No, no, no seas bruto, esto no tiene nada que ver con los ratis de Morón o del conurba, sino que seguimos presentando música bailable, progresiva e interesante para que en las reuniones de estas fiestas meches a Los Pericos con algo realmente interesante, sin que salga de la onda festiva. Estos noruegos presentaron, con este disco, una de las sorpresas más refrescantes del rock progresivo moderno, siendo una explosión de creatividad, optimismo y virtuosismo técnico, alejándose de la seriedad oscura que suele caracterizar al género. Ese optimismo desbordante junto con la calidad técnica y compositiva lo hacen ver (ver con los oídos) como un trabajo muy colorido, gratificante, original y honesto. Un disco plagado de riffs adictivos, una sección rítmica frenética y un estribillo que no se te despegará de tu puta cabeza hasta entrado el año próximo, ojo que te lo estoy advirtiendo y luego no acepto reclamos. Muy recomendado... y digno de conocer. Y con esto nos despedimos hasta el año que viene... y no se pueden quejar que en el blog cabeza consiguen hasta música para poner en las jodas de las fiestas.
Artista: Moron Police
Álbum: A Boat on the Sea
Año: 2019
Género: Progresivo Crossover
Duración: 32:44
Referencia: Discogs
Nacionalidad: Noruega
Una producción cristalina amalgama lo que sería de otro modo como un disco denso, ya que tiene muchas capas de sintetizadores, guitarras y arreglos vocales, pero todo suena definido, aireado y potente. Otra cosa más para destacar es la interpretación vocal, que tiene una increíble versatilidad, pasando de tonos suaves y melódicos a momentos de gran energía con gran facilidad.
Letras irónicas, estructuras impredecibles, un sentido del humor único y una nueva banda que es toda una revelación. Pero me callo y le dejo el turno a nuestro primer comentario de terceros, a ver qué es lo que dicen sobre esto.
¿Y qué quiero decir con esto? Desde la portada del disco hasta lo variado y positivo de su mensaje y su música, es una palabra que le calza perfecto a lo que quiere mostrar Moron Police, definiendo entonces un nuevo género y nuevos estándares, que voy a bautizar en este momento como “Colorful Prog”. Acá no vas a encontrar desarrollos extensos, ni pesadumbre ni oscuridad ni melancolía, esta es una banda para el disfrute en todo sentido de la palabra, y una mente abierta es imprescindible para disfrutar de lo que tiene para ofrecer este singular combo noruego.
A Boat on the Sea es el tercer álbum de la banda, habiendo tenido que esperar cinco años para que fuera materializado, pero lo cierto es que muchos van a conocer a Moron Police y generar sus primeras impresiones con lo que tiene para ofrecer este disco. Y en ese sentido es un buen punto de partida: sin rellenos ni complicaciones, con una duración que apenas supera los 30 minutos, A Boat on the Sea muestra a una banda versátil y ganchera haciendo lo que mejor sabe: divertirse.
La breve introducción con Hocus Pocus comienza de manera calma y misteriosa con un hermoso piano marcando la melodía. En este punto aún no sabemos mucho que esperar de los noruegos, pero en el minuto y medio que dura la canción se va ganando intensidad hasta desembocar en el verdadero arranque con The Phantom Below, una verdadera explosión de colores y aromas que muestra a la banda disparando con todo su arsenal de locura y positivismo. La música nos hace acordar a algunos momentos festivos del genio Neal Morse, así como también otro descubrimiento “feliz” que tuve este año: los españoles de Cheeto’s Magazine. Si te gusta esa faceta alegre y más accesible del Prog, estas bandas son para ti. La canción recorre varios climas mostrándose entretenida, variada y de corte más radial, con un gran estribillo que se torna coreable y se queda atorado en tu cabeza. Hay tiempo también para el virtuosismo y los solos de guitarra en formato compacto, con la cuota justa para satisfacer y a la vez dejar con ganas de más.
The Invisible King se muestra más majestuosa en ejecución, transformándose en un tema a medio tiempo con otro estribillo impecable que vamos a estar repitiendo por mucho tiempo. Claramente los noruegos tienen la fórmula ganadora para este tipo de música, tomándose su tiempo para crear canciones breves pero efectivas, a las que no les sobra ni un minuto y están construidas cuidadosamente y con muchos detalles en su interior. Las revoluciones vuelven a subir con Beware the Blue Skies, una canción que se torna más bailable y saltarina, Moron Police nos transmite alegría y ganas de llevarnos la vida por delante con melodías divertidas, festivas y bien pensadas. En este caso si bien hay ciertas cuotas de virtuosismo, el tema entra dentro del territorio del Pop/Rock bien accesible (característica que se mantiene en casi todo el disco).
