¡Cabeza Al Aire! Bienvenidos, almas errantes, espíritus insomnes y devotos de la distorsión emocional. Esto es Cabeza de Moog Radio, ese templo sonoro donde entrás buscando música y terminás saliendo con la sensación de haberte convertido en un druida gaucho que tomó demasiada porquería, y de la fuerte.Y así nace Cabeza de Moog, la criatura radiofónica parida por este blog. Todo comenzó como un intento—muy fallido, por cierto—de parecer algo serio. Pero nunca lo logramos, ni cerca. Así que no solo dimos de baja nuestras ilusiones de parecer normales (o algo que se le parezca), sino que además extendimos nuestros tentáculos para dedicarnos a lo que realmente vinimos a hacer: meterte sonidos en la cabeza, ahora no solo en nuestro blog sino también en nuestro programa de dos horas por semana, los sábados de 20 a 22 hs. por https://radiosenderbroken.blogspot.com/
¡Buenas y malas, Cabezones de la jungla sonora! Si estás leyendo esto, felicitaciones: todavía existís. Este espacio, gestado entre el vicio y el delirio, nace de la necesidad imperiosa de compartir esas melodías que te agarran desprevenido al abrir el ojo; sí, ese primer contacto con la realidad que es mucho más honesto que ese mate lavado o ese desayuno de gente decente que pretendés tomar. Entonces, en algún momento aparece tu verdadero yo (o tù) saltando un poco tanta esquizofrenia del mundo moderno, tal como nos pasa a los cabezones cuando comenzamos a mezclar música, ironía y un poquito de delirio elegante, y ahí es cuando nos sentimos como pez en el agua… o como Moog en los 70. O como programa enloquecido en la radio Radiøsender Brøken.Bienvenidos, criaturas nocturnas, sonámbulos existenciales, madrugadores por obligación y desorientados profesionales, a este bendito espacio radial que se gestará durante dos horas a la semana, donde decidimos renunciar a la cordura… y a la playlist promedio. Esto serà Cabeza de Moog Radio, la rama sonora—y un poco descarriada—de este viejo blog que sobrevivió a tormentas, algoritmos, denuncias ante todo organismo aceptara el reto, intentos de censura... y hasta a la gente que cree que "todo lo progresivo es Yes". Esto será un programa nace de la necesidad vital de compartir esos sonidos que te sacuden el día antes de que tu cerebro active el botón de "modo responsable" (si es que el cerebro encuentra, en algún momento, ese maldito botón). Acá es donde viven y se reproducen esas melodías que te despiertan antes que el mate, antes que el café, y bastante antes de que te acuerdes que tenés que trabajar y cumplir con las putas reglas de juego del sistema de mierda en el que vivimos.
¿Por qué hacemos esto? Simple, por lo mismo que vos te dedicas a escuchar estas frecuencias sonoras y existenciales que emanamos y te irradiamos desde aquí: estas frecuencias nos causan un extremo, turbio e inexplicable placer. Y como somos buena gente (o al menos lo parecemos, bueno, ponele.. aunque nos importa un carajo que nos consideren "buena gente"), te vamos a convidar un poquito, para que juntos le demos una patada en el culo a esa dominación tediosa del hemisferio izquierdo. Nos expandimos para traerte música que te acaricia el alma... y después te la retuerza un poquito, como para que sientas que estás vivo, mientras seguimos tratando de hacerte explotar cada neurona. Sonidos que te invitan a sumergirte en ese terreno donde lo único que importa es que algo te mueva, te pique, o al menos te haga mover los piececitos y un poquito de tu podrida alma llena de tomate frío.
Pasen. Vean. Escuchen. Olvidate de la lógica, de la agenda y de las preocupaciones. Pasá, revolvé el canasto, quedate con lo que te guste. Y recordá esto: Si por alguna razón no podés leer estas líneas, vos ya no sos, ya no existís, vos tenés un Moog en la cabeza, vos ya no sos usted. Vos has dejado este plano material. Vos sos, lisa y llanamente, un moog con patas.
¡Arrancamos! Esto será Cabeza de Moog Radio, dos horas para que te olvides de quién sos... pero nunca de lo que pasa, y si luego serías tan osado como para desear repetir o recuperar los estremecimientos y espasmos musicales, colgaremos aquí cada programa.
Así que ajusten las perillas, acomódense en la nave, y prepárense para dos horas de viaje.
La cinta ya gira. El oscilador ya vibra. Nosotros también.






Comentarios
Publicar un comentario