiguo repertorio, incluso hablando de Peter Giles, que se retiró de la música profesional en 1970. No daremos mucha vuelta sobre esto, porque ya hemos hablado mucho en su momento, así que viene a completar la historia de este proyecto que hemos expuesto en demasía en el blog cabeza. Y con esto me despido de ustedes hasta la próxima semana, donde volveremos con más música, más sorpresas y más ganas de hincharle las pelotas a este deshumanizado mundo de mierda que tanto nos hace sufrir día a día... y en algún instante será momento de que la tortilla se de vuelta de una vez por todas, mientras tanto, a disfrutar de tanta música y tantas cosas buena...

Sin conexión a Internet: día 7

¿No era que todo lo solucionaba el mercado? Personal, Telecentro y todos los proveedores de la zona de Flores y Floresta, se pueden ir la la reput&$%!@~€|Ç^[!!!. Desde le viernes no tengo conexión a Internet así que hasta que se reestablezca la conexión (increíble en estos tiempos), el blog cabeza tendrá servicios reducidos. Luego volveremos a la locura de siempre y a la que ya seguramente están  acostumbrados...

Ideario del arte y política cabezona

Ideario del arte y política cabezona


"La desobediencia civil es el derecho imprescriptible de todo ciudadano. No puede renunciar a ella sin dejar de ser un hombre".

Gandhi, Tous les hommes sont frères, Gallimard, 1969, p. 235.