The Dog Song continúa con la tendencia bailable siendo una breve canción que nos imaginamos disfrutarla en una playa bebiendo algún trago afrodisíaco desde un coco. La banda logra transmitir esos climas agradables donde todo está bien y las preocupaciones de la vida se detienen por un rato. El trabajo de la batería es interesante en esta canción, formando una base contundente y compleja sobre la accesibilidad del resto de los instrumentos. Con Captain Awkward aparece el momento bizarro del disco, que sin perder accesibilidad en lo musical, presenta un verso donde el vocalista Sondre Skollevoll entona una melodía imposible seguido por la batería en plan virtuoso, rápida y llena de cambios, para luego incursionar en un estribillo con la accesibilidad de siempre. Solos de teclado pirotécnicos y espaciales también adornan la canción, y hasta un momento donde el bajo de Christian Steen también tiene su sección para brillar. Es un tema épico encerrado en apenas 5 minutos donde pasa de todo, sin dudas una de las perlitas del disco.
The Undersea arranca con melodías grandiosas y apostando a gran escala. Es un tema breve pero de sentimiento gigante, transmitiendo de manera efectiva ese aura de calma desde una perspectiva de hacerle frente a los problemas y reírnos de ellos en su cara. Dotada de una magnífica sección de piano que parece haber salido de un disco de iamthemorning, la canción sorprende y nos muestra la versatilidad de estos músicos y la importancia de la atención al detalle. Para cerrar el álbum, Isn’t it Easy representa lo que podría considerarse como el tema “épico”, aunque en realidad su duración no supera los 7 minutos. Pero en melodía y ejecución estamos ante algo mágico y complejo, que nos vuelve a recordar a los mejores momentos morsenianos, e incluso a Flying Colors, con las vocales de Skollevoll adoptando un tono similar al de Casey McPherson en su arranque. En el estribillo vuelve a adoptar ese tono vocal más “sureño” característico, mientras aparecen saxofones y trompetas para adornar una cálida melodía que va mutando a climas complejos y explosivos, con una sección de teclado en plan acelerado que nos quita el aliento. El cierre está pensado claramente para transformarse en la conclusión de una jornada épica y el final de una corta pero intensa travesía.
En un 2019 que estuvo lleno de exponentes progresivos destacados y producciones a gran escala, es bueno ver que también hay bandas que lo mantienen simple y entretenido, y si bien el virtuosismo y la complejidad no le son esquivos a Moron Police, la propuesta de A Boat on the Sea ronda en torno a la accesibilidad, la melodía directa y los estribillos pegadizos, con un gusto exquisito por adoptar el formato canción y priorizar inmediatez por sobre desarrollos extensos. Con este disco puedes transportarte por media hora a un mundo lleno de frescura, magia y diversión, apagar tu mente y dejar que los sentidos te lleven por este viaje en donde el abanico de colores es tan importante como lo que estás escuchando. Bienvenido al Colorful Prog.
Calificación: 8 / 10
Pero nos despegamos de tanta cháchara y les dejo un video para que puedan comenzar a escucharlos...
Virtuosismo sin arrogancia, donde la técnica de los músicos es notable, pero sin embargo, nunca ponen la técnica por encima de la canción; los solos de guitarra, la base rítmica y los complejos arreglos de teclado están siempre al servicio de una melodía memorable.
Y para cerrar el tema, le dejamos la palabra a nuestro eterno comentarista involuntario de siempre, que nos cuenta lo siguiente sobre este disco tan entretenido...
El colorido barco musical de MORON POLICE
Hoy tenemos en nuestras manos el nuevo disco del grupo noruego MORON POLICE, el cual se titula “A Boat On The Sea” y fue publicado a mediados del mes de agosto del año 2019, con una edición japonesa ulterior que se concretó en enero del año siguiente. Se trata del tercer álbum de este grupo que practica un art-rock ecléctico, ameno y ágil, bien habitado por elementos progresivos: habiendo comenzado sus días como trío, sus integrantes actuales conforman el cuarteto de Sondre Skollevoll [voz, guitarras, teclados y percusión], Lars Bjørknes [teclados, piano, órgano Hammond y percusión], Thore Omland Pettersen [batería] y Christian Fredrik Steen [bajo]. Con sus dos discos precedentes, “The Propaganda Machine” (2012) y “Defenders Of The Small Yard” (2014), los MORON POLICE lograron llamar la atención del público progresivo en las redes difusoras del género, pero podemos decir que “A Boat On The Sea” encarna su obra más inspirada hasta la fecha. A lo largo del disco, el personal de MORON POLICE contó con las ocasionales colaboraciones de Claudia Cox (violín), Heine Bugge (acordeón), Morten Norheim (saxos tenor y soprano) y Jonas Flemsæter Hamre (saxo tenor). Aunque esta reseña es un poco tardía, tenemos la novedad de que el grupo ha estado organizando desde la segunda mitad de mayo del año 2020 una campaña de crowdfunding para las ediciones físicas de este disco en formatos de CD y de vinilo, la cual llegó a buen puerto. A propósito, la bella portada está acreditada a Dulk.
La miniatura de menos de minuto y medio ‘Hocus Pocus’ inicia el álbum con un cálido despliegue melódico guiado por el piano y sustentado sobre un medio tiempo amable, el mismo que pronto adquiere un aire sofisticado con la adopción del tempo en 7/8 de parte de la dupla rítmica. De este modo se abre camino a ‘The Phantom Below’, una impactante canción que se sitúa en una enérgica encrucijada entre los senderos de los primeros SPOCK’S BEARD, los STYX de la fase 76-78 y SAGA, con algunos matices de prog-metal melódico insertados por aquí y por allá. Aunque el desarrollo temático es relativamente sencillo, la vitalidad de los arreglos musicales le da un aire muy distinguido al bloque sonoro integral. En medio de toda la rimbombancia rockera en curso, el breve solo de saxo que entra a tallar en el intermedio aporta un recurso de exquisitez a lo SUPERTRAMP. ‘The Invisible King’ sigue a continuación para darle un cariz más matizado a la persistente aureola de contundencia rockera arropada por una precisa claridad melódica desde la que el grupo crea su esencia estilística. Así, la inclusión de algunos interludios suaves permite que la banda geste algunas tonalidades ceremoniosas, especialmente para el intermedio instrumental que precede al último coro. ‘Beware The Blue Skies’ se encarga de explorar una mezcla de frenesí y candidez melódica más en línea con el AOR de unos JOURNEY, aunque los matices progresivos todavía operan en algunos ornamentos de teclados (los cuales nos recuerdan a los YES de la fase del “90125”). De hecho, el elemento progresivo sale totalmente a flote para el sereno epílogo, el cual nos toma de sorpresa con su aura envolvente. Cuando llega el turno de ‘The Dog Song’, el grupo se dispone a explorar una mezcla de jazz-pop y pop-rock mientras preserva el aire de extrovertida distinción de la canción precedente. ‘Captain Awkward’ es el cénit definitorio del álbum con su manera de meter humor estrambótico y aumentar las dosis de excelencia compositiva dentro de un esquema melódico que remodela varios aspectos melódicos que ya hemos hallado en las canciones #2 y #3. Incluso puede ser que tengamos aquí el mejor solo de sintetizador del disco, mientras que los recovecos rítmicos que genera la dupla de Pettersen y Steen son manejados con impoluta fluidez. El interludio acústico brinda un momento de calma en medio de la predominante extroversión, y ya para el epílogo, la guitarra acústica señala el momento del reposo final. Aquí se ha dado un hermoso encuentro entre el estándar del neo-prog y el paradigma de la primera generación del rock prog-sinfónico.
Los últimos 10 ½ minutos del repertorio oficial del disco están ocupados por la dupla de ‘The Undersea’ e ‘Isn’t It Easy!’. ‘The Undersea’ también se orienta por la línea de la segunda canción del álbum, vehiculizando su esencial garra rockera a través de una bien delineada cruza de claridad melódica e intensidad rítmica. En fin, ‘Isn’t It Easy!’ establece el definitivo momento climático del disco, recibiendo claramente los ecos de la canción anterior mientras los remodela con una fastuosidad acrecentada. El solitario epílogo de piano evoca un momento distante en un pasado cada vez más indefinido, el momento de mayor seriedad expresiva de todo el álbum... y justamente tiene lugar en sus últimos instantes. Este disco dura poco más de media hora, pero parece ser todo el tiempo que se necesita para mostrar fehacientemente la mezcla de color y dinamismo que los MORON POLICE articulan para asentar su propia voz dentro de la gran escena progresiva mundial. De hecho, un año después de la publicación de “A Boat On The Sea”, el grupo aprovechó la situación de distanciamiento social sistemático para volver grabar y producir unas composiciones nuevas o que habían quedado fuera de este álbum a última hora: ‘Cult Of Tuna’ y ‘Japanese Pogo Stick Adventure!’, junto a versiones de maqueta de ‘Starlight Cinema’ y ‘Desolation’. Éstas entraron en la edición japonesa que mencionamos en el primer párrafo de esta reseña. La única de estas canciones que es asequible en las redes normales es la primera de ellas, así que será la única que reseñemos aquí: se trata de una balada cándida y amable, portadora de una aureola intimista lo suficientemente refinada para ser parte de un álbum de SUPERTRAMP o THE MOODY BLUES de los 80s. Hay una especie de fastuosidad controlada que emana de las armonías de teclado que arropan a las sencillas bases de piano. Veamos qué nos traerá la gente de MORON POLICE en próximos álbumes; por lo pronto, este disco nos ha gustado bastante.
Lo podés escuchar desde su espacio en Bandcamp:
https://moronpolice1.bandcamp.com/album/a-boat-on-the-sea
Lista de Temas:
1. Hocus Pocus (1:20)
2. The Phantom Below (4:12)
3. The Invisible King (4:05)
4. Beware The Blue Skies (4:11)
5. The Dog Song (3:20)
6. Captain Awkward (5:12)
7. The Undersea (3:27)
8. Isn't It Easy! (6:57)
Alineación:
- Sondre Skollevoll / vocals, guitars, additional keyboards, percussion
- Lars Bjørknes / keyboards, grand piano, Hammond organ, percussion
- Thore Omland Pettersen / drums
- Christian Fredrik Steen / bass
With:
Claudia Cox / violin (2,6-8)
Heine Bugge / accordion (4,5)
Morten Norheim / tenor and soprano sax (2,3,5,6,8)
Jonas Flemsæter Hamre / tenor sax (2,3,5,6)





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